Después de casi cincuenta años de estar al lado de su querida Kagome, esta muere dejando a un Inuyasha totalmente diferente. No creo que ese Hanyou vuelva a aceptar a otra mujer en su vida o ¿si?

Declaimer: Rumiko Takahashi no es mía le pertenece a Inuyasha mmmm bueno creo que va algo así o ¿no? Mm este creo que ya me confundí ¿?

Hola que tal nuevamente escribiendo pa´ los que no me conocen soy la persona que no ha terminado y ni siquiera ha modificado su otro fic jiji chin creo que eso me da mala publicidad O.O este mmm ¿ahora qué hago? Bueno el caso es que traigo esta linda y triste historia espero les guste.

あらたなはじまり

Un Nuevo Comienzo

Una mañana como cualquier otra, el sol sale, las aves cantan, el viento sopla, Myroku recibe el primer grito del día por equis cosa que haya hecho, ¡y así es!, todas las mañanas le parecen iguales, ya no se asombra de nada, la tristeza aun no desaparece, pero la disimula bastante bien, ya ha pasado un año y aun no la saca de su cabeza, pero… ¿Cómo hacerlo? Después de todo vivió a su lado por casi cincuenta años, despertaban y dormían juntos.

Y ahora está despertando completamente solo.

La vida hay que aceptarla como es, pero a pesar de saber esto, es sumamente difícil aceptar que el ser amado ha muerto.

Aquel chico de mirada ambarina, desde hace un año aproximadamente va todas las mañanas al río, se sienta en orilla y lo observa por un rato, después pasea media mañana por el bosque, va a la cabaña, luego al templo y deja unas cuantas flores en una tumba, los restos que se encuentran allí, son de una vieja miko que murió hace poco más de treinta años, después de dejar las flores, el chico se dirige al pozo que se encuentra en medio del bosque, al llegar a él, lo único que hace es observarlo y sentarse al lado de este, se queda allí hasta que anochece y después regresa a la cabaña y duerme.

Así son todos los días en la vida de Inuyasha desde que su querida Kagome murió, ella todas las mañanas iba al río a bañarse, después recogía hierbas medicinales y flores, pasaba a su cabaña a dejar las hierbas e iba al templo a dejar las flores en la tumba de Kaede-obasan y había días en que se escapaba de Inuyasha e iba a su época a visitar a su madre y su hermano.

Cap. 1 Recuerdos Eternos

Hoy ha cambiado su rutina, aquel hanyou ha decidido visitar a su cuñado y pasa a través del pozo, al llegar del otro lado, sale del templo y observa a su alrededor, el lugar no ha cambiado nada, camina hasta llegar al Gosemboku, lo observa y sigue su camino, posa su vista en un pequeño templo, al llegar allí, da una pequeña reverencia y entra.

En aquel lugar se encuentran los restos de el abuelo de Kagome, el cual murió hace aproximadamente unos cuarenta años por problemas de salud, también están los de la mamá de Souta, la cual murió hace unos diez años y en medio de los dos se encuentran los de Kagome, quien murió, hace un año. Él ojidorado se acerca a los restos de su querida Kagome y toma la fotografía que está detrás, le da un beso, la deja en su lugar y se marcha de allí.

Se dirige a la casa, entra pero se da cuenta que está completamente sola, así que decide subir a la habitación que era de Kagome, se recuesta en la cama y se queda profundamente dormido.

– Papá, el tío Inuyasha está aquí –

Souta sube hasta la habitación de su hermana y observa al hanyou, el cual está profundamente dormido, así que el ahora abuelo, lo deja descansar profundamente. Desde el día que murió su hermana, observo un cambio radical en aquel hanyou, cuando conoció a Inuyasha se dio cuenta que era una persona en la que se podía confiar, valiente, decidido, con un carácter muy fuerte y sumamente posesivo, pero ahora, es un ser triste, apagado, y con el recuerdo latente de su querida mujer.

Inuyasha y Kagome no tuvieron hijos, desafortunadamente la pelinegra tuvo problemas para poder embarazarse y al final no lo consiguieron, ya que todos los embarazos que tuvo los termino perdiendo, al ojidorado no le importo ya que lo único que quería era permanecer a su lado.

La joven a pesar de su edad, se mantenía muy bien, no parecía tan vieja, siempre se esmero por verse linda para Inuyasha. Hace un año desafortunadamente, se enfrentaron con un gran demonio que ataco los alrededores de la aldea, Myroku, Sango y Kagome eran demasiado viejos para pelear, Shippo no se encontraba en la aldea y Kohaku tenía tres años de haber muerto en un combate, así que solo quedaba Inuyasha. Como de costumbre la pelinegra hizo caso omiso a las palabras del hanyou y fue directamente hacia el demonio, Inuyasha le ordeno mantenerse detrás de él, pero ella no hizo caso y se precipito en la lucha, el demonio la ataco hiriéndola de gravedad, así que el ojidorado lo ataco con el meido zanguetsuha, cuando lo derroto fue directamente con la pelinegra, la cual se estaba desangrando.

– Vamos Kagome tenemos que ir en busca de Sesshoumaru para que pueda sanarte –

– No Inuyasha, recuerda que Tenseiga ya me salvo una vez y no puede volver a hacerlo –

– Pero… no puedo dejar que mueras –

– Inuyasha, solo abrázame, quédate conmigo –

El joven hizo lo que su mujer le pidió, la abrazó fuertemente hasta que murió. Ese recuerdo constantemente está en la mente del ojidorado, después de todo eso paso hace muy poco.

