Wallflower no es de mi autoría, como tampoco los personajes, este es un Fanfic, creado a partir de la idea original de Tomoko Hayakawa. solo pido no copiar este fic, porque está hecho para ser publicado solo en esta página.

muchas gracias ;)

Como todas las mañanas Nakahara Sunako tenía el desayuno y los bentou listos para ella y sus 4 bishounen, ya no sufría los ataques de sangre de nariz como al principio, tampoco le molestaba tanto el brillo que ellos despedían, es más, hacía meses que Kyouhei no le provocaba ni desmayos ni hemorragias nasales.

El primero en sentarse a la mesa fue el chico de cabello rubio, que exigía sus camarones fritos, no podía negar que amaba los camarones fritos que hacía Sunako

-Nakahara Sunako, donde están mis camarones fritos!- gritaba a todo pulmón mientras los otros comensales ocupaban sus puestos

-aquí tienes criatura brillante- con tono apático Sunako, ponía los camarones frente al chico.

-Itadakimasu- dijeron a coro mientras se llevaban sus desayunos a la boca

El camino al Instituto Mori, fue como todos los días, al llegar estaba el ejercito de fans de los 4 Príncipes.

Aunque las chicas sabían que esos príncipes tenían sus respectivas princesas, no se resignaban de admirar a los 4 bishounen en su entrada al instituto.

Noi-chi aparecía ante el grupo de fans saludando animosamente a los 4 bishounen y a la chica que venía tras ellos.

-Buenos días Takenaga-kun, buenos días chicos, buenos días Suna-chan- saludaba animosamente la chica de cabellos castaños

-buenos días Noi-chi- decía Takenaga que la miraba con cara de idiota enamorado

-buenos días Nio-chan- respondían los otros 4 personajes

-supieron que llegará un nuevo estudiante?, creo que lo transferirán a tu clase Suna-chan, ¿no te emociona?- contaba con entusiasmo mientras caminaban al interior del colegio

Sunako siguió su recorrido como si no hubiera escuchado nada, en realidad no le interesaba quien llegara, ya fuera chico o chica.

-No te escuchó Noi-chan- le respondía un Ranmaru más que divertido

Al sonar el timbre cada uno se fue a sus salas, Sunako saludó a sus 3 amigas en la sala de clases y se sentó al fondo de la sala como siempre.

Los alumnos saludaron al profesor como de costumbre, junto al maestro, se encontraba un joven de cabello negro y ojos de un azul profundo, se inclinó frente a la clase y dijo

-encantado en conocerlos soy Kaname Kouji

Las chicas emitieron un gran KYA! al ver la chico, en realidad era guapo, tenía una sonrisa más que agradable, su voz era muy masculina y suave al mismo tiempo, alto, de complexión delgada pero con músculos marcados, no tenía nada que envidiarle al grupo de bishounen del colegio.

El profesor se dirigió a él diciéndole que debía tomar asiento, miró a la clase y el único asiento disponible era junto a la tenebrosa Nakahara Sunako, si bien ya no era tan tenebrosa como al principio, se debía a que el alumnado y sus profesores se habían acostumbrado a sus excentricidades, además la constante presencia de los bishounen cerca de ella como su amistad con Noi-chan y las 3 chicas de su clase habían ayudado mucho a que Sunako socializara, pero era diferente cuando se trataba de alguien que era nuevo en ese ambiente

-deberás sentarte junto a Nakahara, al fondo del salón.

Las chicas lo seguían con la mirada mientras se dirigía a su asiento asignado, Kouji saludó amistosamente a Sunako y ella al mirarlo no lo encontró brillante, por lo tanto lo saludo de muy buena gana, el chico quedó impactado por los bellos ojos violeta de la chica, el rostro perfecto y el hermoso cabello negro lacio.

Durante el descanso el chico comenzó a preguntarle a sus nuevos compañeros acerca de la chica que se encontraba conversando animadamente con sus 3 amigas acerca de la última película de terror que había visto y que según ella sería un excelente tema para la fiesta de Halloween que se aproximaba más aún cuando el instituto había decidido hacer una en el gimnasio y su clase para suerte de Sunako era la que estaba encargada de la decoración del lugar.

-Nakahara Sunako, dices que se llama?- preguntaba Kouji

-sí, aunque a veces es terrorífica es una buena chica, es sumamente buena en los deportes, el año pasado compitió a la par contra Takano-kun- respondía uno de los chicos

-es cierto, aunque los rumores dicen que están saliendo, bueno era de esperarse, él es uno de los 4 príncipes del instituto Mori y además todos ellos viven con Sunako-san- respondía el otro

Cuando aparecía por la puerta como un vendaval Noi-chan, los 2 chicos quedaron embobados al verla y dejaron la conversación que tenían con Kouji

-Suna-chan! Ven conmigo!, tiene que ayudar a Kyouhei-mientras tomó de la mano a Sunako haciéndola entrar en su forma chibi y llevándola volando mientras Noi corría a toda prisa

Kouji no perdió la oportunidad para conocer a Takano y las siguió

La escena no podía ser peor, un grupo de fans había acorralado a Kyouhei y le exigían saber si era cierto que estaba saliendo con Sunako, estaban a punto de romperle la ropa a tirones cuando aparecieron Sunako y Noi

Las chicas se voltearon a verlas cuando comenzaron a increpar a Nakahara, pidiendo una explicación, una de ellas dijo

-es cierto lo que Kyouhei-san dice? Que estás saliendo con él?

El silencio se apoderó del lugar

-si- dijo una muy serena Sunako

Como por arte de magia las chicas se volvieron de piedra, no podían creer lo que estaban oyendo, su amado Takano Kyouhei estaba saliendo con nada más y nada menos que con Nakahara Sunako, todas se alejaron en un momento. Noi no podía saltar más de la alegría y la emoción, no podía creer que su amiga hubiera reconocido que saliá con Takano

-debo contárselo a los chicos y a Tamao-chan!, Suna-chan podemos salir las 4 pareja de una cita cuádruple, ¿no te parece perfecto?

-mi chocolate, tratos son tratos- decía Sunako mientras le estiraba la mano a Kyouhei

-aquí tienes como acordamos- respondía Takano, al entregarle una bolsita de bombones

Sunako estaba feliz, mientras a Noi-chan se le destruían las ilusiones a pedazos

-de que se trata esto, acaso no admitiste que salías con Takano?- preguntaba una furiosa Noi

- el trato es simple él me entrega chocolates a cambio de que yo diga que estamos saliendo.- respondió Sunako, mientras Takano afirmaba alegremente con la cabeza

-mientras nadie se entere que es solo una farsa no hay por qué preocuparse -decía el rubio

Lo que no sospechaban era que el nuevo chico de la clase de Sunako, Kouji había escuchado todo y su interés en la chica de ojos violeta se había incrementado más aún.