Lo conocí en la calle, le pregunte qué hora era y solo me apunto a el reloj de la plaza central, el vestía totalmente de negro y llevaba sus manos en los bolsillos del pantalón, parecía esperar a alguien, mire el reloj, 10:05am.

-Y… ¿Esperas a alguien?- le pregunte.

-Si- dijo de manera seca.

-me llamo Shouyo, también espero a alguien, a mi hermanita- comente, me miro de reojo, él era considerablemente más alto que yo, sus ojos eran azules. Tan obscuros que en ese día nublado parecían negros.

-Ya veo- se limitó a contestar.

-Eres alguien de pocas palabras, ¿Cómo te llamas?- le pregunte mirándolo con interés.

-¡Toobiiio-chaan!- Un joven de cabello castaño se acercó corriendo hacia el azabache que estaba a mi lado, apenas llego cerca de él se lanzó a sus brazos y estampo sus labios contra los de él.

-Oikawa-san- dijo con un tono de alivio "Tobio-chan", el castaño tiro de su brazo.

-Adiós- dijo mientras era arrastrado por "Oikawa-san".

-Adiós- le conteste haciendo un ademan con la mano, esa seria la primera y la ulma vez que lo vería.