CAPÍTULO 1: NUEVA ESCUELA, NUEVOS AMIGOS

Ginny Weasley estaba emocionada porque su papá había logrado conseguirle una beca en el Colegio Superior de Londres, un colegio al que asistían los hijos de los hombres con apellidos mas importantes en la ciudad.

Ella no era una chica con muchos recursos económicos. Vivía con sus padres y sus hermanos en un pequeño pueblo a las afueras de la ciudad y si había conseguido la beca, era porque su papá trabajaba en una gran empresa que le otorgaba préstamos y facilidades, entre ellas, la de estudiar en ese colegio.

Con un gran esfuerzo, habían logrado juntar algo de dinero para comprar los útiles y el uniforme. Ginny estaba consciente de esto y trataba todo con gran cuidado, prometiéndole a sus papás ser una buena alumna para que se sintieran orgullosos de ella y vieran que el gran esfuerzo que hacían no era en vano.

La mañana que anunciaba el primer día amaneció fría y lluviosa, pero eso no impidió que Ginny se levantara con muchos ánimos, se diera un baño y se colocara el uniforme para bajar a desayunar.

Su padre la esperaba en la cocina con una taza de chocolate caliente y unas galletas de avena.

-Veo que estás ansiosa-Si papá, tengo muchas ganas de empezar las clases-Ojalá ese ánimo te dure todo el año, porque como te darás cuenta tenemos que salir muy temprano de casa si queremos llegar.-Si papá, no te preocupes, siempre estaré puntual- Bueno, pues démonos prisa. La ruta que tomaremos para llegar al colegio es un poco más larga que la que suelo tomar cuando voy al trabajo y no puedo llegar tarde. De eso depende también tu beca- Si papá, solo me cepillo los dientes y bajo de inmediato.

La pelirroja subió y después de asearse y darse un último retoque tomó la mochila y bajó. A mitad de las escaleras se encontró a su mamá.

-Mami, buenos días-Hola hija, ¿ya estás lista?- Si mamá. Te preparé un sándwich y también te bajé un abrigo. La lluvia esta algo fuerte y el viento sopla como loco. Además ese suéter del uniforme es de una tela muy fría… yo no entiendo como siendo un colegio tan caro, no agarran tela mas calientita para que no pasen frío- Mamá, basta! Ahorita me pongo el abrigo y listo. Ya me voy- Cuídate mucho nena y ya sabes que tu hermano pasará por ti a las tres en punto- Ok- Mucha suerte- Gracias ma.

Arthur y Ginny caminaron a la parada de autobús con mucho cuidado, ya que su casa estaba rodeada de vegetación y debían tener cuidado de no ensuciarse con los pequeños charcos de lodo que se formaban. El camión no demoró mucho y después de lo que fue una hora y media de viaje, por fin llegaron.

La jovencita bajó con su padre, que la despidió rápidamente antes de volverse a subir al autobús. Ginny tuvo que caminar unas dos calles más para llegar al colegio y cuando estuvo enfrente de él, se sintió nerviosa.

Estaba por demás decir que la escuela era lujosa y hermosa. Era además de un tamaño bastante grande y ya comenzaba a ver a algunos alumnos que iban llegando.

Respiró hondo antes de acercarse a la entrada. Tenía un hermoso jardín adornado con fuentes y después ya se encontraban los edificios con los distintos salones. Recorrió un edificio hasta que por fin encontró su salón.

Aun estaba vacío, de modo que tomó el lugar que mejor le pareció al centro. Dejó su mochila a un lado y se sentó a esperar la llegada de los demás. Solo pasaron unos minutos mas cuando aparecieron en la entrada tres jovencitas que platicaban alegremente. Ginny desvió la mirada y se dedicó a jugar con las mangas de su suéter.

-Si no quieres tener problemas, te sugiero que cambies de lugar- habló de pronto una de ellas. Ginny tardó un poco en darse cuenta de que se dirigía a ella.

-¿Perdón?- Es el lugar de la sangrona de Parkinson, si te ve ahí se pondrá como loca. Su grupito se sienta en los lugares del centro-.

Ginny se paró comenzó a caminar hacia otra fila.

-Si quieres siéntate cerca de nosotras- le dijo la jovencita mirando a sus amigas, quienes asintieron en señal de aprobación.

