Como todo empezó.

"Hoy Kageyama anda de un humor de perros" pensó hinata, en el entrenamiento se había dedicado a gritarle a Hinata, ¿Por qué? No lo sé, quizás le había molestado de alguna forma, Hinata no podía dejar de pensar en que había hecho mal, desde que volvieron del partido contra Nekoma se ha comportado de una manera extraña, lo evita, y en entrenamientos sólo lo regaña, no entendía eso. Hinata se acostó pensando en Kageyama, querrá decir Bakayama.

Al día siguiente Hinata despertó un poquito más tarde de lo habitual, cuando miro el reloj se le había hecho demasiado tarde para el entrenamiento salió corriendo al baño, se ducho y salió en su bicicleta a toda, "Kageyama se enojara más conmigo" pensó Hinata.

Kageyama tenía un sentimiento incómodo, no sabía que era, sólo sabía que después del partido con Nekoma, bueno, exactamente en el momento que vio a Hinata hablando de manera muy agradable con Kenma, de alguna manera le resultó incómodo y molesto, no le gustaba esa sonrisa que tenía con él, tras de eso llevaba 15 minutos de retraso y nada que llegaba. Todos notaron que el aire alrededor de Kageyama era más oscuro, su mirada más temible de lo normal.

-¿Qué le sucede a Kageyama?-Pregunto con cierto temor Nishinoya.

-No lo se, pero da miedo- afirmo Azume quien ciertamente también estaba observando con temor a Kageyama.

-Rey, te veo algo animado hoy- dijo en tono sarcástico Tsukishima

-¿En serio? -respondió con una cara que realmente le dio temor a Tuskishina.

-Tsukki, vamos a practicar-dijo de manera emotiva Tadashi, él sólo quería sacar del aprieto en el que se había metido tsukki. Antes de que Tsukishima se dirigiera hacia Tadashi las puertas del gimnasio se abrieron y mostraron a un Hinata muy agitado, y sudado. Nishinoya fue el primero en ir corriendo hacia él.

-¡¿Qué sucede shouyo?!- dijo este cuando llego hasta donde su amigo. -Me cogió la tarde- dijo Hinata mientras se pasaba la mano por el cabello despelucandolo, su lado ya había llegado Tanaka, y Suga, el peli naranja empezó a buscar a Kageyama, cuando lo vio este volteo la mirada como si lo estuviera ignorando. Kageyama al ver que el peli naranja había llegado sintió un gran alivio, había estado preocupado por él.

-Sigamos con el entrenamiento-gritó Daichi.

-Osu- gritaron todos.

-Una vez más- grito el chiquito peli naranja.

-Deja de ser molesto-dijo de un tono tan tranquilo que de inmediato hizo que su corazón se agitara y algo le doliera, vio que un balón iba cayendo al frente de sus ojos.

-¿Que paso?- dijo enojado Kageyama- ¡¿ACASO NO ME PEDISTE QUE TE LA LANZARA IDIOTA?!- gritó muy enojado Kageyama, Hinata quedó desconcertado ante ese grito de Kageyama, normalmente lo gritaba pero no de esa manera, no tan enojado.

-¡¿Qué diablos sucede contigo?!- grito el chiquito muy enojado.

-Nada- dijo Kageyama de manera fría, tan fría que al pequeño le dieron escalofríos. Ukai, quien había notado a estos dos muy tensos decidió hacer un cambio. -Sugawara- gritó- levantale a Hinata, y tu Kageyama, levantale a Enoshita-dijo muy serio el entrenador. Hinata pasó al otro lado de la cancha para hacerse con Sugawara, quien lo recibió con una enorme sonrisa. Término el entrenamiento, Hinata pensaba hablar con Kageyama, realmente le dolía ver ese gesto en la persona que le gusta, detestaba que estuviera de esa forma con él, era como si no le importara en absoluto.

-Kageyama, hablemos- dijo hinata con una sonrisa.

-Ahora estoy ocupado- respondió kageyama, él no quería hablar con Hinata no se sentía listo, cuando miro al pequeño se fijó que su sonrisa había desaparecido.

-Entiendo-respondió el pequeño, "hasta ahora he sido un estupido" pensó Hinata, el pequeño se dio cuenta en ese momento que lo estaba evitando. Cuando Hinata iba a montarse en la bicicleta para irse algo, mejor dicho alguien lo cogió del brazo, al ver de quien se trataba se sorprendió, Kageyama tenía las mejillas un poquito sonrojadas, estaba impresionado viendo los ojos azules oscuros como el cielo en la noche de él muchacho de pelo negro azabache, lo próximo que sintió fueron unos labios sobre los suyos.

Kageyama no sabía lo que hacía su cuerpo se movió sólo, después de esto, hecho a correr, no sabía el porqué, solo sabía que los dos eran chicos, había besado a Hinata sin saber si quiera lo que siente, "¿Y si tiene novia? No, no creo, el solo se centra en el voleibol" pensó Kageyama, y él también debe centrarse sólo en eso.

Hinata se quedó parado mientras veía como Kageyama corría, "pero... ¿QUÉ CARAJOS? Me besa y después corre" pensó el pequeño, Hinata estaba feliz, tenía que admitirlo, pero el hecho de que Kageyama saliera corriendo lo confundía mucho.