Disclaimer: Como siempre, yo no tengo ningún derecho o poder sobre Naruto o sus personajes, bla, bla, bla… Yo solo tengo derechos sobre esta historia y algunos personajes, habilidades u poderes de mi autoría.

-Prologo-

Konohagakure no Sato, la aldea número uno actualmente en cuanto a poder bélico se refiere, hoy 10 de octubre está sufriendo una catástrofe inimaginable, una criatura de colosales longitudes apareció repentinamente en la aldea causando destrozos por donde pasaba la enorme bestia… Pelaje de color naranja, unos ojos rasgados enormes de color rojo carmesí, un gran hocico con unos enormes caninos, esto juntado con la oscuridad de la noche además de la lúgubre presencia que irradia la bestia generaba pavor en los aldeanos.

No se equivocan, hablamos del imponente Kitsune, el Kyuubi no Yoko, el rey de los Bijuu estaba acabando con las vidas de muchos civiles y ninjas en cada zarpazo de sus poderosas garras… Pero ¿Cómo carajos llego una bestia de su calibre así de la nada?, pues…

Hace unos momentos atrás en un lugar alejado de la aldea se estaba llevando a cabo un acto que traería nueva vida al mundo, la esposa del Yondaime Hokage estaba dando a luz, todo estaba yendo como anillo al dedo, pero un improvisto surgió…

Un extraño enmascarado con gabardina de color negro apareció repentinamente en la sala donde la hermosa pelirroja había dado a luz finalmente a dos nuevas pequeñas vidas… dos pequeños niños, ambos de piel color durazno parecida a la de su padre, uno tenía el cabello de color carmesí como el de su madre y su hermano tenía el cabello de color rubio como el de su padre (No me preguntéis como carajos dos recién nacidos tienen ya cabello), el enmascarado usando una extraña habilidad que lo volvía intangible logro tomar al recién nacido de cabellera dorada, amenazando con quitarle la vida a su hijo logro engañar al Yondaime dándole paso libre para llevarse a su esposa dejando al rubio con sus hijos y unos papeles explosivos como obsequió, actuando rápidamente logro salir del lugar donde se refugiaban salvando la vida de sus dos hijos a una increíble velocidad… Pero a un alto costo, la liberación del Kyuubi fue inminente.

Sarutobi Hiruzen, antiguo Sandaime Hokage lideraba un grupo de ninjas para mantener a raya a la colosal bestia que amenazaba la aldea, el Yondaime tuvo un combate con el enmascarado haciendo gala de su prestigiosa velocidad y su brillante mente logro llevarse la victoria dañando a su adversario dando paso a su retirada, había terminado con su primer problema… Faltaba el más grande, rápidamente usando su jutsu insignia Hiraishin no Jutsu (Jutsu del Dios del Trueno Volador) que fue por el que se ganó su apodo como el Kiiroi Senkō (Rayo Amarillo) apareció cerca del enorme Kitsune y se lo llevo de ahí.

En el bosque rápidamente aparecieron nuevamente, pero esta vez no estaban solos, el Yondaime llego junto con su esposa y sus hijos, la pelirroja usando su Kekkei Genkai como Uzumaki, freno al gran Kitsune con sus cadenas de chakra mermando su poca fuerza que le queda con el parto y la extracción del Kyuubi, Namikaze Minato había tomado su decisión, encerraría al Kyuubi no Yoko nuevamente en sus hijos para convertirlos en Jinchūriki's, con el Kyuubi retenido momentáneamente, Minato empezó con el ritual para llevar a cabo su plan, con un sello y poniendo su palma en el suelo aparecieron en una nube de humo dos altares, donde situó a sus hijos…

− Minato… No iras ah… − ante las palabras de su esposa, el Yondaime no pudo más que voltear la mirada por sus acciones − ¡No! Me niego a dejarles una carga tan pesada a mis hijos… Ellos no tienen que pagar por nada, Minato… Por favor no lo hagas − el dolor y lágrimas impregnadas en sus palabras era palpable, y como no… Sellar una bestia de tal calibre en dos pequeños que recién han venido al mundo, para que los demás reflejen su dolor en ellos, no es fácil verdaderamente

