Disclaimer: los personajes pertenecen a BioWare, sólo soy dueña de la historia.
Aclaraciones sobre este fic:
Esta historia la creé recordando viejos tiempos, pues hace casi tres años, cuando me uní a fanfiction, mi primer fic fue precisamente de este juego, de Dragon Age, y me gustaría hacerle una especie de homenaje subiendo este one-shot y reeditando el primer fic.
Sin más que decir, espero que alguien lea (porque no hay muchos lectores de este fandom) y que le guste.
Ahora sí.
¡A leer!
Drabble One-shot
Pensamientos de un elfo melancólico.
Celos… era increíble lo poco que podía controlarlos cada vez que observaba a Hawke ser cortejada por ese maldito mago. Últimamente, lo notaba más empeñado que de costumbre por ganarse un lugar entre los sentimientos de la chica, visitándola en su finca cada tanto con alguna estúpida excusa:
"Marian, ¿podemos charlar? Hay un asunto que me tiene preocupado…"
"Marian, ¿te importaría si paso la noche aquí? Los templarios han ido a buscarme a Ciudad Oscura y no tengo donde pasar la noche".
"Marian, ¿te gustan las orquídeas? He visto estas y pensé que te agradarían".
"Marian, sé lo estresada que debes estar, ¿Te gustaría ir a caminar para distraernos un rato?".
Marian esto. Marian aquello. ¡Como deseaba arrancarle el corazón a ese maldito descarado que se atrevía a coquetearle aún sabiendo lo que había pasado aquella noche entre ellos!
No es que el lo hubiera hecho público. Ni ella mucho menos. Bueno, realmente no lo hicieron con palabras, pero los actos que cometían cada uno delataba la tensión existente en su antes cercana relación " amistosa" llena de coqueteos.
No fueron necesarias más de dos semanas antes de que el grupo descubriera la verdad: Fenris y Hawke habían compartido habitación en la intimidad del acto sexual. Y cobardemente, el la había abandonado sin dar una razón convincente del porqué lo hacía.
Con el alma rota y frágil de Marian, Anders descubrió una nueva oportunidad de conquistar a aquella mujer, que obviamente no desaprovecharía.
Y eso le molestaba. Le molestaba demasiado, a pesar de que no tenía ningún derecho de hacerlo, porque el la abandonó, no sin antes haber arrancado la virginidad de su cuerpo, situación que empeoraba el asunto, pues los hechos hacían parecer que había utilizado a Marian para brevemente conseguir placer (y para colmo sólo el sabía que aquello era incierto).
Estaba completamente seguro que después de lo que hizo no debería de ninguna manera molestarse si Hawke tomaba la decisión de abrir sus sentimientos al mago, pero aún así, no podía evitar sentir el deseo de arrancarle la cabeza a Anders cada vez que se acercaba a SU Hawke con intenciones de cortejarla.
Bufó molesto, descubriendo que la amaba, más de lo que había imaginado.