Así es, he vuelto después de ver el impresionante, y maravilloso final de temporada de la serie. Me llené de ideas como para volver a hacer un One-shot, y sinceramente, espero que les guste este escrito queridos lectores.

Alerta: Spoilers.

Disclaimer: Star Vs The Forces of Evil le pertenece a Daron Nefcy.

—Era lo mejor Star, lo siento —dijo la reina Moon. Acto seguido, se agachó a la altura de la princesa, y la reconfortó con un cálido abrazo.

Al regresar a Mewni, Star no había podido soltar palabra alguna. Mientras sus lágrimas caían, ella sólo se había encerrado en la que fue su habitación desde su infancia.

—Pero, ¿qué haremos ahora mamá? —preguntó la princesa mientras recibía el abrazo de su madre.

—No lo sé. Mewni está en un verdadero peligro. Toffee ha vencido fácilmente a Omnitraxus, Hekapoo, Rhombulus, e incluso a mí. Lekmet ha muerto Star, y ni excavando profundo pude hacerle algún daño.

—Agregar que ahora el pueblo nos odia.

—Lo sé, voy a despedir a Ruberiot —dijo Moon mientras deshacía su abrazo y apoyaba sus manos sobre los hombros de Star—. El caso es que, necesito hablar contigo de algo muy importante.

—Sin rodeos mamá.

—Aquel día que…

La reina no pudo terminar su frase, al notar un portal interdimensional abriéndose ante sus ojos. Al ver esto, Moon se puso de pie rápidamente, mientras se posicionaba para defenderse de quien fuera que este atravesando el portal. Star, al captar rápidamente los movimientos de su madre, sacó su varita, y la tomó en posición de defensa.

—Star…

La princesa bajó de inmediato su varita, al escuchar la voz de aquella persona que acababa de cerrar el portal.

—Marco… —no podía creerlo, él había tomado la decisión de seguirla, y ahora se encontraban frente a frente. ¿Qué diría acerca de la última confesión? ¿Qué pensaría al respecto sobre su repentina partida? Star no se esperaba esto, pero de inmediato cayó en cuenta, de que su mejor amigo aún posee las tijeras dimensionales que había ganado con Hekapoo.

— ¡No me hagas más esto! —exclamó el ser humano mientras se aproximaba hacia su mejor amiga para apretar su cuerpo contra el de él en un desesperado abrazo. Star no sabía cómo reaccionar, puesto que esperaba que él estuviera enojado con ella, pero finalmente, correspondió aquel abrazo.

Moon se había calmado después de confirmar que no era ninguna amenaza, sin embargo, seguía intranquila.

—Marco, lo siento, pero te tienes que ir —dijo la reina separando el abrazo entre su hija y el humano.

—Pero, ¿por qué? —cuestionó Marco.

—No queremos que tú y tu dimensión estén en peligro.

—Pero, ¿qué es lo que…?

— ¡Toffee ha regresado! —exclamó Star interrumpiendo la pregunta de su amigo. Marco, por su parte, no pudo emitir palabra alguna al escuchar aquel nombre. Aunque no pudiera saber con exactitud el detalle del problema, sabía que la magnitud de aquel era bastante enorme. Recordó inmediatamente a aquel lagarto que lo secuestró y lo utilizó para destruir la varita de su mejor amiga.

—Síganme —fue lo único que ordenó la reina Moon después de que Marco se enterara.

Los tres salieron de la habitación de Star, para dirigirse unos cuantos pisos más abajo del castillo, hasta llegar a una gran puerta. A Star se le hacía familiar esta habitación, aunque no lograba recordar con exactitud lo que era, y lo que contenía.

Al abrir las puertas, cayó en cuenta, de que era aquella habitación en donde encontró el dedo de Toffe. Sí, la habitación se su abuela, en la cual se mantenía el legado de cada reina que gobernó Mewni, desde el día de la Mewnipendencia.

Al encenderse las luces, se dejó ver cada cuadro que mostraba a cada reina de Mewni.

La reina Moon se acercó más al cuadro que la representaba a ella usando su varita mágica, y apareció ante ella aquella roca en donde estaban grabadas sus hazañas.
"Será hechizado el monstruo inmortal por Moon, la inconmovible y su hechizo fatal."

—Hace años, cuando yo aún estaba aprendiendo a manejar la varita mágica, me tuve que enfrentar a Toffee, el monstruo inmortal. Corté su dedo con mi varita, y lo encerré dentro de ella, para que no pudiera regenerarlo. Ese es el hechizo más oscuro que pude lanzar, para salvar al reino —explicó Moon a Star y Marco.

—Lo que no pertenece a mis recuerdos —susurró la princesa para sí misma, luego de comprender lo que su madre le había dicho.

—Entonces, ¿Toffee no quería en realidad la varita de Star? —preguntó Marco confundido.

—Me ha dejado bien en claro que lo que busca es su dedo. Es por eso que te secuestró Marco, para hacer que Star destruyera su propia varita, e indagar en ella para encontrar la cura de su maldición.

—Mamá, hace poco, mi varita no estaba funcionando bien, así que Glossaryck me introdujo en ella, para encontrar aquello que no pertenece a mis recuerdos. Si yo lo hubiera sabido, no hubiera sacado el dedo de Toffee de mi varita y…

—Espera, ¿sacaste el dedo de Toffee? —Star fue interrumpida ante la estupefacta pregunta de la reina Moon.

