Disclaimer: Los personajes no son míos. A mi solo me gusta ponerlos en situaciones que nunca estarán en los libros.
Mala Praxis.
-¡Malfoy!- El rubio removió su rostro de la entrepierna de la rubia enfermera cuyo nombre no recordaba y se llevó el dedo a la boca en señal de silencio, haciendo que la enfermera lo mirara confundida.
-¿Qué…?- Draco volvió a hacer la señal, haciendo que la enfermera asintiera confundida.
-Malfoy, sé que estás ahí, te vieron entrar mis internos.- Draco rodó los ojos, malditos internos.
-Creo que quiere que salgas.- susurró la rubia, haciendo al rubio entrecerrar los ojos.
-¿Tú crees? Pensé que quería unirse a la diversión.- Draco se levantó de su cómodo lugar y recogió su playera del uniforme del suelo, abriendo la puerta dejando ver a una castaña molesta.
-¡Vístete por el amor de Dios!- le dijo a la enfermera quien se estaba acomodando su uniforme.- ¡y tú! Deja de cogerte a las enfermeras, quieres? Algunos de nosotros las necesitamos trabajando.- Draco sonrió y se colocó su playera, guiñándole el ojo a la rubia quien salió rápidamente del cuarto.
-Dejaré de cogérmelas cuando ellas dejen de seducirme.- Hermione rodó los ojos, jalándolo del brazo y sacándolo al pasillo.
-Eres como una prostituta en una esquina. Paseándote con ropa provocativa para que te noten.- Draco soltó una risa.
-Me paseo con mi uniforme. Qué me haga ver mejor que a todos los demás no es mi culpa.- Hermione bufó, llegando hasta la puerta del baño.
-Si te pusiera ropa interior, no te notaría el contorno del pene y no las provocarías.- Hermione abrió la puerta del baño de hombres e hizo un además con la mano para darle paso al rubio.
-Pensé que iríamos a almorzar.- Hermione lo jalo de nuevo del brazo y lo metió al baño.
-Iremos cuando te hayas lavado esa cara y la boca. Hueles a infección vaginal.- Draco soltó una risa entrando al baño.
-Si no te conociera, pensaría que estás celosa.- La castaña rodó los ojos, cruzándose de brazos y recargándose en la pared, viendo a la gente pasar por el pasillo.
-¿Celosa de qué? ¿De tus exámenes cada seis meses para confirmar que aun no tienes una enfermedad venérea? No gracias.- Draco salió del bañó, pasó el brazo por los hombros de Hermione y caminaron por el pasillo hacia la salida.
-Todas las mujeres con las que me acuesto están limpias, créeme. Lo verifico en su historial.- la castaña volvió a rodar los ojos.
-¿Sabías que es ilegal ver el historial de las personas que laboran aquí?- Draco negó, abriéndole la puerta para que pudieran salir del edificio.
-No para mí, el mejor cirujano de la ciudad.- Hermione sonrió.
-Si claro, el mejor. ¿Cuando fue el concurso que no me pidieron mi voto? Hubiera votado por mi o por el apuesto Doctor Kent de West Side.- Draco frunció el ceño.
-Ese imbécil no sabe distinguir de una arteria coronaria sana a una dañada.- Draco le volvió a abrir la puerta a la castaña de pequeño local Italiano que frecuentaban y entraron.
-Buenas tarde, Doctor Malfoy, Doctora Granger, ¿la mesa de siempre?- Ambos asintieron y siguieron a la anfitriona dentro del local., sentándose en una mesa con vista a la calle.
-Gracias, Silvia, siempre tan amable.- dijo el rubio, sonriéndole encantador a la mujer, haciéndola sonrojarse.
-De nada, que les traigo.
-¿Quieres compartir una lasaña?- pregunto Hermione, haciendo al rubio negar y tocarse el estomago.
-No gracias, tengo una cesárea donde el bebe viene con cardiopatía congénita y necesito monitorearlo para que no se complique.- Hermione asintió.
-De acuerdo entonces pediré un plato de Penne all'Arrabbiata y un té helado, por favor.- la mujer asintió.
-Oh, alguien tiene hambre de algo más.- Hermione rodó los ojos.- Pediré un Trenette al pesto con una copa de Pinot Griggio, gracias dulzura.- La mesera sonrió y se alejo.
-Por favor, no te tires a la mesera, me gusta este lugar.- Draco solo sonrió, sin prometer nada.- Además, ¿Qué haces tomando vino en hora de trabajo? ¿No tienes una cesárea en menos de dos horas?- Draco asintió.
-Podría hacer esa cesárea en estado de ebriedad y sin manos, tranquilízate. Además, no puedes comer italiano sin vino. Es un pecado.- Hermione solo negó con la cabeza.
-Creo que la madre te preferiría sobrio y desde cuando no cometes pecados?- dijo Hermione enarcando la ceja.
-La madre me preferiría en cualquier estado, de hecho. Son del otro lado de la ciudad y llegaron conmigo porque saben que soy el mejor. Y yo nunca cometo pecados, por eso ellos votaron por mí en el concurso del mejor cirujano.- Hermione sonrió.
