Los personajes pertenecen a Ranma 1/2, creado por Rumiko Takahashi, hago esto sin fines de lucro (no se ni para qué pongo esto, pero lo pongo)
Aqui les dejo mi primer fanfic, esta cortito, solo son dos capitulos. Espero les guste y no sean tan duros conmigo, soy novata.
-blablabla- diálogos
"blablabla" pensamientos
blablabla narraciones
¡Ya estoy harto!
Sentado en su futon, un joven de trenza miraba embelesado a la pared, apretaba su puño recordando a la hermosa dueña de sus sueños y pesadillas. Tantas, habían sido tantas las incontables veces en que había querido decírselo, confesarle todo aquello que su sola presencia provocaba en el muchacho, y el mismo número de veces habían sido insensiblemente interrumpidos por toda clase de personas. "Tal vez no es para mí" eran los pensamientos del ojiazul que recordaba con rabia el suceso de esta tarde.
Flash back
Un día como cualquiera en la ciudad de Nerima, dos prometidos caminaban juntos. Había sido un día ejemplar, digno de los jóvenes que por tanto han pasado. Este día fue, de alguna forma, su primera cita.
Después del cine y de ir a comer helado, se dirigían a una romántica escena en el parque.
Esta mañana, el había decidido que era el día, día de confesar sus sentimientos. Tenía miedo, no de aclararlo todo, sino de perderla para siempre, de que si no decidía y se declaraba de una vez, ella se cansaría y terminaría alejándose.
En toda la tarde, no habían hablado más que de asuntos triviales, vivían juntos, no había mucho que contar, pero si mucho que decirse sobre cierto tema que ambos habían evitado todo el día.
Ella no entendía la actitud del joven Saotome, si bien no podía negar que de vez en cuando tenía ciertos detalles con ella, tanta amabilidad no era normal en el chico. No la había insultado este día, ni la había hecho sentir menos y ni siquiera la comparaba con otra de sus autodeclaradas prometidas. No es que no le agradara, pero le causaba curiosidad saber el motivo del cambio en él.
Por fin llegaron, frente a ellos el parque de Nerima lucía en todo su esplendor. Pareciera que el lugar sabía la importancia de este día, los árboles se notaban más verdes que de costumbre, estaba extrañamente vacío y los pájaros tocaban una melodía al compás del dulce viento que agitaba los cortos cabellos azulados de la chica de hermosas orbes cafés.
Trataban de esquivar sus miradas, su rostro rojizo no ayudaba a aparentar tranquilidad. Ambos sabían muy bien a lo que iban, incluso ella, tan ingenua como se ve, ya estaba adivinando las intenciones de su prometido.
Con todo el valor que pudo juntar, el artista marcial levantó la mirada, y la vio directo a los ojos. Ella se perdió en los azules ojos que tanto le gustaban. Él quedó sin palabras, la sola presencia de su prometida lo intimidaba, y la forma más fácil de enfrentarlo siempre había sido insultarla, hacer lo que mejor sabía hacer, era un método de auntodefensa que su orgullo reutilizaba en cada situación parecida para no confesar que se había enamorado de quien tantas veces renegó. Sin embargo, ese día sería diferente, lo había planeado por semanas, el día perfecto, en el momento perfecto, en el lugar perfecto. No se iba a ahechar para atrás, era hoy o nunca.
-A… Akane yo… yo necesito hablar contigo
-¿Qué pasa?
-Yo… yo…- no sabía que decir, necesitaba dejarle claro que la quería, aún con defectos- eres la chica con el peor genio del mundo, no tienes idea de que es el sazón, eres inexpresiva y orgullosa…
-¿Me trajiste aquí solo para insultarme?- un aura feroz se adueñaba del lugar y la chica apretó los puños preparándose para dar su mejor golpe
-Yo… no… lo que quiero decir es que… es que… ¡Ay no lo entiendes!- se rascaba la cabeza- ¡Esto es muy difícil¡ Lo que quiero decir es que no me molesta- así sin más, lo soltó
-¿Q… qué?
-Sí, no me molesta que seas así porque… porque así eres tú, sino no serías Akane
-¿Y a ti desde cuando te gusta que sea Akane?- se cruzó de brazos
-Sí… bueno… si, lo que quiero decir es que… Akane yo… yo… ¡Cuidado!
Una gran espátula se dirigía hacia los dos prometidos. Con suerte, el joven de trenza logró tirar a la peliazul antes de que ésta quedara noqueada por el artefacto.
-Ran-chan, preparé un almuerzo para ti- con voz cantarina, la famosa cocinera de okonomiyaguis acorralaba al chico contra un árbol cercano
-Ah… Ukyo… yo
-Solo espera a que pruebes mi nueva receta de…
-¡Alejarte de airen ahora!- la amazona tomó al joven y lo abrazó hasta sacarle el aire
-¡Yo llegué primero Shampoo!