—Bueno…sí, lo siento.

—Todos estamos en peligro. Mira Star, Ludo tiene la otra mitad de la estrella de tu varita, pero el brazo de hueso que se hacía pasar por varita, es en realidad el brazo destruido de Toffee, y aun no sé cómo su mente se mantuvo en la estrella para manipular a Ludo y poseerlo —dijo un poco alterada su madre.

—Toffee…

Dijeron Star y Marco al unísono con incredulidad en sus rostros. No podían soltar palabra alguna al saber que aquel lagarto nunca había abandonado a Ludo, a quien siguió utilizando para sus perversos planes.

—Además, eso no es todo, Star —dijo la reina.

Moon se dirigió hacia el cuadro en donde mostraba la imagen de la reina Eclipsa.

—Baby me informó sobre tu desempeño en el examen. Al parecer fallaste, ¿no? —preguntó Moon mirando directamente a los ojos de Star.

—Pero después pude llevarle la manzana con mi magia, y no me dijo nada, pero eso mejoró las cosas, supongo.

—No es todo lo que me dijo. Hubieras fallado de no ser por tu nivel de poder que, debo admitir, es por mucho superior al mío cuando tenía tu edad.

—Wow, ¡he superado a mi madre! —exclamó Star con mucha emoción en sus ojos.

—Sí, pero debes… —fue interrumpida una vez más.

— ¿Oíste eso Marco? ¡Soy superior a mi madre!

—Si lo oí Star, pero no…

— ¡Star! —ahora fue Marco el interrumpido por la reina Moon.

—Oh, perdón —dijo la princesa mientras soltaba una pequeña risilla.

—Baby me dijo que nunca había visto un nivel de poder tan alto, desde nuestra ancestro, la reina Eclipsa.

Star borró su sonrisa, y pasó a un gesto más serio, en el que prestaba toda su atención a cada palabra de su madre.

—La historia dice, que la reina Eclipsa Butterfly reinó Mewni al lado de un mewano, pero abandonó su puesto al enamorarse de un demonio. Tú puedes tener un nivel de poder similar al de ella, pero debes tener una gran responsabilidad, porque tus emociones, a veces controlan el rumbo de tu magia.

—Espera, ¿crees que yo puedo ocuparme de Toffee?

—Quedará enmarcado en esta habitación si lo haces. Además, sé que es peligroso, pero tu poder hará muchas cosas increíbles.

—Entonces debo aprender a manejar mejor la excavación profunda —concluyó Star ante las explicaciones de Moon.

—Exacto.

Moon se acercó a la princesa de catorce años, y le dio un corto, pero emotivo abrazo. Tal vez Mewni se encontraba en peligro, pero eso no evitó que Star soltara una sonrisa, al saber que puede cambiar las cosas para mejor.

—Espera, ¿dónde está Marco? —se preguntó Star al notar que su mejor amigo ya no se encontraba en la habitación.

La princesa buscó por cada rincón del castillo a aquel chico moreno, pero no lo encontró. Finalmente, decidió subir a su habitación, y al abrir la puerta, lo encontró, sentado en su cama con la cabeza gacha, como si algo no le pareciera correcto.

—Marco —Star se sentó a su lado —, ¿qué pasa?

— ¿Hasta cuándo vas a seguir ignorando el hecho de que me lo dijiste en plena fiesta antes de irte?

—Ah, yo…

—Me mentiste Star. Primero dijiste que yo no te gustaba, y que sólo me querías como amigo.

—Marco, no quería arruinar las cosas entre nosotros, sabía que no sentías lo mismo.

—Pero te hacías daño a ti misma. Esa es la verdadera razón por la cual saliste temprano del concierto de Love Sentence, ¿verdad?

Star no pudo decir nada. Sabía que era la cruda realidad, ya que no soportaba seguir viendo a Marco junto con Jackie.

—Por favor perdóname, yo ni sabía que estabas enamorada de mí.

—No, perdóname tú a mí Marco. Debí habértelo dicho antes en vez de estar tratando de fingir que no sentía nada —dijo Star mientras agachaba su cabeza.

Unas pequeñas lágrimas amenazaban con salir de los ojos de la princesa, hasta que sintió algo. Los brazos de su mejor amigo la rodeaban en un cálido abrazo, en donde intentaba calmarla.

—Solo quiero que haya más confianza Star, tanto con nosotros, como con lo de Toffee. Hemos luchado juntos contra las fuerzas del mal, así que quieras o no, seguiré luchando a tu lado hasta derrotar a Toffee.

Star no dijo nada, solo se dejó llevar por el calor del abrazo. Saber que Marco no la dejará la reconforta tanto. Tal vez no corresponda sus sentimientos, pero para ella, simplemente fue lindo tener a alguien cerca para compartir toda clase de sentimientos.

Por su parte, Marco sabía que pasaría menos tiempo con sus padres, sus amigos, e incluso Jackie Lynn Thomas, pero Star había mejorado sus días, y ella merecía que él ayudara a mejorar los suyos. Sí, aunque él no se haya dado cuenta, una porción de su corazón seguía estando para ella por la eternidad.

Así lo dictó la luna roja.

Bueno, espero que les haya gustado. Después de ver el final de temporada, me dije "esto tiene que tener una continuación", y tada.

Bueno, muchas gracias por la atención.

Att: Emily Rock.