Disclaimer: nada de esto es mío.

-------------------------------------------------------------------------

De batallas finales contra uno mismo, quizás

Porque hay veces que siente que un beso no es bastante. Porque cierra los ojos y se imagina otra piel, otros labios, otro aliento y otra alma. Porque echa de menos el pelo largo, rojo, el brillo verde de unos ojos muertos hace tanto.

Porque tiene un hijo, un niño, y aún así no ha podido olvidarla. Porque ha sido traidor y traicionado, y un animal en noches de luna y sin ella. Porque se le rompió el corazón tantas veces, entre campanas de boda y calabazas de Halloween, y ahora besa y se deja besar y la ve cambiar ante sus ojos, pelo rosa y azul y rojo –rojo, largo, precioso- y otra vez rosa.

Por todo eso, puede que Remus Lupin se sienta un poco –sólo un poco- culpable al cerrar los ojos, cuerpo destrozado y breve sonrisa en los labios. Y es que la vida duele aunque tenga a Dora. Siente no haberle podido dar todo, su alma y su cuerpo y su corazón; pero este último estaba ocupado, invadido por ese eterno recuerdo verde y rojo que era –es- Lily.

Lástima, piensa, y es su último pensamiento antes de deshacerse, de diluirse en la nada de esa Batalla Final, recordada en el futuro, quizás, con Nimphadora Lupin a su lado, muerta antes de tocar el suelo. A su alrededor, chispazos verdes y rojos y blancos, y gritos y sangre y nada que importe, en realidad.

Se desploma, y todo es negro.

-------------------------------------------------------------------

Danny Pendragon

¿Reviews?