-Eso no importar, porque airen solo querer a Shampoo
-No… puedo… respirar… Shampoo
-Ran-chan, decide de una vez
-Sí, airen, decirle ya que solo querer a Shampoo
-¡YA ME TIENEN HARTO!- explotó, agitaba los brazos con fuerza para librarse del agarre de la amazona- ¡Akane, vámonos! ¿Akane?
Al voltear, pudo ver que su prometida ya no se encontraba en el lugar. Giró su cabeza y la vio escapando de la escena. Quiso ir tras ella, pero una sombrilla le tapó el paso.
-Hiciste llorar a Akane, Ranma, ¡Y eso lo pagarás!- el chico perdido lo atacó, no le costó mucho a nuestro héroe esquivarlo, pero había otro obstáculo
-Saotome, has lastimado a la bella Akane, yo me encargaré de que no vuelva a sufrir por ti, soy el rayo azul de Furinkan y te haré pagar
Kuno sacó su gran espada y la pelea comenzó, no hace falta decir que era solo un juego para Ranma, sin embargo, el tiempo que perdía era valioso, Akane cada vez se alejaba más de allí.
Fin del Flash Back
Sobra decir que Akane no salió de la habitación. Ranma movió la cabeza para desaparecer el recuerdo. Tantos días de planeación, tanto valor reunido, para nada, todo por esos idiotas que día a día encontraban una nueva forma de arruinarle la vida.
Mas no todo era culpa de ellos, era él mismo quien se complicaba la existencia ¿De verdad era tan difícil expresarse? ¿Podía enfrentarse a cualquier persona, demonio o maldición pero no a su prometida? Ni él mismo se entendía, quería decírselo pero no podía, quería decirle que la amaba pero algo lo impedía. Estaba a punto de darse por vencido, de dejar que el tiempo lo dijera todo, mas una pregunta llegó a su mente: ¿Tu orgullo, cobardía y razón es más fuerte que tu amor por ella?
-¡No!- gritó con fuerza
Ahora se convertía en un reto, iba a decírselo, e iba a hacerlo ahora. La casa estaba vacía, ambos padres y Happosai habían salido y no volverían hasta mañana en la noche, por su parte, Nabiki se había quedado a dormir en casa de una amiga, la única era Kasumi, pero ella no era problema, estaba dormida en su habitación.
Salió por la ventana y más decidido que nunca fue a la de ella. Tocó un par de veces y nadie abrió "Debe estar dormida1 pensó "Mejor así, se ve hermosa cuando duerme" se avergonzó de sus pensamientos, hace unos meses apenas que se había dado cuenta de lo linda que ella era. Siempre lo había sabido, solo que no quería aceptar que esa marimacho pechoplane le atraía. Su forma de visualizar a su prometida cambió ese día en quje la creyó muerta, el peor momento de su vida y a la vez el que más le ha servido, gracias a eso se dio cuenta de su verdadero motivo de vida, de que nada importaba si no estaba ella.
Al no obtener una respuesta de la parte interna de la habitacion decidió entrar y llevarse la última noticia que hubiera pensado.
Una cama desocupada, un ropero vacío y una nota sobre el escritorio era lo único que quedaba de su prometida.
Familia:
Lamento irme sin avisar, pero necesitaba alejarme un rato, tomaré el primer tren que salga de la estación, así quie parta cuando lean esto ya estaré lejos. Regresaré en unos días, lo prometo.
Con amor, Akane
PD. No envíen a Ranma a buscarme, yo sé cuidarme sola.
Dejó la nota en su sitio. "Tal vez aún no sea tarde" recapacitó el muchacho. Seguro, Akane pensó que leerían la nota en la mañana, por lo tanto tal vez aún estaba en la estación.
No perdió más tiempo, salió de la residencia y tomó camino a la estación de trenes que, para su mala suerte, estaba al otro lado de la ciudad.
Bueno pues aquí está mi primer fanfic, quería hacer un pequeño one-shot, pero quedó algo largo así que lo partiré en dos, espero mañana poder publicar la última parte. De una vez les aviso que odio los finales tristes, por lo tanto, todas las historias que yo haga serán con un final feliz, amenos claro que me despierte de malas y les mande un Tsunami o algo peor jejeje todo depende de mi estado de ánimo. Perdón si esta primera parte estuvo aburrida pero lo compensaré nen la segunda, lo prometo.
Por favor, se aceptan críticas constructivas, o tambien insultos, lo que sea pero déjenme un comentario
Nos leemos pronto, bye.
