La lluvia caía fuertemente sobre la cuidad de Tokio, atra vez de la ventana
se podía ver como la lluvia mojaba las calles, ya no había gente
transitando las calles, ya que eran como las tres de la mañana, la luna no
se podía ver atra vez de la espesa cortina de nubes grises, las lamparas
iluminaban tenuemente afuera y atra vez de su luz naranja se podían ver las
gotas de agua.
Serena miraba la calle, deseaba con toda su alma que Seiya llegara y tocara a su puerta, para ella bajar y abrazarlo y decirle que lo amaba.
Abrazo con fuerza su conejo de peluche, y unas frías lagrimas rodaron por sus mejillas.
Miro asía la cama y encontró a Luna profundamente dormida, miro a su mesita de noche y encontró la foto de Rini, Sonrío tristemente al pensar que por un descuido suyo esa niña que tanto quería nunca llegaría a nacer, mira de nuevo a la calle y trato de contener el llanto, trato de tragarse todo el dolor que le provocaba estar ligada a un destino que tanto deseo antes y que ahora no quería, ella daría su vida por estar junto a la persona que amaba, pero no podía tenia que afrontar sus obligaciones, no podía negarle la vida a esa niña que tanta felicidad le había dado, ahora tenia que atenerse a las consecuencias de sus acciones, debía quedarse al lado de Darién y no decir nada, esconder en lo más profundo de su corazón esos sentimientos que amenazaban con salir y explotar, tenia que olvidarse de él, tenia que seguir adelante y olvidarlo, pero como hacerlo si todo su ser lo reclamaba, como hacerlo si su corazón latía más rápido con el simple hecho de escuchar su nombre, ella tendría que ser fuerte, y superar esa prueba, no podía darse el lujo de negarle la vida a una persona inocente y de arruinarle su vida a una persona que tanto amo, y por la cual ahora solo siente afecto.
Camino asía su cama y se acostó, ya era tarde y mañana tendría un día muy agitado.
Cuando serena cerro los ojos, y cayo profundamente dormida no sintió cuando comenzó a brillar tenuemente, no sintió nada.
A la mañana siguiente Serena se despertó muy temprano, se sintió llena de energía por lo que bajo a preparar su desayuno y su almuerzo y sin fijarse, preparo dos, salió de su casa dejando una nota avisándole a su madre, para que se fuera a procurar, camino solitaria por las calles antes de llegar a su escuela, cuando paso por el parque No. 10 se encontró con esa persona que le robaba sus sueños.
Seiya al verla le sonríe melancólicamente, traía puestos unos lentes negros, se veía más apuesto que antes, Serena se acerco a él, y cuando estuvieron frente a frente, el solo atino a brazarla, la tenia tan cerca y a la vez tan lejos, ella lo abrazo tan fuerte que parecía que ella fuera un naufrago y él su tablilla a la deriva, no quería soltarlo, no lo soltaría no quería dejar que él se alejara de ella.
Después de unos minutos Seiya se separo de ella y la miro, seco las pocas lagrimas que habían logrado salir de los ojos de su amada.
No llores Bombón, no me gusta verte triste- Seiya le dio un beso en la mejilla y le sonrío. -Es cierto que ustedes se irán dentro de un mes?- serena temía a la respuesta de esa pregunta.
-Lo lamento Bombón, pero nuestra princesa nos ha dicho que ya no tenemos nada que hacer aquí.- Serena se recargo en el pecho de Seiya.
-Si te vas y me dejas sola jamas te lo perdonare.
-Serena... - Seiya separo a Serena de su pecho para verle a los ojos y cuando la miro ella sintió como una sensación muy agradable la invadía- Serena el que me vaya no quiere decir que me olvidare de ti, te lo juro yo jamas me olvidare de ti, si no nos fuimos esa noche, después de la batalla contra Galaxia fue por que yo le pedía a la princesa como un favor especial que me dejara quedarme un tiempo contigo, solo por eso sigo aquí, yo te... - Seiya no acabo la oración pues sentía un tremendo nudo en la garganta.
-Seiya, yo.....- Serena lo abrazo.
-Serena Mina me contó acerca de tu futuro, yo se que quieres mucho a tu hija y no me gustaría separarte de ella por eso......- Serena lo interrumpió.