-Si no fueras mi amigo creo que te odiaría. De hecho, aunque seas mi amigo te odio un poquito.- La mesera trajo las bebidas y se retiró.
-No confundas la envidia con odio, cariño.- Hermione rodó los ojos, tomando un sorbo de su té.
-¿Por qué te envidiaría, Malfoy? Soy una excelente Pediatra neonatóloga, la mejor de mi rango, de hecho…
-¡Y eso es todo! ¡No tienes vida social, ni vida familiar! ¡Estás sola! - Hermione frunció el ceño, molesta.
-¿Y tú sí? El tirarte a cualquier tipa con falda no te hace tener vida social. Salir a fiestas hasta altas horas de la mañana cuando tienes que ir a trabajar al día siguiente no te hace mejor persona que yo. Ver a tu madre cada quince días para desayunar, tampoco.- Draco suspiró y se sentó junto a Hermione, pasándole un brazo por los hombros, besándole la frente.
-Todo lo que dije salió mal. No quería implicar que estabas sola. No lo estas. Me tienes a mí…y a Crookshanks.- Hermione sonrió un poco, recargando su cabeza en el hombro del rubio.- Y si me tienes a mí, no necesitas a nadie más.- Hermione lo empujó con su codo, haciendo que el rubio le besará la frente por última vez y se regresara a su lugar, justo enfrente de ella. La mesera les trajo su comida y ambos comenzaron a comer, solo escuchándose el sonido de los cubiertos sobre los platos.
-¿Qué piensas de Kent?- Draco le miro con pánico.
-No, no, no, no y no.
-¿Qué?- le pregunto Hermione, un poco confundida.
-¿Con mi archí enemigo? Mi némesis? ¿Mi enemigo?- Hermione soltó una risita.
-¿Tu competencia?...- Draco levantó una mano para que se detuviera.
-Ese tipo no puede considerarse competencia. Es un inepto.- Hermione sonrió, comiendo un poco más de pasta. – ¿De todos los hombres del mundo con los que puedes salir tienes que elegir a Kent? Apuñálame en la espalda, mejor.
-Estás siendo dramático. Solo te pregunté qué te parecía. Eso es todo. No existe nada detrás de eso.- Draco rodó los ojos.
-Claro que lo hay, siempre hay algo detrás de lo que preguntas. Pienso que es un idiota, de hecho. No te merece y necesita alejarse de cualquier mujer embarazada, neonato o infante antes de que lo mate con sus malas decisiones.- Hermione suspiró.
-De acuerdo. Solo preguntaba.- Draco asintió, volviendo a comer su pasta.
-Que no vuelva a pasar.- Hermione rodo los ojos. Después de un momento, el rubio volvió a hablar.
-La hija de Potter cumple años el viernes. Al parecer el cumplir 4 años es una gran logro por lo cual le harán una fiesta. ¿Quieres ir?- Hermione se encogió de hombros y asintió.- Bien, usa el vestido azul, ese me gusta.- Hermione le miro incrédula.
-No tienes derecho a decirme que ponerme.- Draco sonrió.
-Era solo una sugerencia, no te pongas feminista justo ahora.- Hermione tomo un sorbo de su té.
-No puedes decirle a una mujer que hacer o usar.
-Cálmate, mujer. Era solo una sugerencia, por Dios.- El rubio negó con la cabeza, tomando un sorbo de su vino.- A las demás mujeres les gusta cuando les digo que ponerse…o quitarse.- Hermione lo pateó por debajo de la mesa, haciendo al rubio sonreír.
-Eres un idiota, ¿sabías?- El rubio solo asintió.
-Me lo recuerdas siempre que puedes, amor.- Hermione sonrío también. Después de unos minutos, el "viper" de Hermione sonó.
-Maldita sea.- El rubio pidió la cuenta rápidamente, tomando de un sorbo largo su vino.- El jodido señor Williams.- Draco frunció el ceño.
-¿El pervertido?- Hermione asintió.- Deberías dejarlo morir, el mundo sería un lugar mejor sin ese enfermo seduciendo jovencitas. Además, cuando dejarás de cubrir Neuro?- Hermione rodó los ojos, tratando de comer lo más rápido posible. La mesera llegó con la cuenta.- ¿A quién le toca?- Hermione se encogió de hombros con la boca llena.
-¿Importa?- El rubio sonrío, sacando su celular y tomando una foto de Hermione con la boca llena.
-Oh, tan sensual.- Hermione le dio un golpe en el brazo, alejando el celular de su rostro. El rubio vio la foto.- Es una obra de arte, definitivamente, me masturbaré con eso más tarde.- Hermione soltó una risa.- gracias, cariño.- Le dijo sonriendo Draco a la mesera, pasándole su tarjeta por el aparato de ATM.
-No seduzcas a la mesera. Amo este lugar.- dijo Hermione, tomando de su té helado.
-Claro que lo amas, mi nuevo fondo de pantalla lo confirma.- dijo mostrándole su Iphone con la foto de Hermione de fondo de pantalla.
-Te odio, ¿sabes?- El rubio le soltó un beso con la mano.
-Me amas.- Hermione rodó los ojos.