La pelirroja sonrió y caminó hasta donde estaban. Dejó sus cosas en la banca de al lado de donde estaba una de ellas.

-¿Cómo te llamas?- preguntó otra de las chicas- Virginia, pero me dicen Ginny- Así que eres nueva Ginny… Mucho gusto, yo soy Lauren, ella es Samantha y ella Monique- Hola mucho gusto- Bienvenida Ginny- la saludaron las otras.

Las tres eran muy bonitas. La que se llamaba Lauren era un poco alta, esbelta, de tez blanca y cabello castaño claro que le llegaba por abajo del hombro y terminaba en unos rizos. Sus facciones eran muy bonitas y tenía unos intensos ojos color aceituna.

Samantha no era muy diferente. Solo que su cabello era negro y lacio, con un corte que le llegaba apenas al cuello, fleco y sus ojos eran de verde esmeralda

Monique era de piel más morena, con el cabello de color café oscuro y unos mechones pintados de color miel y ojos café claro.

-Y de qué escuela vienes Ginny?- preguntó Lauren- Yo estaba estudiando la secundaria en la escuela del pueblo de RiverVille, ahí es donde vivo-.

Las chicas le sonrieron amablemente y Ginny entendió que ya había revelado su posición económica. Bajó la cabeza avergonzada por la situación. Ella nunca se había quejado de su situación económica. Era feliz en una villa como la suya, corriendo por los pastos con su familia y el dinero le importaba poco si podía pasar un rato agradable con todos. Pero en aquel momento se sintió incómoda.

-Bueno, te tenemos que explicar unas cosas…- continuó Lauren para romper el silencio… Primero, debes llevar tu abrigo a tu casillero o aquí te va a estorbar- Y donde está el casillero?- Esta en el piso de arriba. Vamos, yo te acompaño- OK- Chicas, ya venimos.

Lauren y Ginny salieron del salón y se dirigieron a las escaleras.

-Todos tus artículos personales se deben quedar en tu casillero, excepto el celular. Maquillaje, abrigos, i pod, ropa extra… todo de acuerdo? El reglamento de la escuela ya te lo dieron pero hay otro reglamento:

Regla número uno: Los lugares del centro son de los populares. Nadie mas puede sentarse ahí si no es de su grupo.

Regla número dos: Ernie es el chico mas listo de la clase… Por ningún motivo se pasa al frente con él en clase de debate ni para algún ejercicio que implique competencia. Él compite contra reloj

Regla número tres: Los anuncios de fiestas impresos en hojas de colores que se peguen en el pizarrón de anuncios son solo para los populares. Si ellos no te invitan no puedes ir.

Regla número cuatro: Es mal visto que platiques con George el Loco. Tú entiendes porque.

Regla número cinco: A la hora del almuerzo, tampoco puedes sentarte en la mesa que quieras. Ya hay lugares específicos.

Regla número seis: Pansy es capitana de porristas, si quieres entrar al equipo… Debes caerle bien, ser bonita, tener talento para el baile… Aquí está tu casillero.

Ginny lo abrió con la contraseña que le habían asignado en la dirección y guardo su abrigo. Cuando lo cerró regresaron juntas al salón.

Regla número siete: En clase de gimnasia, no intentes ligarte al profe, aunque él te quiera ligar a ti.

Regla número ocho: Los jugadores de Futbol Americano son populares… No les hables si ellos no te hablan y es una lástima porque son guapísimos., peo solo salen con las chicas porristas y por lo tanto populares…

Regla número nueve: Nunca en tu vida te inscribas al programa de ayuda sabatino… es suicidio social, solo los freaks y exiliados de la sociedad lo hacen…

Ginny escuchaba todas las reglas con atención y no se dio cuenta cuando llegaron otra vez al salón. Al entrar vio que ya estaban casi todos los alumnos y fue más que obvio quienes eran los populares.

Eran tres chicas y dos chicos. Todos eran muy guapos y había algo notorio en sus gestos que delataba que eran los típicos juniors adinerados.

