FROZEN ROSES
Cap.1 El Regalo Sorpresa
Era mi cumpleaños número 18. Me encontraba en mi enorme mansión, por supuesto, celebrando con todos mis amigos (si se les podía llamar así) y algunos que no conocía, supongo que hijos amigos de mi padre. Todos vestidos en trajes de gala, las mujeres con sus hermosos vestidos largos, pero a la vez muy sexys, y los hombres con las túnicas de los más caros diseñadores de ropa. Fui bajando las escaleras, poco a poco, para saludar a mis invitados. Como era de esperarse, todas las mujeres me veían con ese brillo en los ojos de excitación. Algunos hombres me veían con envidia, otros con respeto, yo les devolvía la mirada con autoridad. Estaba observando a cada mujer para ver cual sería la indicada para esa noche. Casi a ninguna las conocía, pero eso era lo de menos, sabía que al día siguiente me iría sin resentimiento alguno a buscar otra. "Solo sexo" Pensaba. Eso era lo más importante. Veía a todos los invitados, alguno que otros me saludaban como si me conocieran de toda la vida, algunos solo bajaban la mirada en señal de respeto. Me fijé en una hermosa pelirroja con corto vestido negro. Era hermosa. Fijé mi mirada en ella examinándola. Alta, tez blanca, piernas largas y hermosas, senos estructurados a su cuerpo, hermosa sonrisa y unos imnotizantes ojos azules. Sin contar su hermosa cabellera roja como el fuego. De repente siento que alguien se me acerca y me saca de ese trance de seguir viendo a la despampanante pelirroja.
-Feliz cumpleaños, hermano.- Dijo Blasie sonriéndome.
-Gracias, Blasie- Dije devolviéndole la sonrisa y abrazándolo.
Se me acercó y muy bajito me susurró cerca del oído.
-Te tengo tu regalo en mi mansión, cuando acabe esta porquería de fiesta nos vamos para entregártela- Termino sonriendo.
Me alejé de el sonriéndole de la misma manera. Me conocía perfectamente. No por algo era mi mejor amigo. Sabía que odiaba las reuniones grandes y lujosas, con gente que ni siquiera conocía y la mitad estaba tras mi herencia.
-¡¡Draquiiiiiiiiiiiiiiiiiiiito!!-
"Oh no, por favor NO, todo menos ella" Pensé.
- ¡¡Dios, Draquiiiiiiiin!! Pero… ¡Mírate! ¡Estás precioso amor! ¡¡YA 18!! ¡Que emoción! ¿No? ¡Tienes que venir conmigo para tu regalo...! ¡Ah! Y mi padre quiere que vengas a la casa por que me dijo que tenía que darte algo… y tienes que llevarme a Hogsmeade para comprarte una sorpresa… ¡Y…!-
-¡¡Ya Pansy, YA BASTA!! Cálmate ¿ok? No voy a ir a ninguna parte contigo porque ya tengo un compromiso ¿ok?-
Dije molesto y tratando de zafármela de encima. Maldita zorra. (Me acordé de tu fic Vale xD)
-¡Ayyyyyyyyyyyyyyyyy!, pero Draquito bello, yo soy más importante que ese compromiso… tienes que…-
-Primero no me digas "Draquito" ni "Draquín" como si fuera un bebe o algo tuyo, segundo no tengo NADA que hacer contigo y tercero, si mi compromiso es muchísimo más importante que ¡TÚ! Así que si me disculpas voy a ir a terminar de celebrar esta maldita fiesta. Adiós.-
Y diciendo esto me fui dejándole la palabra en la boca a la zorra, egocéntrica. Malcriada de Pansy. Uff… Me ponía de mal humor solo oír que se acercaba y se me pegaba en sima. Terminé de saludar a mis invitados y me fui a beber y a bailar un rato. Coquetee con algunas chicas, pero mis ojos seguían en la condenada pelirroja. Dios, ese cuerpo me tenía loco. Ella solo me miraba seductoramente. A las doce me cantaron cumpleaños y aproximadamente a la una ya casi todos los invitados se habían marchado. Ya despidiéndome de los padres de Pansy, se me acercó la pelirroja caminando muy sexy.
-Malfoy-
-Weasley-
-¿Te sorprende verme?-
-Para nada, creo que te ves muy hermosa con tu vestido. Nadie te reconoció, sabes muy bien como mezclarte entre la gente.- Le dije sonriendo.
-¿Qué te puedo decir? Es mi especialidad.- Dijo devolviéndome la sonrisa.
-Me eh podido dar cuenta. ¿Qué te parece si ahora nos mezclamos por mi cuarto?- Pregunté seductoramente a muy pocos centímetros de sus labios.
-Definitivamente, me encantaría, pero tengo que irme Malfoy. La noche es joven. Iré a terminar de disfrutarla-
Y diciendo esto me dio un beso en el cachete y se fue hacia la puerta. La comí con la mirada. Ya casi llegando saliendo de la puerta dejó un papel encima de la mesa que estaba cerca de la salida. Se voltio y me guiñó el ojo. Yo solo le sonreí. Salió dejando un reflejo rojo fuego destellando la sala.
-Wow… ¡Qué mujer!- Dijo Blasie mirando hacia la puerta.
-Olvídalo, Blasie, ahorita es mia- Dije mirándolo
-¡Jajajaja! De acuerdo hermano… pero después de esta noche no vas a querer estar con otra mujer-
-Sorpréndeme- Dije tranquilamente
-¿Listo entonces, para tu regalo sorpresa?
-Listo para todo Blasie- respondí seguro.
-Entonces, vamos-
Salimos y cerramos la puerta de la casa, nos montamos en el BMW de Blasie y nos fuimos hacia su mansión.