− Kushina, sé que no gusta pero es necesario, no puedo sellar nuevamente al Kyuubi dentro de ti, morirías segundos después de hacerlo, además… Confió en ellos, harán grandes cosas en el futuro, sellare parte de nuestro chakra para que un futuro cuando más lo necesiten, estaremos con ellos − mientras decía estas palabras, Minato depositaba a sus hijos en los altares, los pequeños no dejaban de llorar y la bestia que se encontraba cerca estaba más inquieta a cada momento luchando por zafarse de esas cadenas

Sin muchas opciones a la mano, Kushina tuvo que ceder ante las palabras de su esposo confiando en que un mejor futuro deparara a sus hijos, el Yondaime rápidamente actuó y en un rápido movimiento de manos juntando sus manos al final, una tétrica imagen apareció de la espalda del rubio mayor, el jutsu "Shiki Fūjin" (Sello Consumidor del Demonio de la Muerte) había sido efectuado. Ante eso, Kushina abrió ampliamente sus ojos, dejando paso nuevamente a las lágrimas, pero Minato la detuvo… Entendió a que se debía.

La criatura que había aparecido tenía una daga en su boca, tomándolo con su mano derecha, dirigió la daga hacía el Kyuubi y este fue dividido en dos partes, el chakra Yin fue sellada en el de cabellera rubia y el Yang en el pelirrojo, terminado el sello apareció su símbolo en el estómago de los bebes, tenía la forma más o menos de un sol, pero algo extraño sucedió…

El Shinigami fijándose en los contenedores de la bestia noto algo extraño en uno de ellos, precisamente en el rubio, dentro de él había dos energías fluctuantes que literalmente luchaban por mermar la una a la otra, una era de color de color purpura, la otra era de color dorada… Reconoció la firma de chakra de ambas, una sonora carcajada que helaría la sangre de cualquiera resonó por el lugar, era proveniente del mismo dios de la muerte.

− La suerte está de tu lado, humano, no cobraré tu vida por esto… Considérate afortunado, contrarió a esto… Creo les daré un obsequió − en un movimiento de su mano restauro el chakra de ambos padres y la lúgubre silueta desapareció del lugar

Decir que los padres estaban sorprendidos era poco, no entendían que había sucedido ni por qué el Shinigami había perdonado la vida de Minato además de restaurar su chakra, Kushina rápidamente corrió hacía sus pequeños llorando a mares de felicidad por poder estar cerca de sus hijos y poder vivir con ellos, Minato por otro lado estaba serió y pensativo, lo que acababa de pasar era ilógico en todo sentido, estaba feliz por poder ver a sus hijos crecer y enseñarles todo lo que sabe, pero le resultaba extraño el cómo veía a uno de sus hijos, no encontrando ninguna respuesta avanzo rápidamente donde estaba su familia, pero uno de sus hijos habían cambiado un poco, el de cabellera rubia ahora tenía una marca de bigotes en sus mejillas… Esto lo alarmo un poco, pero cuando vio el color de ojos de sus hijos se calmó.

El pelirrojo tenía los ojos de su madre, tenía unos hermosos ojos de color violeta, pero el rubio era peculiar, parece que tenía la extraña enfermedad de heterocromía, su ojo izquierdo era de color azul cielo como los de su padre y el derecho era violeta como los de su hermano y madre… Le sorprendió un poco este detalle, pero de igual forma calmo sus nervios, por un momento pensó que su hijo había sido poseído por el Kyuubi, pero de ser así sus ojos serían de color rojo como los del Bijuu, probablemente las marcas en sus mejillas era algún extraño efecto secundario que se presentó solo en su hijo, pero de igual forma estaría alerta por cualquier percance.

La barrera que se había puesto para evitar una catástrofe por parte del Bijuu desapareció y rápidamente alguien se dirigió a nuestros protagonistas.

− ¡Minato! ¿Qué fue lo que ocurrió y cómo es que estás vivo?, estaba seguro que utilizaste el Shiki Fūjin − el viejo Kage, Sarutobi Hiruzen había presenciado todo lo ocurrido dentro de la barrera.

− No se precisamente que fue lo que ocurrió, pero extrañamente Shinigami no reclamo mi alma y en cuanto al Kyuubi… Pude encerrarlo nuevamente − Mientras decía esto, el Yondaime tomo en brazos al pequeño rubio cargándolo en brazos, Kushina hizo lo mismo con el pelirrojo − Y estos pequeños fueron quienes nos libraron de esta catástrofe − Sarutobi apreciaba con detalle el símbolo del sello en sus estómagos, pero viéndolos con detenimiento se dio cuenta que…

− Minato, ¿Ellos son… − replicaba con los ojos abiertos de par en par, no imagino que sellarían a la bestia en sus propios hijos, aunque si lo pensaba bien… Por cómo era Minato, nunca podría ponerle esa carga en nadie más, así era como era él.