-Tu dijiste que te quedaras un mes para pasarlo conmigo, en ese caso yo quiero que pasemos este tiempo, juntos, sin nadie más, quiero que me regales este ultimo mes contigo, quiero estar contigo.
-Serena- Los ojos de Serena se llenaron de nuevo de la grimas y ella se aferraba al pecho de su amado- Te quiero que siempre estaré contigo, aun cuando no sea en forma física siempre estaré contigo- Seiya escucho un "gracias".
Los dos caminaron asía la escuela, cuando de pronto Serena se detuvo súbitamente, miro a Seiya y sin previo aviso, lo beso, fue un beso tierno lleno de sentimientos encontrados, fue un momento extremadamente mágico, ninguno de los dos dijo algo después de eso, llegaron a la escuela, y ahí trataron de ocultar sus sentimientos, lo mejor posible.
Los únicos que se encontraban en el salón eran Taiki y Ami, al parecer estaban revisando unos apuntes antes de la clase. Cuando los vieron entrar se quedaron sorprendidos de ver que los dos estaban frescos como una lechuga, Ami y Taiki sabían perfectamente lo que sentía Serena por Seiya y biceversa, y al saber que solo tendrían un mes juntos pensaron que estarían un poco deprimidos pero nada de eso ocurrió.
Serena y Seiya se sentaron en la parte de atrás del salón, sin siquiera saludar a sus amigos, ambos reían mientras el salón se iba llenando, parecían dos jóvenes normales que disfrutaban un momento de perfecta armonía, tal vez por eso ninguna de las chicas se acerco a interrumpirlos, cuando el maestro llego, los dos se sentaron en sus lugares y tomaron apuntes, parecía que su vida seguiría igual a antes.
Mina mira a Rei, ambas estaban preocupadas, esa actitud era muy rara, además de que Mina se había encontrado a Darién y le había pedido de favor que le avisara a Serena que a la salida pasaría por ella, ahora se encontraba en un gran dilema ya que los dos días anteriores (dos días después de la batalla contra galaxia y cuando se entero de que Seiya se iría) ella estuvo muy triste no quería ver a su amiga de nuevo triste, no querían que Serena sufriera.
Así llego la hora del almuerzo, Serena le entrego el paquete a Seiya y el sonrío, en ese momento llegaron las chicas y los demás.
-Al parecer han estado ustedes dos muy ocupados no?- Yaten parecía molesto, Mina se le acerco y lo miro fijamente, cosa que hizo que Yaten se sonrojara un poco.
-Si, así parece, pero que hacen ahí parados siéntense con nosotros en el pasto, Serena se acerco un poco más a Seiya.
-Serena necesito hablar contigo,- Rei que andaba de colada en esa escuela para vigilar a Serena se la llevo lejos de sus amigos mientras los demás comían.
Rei, miro a su princesa y después se relajo un poco.
-Darién vendrá a recogerte en la tarde, no creo que sea prudente que te vea con Seiya, creo que es momento de que te separes definitivamente de él.
-Rei - Serena miro por un momento el suelo, después levanto la cabeza y miro a su amiga, en sus ojos se podía ver la determinación con la cual contaba, dejo escapar un suspiro- Rei, esta es mi decisión, un mes, es todo lo que pido un mes, después volveré a mis obligaciones, no me nieguen este momento por que si lo hacen estoy segura que se arrepentirán.
Serena comenzó a caminar asía sus amigas, Rei vio a Serena y sonrío, sin duda ella seria una buena reina, sin duda ella ya conocía lo que era el Amor, mira asía el cielo, después al grupo de jóvenes que llamaba amigos y sonrío, un mes, un mes solamente y después Serena tendría que casarse con Darién.
El resto de las clases pasaron tranquilas, Rei les había dicho a las chicas que Serena no se sentía bien y que eso le dirían a Darién, pero que él no se preocupara por nada.
Y así lo hicieron, Rei salió al encuentro con Darién y le dijo que Serena se había ido temprano a su casa y que se sentía mal, así que se había ido a descansar.
Mientras que Seiya y Serena se dirigían al aeropuerto, tenían que abordar un vuelo con dirección a una playa de México.
Darién, se dirigió a la casa de Serena y la mamá de Serena le abrió la puerta y al verlo no expreso ni alegría ni enojo, más bien pura indiferencia.
-Señora se encontrara su hija?