Entre las chicas destacaba una. Era rubia, alta, de una figura hermosa, su cabello era rubio y lacio, perfectamente bien peinado y con un corte muy de moda, tenía los ojos de un azul intenso que la hacían verse como una diosa. Ginny la vio caminar y se dio cuenta de que hasta sus movimientos eran… perfectos. Caminaba como una modelo pero con ligereza.

-Si, sonrisa perfecta, cabello perfecto, nariz perfecta, boca perfecta…toda ella perfecta- dijo Lauren mientras llegaban a su lugar con las demás.- Ella es la diva Pansy Parkinson.

-Es la chica mas popular, aunque no sea de las mas grandes de la escuela… Hasta chicos universitarios se mueren por ella.- continuo con cierta amargura Monique.

-Pero es una verdadera engreída… Solo porque su papa domina el negocio de la moda…-dijo Samantha.

-Si que es bonita- dijo Ginny mientras se acomodaba en su asiento- Si lo es, pero no tiene corazón. La verdad me parece una niña sin mas chiste que el físico. No entiendo porque los niños no se dan cuenta de que su carita bonita algún día se le va a acabar y entonces….-

Pero Ginny ya no escuchó más, porque justo en ese instante alguien mas llamó su atención.

En el marco de la puerta estaba recargado un chico rubio de intensos ojos grises. Su cabello estaba algo despeinado, pero al contrario de verse mal, se veía…"Sexy". Era alto, de cuerpo atlético y el uniforme color negro lo hacía verse mejor que perfecto.

Ginny sintió como se le iba el corazón al estómago cuando lo vio sonreír ligeramente de lado.

-Y regla número diez: Si los chicos guapos tienen restricciones… Draco Malfoy está prohibido- le susurró Lauren al oído a la pelirroja.

La chica salió de su ensoñación y volteó a verla.

-Es el novio de Pansy- terminó de decirle la castaña.

Entonces la chica lo volvió a mirar y vio como la rubia se acercaba a él y lo abrazaba mientras lo sacaba del salón.

Nuevamente se sintió mal. Ese colegio era totalmente elitista. Ningún chico como Draco iba a salir con una chica como ella: sencilla y sin un apellido de renombre.

-Si Ginny, mas vale que no vueles tan alto. Nosotras ya aprendimos la lección y te sugerimos no intentes salir con chicos como ellos.

-Ustedes no salen con nadie?- preguntó Ginny para no escuchar lo que ya sabía.

-Lauren sale con un chico del otro salón. Se llama Harry

-También es un chico popular, pero no tanto como el grupito selecto.

-Veras, Harry es una onda totalmente diferente. Los mas populares son los jugadores de Futbol y las porristas, pero también hay otros grupos sobresalientes, como el de Harry. El juega basquetbol, participa en eventos de sociales, pero para beneficio de la escuela. Es el presidente estudiantil de nuestra generación y él si es buena onda- le dijo Lauren orgullosa.

-Que bien!- exclamó Ginny- Y ustedes?

-Yo estoy saliendo con un chico un año mayor que nosotras, pero por ahora nada serio- dijo Samantha

-Y yo empiezo a hablarle a un chico de mi clase de Alemán…- comentó Monique

-Ginny, espero que para esta semana ya tengas un prospecto eh?- le dijo Samantha

-Si Ginny y así tal vez te podamos ayudar con él

La pelirroja sonrió y pensó en Draco Malfoy… un sueño verdaderamente imposible.

-Bien, si encuentro a algún chico, se los haré saber.

El profesor entró en ese momento y todos ocuparon sus lugares nuevamente. Segundos después también entraron Draco y Pansy tomados de la mano y se dirigieron a sus lugares del centro.

Ginny los miró un segundo y luego volteó a ver a Monique que estaba sentada a su lado.

-Todos en este salón se conocen desde hace años?

-Algunos nos conocemos desde el jardín de niños. Regularmente son pocos los nuevos… pero la verdad es que eran mas desconocidos cuando nos revolvieron con el otro grupo de 3ro... pero ahora, ya conocemos a la mayoría.

Las clases transcurrieron tranquilamente. Para la hora del almuerzo eran pocos lo que ya habían notado a la nueva alumna.

-Te sentarás con nosotras- le dijo Lauren mientras se dirigían a la cafetería.

