Holaaa a todoooos eue
Ya era hora de que escribiera algo nuevo, y aunque no haya podido ser del fic de "En busca de la verdad" debido a su pausa, pues ha sido con este el cual tengo muchas ganas.
Si os digo la verdad este fic se me ocurrió escuchando música de Vocaloid, el cual llevaba bastante tiempo sin escuchar temas de estos. Y actualmente varias cosas pensadas y anotadas para escribirlas en esta historia.
Tengo pensado en hacer esta historia como de entre diez y quince capítulos más o menos, dependiendo de cómo vaya organizando la historia. De mientras, espero que sea de vuestro agrado. Y si dejais un comentario por aquí estaré muchísimo más feliz eue
El prólogo es algo corto, pero intentaré que los capítulos posteriores tengan más contenido.
Antes que nada, me gustaría invitaros a pasar mi twitter. No suelo escribir mucha cosa pero trato de actualizarlo de vez en cuando, no me importa hablar con gente y tal.
Mi nombre de usuario es lucy_penguin
Y bueno, mejor me dejo de charlas (en este caso de texto xD) y os dejo empezar con el prólogo. Así que con esto y un pingüino(?), ¡que comience esta historia!
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PRÓLOGO
Dos años pasaron desde que la guerra contra el Imperio Álvarez y todo lo relacionado con Zeref y E.N.D. diera fin y que todo volviera a la normalidad. Y actualmente el gremio de magos Fairy Tail recuperó la popularidad y la fuerza que había perdido tras su separación tiempo atrás.
Y esta historia empieza cuando Lucy, una de las magas de dicho gremio, entró al edificio donde se encontraban sus compañeros de hermandad, lugar en donde casi siempre había peleas, fiestas y mucha cerveza.
La rubia apenas había cambiado físicamente, únicamente se había cortado el cabello hasta la mitad de la espalda y habitualmente lo solía dejar suelto, no obstante había veces que se arregla más el pelo. Iba vestida con una blusa de color beige con cuello alto y sin mangas, una falda corta y ajustada de color negro y botas altas de cuero marrón claro. Además llevaba un cinturón negro en la cintura donde se encontraban las llaves del zodiaco y su látigo. También llevaba una muñequera negra en la mano izquierda y una pulsera en la derecha.
Nada más entrar miró a su alrededor en busca de algún compañero de su equipo, pero al notar que no había nadie a la vista optó por dirigirse hacia su amiga peliblanca la cual estaba en su puesto de trabajo como camarera del gremio.
-¡Hola Mira! –dijo ella alzando el brazo.
-Buenos días, Lucy –saludó Mirajane mientras que la rubia se acercaba al lugar donde se encontraba ella, en la barra.
-¿Han llegado nuevas misiones? –preguntó mientras que la chica le servía un batido de fresa frío debido al calor que hacía ese día.
-Pues sí, hace unas horas llegaron unas nuevas y desde hace un rato se encuentran colgadas en el tablón –contestó mientras tomaba entonces un gran vaso para limpiarlo-. Pero, ¿por qué lo preguntas? ¿Acaso no has pagado aún la renta de tu piso?
-Está pagada y para algunos meses –respondió. Desde que todo terminó, ella logró hacer misiones tanto por su cuenta como con su equipo sin apenas perder el dinero de las recompensas-. Pero es que me gustaría tener un poco más de dinero para comprar comida, ropa nueva…
-Entiendo –dijo la peliblanca con una sonrisa-. Pues allí en el tablón se encuentran las nuevas misiones, espero que puedas encontrar una que sea de tu agrado.
-Eso espero.
La rubia terminó la bebida después de unos minutos y entonces se dirigió al lugar donde podría encontrar un puesto de trabajo adecuado para ella.
-Mmmm… -decía mientras buscaba una hoja que le llamara la atención. Sin embargo no notó la presencia de alguien a sus espaldas hasta que sintió algo pesado sobre su hombro.
-¡Luce! ¡Hola! –escuchó gritar. Lucy dio un pequeño brinco tras esto y se giró de golpe para ver el causante del susto. Y delante de ella vio a su mejor amigo Natsu.