-Lo siento Joven pero Serena tuvo que salir de viaje, fue con su padre a visitar a una tía que esta muy enferma yo creo que regresara asta dentro de unos quince días.
Darién se despidió muy cortes mente y después se dirigió a su departamento a pensar, por que Serena se había ido sin decirle nada? Por su parte Taiki y Yaten, estaban que no se lo creían, como era posible que su bien portado hermano se hubiera escapado con la que seria la futura reina de la tierra, no les quedaba de otra más que cubrirlo en lo que él regresaba, de su "viajesito".
En el avión, Serena miraba el cielo, estaba Seiya al lado de ella, estaban muy felices y no era para más, lo primero que hicieron después del almuerzo y de que Serena pidiera ayuda a Mina para que la cubriera en lo que iba a poner en orden algunas cosas, se escaparon y tomaron el primer vuelo que encontraron, los dos querían irse a la playa, por lo que Serena le pidió a su mamá que la ayudara, le contó todo y su mamá tratando de mantener una sonrisa, la abrazo y después de un momento ella le dijo que le ayudaría, le dio un poco de dinero y le dijo que se cuidara mucho, Seiya llego por ella y la mamá de Serena le sonrío muy complacida, nunca había visto a su hija tan feliz. Después de despedirse Serena y Seiya se dirigieron al aeropuerto, para tomar su vuelo, sin duda eso seria como una luna de miel, y es que así ellos lo querían.
Rei y las chicas se encontraban en el templo, habían decidido pasar la noche con Rei, ya que su abuelo se había ido y ella se sentía un poco sola.
-Rei que opinas de las locuras de Serena?- Mina estaba comiendo papas fritas, mientras veían la televisión.
-Yo creo que ella ya sabe sus responsabilidades no hará nada malo, se los puedo asegurar- Ami, había dejado de leer y ahora se encontraba mirando a sus amigas.
Lita apago la televisión y miro a Rei quien estaba escribiendo una carta, tratando de copiar los garabatos de Serena.
-No creo que ella nos defraude, nosotras la conocemos no creo que ella haga algo que pudiera cambiar el futuro, ella quiere tanto o más que nosotras a Rini, estoy segura de que ella no hará nada de lo que después se pueda arrepentir.
-Rei, nosotras apoyaremos a nuestra princesa sea cual sea su decisión, además creo que todos aquellos que la amamos lo aceptaremos, por que lo que ella escoja sin duda será su felicidad.
Las chicas siguieron comiendo botanas durante casi toda la noche mientras que el rey de la tierra miraba a la luna y pensaba en su preciosa princesa y en la forma tan fría que la mamá de su amada lo trato, no sabia por que pero algo lo tenia inquieto.
Serena por su parte se sentía más feliz que nunca, estaba recostada sobre el pecho de su amada, era tan feliz ella, nada le importaba en esos momentos nada. Seiya miro a su amada y sonrío plenamente, era tan lindo tenerla así, nada podía interrumpir su felicidad.
Setsuna, miraba atra vez de la ventana, Mishiru estaba junto a ella, mientras que Haruka estaba preparando un poco de café.
-Osea que nuestras sospechas son ciertas, entonces el destino sigue igual que antes, pero si la princesa ya no ama a Darién, como es posible que la pequeña dama nazca.
-Michiru, no crees que haces demasiadas preguntas, yo no te puedo decir nada acerca del futuro, nada, no lo entiendes, lo único que te puedo decir es que el futuro tal cual conocemos si existe, nada a cambiado.
-Vaya, parece que llegué en un mal momento- Haruka entro con una charola para servir el té- que ocurre Michiru.
-Es que sigo sin entender por que nosotras debemos quedarnos con las manos cruzadas mientras que la princesa sufre por no poder estar con su amor, no lo entiendo, o mejor dicho no lo acepto.
-Michiru- Haruka acaricio la cara de la chica- Cabeza de Bombón ya tomo su decisión, si nosotras intervenimos en algo, con seguridad, el futuro cambiara y eso es lo que ella menos quiere, no te preocupes, todas sabemos que ella será feliz de cierta manera, te aseguro que todo resultara bien.
-Haruka tiene razón Michiru, no creo que nuestra princesa se de por vencida tan pronto, ella luchara asta el final al igual que él.
-Princesa- Michiru miro la luna, todo eso no le gustaba, sabia lo que se avecindaba y no quería ver llorar a las chicas y a su princesa.
