Nota: los personajes y lugares le pertenecen a Akira Toriyama, este es el primer fanfic que escribo para esta serie, que es la responsable de que me guste el Anime y los fanfics, porque fue el primer anime que vi y los primeros fanfics que leí eran de Dragón Ball.
Una aclaración muy importante. En esta historia AU, la diferencia de edades de Goku y Vegeta es de apenas un año. La historia comienza en el planeta Vejita, una mañana cualquiera, pero mejor seguimos con el relato mismo.
Planeta Tierra
—Príncipe Vegeta, regrese.
—Ese estúpido de Nappa —Refunfuñó Vegeta detrás de un mueble en el palacio del rey —. Seguro quiere que vaya otra vez con Freezer.
El joven Príncipe siempre se caracterizó por su inteligencia, y esta vez no era la excepción. Freezer le había enviado un mensaje al Rey Vegeta en el que decía que quería ver al joven príncipe de los Saiyajin. Temeroso de una revolución del pueblo del planeta Vejita, que no estaba alejada de la realidad del todo.
Vegeta corrió hacia la puerta, con sus seis años de edad, todavía no aprendía a volar, y escabulléndose abrió una puerta que sabía le llevaría lejos de Nappa, el encargado de cuidar y entrenar a su majestad.
—Aquí no me encontrará el inútil de Nappa —Pensó vegeta que a gatas se metía debajo de una mesa en la cocina.
Para sorpresa del príncipe, no fue el único que pensó que ese era un buen escondite.
—¿Quieres un pedazo de pastel? —Kakarotto, el hijo de Bardock le ofreció una parte de su mal habido botín.
—¿Quién eres tú? —Preguntó el joven príncipe.
—Mi nombre es Kakaroto, mi papá se llama Bardock y mi hermano se llama Raditz.
—Eres el hijo de un soldado de clase baja —Dijo con Desdén Vegeta —. Pensé que a insectos como tú los enviaban a planetas débiles.
—Eso me dijo mi hermano —Dijo Kakaroto dándole una mordida al pastel, para luego continuar hablando con la boca llena de migas —, pero mi papá pensó que era mejor que recibiera algo de entrenamiento. Ahora ya puedo lanzar poderes.
El pequeño se concentró y aunque lo intentó, sólo pudo hacer aparecer en su mano una pequeña esfera luminosa que desapareció rápidamente.
—¿A eso le llamas poder? —Se burló Vegeta — Esto es poder.
El príncipe hizo estallar el pastel de Kakaroto desparramando toda la crema sobre ellos.
—Mi pastel —Se quejó Kakaroto —Mi delicioso pastel. ¡Buahhh!
La explosión y el llanto de Goku no pasaron desapercibidos. Pronto Raditz y Nappa llegaron para atrapar a los fugitivos.
—Con que aquí te escondes insecto —Raditz tomó a su hermano de la cola —Vamos, tenemos que preparar tu viaje.
—Hay mi colita —Se quejaba Kakarotto.
—Príncipe Vegeta lo estaba buscando —Nappa hizo una reverencia —. Su padre, el rey, me ordenó llevarlo con el señor Freezer.
—¿Eres el príncipe? —Preguntó Goku — Ahora entiendo porque usas capa.
Vegeta sólo se cruzó de brazos y miró a otro lado.
—Vamos pequeña molestia —Raditz soltó a Goku para que cayera sobre su cabeza —. Nuestro padre está en una misión importante, me dejo a cargo de ti por si no regresaba. Ahora mismo te voy a enviar al planeta Tierra, para deshacerme de ti de una vez por todas.
—Yo no quiero ir —Kakaroto Se frotaba el chipote de la cabeza —. Quiero quedarme aquí.
—Harás lo que te digo —Raditz jaló el brazo de su hermano —. Si no te hubieras golpeado la cabeza cuando eras un bebé ya estarías allí. Por lo menos papá no hubiera sentido lástima por ti, creyó que ya no eras el mismo.
Raditz se llevó a rastras a su hermano, no sin antes hacer una reverencia al príncipe Saiyajin.
Vegeta observó la escena en silencio sin atreverse a intervenir, pensando en la manera de deshacerse de Nappa, si tan sólo le hubieran enseñado la técnica de volar, ya se habría marchado mucho antes, cansado de obedecer las órdenes de Freezer y que su padre no hiciera nada el respecto. Trataba a todo el pueblo Saiyajin como si fueran sus empleados.
—¿Por cuánto tiempo será esta vez? —Preguntó Vegeta a Nappa.
—¿A qué se refiere su alteza?
—¿Cuánto tiempo voy a estar con Freezer?
—No lo sé —Respondió Nappa —Sólo me dieron las órdenes de llevarlo con él.
—Si voy a estar mucho tiempo necesito preparar mi equipaje —Dijo Vegeta —Llévame a mi habitación.
Nappa obedeció sin pensarlo dos veces, porque conocía a bien a Vegeta. Sabía que no debía contrariar al príncipe. Caminó delante de Vegeta esperando que el joven príncipe lo siguiera. Grueso error, en cuanto Nappa dio el primer paso Vegeta ya corría en dirección contraria.
Por su parte Kakaroto tenía sus propios problemas.
—Suéltame, papá no quiere que me manden a la Tierra —Kakaroto trataba de zafarse de Raditz pero era inútil —. Yo no quiero ir. Le diré a papá.
—Papá está muerto —Le dijo Raditz secamente —. No volvió de su última misión, los otros soldados me lo dijeron.
—No, papá no puede estar muerto —Lloró Kakaroto —. El me prometió que volvería y que me enseñaría a usar mis poderes.
—No seas tonto —Raditz tomó a su hermano y lo encerró en la primera cápsula —. Ahora directo a la Tierra.
—¿Qué estás haciendo imbécil? —Raditz escuchó la voz de Vegeta —. Apaga esa máquina.
Raditz sólo pudo ver como aquella nave con forma de esfera despegaba con dos tripulantes dentro, su destino era un pequeño planeta azul.
Nota: Sí, el planeta también se llama Vegeta, pero con tres Vegetas habrá mucha confusión, por lo que he decidido simplemente llamar al planeta Vejita simplemente pare evitar confusiones.