− Si, ellos son nuestros hijos, él es Naruto, es el mayor por unos pocos minutos, Kushina sostiene a Menma…

Identificados los recién nacidos, la noticia se esparció como pólvora, el héroe más grande actualmente de la aldea de la hoja había vencido a la bestia de nueve colas junto a su esposa, además de sus dos hijos, aún con la destrucción de su pueblo el pueblo estallo en jubilo aún después de haber tenido muchas bajas en la aldea, sabían que los lucharon por proteger el pueblo no murieron en vano, el tiempo transcurría mientras la aldea era reconstruida nuevamente, todo era tranquilidad actualmente por así decirlo… ¿Pero qué sucedió con los Jinchūriki's?.

Una semana después del ataque del Kyuubi no Yoko, una reunión se llevaba a cabo en uno de los pocos lugares que no se vieron afectados por esa catástrofe, ahí se encontraba el Yondaime Hokage junto a sus consejeros, además de las cabezas de los clanes más fuertes e importantes, entre ellos estarían los civiles de más prestigio en la aldea además de los clanes más importantes, estos serían los Uchiha, Hyuga, Yamanaka, Nara, Akimichi, Aburame, Inuzuka, Sarutobi y Uzumaki.

− Bien, una vez acabado los detalles en cuanto al rumbo de la aldea luego de este percance me gustaría tocar un tema más serio, me gustaría pedir que el honorable concejo civil salga de la sala, en esta reunión debo dar la noticias respecto al fin del Kyuubi… − ante la mención de la bestia rápidamente gano la atención de todos los ahí presentes a excepción de Kushina y Hiruzen que ya sabían sobre ello… Pero los civiles no se tomaron muy bien esto.

− ¡Porque debemos salir de aquí, Hokage-Sama! − replico con fuerza uno de ellos.

− Recuerde su lugar Tomoharu-san, soy el Hokage y espero el debido respeto hacia mi persona − la seriedad y dureza era palpable en la voz del rubio, además de la fría mirada de Minato hizo estremecer al civil que alzo la voz − En cuanto a la razón del porque pido su retiro, el tema a tratar es completamente de lucro Shinobi, temas en los que ustedes no tienen ningún poder o voto que los haga necesarios en la sala − el lugar quedo en silencio total, nunca habían recibido ese tipo de trato por parte del Namikaze, normalmente siempre se mantiene con una sonrisa y nunca pierde la calma, caso contrario a lo visto el día de hoy, y es que no era para menos… Luego del nacimiento de sus hijos y el pensamiento en que tenía que dar la noticia del estado de Jinchūriki's de sus hijos, no podía mantenerlo en secreto, cosa que lo hizo pensar en que había dado demasiado poder en este tiempo a los civiles y concejales que para futuro podrían ser un verdadero problema, cosa que con Naruto y Menma no podría darse el lujo de cometer un paso en falso.

Los civiles no pudieron hacer nada, con la cabeza gacha a regaña dientes salieron de la sala dejando solamente a los Shinobis, pero algunos de ellos no se veían muy felices que digamos, los concejales y en especial Danzo no estaba contento con esto, los civiles eran sus mejores aliados a la hora de tomar una decisión, en cuanto a la cabeza de los clanes sonreían para sus adentros por las acciones de su Kage, los civiles eran una piedra en sus zapatos verdaderamente, entonces Minato retomo nuevamente la palabra.

− Como todos sabrán, un Bijuu no puede ser asesinado debido a que solamente son una gran acumulación de Chakra con conciencia, debido a esto me vi obligado a sellarlos en dos pequeños, mis hijos Naruto y Menma − Ante sus palabras todos quedaron en silencio, procesando la información que habían escuchado.

Los minutos pasaban y finalmente alguien rompió el silencio que se había instaurado en el lugar − Me gustaría que los Jinchūriki's estuviesen en mi poder para poder formarlos en las armas que Konoha necesita… − no pudo terminar con su discurso ya que se vio interrumpido por el Hokage − Lo siento Danzo, pero mi esposa y yo entrenaremos a nuestros hijos personalmente cuando alcancen la edad óptima para hacerlo − replicaba el rubio con una sonrisa y sus ojos cerrados.