La luna siguió su trayectoria al igual que el tiempo, ya no había nada que pudieran hacer. Su destino se estaba trazando muy rápido.
Serena miraba la calle, deseaba con toda su alma que Seiya llegara y tocara a su puerta, para ella bajar y abrazarlo y decirle que lo amaba.
Abrazo con fuerza su conejo de peluche, y unas frías lagrimas rodaron por sus mejillas.
Miro asía la cama y encontró a Luna profundamente dormida, miro a su mesita de noche y encontró la foto de Rini, Sonrío tristemente al pensar que por un descuido suyo esa niña que tanto quería nunca llegaría a nacer, mira de nuevo a la calle y trato de contener el llanto, trato de tragarse todo el dolor que le provocaba estar ligada a un destino que tanto deseo antes y que ahora no quería, ella daría su vida por estar junto a la persona que amaba, pero no podía tenia que afrontar sus obligaciones, no podía negarle la vida a esa niña que tanta felicidad le había dado, ahora tenia que atenerse a las consecuencias de sus acciones, debía quedarse al lado de Darién y no decir nada, esconder en lo más profundo de su corazón esos sentimientos que amenazaban con salir y explotar, tenia que olvidarse de él, tenia que seguir adelante y olvidarlo, pero como hacerlo si todo su ser lo reclamaba, como hacerlo si su corazón latía más rápido con el simple hecho de escuchar su nombre, ella tendría que ser fuerte, y superar esa prueba, no podía darse el lujo de negarle la vida a una persona inocente y de arruinarle su vida a una persona que tanto amo, y por la cual ahora solo siente afecto.
Camino asía su cama y se acostó, ya era tarde y mañana tendría un día muy agitado.
Cuando serena cerro los ojos, y cayo profundamente dormida no sintió cuando comenzó a brillar tenuemente, no sintió nada.
A la mañana siguiente Serena se despertó muy temprano, se sintió llena de energía por lo que bajo a preparar su desayuno y su almuerzo y sin fijarse, preparo dos, salió de su casa dejando una nota avisándole a su madre, para que se fuera a procurar, camino solitaria por las calles antes de llegar a su escuela, cuando paso por el parque No. 10 se encontró con esa persona que le robaba sus sueños.
Seiya al verla le sonríe melancólicamente, traía puestos unos lentes negros, se veía más apuesto que antes, Serena se acerco a él, y cuando estuvieron frente a frente, el solo atino a brazarla, la tenia tan cerca y a la vez tan lejos, ella lo abrazo tan fuerte que parecía que ella fuera un naufrago y él su tablilla a la deriva, no quería soltarlo, no lo soltaría no quería dejar que él se alejara de ella.
Después de unos minutos Seiya se separo de ella y la miro, seco las pocas lagrimas que habían logrado salir de los ojos de su amada.
No llores Bombón, no me gusta verte triste- Seiya le dio un beso en la mejilla y le sonrío. -Es cierto que ustedes se irán dentro de un mes?- serena temía a la respuesta de esa pregunta.
-Lo lamento Bombón, pero nuestra princesa nos ha dicho que ya no tenemos nada que hacer aquí.- Serena se recargo en el pecho de Seiya.
-Si te vas y me dejas sola jamas te lo perdonare.
-Serena... - Seiya separo a Serena de su pecho para verle a los ojos y cuando la miro ella sintió como una sensación muy agradable la invadía- Serena el que me vaya no quiere decir que me olvidare de ti, te lo juro yo jamas me olvidare de ti, si no nos fuimos esa noche, después de la batalla contra Galaxia fue por que yo le pedía a la princesa como un favor especial que me dejara quedarme un tiempo contigo, solo por eso sigo aquí, yo te... - Seiya no acabo la oración pues sentía un tremendo nudo en la garganta.
-Seiya, yo.....- Serena lo abrazo.
-Serena Mina me contó acerca de tu futuro, yo se que quieres mucho a tu hija y no me gustaría separarte de ella por eso......- Serena lo interrumpió.
-Tu dijiste que te quedaras un mes para pasarlo conmigo, en ese caso yo quiero que pasemos este tiempo, juntos, sin nadie más, quiero que me regales este ultimo mes contigo, quiero estar contigo.
