Notas:
Los personajes de la saga Naruto no me pertenecen a mí, si no a su creador Massashi Kishimoto.
La pareja que componen Gaara y Hinata no es cannon.
Si no le gusta esta pareja por favor no comente agresivamente.
Gracias por su atención.
Infancia.
El prestigioso clan Hyuga llegó, finalmente, después de un largo viaje de la aldea de Konoha del País del Fuego hacia la cálida aldea de Suna del País del Viento.
La heredera del clan, Hinata Hyuga, una pequeña tímida y sumisa niña, observaba de lejos a un solitario niño en un columpio con un oso de peluche en mano, lo miró por un largo tiempo, parecía triste pero…¿Cómo no estarlo? La soledad nunca fue algo bueno, ella lo sabía, quizás no muy a fondo, como ese imperativo y simpático niño de su aldea, pero podía entenderlo un poco, después de todo, su padre…siempre le exigió de mas y no tenía a nadie con quien compartir ese dolor. Era algo insoportable.
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Pasaron las horas hasta que finalmente llegó la fresca noche, ella se encontraba en su habitación de hospedaje junto con su hermana menor Hanabi.
-Buenas noches, onee-san- Le dijo.
-Sí, buenas noches, Hanabi- Le devolvió el deseo.
Pasaron varias horas y la pequeña Hinata no pudo evitar escuchar unos extraños sollozos que venían de afuera, volteó a ver a su hermana menor, sin embargo, ella se encontraba en un profundo sueño por lo que comprobó dos cosas: no estaba llorando. 2. Tampoco se había dado cuenta de esos extraños sollozos. Estaba un poco asustada, pero su curiosidad era aun mayor por lo que salió de su cálida cama y aventuró a salir.
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Afuera de la torre de hospedaje de los Hyuga un pequeño niño pelirrojo parecía estar desesperado buscando algo entre la arena.
-¿Dónde estás…? Por favor…sal…oh…por favor, por favor.
Mas allá se encontraba Hinata observando como el niño se desesperaba por algo que ella no parecía comprender. No lo comprendía hasta que recordó lo que tenía la primera vez que lo vió. Un oso de peluche en la mano.
-Byuakugan…- Susurró mientras buscaba con el ojo blanco el pequeño peluche. Después de varios minutos, encontró al fin al peluche, lo recogió y se acercó lentamente con el niño y con un poco de miedo comenzó a hablar.
-E-esto..yo…u-um- No sabía que decir sobre todo cuando este volteo con una cara preocupada. Ahí fue cuando trago saliva de manera muy pesada.-E-esto…e-esto es… ¿t-tuyo?- Le dijo mientras le acercaba el oso de peluche cerca de él. Si ella no sabía ni que decir, el todavía menos, nadie le había dirigido la palabra. No que el recordara.
-L-lo encontraste…-Le dijo después de tanto silencio, Pasó aun más tiempo después de esa pequeña oración que le había dicho y tomo suavemente al oso mientras lo abrazaba. Ella sonrió al ver esa tierna escena, sin embargo se sonrojó cuando este volteó a verla con una infantil sonrisa.-Muchas gracias…mi nombre es…um- Bajó la cabeza, tenía miedo que si le decía su nombre saldría corriendo asustada como todos lo hacían.-Yo soy…¡adiós!- Salió corriendo con su oso pegado al pecho hasta que sintió una pequeña mano sujetándole la mano, evitando que fuera más lejos.
-E-espera por favor…-Esto le sorprendió y se detuvo mientras volteaba a verle la cara.-Yo soy…H-hinata Hyuga…p-por favor dime tu nombre…
-G-gaara…mi nombre, es Gaara.- Sacó el coraje para decirle su nombre mientras se preparaba para verla huir y que no le afectara tanto.
-¿G-gaara-kun uh? E-es un nombre muy b-bonito- Le sonrió cálidamente mientras le soltaba cuidadosamente la mano.
-G-racias…tus ojos…también son…muy bonitos, um…Hinata-chan…
Fin