-Es la mejor mesa, porque somos muy relajados

-Y aunque no lo creas pues tenemos un poquito de fama en el colegio

-Si, gracias a Lauren que sale con Harry, los de nuestra generación y los de una mas arriba también nos conocen porque saben que no nos llevamos con las odiosas populares…

-Pero a la que mas conocen es a nuestra otra amiga.

-Si, va en el otro grupo y la conocen por ser la prima de Draco y la enemiga total de Pansy.

-La mayoría de los fans de Pansy la odian, pero no le dicen nada por su primo, así que a la que miran feo es a Lauren… Monique y yo somos equis.

-No es bonito, créanme- dijo Lauren cuando abrió la puerta de la cafetería.

Ginny vio las mesas, las sillas… todo era tan modernista y lujoso… Era un salón grande y perfectamente bien acomodado. Ocuparon los lugares cerca de la barra de comida.

-Este es nuestro lugar, porque Harry y sus amigos son unos comelones, así que se paran a cada rato a ordenar algo de comer…-explicó Monique.

-Harry se sienta con ustedes?-

-Si- contestó Lauren mientras tomaba una charola y dos platos y empezaba a servir diferentes alimentos- También sus amigos, pero no te preocupes, son súper relajados. Seguro te caerán bien.

-Conforme iban avanzando en la fila, las chicas iban bromeando más de la comida. Hasta que Samantha miró a Ginny y se dio cuenta de que solo las seguía sin tomar nada.

-Tú no vas a comer nada?- preguntó

La pelirroja sintió mucha vergüenza, pero solo sonrió levemente y contestó:

-No. Llevo una dieta un poco rigurosa…

-Haces dieta? Pero si estas delgada- dijo Monique

-Bueno no es una dieta para bajar de peso. Sino que debo controlar muy bien mi comida o podría tener un problema severo. Además bueno, en RiverVille la comida es diferente…

-Bueno, si se trata de tu salud, entonces lo entendemos, pero de verdad, por lo menos pide algo de fruta…-insistió Monique.

-Gracias, de verdad pero así estoy bien.

-Chicas, si Ginny quiere algo, lo comprará mas adelante… verdad?- la ayudó Lauren

-Si

-Será que puedan apurarse?- sonó una voz atrás de la pelirroja.

Las chic as la miraron y Ginny reconoció a Pansy Parkinson

-Chicas, mejor hagámonos a un lado porque la vaca de Pansy ya viene a devorar todo lo que encuentre… tan hambreada está, que no puede esperar ni un minuto- contestó Lauren

-Quisieras… pero no pienso discutir con una fracasada como tú…

Pansy iba a pasar con sus dos amiguitas detrás cuando notó a Ginny

-Y tu quién eres?

-Soy Virginia…

Pansy la miró de arriba abajo. La chica pelirroja no era fea, algo flacucha y muy sencilla en su arreglo.

-Nueva?

-Si

-De que año…?

-Cuarto, voy en tu salón

La rubia alzó una ceja y luego después de mirar con desprecio a las demás pasó de largo.

-Vamos Ginny, paguemos esto y sentémonos- la llamó Samantha.

Ginny las siguió en silencio y mientras ellas pagan, la chica fijó su mirada en las mesas del jardín en donde estaban los chicos que había visto en el salón junto con Pansy y otros mas, que debían ser los otros populares. Buscó entre ellos a Draco Malfoy, pero no estaba. Algo decepcionada dirigió otra vez su mirada a las tres chicas que estaban terminando de pagar y luego caminaron juntas a la mesa.

No pasó mucho tiempo cuando llegó otra chica mas. Era castaña, con el cabello un poco esponjado, ojos cafés claros, pero de una figura muy bonita.

-Chicas, sobrevivieron al primer día con Pansy!!- Hola Herms… te presentó a Ginny- saludó Lauren

La castaña la miró y le sonrió mientras la saludaba con un beso en la mejilla.

-Ginny, mucho gustó. Soy Hermione y pues que bien que estés en nuestro colegio.

-Gracias

-Ella es la prima de Draco- le dijo Monique-Ah, con que ya están poniendo al tanto a Ginny de todo eh? Si, soy la prima de Draco Malfoy el niño mas cotizado de todos y la enemiga insufrible de su odiosa novia agg!!... Bueno ahora vengo, voy por algo de comer.