-Tal vez el Doctor Kent tenga algo que decir al respecto.- El rubio le miro con el ceño fruncido.
-Hermione, si sales con el maldito homosexual del Doctor Kent, te juro por lo más sagrado que te dejo de hablar.- Hermione soltó una risa, mientras de ponía de pie, seguida por el rubio.
-¿De verdad lo odias tanto?- El rubio le abrió la puerta del local y dejo salir a Hermione.
-Es mi némesis, el propósito de némesis es ese, el odiar.- Hermione rodó los ojos.
-¿Qué te hizo?- El rubio bufó.
-Es un imbécil. No distingue una vagina de un ano.- Hermione sonrió ante lo infantil del rubio.- Por eso los rumores de que es pasiva.- La castaña frunció el ceño.
-¿Pasiva? ¿Como muy tranquilo?- Draco soltó una risa.
-Pasiva como en es el que le gusta la sensación de un pene en su orificio anal.- Hermione frunció la nariz.
-No tenías que ser tan crudo.- El rubio le abrió la puerta del hospital a la castaña, cediéndole el paso.
-No tenías que ser tan boba.- Hermione se detuvo, mirándole ofendida.
-No tienes que llamarme boba.- Draco asintió, pasandole un brazo por los hombros.
-Tienes razón, disculpa.- El rubio le besó el cabello. Hermione recibió de nuevo la alerta.
-Maldición.- El rubio sonrió.
-¿Te apuesto unas cervezas a que te hablaron porque necesita pornografía en su televisión?- Hermione rodó los ojos.
-Nadie me hablaría por eso.- El rubio sacó un billete de su pantalón, mostrárselo a la castaña.
-¿Sí o no?- Hermione sonrío.
-De acuerdo.- Hermione se dio media vuelta caminado, volteando de nuevo a ver al rubio sonriendo en el mismo lugar.
-Que sea Heineken y no esa basura de Corona.- dijeron ambos al mismo tiempo, soltando una risa. Hermione caminó por el pasillo del hospital, llegando al lugar de las enfermeras de su piso.
-Carmen, ¿me llamaron?- La mujer regordeta con uniforme de enferma asintió, pasándole una tablilla.
-Señor William, se iba a hacer una resonancia magnética pero se rehúsa hasta que le autorices el canal para adultos que le prometiste.- Hermione rodó los ojos, viendo el informe en la tablilla.
-¿Crees que si le autorizo el canal lo podrá ver sin el volumen alto?- La mujer negó con la cabeza sonriendo.
-¿De verdad estás pensando en autorizarlo?- Hermione asintió.
-Le ayuda con el dolor. Está comprobado que los orgasmos reducen hasta un 75% el dolor.- La enfermera negó.
-Por cosas como esas es por lo que no tienes un hombre.- Hermione frunció el ceño.
-¿Por investigar datos sobre el dolor?- Carmen rodó los ojos.
-No, por sonar tan clínica y profesional sobre algo tan sexual.- La castaña frunció el ceño. Después de un minuto su celular sonó, dejandole saber que tenía un texto.
"Dale su porno al pervertido y a mí mi cerveza"
Hermione sonrío, maldito tenía razón.
"¿Cómo estás tan seguro de que ganaste?"
Hermione caminó hasta el cuarto del señor Williams y se detuvo justo afuera.
"Porque lo sé todo, Hermione. Hoy, 8pm, mi departamento, tus cervezas, Maratón de Rápido y Furioso, mi pizza"
Hermione frunció el ceño.
"¿Por qué Rápido y Furioso? ¿Porqué no El señor de los anillos?"
"Porque ambos tenemos que trabajar mañana, no quiero pasarme tres días y cuatro horas viendo las películas del El señor de los anillos"
"Son 3 películas, no duran tres días y cuatro horas"
"¿Has visto o leído el señor de los anillos? CLARO QUE SÍ, MALDITA ÑOÑA"
"Rápido y Furioso son 6 películas :("
"Pero no duran una jodida eternidad, Hermione. Además tienen mujeres sensuales y autos deportivos."
"¡EXACTO! No mi tipo de película"
"Sé una buena mujer, Hermione, sumisa y cooperando."
"Eso es lo más machista que has dicho hasta el momento."
"Cállate que tengo una cesárea. Hoy, sin discusiones, Granger"
Hermione rodó los ojos y soltó una carcajada cuando recibió una foto del rubio completamente vestido para operar entre las piernas de la mujer en camilla. Lo gracioso es que la mujer estaba con una enorme sonrisa y ambos pulgares arriba, completamente feliz de posar para la foto con su vagina expuesta. Hermione casi podía ver los centímetros de dilatación. Ese era Draco Malfoy, haciendo que las mujeres hicieran lo que él quisiera solo con una sonrisa. Ese era su mejor amigo.
Espero que lo hayan disfrutado tanto o más como yo disfruté en escribirlo. Nunca he leído una historia parecida y dije "¿Porqué no?".
Como siempre, ustedes son los que tienen la última palabra. Este fic será corto, espero me dejen saber como les parecio en los reviews :)
Atte: Friidaaa (A 1ero de octubre del 2013 a las 10:02pm)