Capítulo 1: Los Invitados del Castillo

En la actualidad, en algún punto del Bosque Eterna... A través de la boscosa zona, un joven entrenador Pokémon atravesaba corriendo a través de los árboles, dirigiéndose hacia un lugar recóndito del bosque, desde donde podría haber jurado pasaba algo raro.
El entrenador, de pelo azabache y ojos cafés, que portaba una muy representativa gorra roja, venía acompañado de un Pikachu, que corría a lado suyo, mientras tras de ellos una joven entrenadora de pelo azul, gorra gris y vestido azul oscuro, corría tras de ellos.
- ¡Ash, detente un poco! – gritó la jovencilla, la cual ya estaba exhausta de tanto correr - ¡No creo aguantar más!
- ¡Vamos Dawn, ya casi llegamos! – contestó el entrenador, mientras aceleraba el paso.
Después recorrer unos cuantos metros, el entrenador y su Pikachu se encontraron enfrente de un claro baldío. No había nada más que césped. Incluso los árboles rodeando el claro le daban una forma rectangular perfecta.
El chico observó el claro en busca de algo sospechoso, pero no halló nada.
- ¿Cómo? – preguntaba el chico – Podría jurar que había una extraña energía oscura aquí...
- ¿PikaPi? – preguntó el pequeño roedor amarillo que estaba junto al entrenador.
Momentos más tarde, la ya cansada amiga del entrenador apareció de entre los árboles.
- Ash...¿Seguro que es aquí? Parece vació. – preguntó la jovencilla de pelo azul.
- Si, estoy seguro. Hacía momentos sentí un aura oscura provenir de aquí – fue la respuesta de Ash. – Pero ahora parece que desapareció...
En ese momento, de la nada empezó a soplar una extraña brisa, que parecía se originaba del centro del claro. Pikachu sabía que algo no estaba bien. Arqueó su lomo y empezó a sacar chispas de sus rojas mejillas.
- Pikachu, ¿qué ocurre? – preguntó el entrenador a su amigo y Pokémon.
Un segundo después, la leve brisa se volvió más fuerte, y no parecía que algo bueno pasaría.
- Ash, ¿Qué esta ocurriendo? – pregunto Dawn un tanto preocupada.
Pero justo cuando las cosas no podrían ser peor, de la nada apareció un enorme portal en medio del claro, justo enfrente de los entrenadores, los cuales estaban siendo empujados hacia el portal.
- ¡MALDITA SEA! – fue el gritó de Ash al momento en el que empezó a ser empujado hacia el portal.
Los dos entrenadores se agarraron fuertemente de un árbol, tratando de evitar ser absorbidos.
- ¿¡DE DONDE DEMONIOS SALIÓ ESA COSA? – gritó Dawn, muy asustada
- ¡CREEME, SI LO SUPIERA, TE LO DIRÍA! – respondió algo enojado el entrenador azabache.
Más el portal seguía aspirando con fuerza, tratando de absorber a los jóvenes. De repente las manos de Ash se empezaron a resbalar del árbol.
- ¡MALDITA SEA, CASI NO ME PUEDO SUJET...AAAAHHH! – fueron las últimas palabras del chico antes de soltar el árbol y caer dentro del portal.
- ¡ASH, NO! –gritó la joven de pelo azul al ver como Ash era absorbido por el portal, para después desaparecer sin dejar rastros...

