Disclaimer: La saga y todo lo referente a Percy Jackson no son de mi autoría, le pertenecen al Tio Rick.
Este fic participa en el reto "Nico di Angelo" del foro El Monte Olimpo.
Los mejores años de Nico di Angelo fueron aquellos en los que era ignorante del mundo a su alrededor, en los que jugaba a las escondidas con su hermana Bianca y podía abrazar con cariño a su madre.
Pero no todo tiene siempre un final feliz.
Nico era, como todo niño, fácilmente impresionable. Luego de la muerte de Bianca, el chico perdió de vista el "buen camino" como le dirían algunos. Pero vamos, ¿se muere la hermana del hijo del dios de los muertos?
No le parecía simpático.
Nico se odió a sí mismo por mucho tiempo, se maldijo en silencio a sí mismo y a Percy Jackson, por no cumplir la promesa que le había hecho.
Por suerte para el di Angelo, al encontrar a Hazel Levesque y al Campamento Júpiter ordenó sus ideas un poco más.
Luego de la derrota de Gea, su meta era nada más irse de los dos campamentos a quién sabe dónde, quizá recorrer el mundo. Además, ¿Quién querría quedarse en una cabaña salida de una película de vampiros? Ni siquiera era hijo de la parte romana de Hades, así que no estaba entre sus opciones el Campamento Júpiter.
A pesar de todo esto, Nico halló su luz. Tal vez no en la paz, no en el Inframundo, como muchos pensarían, más bien en el sol. Si, al final el rey de los fantasmas halló la paz en el sol, o más bien, en uno de sus hijos.
A veces hay que recibir un poco de luz para no transformarnos en sombras.
Palabras: 250
AMO a Nico di Angelo, pero no sé muy bien como escribir acerca de él. Tengan compasión. Está en su derecho decirme si he tenido algún que otro error, de los errores se aprende.