Rei no era celoso, claro que no, es solo que no le gustaba que alguien llamara más la atención de su querido rubio. Temía que lo dejara, quizás sea un tigre, pero cuando se trata del chico estadunidense era un gatito sumiso.

Miro con molestia al gato, el cual estaba en el regazo del rubio mientras este le acaricia la cabeza con suma delicadeza, obteniendo por respuesta unos ronroneos.

Odiaba a ese gato…

-¡Rei!- Ante aquel grito volvió a la realidad, mirando al dueño de esa voz quien lo miraba con las mejillas infladas y las cejas un poco fruncidas, dándole un tierno aspecto

-¿Si Maxie?-

El nombrado agarro al gato con un solo brazo, poniéndolo en su pecho, sin posibilidades de que se caída. Se levanto y camino tranquilamente hasta el poseedor de Driger. Parándose enfrente de él, pasando su brazo libre a su cuello, acercándose bastante; pero sin aplastar al animal.

El mayor lo miro con intriga, tratando de averiguar que quería hacer su amante. El cual cerro sus ojos y junto sus labios con el chino; sorprendiéndolo.

Aun así, correspondió al beso, posando sus manos en las caderas del menor. Empezó con un beso tierno. En un instante recordó lo que paso con el minino, enojándose un poco. Se separaron para poder tomar aire, pero lo suficientemente cerca para sentir sus respiraciones. Rei se volvió a acercar pero esta vez, tomo la barbilla del oji-azul.

-Max…-

-¿Si?- Pronuncio perdido en esos ojos marrones

-Solo yo puedo ser tu único gatito- Dijo empezando a lamber sus labios como un felino, parando después para bajar a morder, chupar, besar y todo lo que él quisiera con su cuello

-Rei…- Murmuro jadeantemente –Tú no eres un gato, tu eres más que eso… Tú eres mi tigre… Ningún gato por más lindo que sea, se podrá comparar contigo…- Comento mientras soltaba al gato que aun tenía en brazos, mientras que el felino caída de pie y se iba del lugar

Rei sonrió, volvió a besar al rubio, pero, esta vez con pasión, pasando su lengua en la cavidad bucal del menor; comenzando una danza de lenguas interminable. El mayor llevo al de pecas lentamente hacia la cama, recostándolo, para por fin separarse, se acerco al oído del menor, lambiendo el ovulo de este.

-Tu tigre tiene hambre…- Susurro sensualmente –Y quiere leche- Termino por decir, mirando de reojo la entrepierna del estadunidense, sonrojándolo al instante pues el sabia a lo que se refería el mayor

-Entonces lo tendré que complacer….-

Rei sonrió ante lo dicho; después de todo, ese felino sirvió de algo, ahora él y Max estarían muy ocupados.


No sé de donde saque lo cursi porque soy más de comedia… ¡En realidad este drabble iba hacer de comedia! Pero bueno… Soy nueva en esto de escribir fic sobre Beyblade… ¡Así que no maten! Me encanta esta pareja *-*! Así que decidí empezar con ella ¿Reviews? :'3