Holaaa, el otro día en mi instituto estaban haciendo una campaña de donación de sangre y pues me quede. Y mientras me pinchaban con una intravenosa digna de pesadilla (todavía tengo un agujero en el brazo, sii un agujero) se me ocurrió este fic. Primero pensé en que Maka fuera la miedosa, pero luego recordé que la tecnologa que me atendió me contaba que los hombres eran los mas miedosos a las agujas muajajajaja.
Agujas
Luego de la terrible batalla contra el Kishin Asura, Shibusen tomo la decisión de hacer un examen medico completo a todos sus alumnos, profesores y resto del personal para corroborar que todos se encontraban en perfecto estado de salud, e iba incluido un examen complementario de sangre.
- Bueno, vamos a sacar un poco de sangre a cada uno -dijo Stein con una pequeña sonrisa de satisfacción cuando fue turno del equipo Evans-Albarn.
- Ah... No, yo creo que no, nadie me dijo nada de esto -dijo Soul retrocediendo hacia la puerta.
- Oh si, yo creo que si -se adelanto Maka tomándolo por el cuello de la camisa- ¿Como puedes tenerle miedo a las agujas cuando te suturaron medio torso? -preguntó Maka sin entender.
- ¡Pero estaba inconciente! -se defendio el Arma.
- En realidad no -comentó Stein mientras preparaba la jeringa- aproveche de experimentar con una nueva droga de mi invención que te mantuvo despierto durante todo el procedimiento, tuve que amarrarte con cadenas a la camilla.
Nigus, que también estaba presente, miro al científico con duda, pero este le guiño el ojo, comprendiendo que era una distracción. Después de todo, ella también había estado durante esa operación.
- ¡¿Que?! -preguntó el equipo sin creerlo.
- ¡Yo no recuerdo nada de eso! -alegó una vez mas Soul.
- Si, ese es un efecto secundario lamentable, el paciente pierde la memoria tres horas después de administrada -explicó con pesar- Nigus.
Y mientras el Arma estaba distraída gritando lo inhumano que era su profesor y que podía tomar acciones con él, Nigus aprovecho de sujetarlo con fuerza por detrás y así poder tomar la muestra.
- ¡NOOOOOOOO!-fue el grito desgarrador que se escucho por todo Shibusen.
Cuando salieron al fin de la enfermeria, Tsubaki y Black Star eran los siguientes.
- Viejo ¿Que paso ahí dentro? -preguntó Black muy asustado, eso no se había escuchado como una simple extracción de sangre.
- ¡Traición! Eso es lo que paso -contesto Soul lloriqueando- Mi propia Técnico, mi amiga, mi compañera -dramatizó- No me denfendio de las aterradoras garras de Stein ¡No confies en nadie! -gritó mientras Maka lo arrastraba por el pasillo.
- Tsubaki... -dijo el Ninja con miedo.
- Vamos, un Dios no le teme a las agujas -dijo Tsubaki con una de sus mejores sonrisas fingidas.
- ¡AYUDA!
Gracias por leer!
Onny.