Las mañanas de una vida.
El sol aun no se asoma en el cielo y tú despiertas empujado por la alarma del reloj junto a tu cama. Te toma unos segundos despertar, moverte y apagarlo, empieza la mañana de un día normal. Estiras tu cuerpo con calma, volteas, sonríes y te acercas a despertarla; palabras suaves y la sonrisa de la mañana; luego un beso, palabras y caricias; entonces entre beso y beso notas que se ha empezado a ir la mañana.
Te levantas y te preparas al mismo tiempo con ella, el baño, el traje, algo rápido a modo de desayuno y ambos corren al trabajo; procurando que al entrar el trabajo nadie se percate de que has llegado con ella, pero por suerte aun no hay nadie.
El día corre y tú te preocupas por papeleo y por checar posibles cosas, mucha gente entra y sale de tu oficina con todos los asuntos posibles; hoy no tienes que salir volando a otra ciudad, pero posiblemente mañana si, es tu vida y la conoces perfectamente. Hoy has tenido mucho trabajo y regresas a casa tarde, ella ya te espera ahí. Besos, caricias y es tan tarde de nuevo.
Llega una nueva mañana, con el mismo sonido del despertador; despiertas esperas unos segundos, movimientos, besos, caricias, luego prisas y la mañana se repite como la anterior; llegas el trabajo, fingen que no han llegado juntos... Hoy te espera un caso difícil y un viaje por delante.
Demasiadas fotos de muerte, un viaje, comentarios y los inicios de un perfil; tienes que presentar a tu equipo y tu trabajo frente a los policías y detectives de una ciudad, tienes que trabajar de inmediato, ir y venir... Se hace tarde, es hora de que descanses, vuelves al hotel, hoy no dormirás con ella, si quieren que después de siete meses su relación aun sea secreta sabes que en días de trabajo no duermen juntos.
Despiertas la mañana siguiente muy temprano, has dormido poco y trabajado mucho, te preparas, un baño, el traje y es hora de salir, la has llamado para asegurarte que todo esta en orden y al bajar ella es la primera; empiezas otro día de trabajo, vas, vienes, investigas y preparas un perfil excelente. Otra noche y otra mañana.
Interrogas, averiguas y finalmente llegas a un culpable, un asesino que fácilmente tu equipo detiene; regreso a casa en el avión, ella te prepara un café para pasar el viaje, no dices nada y nadie nota nada... Morgan escucha su música, Rossi y JJ duermen, Reid lee... cada cual en lo suyo.
Regresas a casa, es muy tarde, casi la madrugada, apenas y duermes antes de tener que prepararte nuevamente para el trabajo; se repite lo de siempre, despertador, momentos, besos, caricias, prisas... Llegas al trabajo y te ocupas del papeleo del caso anterior, te preocupas por los casos que pueden seguir y en eso se te va el día entero, para cuando sales ya es muy tarde.
En casa ella te espera, cenan juntos y hablan de tantas cosas que no han tenido tiempo de hablar mientras están en el trabajo, guardando en secreto su relación; terminas tranquilamente tu cena y recoges todo de la cena mientras dejas que ella se relaje un poco.
Larga semana; terminas lo que haces, regresas a tu habitación un tanto cansado y te detienes a mirarla mientras ella cepilla su cabello, se ve hermosa, ella se da cuenta y te mira sonriendo.
-¿Qué sucede?- te pregunta
Tú te quedas callado un minuto más, piensas en tantas cosas al mismo tiempo, te gusta mirarla, sobre todo después de que han pasado un par de días fuera... Si, estas enamorado, como nunca en tu vida y no tienes porque lidiar con eso, porque aunque es un secreto tu relación, es todo fácil de asumir.
-¿Me amas Emily?- preguntas
-Cada día un poco más- te contesta
Ella te sonríe, se acerca a ti sin decir nada más y te besa suavemente; tú sonríes y la tomas entre tus brazos mientras una vez más la besas, con más pasión.
Es tarde... Te preparas para otra mañana de tu vida; si, son todas iguales, pero nunca te molestas ¿y por qué? Pues porque estando junto a ella todas las mañanas son hermosas.