-Serena- Los ojos de Serena se llenaron de nuevo de la grimas y ella se aferraba al pecho de su amado- Te quiero que siempre estaré contigo, aun cuando no sea en forma física siempre estaré contigo- Seiya escucho un "gracias".
Los dos caminaron asía la escuela, cuando de pronto Serena se detuvo súbitamente, miro a Seiya y sin previo aviso, lo beso, fue un beso tierno lleno de sentimientos encontrados, fue un momento extremadamente mágico, ninguno de los dos dijo algo después de eso, llegaron a la escuela, y ahí trataron de ocultar sus sentimientos, lo mejor posible.
Los únicos que se encontraban en el salón eran Taiki y Ami, al parecer estaban revisando unos apuntes antes de la clase. Cuando los vieron entrar se quedaron sorprendidos de ver que los dos estaban frescos como una lechuga, Ami y Taiki sabían perfectamente lo que sentía Serena por Seiya y biceversa, y al saber que solo tendrían un mes juntos pensaron que estarían un poco deprimidos pero nada de eso ocurrió.
Serena y Seiya se sentaron en la parte de atrás del salón, sin siquiera saludar a sus amigos, ambos reían mientras el salón se iba llenando, parecían dos jóvenes normales que disfrutaban un momento de perfecta armonía, tal vez por eso ninguna de las chicas se acerco a interrumpirlos, cuando el maestro llego, los dos se sentaron en sus lugares y tomaron apuntes, parecía que su vida seguiría igual a antes.
Mina mira a Rei, ambas estaban preocupadas, esa actitud era muy rara, además de que Mina se había encontrado a Darién y le había pedido de favor que le avisara a Serena que a la salida pasaría por ella, ahora se encontraba en un gran dilema ya que los dos días anteriores (dos días después de la batalla contra galaxia y cuando se entero de que Seiya se iría) ella estuvo muy triste no quería ver a su amiga de nuevo triste, no querían que Serena sufriera.
Así llego la hora del almuerzo, Serena le entrego el paquete a Seiya y el sonrío, en ese momento llegaron las chicas y los demás.
-Al parecer han estado ustedes dos muy ocupados no?- Yaten parecía molesto, Mina se le acerco y lo miro fijamente, cosa que hizo que Yaten se sonrojara un poco.
-Si, así parece, pero que hacen ahí parados siéntense con nosotros en el pasto, Serena se acerco un poco más a Seiya.
-Serena necesito hablar contigo,- Rei que andaba de colada en esa escuela para vigilar a Serena se la llevo lejos de sus amigos mientras los demás comían.
Rei, miro a su princesa y después se relajo un poco.
-Darién vendrá a recogerte en la tarde, no creo que sea prudente que te vea con Seiya, creo que es momento de que te separes definitivamente de él.
-Rei - Serena miro por un momento el suelo, después levanto la cabeza y miro a su amiga, en sus ojos se podía ver la determinación con la cual contaba, dejo escapar un suspiro- Rei, esta es mi decisión, un mes, es todo lo que pido un mes, después volveré a mis obligaciones, no me nieguen este momento por que si lo hacen estoy segura que se arrepentirán.
Serena comenzó a caminar asía sus amigas, Rei vio a Serena y sonrío, sin duda ella seria una buena reina, sin duda ella ya conocía lo que era el Amor, mira asía el cielo, después al grupo de jóvenes que llamaba amigos y sonrío, un mes, un mes solamente y después Serena tendría que casarse con Darién.
El resto de las clases pasaron tranquilas, Rei les había dicho a las chicas que Serena no se sentía bien y que eso le dirían a Darién, pero que él no se preocupara por nada.
Y así lo hicieron, Rei salió al encuentro con Darién y le dijo que Serena se había ido temprano a su casa y que se sentía mal, así que se había ido a descansar.
Mientras que Seiya y Serena se dirigían al aeropuerto, tenían que abordar un vuelo con dirección a una playa de México.
Darién, se dirigió a la casa de Serena y la mamá de Serena le abrió la puerta y al verlo no expreso ni alegría ni enojo, más bien pura indiferencia.
-Señora se encontrara su hija?
-Lo siento Joven pero Serena tuvo que salir de viaje, fue con su padre a visitar a una tía que esta muy enferma yo creo que regresara asta dentro de unos quince días.
