.Juego de niños.

Introducción "volver al comienzo"

Las escasas nubes que se encontraban en el cielo comenzaron a aumentar su número al igual que su tamaño lo que indicaba que se avecinaba la lluvia, Kise estaba esperando a las afueras del aeropuerto con una tenue sonrisa miro al cielo y como si no hubiese más remedio entro con un paso lento pero sin perder toda la gracia que había adquirido con sus años de modelo robándose más de una mirada y uno que otro suspiro de alguna chica e incluso algunos chicos que se encontraban en el inmenso edificio a la espera de alguien o del mismo avión, el blondo no podía quitar esa sonrisa de su rostro pero no era como si le importase demasiado como para hacer algo al respecto, tomo asiento para dirigir tranquilamente su atención a su móvil esperando algo que le avisase que esa persona ya había llegado. Permaneció de esa manera durante unos minutos hasta que recibió un mensaje y se levanto con gran entusiasmo, buscando con la mirada. El rubio miro por décima vez a su móvil pero esta vez cuando levantó su mirada color ámbar se encontró común chico de cabello desordenado color rosa y unos ojos de un hermoso color violeta que al cruzar sus miradas le dedicó una sonrisa y comenzó a acercarse, pronto sentió que alguien le estaba abrazando, dirigió su mirada hacia abajo y vio unos ojos entre violeta y azul bastante bonitos que le provocaron una sonrisa.

– Noririncchi – levantó al niño y lo dejó de su misma altura.

– ryuotanichan que bueno verte –se abrazo aun mas al cuello del blondo.

Norio era el hermano pequeño de su mejor amigo de la infancia siempre le había recordado a él en todo.

– tanto tiempo sin verte Ryouta –el chico de cabello rosa estaba ahora frente a él a pesar de que lo había visto en las vacaciones de invierno cuando viajó hasta París donde estaba viviendo Michio se había puesto aún más guapo, sin bien Kaisumi Michio era su mejor amigo no podía negar que él era mucho más hermoso y apuesto que el mismo Kuroko Tetsuya que quien toda la generación de los milagros estaba o estuvo enamorado alguna vez.

– Michiocchi que bueno verte –abrazo a su amigo cerró los ojos inhalando el aroma que emanaba de Michio y una vez separados le sonrió como siempre pero quizá con mucho más brillo que como solía hacerlo.

– ven, Norio –El peli rosa tomó la mano de su hermano pequeño para salir del aeropuerto ya que todos a su alrededor comenzaban a mirarles por aquella escena, una vez fuera caminaron a un paso lento para poder ponerse al tanto de todas las noticias que habían sucedido en la ausencia de ambos en la vida del otro.

– estoy saliendo con Yukio hace más o menos unos seis meses desde mi última visita a tu casa.– comentó Kise aun de la mano de Norio, estaba un poco nervioso por contarle algo tan íntimo pero se sentía bastante aliviado a la vez.

– me alegro mucho por ti Ryouta, es bueno escuchar que te enamoraste de verdad de alguien– sonrió melancólicamente por recordar– sus salidas supongo que ahora solo me queda a mi encontrar el amour ~~ –soltó con su tono francés lo cual lo hacía parecer más atractivo.

– no has hablado con Aominecchi?– Michio se detuvo y le dijo a su hermanito que fuese a jugar mientras ellos hablaban un poco, el pequeño obedeció y comenzó jugar en el los juegos infantiles que tenían frente.

– que debería hablar con Daiki?– bajo su mirada escondiendo el dolor que le causaba el solo pronunciar ese nombre – esa vez... me llamo Tetsuya – sonrió irónico– Fue horrible... no fue capaz de decir mi nombre ni una sola puta vez – su mirada seguía interna en el suelo– no tienes idea de lo mierda que me sentí, Daiki eligió a Tetsuya y no pude hacer nada a pesar de mis sentimientos tuve que resignarme a aceptar que Kuroko lo usara y luego rompiera con él.

– pero ahora Kurokocchi está saliendo con alguien más, creo que se llama –se quedó pensando un momento– Shiro Kitetsu, no lo lleva mucho a nuestras reuniones ya que Akashicchi tiene una rivalidad con él y siempre lo ve como su enemigo .

– no es de mi interés, además no entiendo a donde quieres llegar Ryouta – sus ojos estaban vidriosos y sin saber qué esperar de su amigo.

En ese momento la voz de Norio le interrumpió de su plática esta vez venía de la mano con alguien– oni chan he encontrado a uno de los chicos que aparece junto a ti en una de tus fotos.

Michio levantó la mirada y se encontró con la figura imponente del ex capitán de Teiko la persona con la cual siempre había tenido enfrentamientos a causa de que era demasiado cruel según su punto de vista con Aomine a causa de su noviazgo con el sexto jugador del equipo, además de que él había sido un jugador del instituto internacional de Japón en sus primeros años de escuela.

