El siguiente fanfic se ambienta en el videojuego Mix Ore, creado por CHARON.

No soy dueño de ninguno de los personajes, hago uso de ellos con fines de mero entretenimiento, no me interesa, no deseo y no debo lucrar con ellos.

Comencemos.

Hubo algo en mí que cambió desde el día en que te vi. No supe cómo reaccionar, qué decir o hacer, simplemente mi corazón fue atravesado por una flecha. Mi cuerpo sudaba, mi cabeza tenía bastantes ideas donde nosotros dos estábamos involucrados, palpitaba con rapidez, casi se salía del pecho.

¿Por qué, Kantarou? ¿Por qué te esforzaste en darme falsas esperanzas de una relación? ¿Era acaso un malvado plan que funcionó a la perfección?. No lo sé, nunca lo sabré.

Eras mi novio, no te acordabas, y no, no era porque perdiste la conciencia y despertaste en esa cama de hospital descubriendo que tenías amnesia, tu recuerdo estaba bloqueado antes de eso. ¡Yo soy tu novia! ¡No esa cosa que está en el suelo desangrándose que alguna vez fue mujer!

Por favor, entiende.

Entiende que eres lo más importante para mí, haría cualquier cosa para contentarte, mataría a cualquier persona que quisiera separarnos, destrozar esta bonita relación, este noviazgo que estoy ansiosa para que se convierta en matrimonio.

Puedo verlo en tu mirada, tus ojos repletos de decepción al ver que he cobrado la vida de Sanae. Sí, debo morir, debo pagar por mi crimen. Fui tan estúpida, creí que aprovechando esta oportunidad podría hacer realidad mis sueños, pero me di cuenta que no es así. Te he mentido, hice este acto tan horrible sólo para saciar los pensamientos de una mente perturbada.

No me importa si el filo del cuchillo está apuntando a mi estómago, si quiere llegar a la garganta y rajarla, merezco esto y cosas peores.

Pero, entonces de tu boca salieron palabras que me sorprendieron;

"No mueras"

¿Por qué, Kantarou? ¿Por qué me haces sufrir? ¿Lo habías dicho como un oscuro sarcasmo?

No puedo evitar llorar de la felicidad al saber que me has aceptado, que me perdonaste queriendo que no me vaya, pero sabemos que no es posible, de algún modo tendré que ser víctima de lo que hice.

Pedí un abrazo, aceptaste acercando mi cuerpo con el tuyo sin querer separarte de mí, era tan cálido, el aroma con el que siempre había deseado estar... era maravilloso.

Tomé mi cuchillo y lo impacté contra tu estómago, tu sangre era preciosa, más bonita que la de Sanae.

Caíste al suelo, confundido, temiendo a lo peor. No te preocupes, haré lo mismo, pronto nos volveremos a encontrar.

¿Sabes? Cuando muera, seré Dios, con ese poder, podré hacer un mundo perfecto, uno donde la noche más oscura sea incluso más brillante que una mañana soleada.

Cuando sea Dios...

No habrá muerte.

No habrá dolor.

No habrán más llantos desconsolados.

La gente no volverá a estar sola, las personas no perecerán de hambre, frío y sueño.

El mundo será un lugar mejor.

Y, como Dios, haré que las cosas cambien, mientras, tendré que dejar este cuerpo terrenal. Me entristece mucho saber que te perderé pero, será algo momentáneo, pronto nos volveremos a encontrar.

Nota del autor: ¡Agradezco muchísimo a los autores Vnixx y c62 por ser los dos autores que han mostrado apoyo en mis trabajos para el fandom de KoF, estoy bastante agradecido, es bonito saber que han tomado de su tiempo en leer los fics de alguien en sus dieciséis. Espero poder traer más contenido ahora que estoy de vacaciones y, si la inanición no me mata, estaré contento de poder publicar seguido jeje.

¡Gracias!