Hermione se alejó y empezó a escoger sus alimentos. Ginny la observó y pensó que de no haberla presentado, ella jamás hubiera creído que esa chica podría ser la prima del chico popular. No es que fuera fea, pero era muy diferente a su primo.

La pelirroja salió de sus pensamientos cuando vio a Lauren ponerse de pie y abrazar a un chico que ya estaba junto a la mesa, acompañado de otros tres mas. De inmediato supo que era su novio.

Harry era alto, de tez blanca, el cabello despeinado y de un color negro intenso y una figura también atlética.

Cuando se separaron. Harry miró a la chica nueva y le sonrió.

-Amor, ella es Virginia, nuestra nueva amiga… Ginny él es Harry, mi novio.

-Mucho gusto Ginny, Virginia…- le dijo Harry mientras le extendía la mano.

-Igualmente… y dime solo Ginny

-De acuerdo. Ellos son mis amigos… Colin, Seamus, Dean

-Hola- Saludaron todos.

Después los tres chicos fueron a la barra por su comida y Harry se sentó junto a Lauren, que ya le había comprado algo.

-Y Ginny, vas en el grupo de estas tres locas?

-Si

-Que bien!! Y de dónde eres, si se puede saber?

-Yo vengo de RiverVille- dijo algo apenada.

Harry le sonrió y Ginny vio una sonrisa encantadora. También hasta ese momento notó los hermosos ojos color verde esmeralda del chico.

-Me han dicho que es muy bonito y verde

-Sí, así es. Bueno es que llueve seguido y los campos se riegan constantemente

-Ya lo creo…Espero un día nos invites, tengo ganas de conocer ese lugar

-Claro. Algún día.

Lauren también le sonrió a la chica y abrazando a Harry le dijo a la pelirroja:

-Dime si no es verdad que mi novio es un encanto?

La pelirroja sonrió con timidez y Harry le dio un beso en la frente a Lauren.

-Ginny no le hagas caso, por favor… Perdónala si?

-Jaja, ok… pero si eres muy buena onda

-Gracias, pero no te sientas obligada a decirlo solo porque esta niña está presente.

-No, no lo digo por compromiso, sino porque siento que eres así, muy amable

Los demás chicos y Hermione llegaron y se sentaron a comer. Empezaron a hablar de los profesores que les habían tocado, del horario...En verdad todos eran muy unidos.

De pronto Harry notó que Ginny no tenía una bandeja de comida como todos los demás y preocupado le preguntó:

-Disculpa Ginny, pero tú no vas a comer?

-Eeh.. No la verdad es que no tengo hambre.

Ginny se puso colorada porque ahora todos los chicos de la mesa la miraban.

-Porque? Ya aprendiste a comer entre clases?

-No, lo que pasa es que la comida de la ciudad no me cae bien… les decía a ellas que mi dieta es rigurosa, porque soy muy enfermiza.

-Pero debes alimentarte… por lo menos algo de fruta. Si esperas a llegar a RiverVille, te puedes desmayar de hambre.

-Es lo que le decíamos nosotras- dijo Samantha

-Lauren, porque no le insististe?- le dijo Harry

-Es que Ginny no quiso.

-Bueno Ginny, como presidente de los alumnos de esta generación, como tu nuevo compañero, te pido por favor que comas algo.

Ginny agachó la cabeza apenada. No sabía como decirles que no tenía dinero suficiente para comprar algo para el almuerzo.

-De verdad, mil gracias, pero así está bien

-Ginny por favor, come algo… Todos aquí nos cuidamos mutuamente y si no comes te puedes enfermar. Es mas, vamos; yo mismo te acompaño a que escojas algo de comer.

-No Harry muchas gracias…- pero ya no pudo seguir renegando porque el chico estaba de pie y la esperaba.

Con pesar se levantó de la mesa y Lauren le sonrió apoyándola.

Caminó con Harry hasta donde estaba la comida.

-Vamos chica, escoge algo… Y si me dejas ayudarte pues como dices que te cae pesada la comida de aquí te sugiero una ensalada, es ligera y pues no tiene tantos condimentos.

-Es que yo no…

-Basta. Sus, me puedes preparar la ensalada especial… con mil islas? Te gusta Ginny?