Lentamente un joven abre sus ojos, el viento sopla delicadamente y lleva unas cuantas hojas a la habitación en la cual un hanyou se encuentra descansando. Inuyasha voltea su cabeza hacia la ventana y observa como las cortinas se mueven a causa del aire, vuelve a colocar su cabeza en la posición anterior y comienzan los recuerdos a surcar su mente.

Alejarse de la joven era sumamente difícil, pero no podía hacer nada, había intentando más de mil veces pasar por el pozo, pero este no lo llevaba a ningún lugar. A pesar de esto, el ojidorado nunca se dio por vencido.

Ya habían pasado tres años desde que el pozo llevara a Kagome a su época, e Inuyasha constantemente se internaba en el bosque para esperar a que sucediera un milagro y su querida Kagome regresara. Pero siempre era lo mismo y las esperanzas se desvanecían.

Inuyasha se encontraba con las gemelas de Myroku y Sango, esta acababa de dar a luz a un varón. Poco después los felices padres se reunieron con el ojiodorado, el cual estaba batallando con los dos pequeños demonios, los cuales le jalaban sus orejas y su haori, Myroku solo observaba la escena mientras Sango le pasaba la ropa para tenderla, Shippo también se les unió, después de todo le encantaba ver que las gemelas maltrataran a Inuyasha e incluso intentaban exterminarlo. El hanyou solo se quedaba allí sentado mientras las pequeñas lo maltrataban, hasta que un singular aroma llamo su atención, Inuyasha se libro de las gemelas haciendo que atacaran a Shippo y se marcho del lugar sin decir nada, cuando llego al pozo se asomo y dio su mano en señal de ayuda, la pelinegra la tomo y el hanyou la ayudo a salir de aquel lugar.

A Inuyasha le gusta mucho recordar ese día, ya que fue el día que le declaro sus sentimientos, el ojidorado le pidió que se quedara con ella y esta acepto.

El hanyou se levanta de la cama, se dirige hacia la ventana la cierra y se marcha de la habitación. Baja las escaleras, su nariz comienza a detectar un poco de curry y tempura, así que decide ir a la cocina, no cae mal un poco de comida en el estomago. Al entrar observa a Souta y a sus dos hijos, están sentados a la mesa mientras la esposa de su cuñado termina de servirles.

– Siéntate Inuyasha, hay un lugar extra – dice Souta, indicándole el lugar vacío al hanyou.

Inuyasha se quedo cenando con la familia y decidió pasar la noche allí.

El joven de mirada ambarina se encuentra recostado en la cama que antes era de su esposa. A Kagome siempre le resulto raro decir que Inuyasha era su esposo, después de todo pasaron mucho tiempo juntos y se hicieron amigos, el hanyou concordó con ella siempre fue muy extraño decir que Kagome era su esposa, y aun le parece muy extraño.

Ese ojidorado aun no la olvida, prefiere mantenerla latente en sus pensamientos antes que dejarla morir completamente.

Inuyasha nunca imagino que cambiaria tanto. Se abrió más a las personas y conversaba fluidamente, la confianza hacia sus amigos y seres cercanos creció, basta con decir que todos los niños de la aldea se acercaban al hanyou para poder jugar con él. Pero ahora solo es un ser triste que vaga por la aldea, tiene que afrontar las consecuencias de ser un semidemonio, con el tiempo todos a su alrededor mueren, pero él seguirá viviendo el tiempo que le corresponde.

Aquel joven que se encuentra recostado en la cama, cierra lentamente los ojos y se deja llevar por el sueño.

La mañana es agradable y muy fresca, es plena primavera y los arboles se tiñen rosado, dando un aspecto agradable al lugar. . Se comienzan a escuchar voces dentro de la casa, la familia ya esta despierta y se preparan para una salida familiar.

Souta toca la puerta del cuarto y segundos después entra, invita a Inuyasha a que pase el día con ellos, pero el hanyou rechaza la propuesta, prefiere quedarse un poco más de tiempo en el templo antes de regresar a su época. Souta no insiste y minutos después se marcha del templo junto con su esposa y sus dos hijos.

Hay veces en las que el joven de cabellos plateados le desagrada estar en el templo, los recuerdos que se le vienen a la mente, la cantidad de momentos felices que paso allí junto con su mujer, son tantos, lo único que hace ese miserable templo es hacerle recordar a la mujer que jamás volverá a ver, a la que jamás volverá a besar, a la que jamás le volverá a decir que la ama y que es su vida, ella, a Kagome.

La pelinegra nunca tuvo hijos, desafortunada mente no podía, Inuyasha nunca se lo reprocho ya que no era su culpa, pero a pesar de todo siempre quisieron tener una pequeño que fuera producto de su inmenso amor.

El ojidorado tiende la cama y se dirige hacia la puerta y antes de salir da un último vistazo a la habitación, después solo cierra la puerta y se marcha de la casa.

Pasa por el pequeño templo que contiene los restos de Kagome, simplemente no se detiene, camina al lado de Gosemboku y va directamente al pozo, lo observa un momento y queda pensativo, da un suspiro profundo y salta.

Continuará…

Bueno espero que les haya gustado, cualquier cosa comuníquenmelo en un reviews por fis. Les prometo que ya merito termino de actualizar el fin de "Kagome Queda Sola" lo que pasa es que no puedo subir los capítulos modificados por que aún falta uno que otro, pero ya me estoy apurando =).

Nos vemos después. Chausito.