El pelirrosa habría crecido en altura un poco y su cabello había crecido hasta casi los hombros volviéndose más alborotado. Iba vestido con su chaqueta larga el cual únicamente era de manga larga en el brazo izquierdo, pantalones blancos y abombados que llegaban hasta las rodillas y las sandalias negras. En su brazo derecha llevaba una muñequera negra similar a la de Lucy.
Sobre el hombro de Natsu se encontraba el felino azulado Happy, mirándola fijamente con una sonrisa.
-¿Qué estás haciendo? –preguntó curioso el exceed.
-Ando mirando si hay una misión adecuada para mí.
-¿Enserio? Pero si hace unos días regresamos de una –contestó el pelirrosa cruzándose de brazos.
-Aye.
-Lo sé, pero necesito dinero para comprar ropa, libros, comida que entre vosotros os zampáis de un momento a otro… -decía mientras ponía los brazos en jarras.
-No es nuestra culpa que la comida de tu casa este mejor que la nuestra.
-¿No será que en donde vivís hay un completo desorden y no es de extrañar que la comida que tenéis está en mal estado?
-Eso hiere nuestros sentimientos, Lushi –contestó Happy.
-¡Pero si es la verdad! –exclamó empezando a sentirse molesta.
-Hey, ¿qué es todo este bullicio? –preguntó una voz masculina acercándose a ellos. Delante vieron al resto de su equipo.
De todos, Erza era una de las que menos había cambiado en estos años. Su cabello pelirrojo seguía igual de largo y vestía con su habitual armadura y falda azul.
Gray había crecido unos centímetros y se había dejado crecer algo de vello facial. Vestía una camisa verde de botones los cuales algunos estaban desabrochados para dejar ver parte de su pecho, pantalones vaqueros y zapatos negros. Seguía llevando el colgante en forma de cruz.
Wendy se había cortado el pelo un año atrás, dejándose hasta la altura de los hombros, pero en este caso se había recogido unos mechones para hacerse dos pequeñas coletas y el resto del cabello suelo. Y algo que fue realmente bueno para ella es que sus pechos habían crecido un poco. Iba vestida con un vestido floreado que le llegaba hasta las rodillas y unas sandalias blancas.
Y por último Charle seguía siendo la misma de siempre, vistiendo un vestido de su tamaño de color rojizo y un lacito colgando. También llevaba otro lazo en la cola pero en este caso rosa.
-Hola –dijeron los dos chicos al unísono.
-Estaba mirando una misión interesante para poder tener algo más de dinero para mi –explicó la maga dando un paso hacia ellos.
-Ya veo –comentó la felina mirando a su amiga peliazulada.
-¿Y has visto alguna que te interese? –preguntó Wendy.
-Por ahora no –decía mientras se giraba al tablero y miraba una vez más los panfletos con las misiones correspondientes cuando entonces vio una que la llamó la atención-. Este…
-¿Hm? –dijeron el resto al mismo tiempo. Lucy tomó el papel entre sus manos y leyó en voz alta.
-"Necesito magos para vigilar una reliquia familiar el día de un baile en mi mansión. Preferiblemente necesito más de dos personas para esta misión. El pago total de sus servicios serán de 175.000 jewels"…
-Eso es mucho dinero –comentó el pelinegro.
-Y podríamos hacerlos entre todos –propuso Erza mirando a sus compañeros-. Eso si tú quieres, Lucy.
-Me parece bien –respondió-. Además, es mejor cuando estamos todos en equipo, ¿verdad?
Sus amigos sonrieron.
-Tienes razón –dijo Gray.
-¡Aye! –siguió Happy.
-Pues en ese caso voy a donde se encuentra Mira para que notifique al cliente que iremos lo más rápido posible –habló Lucy-. Y dentro de media hora nos encontraremos en la estación de Magnolia.
-De acuerdo -dijeron.
Después de esto el grupo se separó para prepararse, sin saber qué es lo que les depararía en un futuro cercano...
