Disclaimer:Jotaká hizo a sus personajes y los casó con quién ella quiso. Dijo Livia una vez "nosotros hacemos lo que podemos para arreglarlo". Que... bueno, por mi parte no es mucho.
Por última vez.
Cuando la tocas se estremece, cuando te acercas a su cuerpo, puedes percibir la tensión que si no fuera imposible, podrías palpar, podrías cortar con un cuchillo... Cuando aproximas tu mano a su mejilla, ella retrocede, y cuando le pides que confíe, ella sólo cierra los ojos presa de un pánico, que sabe ocultar casi demasiado bien y que a veces te perturba y te hace indagarte si no serás tú el único culpable por ello.
Estás cansado, estás harto de eso, estás aburrido de la sumisión que ella nunca deja de mostrar por más veces que lo hagan, por más veces que la toques y que la tomes y que la reclames. Ella no puede disfrutar algo así, es imposible que ella disfrute haciendo algo así cuando siempre cierra los ojos, cuando siempre gime en silencio para no molestarte, cuando ella no hace nada y cuando tú estás harto de eso.
Así que esa es la última vez...
La última porque ya no vale la pena seguir con algo que ninguno de los dos quiere, porque ya no tiene sentido esforzarse por salvar algo que desde un principio sabían que estaba condenado al fracaso. La última... Aunque es difícil decir de qué, si realmente ahí nunca hubo nada. Y al final de nada, al final de espacios vacíos en la vida de ambos, al final de páginas en blanco, de momentos perdidos con su mutua compañía, al final de una vida de falsedades, de mentiras, de disgustos, de ausencias físicas y mentales, de todo lo que vivieron y que no pueden decir haber vivido porque eso no puede merecer llamarse vida... Al final no queda más que pérdida y es absurdo negarlo.
Por eso te alejas y le dices que pare, por eso le dices que ya basta de toda esa farsa y por un momento ella no sabe qué decir, por un momento te parece ver alivio en sus ojos, un alivio que compartes. Crees ver cómo ella también está harta...
Pero luego ves cómo el miedo le atraviesa la mirada, cómo se siente a la deriva. Y entonces es cuando tú sabes que no va a aceptar nunca abandonar la monotonía a la que ambos se han atado, que por más harta que se sienta de eso, lo va a mantener porque no está ni va a estar dispuesta nunca a ser la ex-esposa de Harry Potter... Pero ya has tomado una decisión.
Así que te levantas de esa cama, la miras por última vez en ella y sales de la habitación que jamás volverán a compartir, porque esta vez estás seguro de ello. La escuchas llorar, la escuchas gritar tu nombre, la escuchas maldecirte una vez que intuye que no darás la vuelta, entonces te preguntas por qué no lo habías decidido antes...
Sales de la casa que compraron por decisión suya y te diriges a esa en la que no hubieras elegido vivir pero que en la última década ha sido otro lugar más para alejarte de su lado. Vas a seguir con tu vida… Y esta vez será sin ella, por primera vez estás absolutamente seguro.
Ya no vas a volver. Y una sonrisa asoma tu cara cuando te das cuenta.
o0o
Me imagino un Harry de cuarenta y tantos intentando rehacer su vida y muero. Hace añisimos que quiero escribirle un final al matrimonio que impuso Jotaká en su epílogo (porque aunque se arrepienta, ella escribió eso). Igual y un día escribo algo largo, algo de verdad y que termine en Drarry... Pero por ahora no doy más que para esto.
Gracias.
09/02/2014.