-Sí pero…

-Entonces sí, con mil islas e ingredientes extra… ya sabes, como me gusta a mí

-En seguida corazón- respondió la cocinera y se metió a preparar todo.

-Lo ves, así no tienes que comer nada de lo que está aquí ya preparado.

-No sabía que también te preparan cosas especiales…

-Sí, si le caes bien a Sus jajaja

Los dos chicos se quedaron en silencio y Ginny empezó a mirar nerviosa a todos lados, porque no sabía cómo le haría para pagar.

La cocinera no tardó nada en salir con el platillo listo.

-Listo corazón, le pagan a Anita si?

-Gracias Sus.

Harry caminó a la caja junto con Ginny que miró apenada a la mesa en donde estaban Lauren y los demás que reían animadamente.

-Anita, te cobras mi especial?

-No Harry- dijo Ginny tan roja como podía.

-Déjame pagar Ginny, yo te insistí para que comieras…

-Pero es que me da pena que pagues-. Metió su mano en el bolsillo de su falda para tronarse los dedos por los nervios, pero Harry creyó que la chica iba a sacar su dinero para pagar y la detuvo.

-No Ginny, yo pago. Ni te esfuerces en sacar tu dinero, porque no lo vas a ocupar.

El chico pagó y volvieron a la barra.

-Te mostraré como se come esta delicia.

Harry tomó el aderezo y lo vació sobre la ensalada, luego también abrió unos sobrecitos que eran como especias y los esparció.

-Qué es eso?

-Es el ingrediente secreto. Lo siento Ginny pero solo debes probar.

La chica le sonrió y cuando Harry le pasó el tenedor la miró atentó.

-Pruébala y me dices… Mientras iré a tirar esto- dijo señalando las bolsitas de basura de las que había sacado las especias.

Ginny tomó un poco y lo probó. El sabor era riquísimo, en definitiva Harry tenía razón era una delicia.

-Se ve bien- dijo una voz a un lado.

Ginny se volvió a poner roja cuando miró al chico que la observaba comer. Era el rubio de ojos grises, Draco.

-Puedo saber qué es?- volvió a preguntar.

-Eeh.. Lo siento no lo sé, me la dieron a probar. Harry la pidió como la especial con ingredientes extra- contestó a penada.

-Harry eh? Provecho.

-Gracias.

El chico se volteó y pidió algo que Ginny no entendió porque estaba demasiado ocupada en mirarlo a él. En verdad que el chico no le pedía nada a nadie, era demasiado guapo.

-Y que tal?- Harry la sacó de sus pensamientos

-Sabe bien. Le respondió ella sonriendo

-Bueno, vamos a la mesa a que la disfrutes

-Gracias Harry pero no me da pena que hayas pagado

-No te preocupes, nadie sabrá que fui yo- y guiñándole un ojo la tomó del brazo y caminaron hasta la mesa.

-Listo señorita?- dijo Lauren cuando llegaron

-Si

-Es la especial no Harry?- preguntó Colin

-Sí, tenemos que cuidar a nuestra nueva amiga y además de que esta ensalada es muy rica, pues no le va a caer mal.

Y a partir de ese momento la comida fue más amena. Ginny se sintió muy a gusto con todos los chicos que estaban ahí. Además eran muy divertidos y siendo honesta, la ensalada le cayó súper bien pues tenía hambre y el sabor era de lo mejor.

N/A: BUENO, PUES DÍGANME LOCA, PERO YA ESTOY CON OTRA HISTORIA, QUE SE ME VINO A LA MENTE DESPUÉS DE LEER UN LIBRO Y VER UNA PELÍCULA QUE ME LLENARON DE INSPIRACIÓN. SE QUE AUN NI TERMINÓ MI OTRO FIC, ES MAS LO ABANDONÉ POR UN BUEN TIEMPO, PERO LA VERDAD ME MORÍA POR ESCRIBIR ALGO MAS… PORQUE SON TANTAS IDEAS QUE ES IMPOSBLE ACOMODARLAS EN UNA SOLA HISTORIA… PUES BUENO, ESPERO QUE LES GUSTE Y DEJEN REVIEWS POR FI. LOS QUIERO…. BSSS DARYNKA MALFOY.