Capítulo 1
-Ey hielito, ¡¿qué te apuestas a que en menos de dos días reúno más recompensas haciendo misiones que tú?!
-¿Es eso una especie de reto, imbécil? Sea lo que sea, todos sabemos que el ganador sería yo.
Natsu y Gray discutían cada vez más acaloradamente y estaban en constante rivalidad.
-Entonces decidido, ¿de acuerdo?- rió Natsu.
-Como quieras, pero tendremos que hacerlo más interesante…-respondió Gray.
-La recompensa la decidirá el ganador.-dijo Natsu decidido.
-¿Sea lo que sea?- Gray empezó a poner un gesto malicioso.
-Sea lo que sea… Pero hay que poner ciertas condiciones, ya lo he pensado todo: tendremos que realizar las misiones a solas.- a lo que miró a su lado.- Lo siento Happy, no podrás acompañarme.
-Aye…- dijo el gato sintiéndose excluido.
-¿Eso es todo? No tengo problemas en ir a misiones solo, idiota, eso no será ninguna dificultad para mí.- lo retó Gray más aún.
Mientras ambos magos seguían pensando en cómo dificultar su reto, el resto del gremio seguía con sus quehaceres diarios. En una mesa estaban Lucy, Levy y Cana conversando animadamente sobre sus cosas.
-¡¿Qué anoche conociste a un chico?!- dijeron Lucy y Levy a la vez.
-Bah, no es para tanto. Ya he estado con muchos hombre, después de todo… soy todo una mujer.- terminó orgullosa Cana.- Vosotras deberíais pareceros un poco más a mí, parece que os habéis escapado de un convento de monjas.
-¡No digas eso! Sólo que ni Levy ni yo somos tan decididas como tú… Nosotras… quiero decir, tiene que ser todo…-Lucy no encontraba las palabras para expresarse, por lo que Levy continuó.
-Tiene que ser como un libro romántico. Una verdadera historia de amor.
-Ay pero qué dulces sois…- dijo Cana.- Tendré que advertir a Natsu y a Gajeel sobre esto.
A lo lejos de las chicas, en otra mesa, el dragon slayer de hierro empezó a toser, poniéndose rojo de vergüenza e incomodiad.
-Gajeel-kun, ¿qué te pasa?- dijo su compañera, Juvia, que estaba en la misma mesa con él.
-¡Nada que te importe, idiota!- respondió Gajeel todavía rojo. –Es más, ¿qué estás haciendo aquí? Parece que estás interesada en lo que Lucy y las demás están hablando…
-¿Juvia? ¡De eso nada, Juvia no se mete en los asuntos ajenos!- contestó ella indignada.
-Como digas, pero puedes estar tranquila. No están hablando de conquistar al stripper.- terminó el mago con calma.
-Menos mal, Juvia no podría soportar tener más rivales en… ¡Oye! ¡No estaba preocupada por eso!
-Gehe, te has delatado tú sola.- se burló su amigo.- Pero es cierto que deberías estar más con el resto de las chicas, eres preocupante.
-A Juvia no le importa estar con el resto, pero me gusta estar con Gajeel-kun. Siento como si tuviese un hermano. Además, Gajeel es el que debería estar con el resto de la gente.- le respondió la maga de agua.
-Lo que sea…-se avergonzó él.
Gajeel y Juvia pasaban mucho tiempo juntos, en realidad era como había dicho la maga de agua; eran casi hermanos, y se querían y cuidaban.
Por otra parte, Natsu seguía discutiendo con Gray acerca de su reto.
-Para hacerlo más difícil y pensándolo mejor… ¡Juvia debe acompañarte a todas las misiones! ¡Tu reto será cargar con ella en todos lados!- Natsu dijo esto divertido.
-¿Dónde le ves la gracia? ¿Ella te ha hecho algo para que hables así de ella?- Gray empezó a enfadarse.- Aunque nunca hables con ella, es tan compañera mía como tuya, así que déjalo ya.
-No quería ofenderte, ni a ella tampoco… Debería ir a disculparme con ella.- dijo Natsu algo arrepentido, a lo que Gray agarró su brazo.
-No le digas nada, déjalo correr, sólo harás que se sienta mal. Y volviendo al tema de la apuesta…-volvió a decir malicioso.- ¡El reto comienza ya!
Y los rivales salieron corriendo mientras se empujaban desesperadamente hacia el tablón de misiones, cogiendo tantos carteles como pudieron.
Mirajane siempre recomendaba no coger más de una misión por viaje, por los asuntos del papeleo y demás temas formales, pero de vez en cuando hacía la vista gorda.
Ante el escándalo que habían montado Natsu y Gray, algunos miembros de Fairy Tail se acercaron a preguntarle a Mira.
-Parece que están en una competición, les llevará dos días.- dijo la albina con una sonrisa.
-¿Juvia no verá a Gray-sama en dos días? ¿Ni siquiera se ha despedido de Juvia?- dijo ella medio llorando.
-No te preocupes por ellos, seguro que se cansan y vuelven en un abrir y cerrar de ojos.- dijo Lucy, aunque ni ella misma creía lo que decía.
-Tal vez deberíais ir a una misión vosotras, chicas, puede ser divertido.- sugirió Mira.
-Juvia no…
-Eso suena tan maravilloso como una mañana de picnic. ¡Decidido, iremos a una misión de chicas!- Erza apareció de la nada junto con Wendy y Carla.
-Pero Erza-san, ¿no está nada cansada? Acabamos de regresar de una misión…- dijo Wendy.
-¡Tonterías! Haremos la misión rápidamente y luego disfrutaremos de una agradable charla femenina.- seguía diciendo Erza con entusiasmo.
Así que Titania cogió a Lucy, Juvia, Levy y Wendy y las arrastró, literalmente, hacia fuera del gremio para emprender su viaje hacia la misión.
-¡Pero Erza-san, ni siquiera hemos escogido la misión!- advirtió Wendy, a lo que Erza entró y salió del gremio a la velocidad de la luz con el primer cartel que se le puso ante la vista.
Habían avanzado algo de trecho y se alejaban del gremio, y una sombra se vio a lo lejos, en la puerta del gremio.
-¡Hey, mujer de la lluvia! ¿No nos íbamos a una misión?- era Gajeel.
-¡Lo siento por ti, pero no va a poder ser!- le respondió Erza en lugar de Juvia.
-¡Gajeel-kun, Juvia lo siente!- sólo pudo decir ella a lo lejos.
Y así, las chicas se dirigieron hacia una aldea no muy lejana de Magnolia para cumplir su misión: pasar un día entero cuidando los animales de una granja en el campo porque al dueño le había surgido un compromiso.
-Por lo menos no tendremos que luchar contra nadie…- dijo Lucy siendo sarcástica.