La impasible momia maldecía a Minato interiormente, estaba esperanzado que el Kyuubi se encargara del Yondaime para tomar finalmente el puesto que a él le correspondía por derecho, pero nuevamente la oportunidad se le vio arrebatada de sus manos al él seguir vivo, ahora con la posibilidad de tener dos armas perfectas a su disposición… − Disculpe Hokage-Sama, pero no creé que eso haría descuidar su puesto como líder de la aldea −

− Tengo mis métodos para poder llevar a cabo ambas cosas a la vez, puedo asegurar la eficiencia en mi trabajo, si encuentran alguna falla podrán hacérmela saber y si la situación no mejora, aceptare la petición de Danzo, ¿Les parece suficiente? − indicaba con una sonrisa inamovible el Yondaime, los demás miembros del consejo no pudieron replicar nada en contra de sus palabras − Antes de que puedan retirarse, esta información se mantendrá como secreto clase S con la ejecución inmediata de quien lo divulgue a quien sea que este fuera de esta sala, todos solamente asintieron a sus palabras pero uno de ellos decidió hablar.

− Disculpe Hokage-Sama, pero me gustaría saber el motivo de mantener el estatus como Jinchūriki de sus hijos − quien hizo la pregunta fue la cabeza del clan Akimichi − sencillo, Choza-san, si esta información sale de la aldea, el peligro de secuestro se incrementaría exorbitantemente, con los enemigos que hemos ganado en el transcurso de estas guerras, no veo imposible que la otras aldeas toman cualquier oportunidad para ganar poder y debilitar a Konoha − sin añadir nada más, todos estuvieron de acuerdo con el razonamiento de su líder.

Cabe mencionar la inconformidad de Danzo, él conocía muy bien al Yondaime… Hacer una falta en cuanto a sus palabras sería casi imposible, Minato siempre estropea sus planes según él, sin cambiar la expresión de su rostro, pero si en sus acciones, fue el primero en salir de la sala cerrando la puerta con un fuerte estruendo, el Namikaze no pudo evitar dejar salir una pequeña risa por el triunfo que había tenido al dejar fuera de sí los planes de esa vil momia.

El tiempo transcurría, la familia Uzumaki Namikaze no podría ser más feliz con los tiempos que vivían, Kushina con cada una de sus acciones hacía los bebes demostraba el amor de madre que esta cargaba consigo, Minato luego de cada día de arduo trabajo regresaba a casa para ver a la mujer de su vida junto al fruto de su amor además de ser sus soles con el porvenir de cada día, lo que los sorprendió unos meses después fue un detalle en uno de sus hijos…

Siendo más específico, en Naruto, en su cabello había surgido un cambio extraño, las puntas de su cabello ahora era de color rojo escarlata como el de su madre y hermano, pero no paso de ahí, a la conclusión que llegaron fue el de su sangre Uzumaki, ya que muchas veces un miembro del clan podía sufrir cambios en su cabello, los gemelos no podían pedir más, eran felices con los padres que tenían y no se quejaban en cuanto a su hermano, sin duda eran tiempos de paz… Pero todos saben que los tiempos de paz suelen atraer grandes tempestades…

¿Por qué el Shinigami actuó de esa manera? ¿Qué son esas energías en el cuerpo de Naruto? ¿Qué será lo que depara el futuro para la familia Uzumaki Namikaze?... Esto y más en los futuros capítulos.

-FIN DEL CAPÍTULO-

Bueno pues, este nuevo proyecto lo traigo con mucha ilusión, las ideas que me bombardearon fueron gigantes, las suficientes como para darle vida a esta historia.

Pido disculpas por las faltas de ortografía y gramática, espero mejorar con el tiempo.

Esta historia la actualizare según me dé chance el tiempo, no dependerá de nada para ser actualizada, la culminare por gusto propio, en cuanto a la otra historia… Pues no lo sé, tengo varías ideas en mi cuaderno, pero como había dicho desde un inicio, todo dependería del apoyo que viese en ella como para seguirla actualizando, si en algún momento veo el interés en ella la seguiré, por mientras estará pausada.

Sin más, saludos de parte de su servidor SasoriK. ¡Nos leemos luego