Mientras tanto, en algún lugar del Digimundo… Una chica de casi 14 años se encaminaba a través del desértico Digimundo, tratando de dar con un punto en específico, donde sabía pasaban cosas raras, solo que no sabía de que se trataba.
Esa chica, de pelo castaño y ojos violetas, llevaba una blusa blanca con un dibujo de un corazón azul. Se trataba de la llamada Reina Digital, Rika Nonaka.
No muy lejos de ella, alcanzó a distinguir una figura alta, de color amarillo, parecía un zorro. Se trataba de Renamon, antigua compañera de la joven. Esta observó como la joven se acercaba y le dijo con aire serio:
- Hace tiempo que no te veía, Rika. Creí que me habías olvidado.
La joven volteó hacia su Digimon, y simplemente sonrió.
- ¡Cómo puedes decir eso, si tú sabes que nunca te olvidaré, Renamon!
La joven entonces abrazó a su amiga, y unas lágrimas rodaron por la mejilla de esta.
- Me alegra verte de nuevo, Rika.
- Sí, lástima que sea por poco tiempo. – suspiró la joven, que aún así disfrutaba el momento de reencuentro.
Minutos después, ambas chicas prosiguieron caminando, contando sus peripecias que ocurrieron mientras no estaban.
- ¿Y cómo has estado? ¿Alguna novedad?
- Pues…no hay mucho que contar. Yo estoy tratando de participar en el próximo torneo Digimon, pero mi madre me sigue forzando a ir a sesiones fotográficas y demás. Ya sabes cómo es ella.
- Bueno, al menos no tienes a un molesto dinosaurio color rojo molestándote a cada momento, y mucho menos a ese diablillo morado de Impmon.
- ¿Eso crees? ¡Intenta pasar un día entero con chicos pidiéndote tu autógrafo, una foto tuya o queriendo salir contigo! – dijo Rika casi gritando, un tanto molesta por eso.
- Muy bien, te comprendo. ¿Y que ha sido de…?
Renamon no pudo terminar su oración. De repente, el D-Power empezó a parpadear. Rika notó que su Digivice andaba mal.
- Maldita sea…Estamos cerca.
- ¿Cerca? ¿Esa fue la razón por la que regresaste?
Más no hubo respuesta, pues Rika empezó a correr hacia adelante, siempre observando su D-Power. Renamon no tuvo otro remedio más que seguir a su Tamer.
Mientras tanto, Rika corría cada vez más rápido, mientras el parpadeo de su Digivice se volvía cada vez más rápido. Siguió corriendo, hasta detenerse justo en el momento en el que el parpadeó se convirtió en un solo brillo.
Rika notó el paisaje. Parecía vacio, pero al parecer justo enfrente de ella se estaba generando una extraña brisa, leve, pero que cada segundo empezaba a volverse cada vez más fuerte
- "Pero…¿Qué esta pasando?" – pensó la castaña.
Momentos después, Renamon alcanzó a su Tamer y amiga, y noto la misma brisa que ella.
- Esa extraña energía…es similar a la de…
Renamon fue de nuevo interrumpida cuando justo enfrente de ellas, se abrió…
- ¿¡UN PORTAL! ¡QUE ESTA PASANDO AQUÍ!
Rika empezó a gritar desesperada, pues el portal intentaba aspirarla. Renamon trataba de sujetar a Rika, pero le era algo difícil.
- ¡RENAMON, SUJETAME MÁS FUERTE!
- ¡SERÍA MÁS FÁCIL SI NO FUERAS TAN DELGADA!
- "¡Maldicón, madre! ¿Por qué tenías te obligarme a seguir aquella tonta dieta?" – pensó Rika al oír el comentario de Renamon, que a pesar de todo, no logró sujetarla mucho tiempo.
Rika fue aspirada por el portal, que se cerró en cuanto ésta fue absorbida.
- ¡Maldita sea! ¡RIKA! – gritó Renamon desesperada, al ver como su amiga había desaparecido…

Minutos más tarde, en Transilvania, año de 1797… En medio de la oscuridad de un extraño castillo, dentro de la entrada a éste, un portal se abrió de la nada, para dejar salir de este al joven de pelo azabache, Ash Ketchum, Guardián del Aura. El joven estaba algo aturdido.
- Uh…no creo que esté más en Kansas… - Comentó Ash, para después pensar – "¿Qué…qué fue lo que dije? ¿Y qué fue eso de Kansas?"
De repente, a sus espaldas, apareció otro portal, que dejó esta vez a la joven de pelo castaño, Rika Nonaka, la Reina Digital. Estaba un poco aturdida.
- Ah…¿Qué es este lugar? – dijo antes de voltear a ver al azabache - ¿Y quién eres tú?
- ¡WOW! ¿Tú también? – le preguntó a la extraña.
De repente se abrió un tercer portal, que dejó salir a un joven de pelo negro, de unos 15 años. Al igual que todos, había llegado vía portal.
- ¡Diablos! ¿Dónde demonios estoy?
El chico volteó a ver al azabache y la castaña y dijo:
- ¡Un momento, yo los conozco! Tú eres Ash Ketchum – dijo muy emocionado el joven, mientras señalaba al azabache. – Y tu...¡Oh por Dios! ¡Tú eres Rika Nonaka!
Los otros dos se quedaron perplejos.
- ¡Vaya, parece que soy muy popular, Rika, si es que así te llamas!
- ¿Y tú eres…?
- Ricardo, aunque solo pueden decirme Richard o Rich si prefieren.
- Bueno, aclarado esto, ¿Cómo salimos de aquí? – preguntó el azabache.
- Pues…como tú, Ash, ni tú, Richard, saben dónde estamos…supongo que hay que investigar.
- ¿O qué les parece si vamos por esa puerta? – dijo el azabache señalando hacia una enorme puerta que dirigía hacia afuera del castillo, directo hacia un bosque.
Los tres se quedaron pensando, pero entonces Rika dijo:
- Ash, si ese es tu nombre, no sabemos dónde estamos. Si salimos hacia un bosque desconocido, nos perderíamos peor que en este castillo.
Richard entonces revisó su celular, a ver si tenía batería y señal.
- Y para colmo mi celular casi no tiene batería, y no existe señal.
- Entonces será mejor investigar este castillo, a ver si encontramos algo, ¿no lo creen?
- Eso es cierto. Casi siempre es así como funciona – añadió Richard, mientras los otros dos no entendieron bien de que hablaba.
Entonces Ash y Richard se adentraron hacia el castillo, buscando una respuesta a sus dudas.
Pero Rika se quedo unos momentos atrás, pensando.
- "Que extraño. Siento cierto sentimiento familiar en este castillo. Supongo que mejor los sigo. No tengo ni idea de lo que pasaría sime quedo aquí inmóvil"
Entonces ella procedió a alcanzar a sus ahora compañeros, esperando descubrir que era esa sensación familiar que sentía.

¿Qué aventuras les esperan a nuestros héroes? ¿Qué encontraran en el castillo? ¿Por qué me hago esas preguntas? Pero más importante: ¿Será esta la historia más LOCA jamás hecha?