Disclaimer: el Potterverso pertenece a JK Rowling.
Esta historia participa en el reto "El dinosaurio" del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black. Este consistía en escribir un fic basándose en un microrrelato que dan al azar.
Costaba demasiado permanecer humano - Bruce Sterling
Sentir.
Si le hubiesen preguntado quién era Emmeline Vance, a Hestia le habría encantado decir que le sonaba el nombre, que solo podía recordar a una muchacha rubia, recorriendo los pasillos de Hogwarts con una expresión seria. A veces Hestia —aún sabiendo que era egoista— deseaba que su mejor amiga hubiese sido una extraña. Porque si lo hubiese sido, habría leído su muerte en el Profeta como una más. Solo habría sentido pena por la mujer, una víctima más de una guerra interminable.
Pero ahora dolía.
Dolía tanto que Hestia se preguntaba si alguna vez pararía.
Emmeline lo había sido todo: sus risas, sus llantos, sus gritos y sus sueños. Pero ahora no era nada, un nombre más en un periódico que seguramente terminaría sirviendo para alumbrar una chimenea, o que simplemente terminaría en una papelera.
Hestia quería que dejase de doler.
Casi podía ver el ceño fruncido de su amiga contemplando su egoísmo. Pero costaba demasiado levantarse de la cama, escuchar las noticias, salir a la calle, ir a una reunión de la Orden, vivir en general.
Ojalá pudiese dejar de llorar, ojalá pudiese sonreir al recordarla (porque así debería ser, a nadie le gusta ser recordado con lágrimas).
Ojalá sentir no doliese tanto.
Nota de autora: ¿cada vez que no sé qué escribir lo hago sobre amistad o sobre angst? Sí, ¿y me lo paso mejor cuando junto mis dos cosas favoritas? También. Ahora en serio, Hestia y Emmeline son la cosa más bonita del mundo y me alegro de haber podido escribir sobre ellas, aunque el fic no me ha quedado tan bien como me gustaría.