Darién se despidió muy cortes mente y después se dirigió a su departamento a pensar, por que Serena se había ido sin decirle nada? Por su parte Taiki y Yaten, estaban que no se lo creían, como era posible que su bien portado hermano se hubiera escapado con la que seria la futura reina de la tierra, no les quedaba de otra más que cubrirlo en lo que él regresaba, de su "viajesito".
En el avión, Serena miraba el cielo, estaba Seiya al lado de ella, estaban muy felices y no era para más, lo primero que hicieron después del almuerzo y de que Serena pidiera ayuda a Mina para que la cubriera en lo que iba a poner en orden algunas cosas, se escaparon y tomaron el primer vuelo que encontraron, los dos querían irse a la playa, por lo que Serena le pidió a su mamá que la ayudara, le contó todo y su mamá tratando de mantener una sonrisa, la abrazo y después de un momento ella le dijo que le ayudaría, le dio un poco de dinero y le dijo que se cuidara mucho, Seiya llego por ella y la mamá de Serena le sonrío muy complacida, nunca había visto a su hija tan feliz. Después de despedirse Serena y Seiya se dirigieron al aeropuerto, para tomar su vuelo, sin duda eso seria como una luna de miel, y es que así ellos lo querían.
Rei y las chicas se encontraban en el templo, habían decidido pasar la noche con Rei, ya que su abuelo se había ido y ella se sentía un poco sola.
-Rei que opinas de las locuras de Serena?- Mina estaba comiendo papas fritas, mientras veían la televisión.
-Yo creo que ella ya sabe sus responsabilidades no hará nada malo, se los puedo asegurar- Ami, había dejado de leer y ahora se encontraba mirando a sus amigas.
Lita apago la televisión y miro a Rei quien estaba escribiendo una carta, tratando de copiar los garabatos de Serena.
-No creo que ella nos defraude, nosotras la conocemos no creo que ella haga algo que pudiera cambiar el futuro, ella quiere tanto o más que nosotras a Rini, estoy segura de que ella no hará nada de lo que después se pueda arrepentir.
-Rei, nosotras apoyaremos a nuestra princesa sea cual sea su decisión, además creo que todos aquellos que la amamos lo aceptaremos, por que lo que ella escoja sin duda será su felicidad.
Las chicas siguieron comiendo botanas durante casi toda la noche mientras que el rey de la tierra miraba a la luna y pensaba en su preciosa princesa y en la forma tan fría que la mamá de su amada lo trato, no sabia por que pero algo lo tenia inquieto.
Serena por su parte se sentía más feliz que nunca, estaba recostada sobre el pecho de su amada, era tan feliz ella, nada le importaba en esos momentos nada. Seiya miro a su amada y sonrío plenamente, era tan lindo tenerla así, nada podía interrumpir su felicidad.
Setsuna, miraba atra vez de la ventana, Mishiru estaba junto a ella, mientras que Haruka estaba preparando un poco de café.
-Osea que nuestras sospechas son ciertas, entonces el destino sigue igual que antes, pero si la princesa ya no ama a Darién, como es posible que la pequeña dama nazca.
-Michiru, no crees que haces demasiadas preguntas, yo no te puedo decir nada acerca del futuro, nada, no lo entiendes, lo único que te puedo decir es que el futuro tal cual conocemos si existe, nada a cambiado.
-Vaya, parece que llegué en un mal momento- Haruka entro con una charola para servir el té- que ocurre Michiru.
-Es que sigo sin entender por que nosotras debemos quedarnos con las manos cruzadas mientras que la princesa sufre por no poder estar con su amor, no lo entiendo, o mejor dicho no lo acepto.
-Michiru- Haruka acaricio la cara de la chica- Cabeza de Bombón ya tomo su decisión, si nosotras intervenimos en algo, con seguridad, el futuro cambiara y eso es lo que ella menos quiere, no te preocupes, todas sabemos que ella será feliz de cierta manera, te aseguro que todo resultara bien.
-Haruka tiene razón Michiru, no creo que nuestra princesa se de por vencida tan pronto, ella luchara asta el final al igual que él.
-Princesa- Michiru miro la luna, todo eso no le gustaba, sabia lo que se avecindaba y no quería ver llorar a las chicas y a su princesa.
La luna siguió su trayectoria al igual que el tiempo, ya no había nada que pudieran hacer. Su destino se estaba trazando muy rápido.