– tanto tiempo sin vernos Kaisumi-kun— el pelirrojo esbozo una de sus ya bien conocidas sonrisas de superioridad mientras que el aludido solo frunció su ceño y luego le enseñó una altiva sonrisa.

– veo que no has crecido mucho— se burlo– a diferencia de ti yo recuerdo cada una de tus burlas relacionadas con mi estatura —hablo lo que hizo gracia a Akashi quien solo miro hacia el pequeño Norio que aún le sostenía la mano.

— cuando vi a tu hermano pensé que eras tú, a los trece medias más o menos lo mismo— pozo una de sus manos sobre el cabello rosado del niño que tenía al lado.— me sorprende bastante ver que casi ya eres de mi misma estatura

— yo no me sorprendería mucho te lo advertí la última vez que nos vimos— ladeo la cabeza— te voy a vencer en un one on one.

— será otro día ahora estoy ocupado además preferiría hacer otras cosas contigo que jugar al baloncesto.

— pues yo no.— respondió asertivo con su ceño fruncido

— ven, Noririncchi vamos a comprar un refresco— el rubio tomo de la mano al pequeño y se fue a otro lugar dejando a solas a los dos individuos

— qué demonios te sucede?! No tienes respeto por un niño pequeño?!— subió el tono de la voz un poco, Akashi solo le dio una sonrisa y comenzó acabar con la distancia que había entre ambos.

Sin darse cuenta como los labios del pelirrojo apresaban los suyos y sentía como su corazón había dado un respingo del susto que le había causado rápidamente Akashi comenzó a apoderarse de cada centímetro de su boca, se separo un poco y le susurro.

— no fue así nuestra primera vez?— murmuró Michio y Seijuro solo se dedicó a acabar con las distancias que había entre sus labios haciendo caso omiso a la resistencia del chico de cabellos rosa.— suéltame— comenzó a forcejear hasta que con un golpe logró que el pelirrojo le soltara.— las cosas han cambiado desde la última vez que nos vimos ya no soy el inocente niñato con el que una vez lo hiciste por despecho porque Daiki estaba con "tu" amado Tetsuya —paso su mano por su cabello esperando alguna respuesta del otro.

— no fue despecho, en verdad me pareces atractivo… además no importa con cuantas personas te hayas acostado seguirás siendo el mismo muñeco inocente e idiota de siempre— su rostro parecía estar bastante seguro de lo que decía pues al contrario de Michio quien parecía que toda su seguridad ya era casi inexistente tan solo por el dulce amargo de sus palabras que calaron hondo en su mente.

— ya no finjas conocerme que hace mucho que deje de creer en ese truco… en verdad a cuantas personas has seducido tú y Kuroko con ese truco? Ha muchas no es así? Pues ya no conmigo, Akashi.

Estaba dispuesto a irse cuando sintió el frío contacto de la mano de Seijuro contra su cálida mano una corriente recorrió a ambos pero Kaisumi ya no estaba dispuesto a seguir siendo la "zorra rosa" de todos los que querían estar con él peli celeste y no lo consiguieron, se había hecho una promesa a él y a su dignidad.

— aún no lo olvido— mencionó— aún no a pesar de que he estado con bastantes para olvidarme de Tetsuya pero contigo todo fue mucho mejor— admitió Akashi

— no me interesa que tan bien "el mundo" se haya sentido conmigo ya no soy una zorra como siempre me ha llamado Kuroko desde que nos conocimos.— liberó su mano de aquella prisión de Hielo y se fue hasta donde se suponía podría estar Kise y su hermanito, escondidos tras unos arbustos espiándole para luego interrogarle sin descaro.

Sus propias palabras le hacían estremecerse al recordar su sucio pasado y no es que el fue pudoroso pero recordar todas aquellas personas que se aprovecharon de su estado incluyendo al pelirrojo e incluso hasta el mismísimo Aomine Daiki, sin duda verse nuevamente en la ciudad que ya le había dado un apodo propio por su estúpido y sin sentido pasado era realmente duro lo único que le faltaba para empeorar su día era encontrarse con el peli celeste con el cual siempre tuvo una rivalidad por quien era más puta.

— Anda, levantaos de ahí… no tenéis derecho de espiar mis conversaciones— dio una sonrisa llena de falsa dulzura ya que por dentro los estaba matando por entrometidos.

— Onii-chan, no mates a Ryoutanichan yo le pedí que nos quedásemos para ver un poquito— hizo un gesto con sus manos mientras daba unas pataditas al suelo lo que lo hacía ver inmensamente tierno lo que le rompió el corazón a su hermano mayor.

— no lo voy a matar— termino por decir.

— me lo prometes?

— vale, te lo prometo— tomo al niño en brazos, dio una mirada al rubiales y luego suspiro negando con la cabeza— con voy a hacer con ustedes… creo que es hora de que nos vayamos a casa ¿no? —pregunto esperando que alguno de los dos le respondiese pero solo el silencio hizo eco en su pregunta.