Declaimer: El universo de "The Walking Dead" y sus personajes pertenecen a Robert Kirkman y al resto de creadores de la Serie de TV de la cadena AMC, en la que se basa la historia. Las únicas creaciones mías son los personajes de: Alex Riggs/ Tyler Riggs y los que vaya creando a medida del transcurso de esta Fanfiction. Además de los acontecimientos que los relacionan.
N.A:En primer lugar quiero prevenir los posibles Spoilers para aquellos que quizás no han visto lo que es el transcurso de la serie hasta ahora. Esta novela no sigue exactamente el mismo camino de la serie, ya que hemos modificado algunos de los sucesos en esta.
En un principio Daryl Dixon no se comporta exactamente igual a lo que quizás se espera que sea, pero estamos haciendo todo lo posible para ceñirnos a la personalidad de este a medida del avance de esta Fanfiction.
También queremos aclarar que los que desean que Daryl y la protagonista empiecen una relación en los primeros capítulos, lamentamos (bueno no) que no será así ya que queremos ser lo más realistas posible. Aceptamos las críticas y comentarios de todo lector.
Y como dice Kirkman: "Nadie está a salvo".
Esperamos que disfruten de nuestra Fanfiction.
Inicio.
Llevábamos semanas caminando y ya me dolían los pies de tanto andar sin rumbo alguno, teníamos hambre y estábamos deshidratados, en mi mente pensaba que no duraríamos mucho más, pero debía proteger a Tyler.
Por un momento miré hacia un lado, ahí estaba Sophia.
FLASHBACK.
Aún recuerdo el día que encontré a la pequeña niña, se veía tan delicada; tan frágil. Recuerdo que llevaba una pequeña muñeca entre sus brazos, la apretaba con fuerza mientras sollozaba en silencio. Junto a ella se encontraba una bella y menuda mujer, en sus manos tenía una pistola que parecía ser un revólver, se encontraba apuntando a un cuerpo que parecía no tener vida, al acercarme noté que se trataba de un caminante. Ella inmediatamente notó mi presencia y me apuntó a la cabeza con su revólver, por un momento y solo por un momento, realmente deseé que me disparara de una vez, preferiría eso a seguir viviendo en un mundo de mierda en el que la gente volvía de la muerte, y atacaban a personas, sin piedad alguna simplemente me aterrorizaba.
Pero no podía rendirme así de fácil, sería una estúpida y egoísta puesto que no estoy sola, yo tengo a Tyler, y por él jamás dejaría de luchar. Yo era lo único que él tenía, y para mí era exactamente igual y si es que algún día llegara a perderlo, simplemente preferiría no seguir viviendo.
-¿Qué quieres y por qué nos observabas?- Me dijo la mujer aún firme con el revólver entre sus dedos. Tenía los ojos cristalizados, había estado llorando.
Tyler al ver que esa mujer extraña me estaba apuntando apretó muy fuerte de mi mano y comenzó a llorar.
-Nada, solo caminábamos en busca de un lugar en donde poder pasar la noche, y entonces Tyler las vio y creyó buena idea acercarnos para preguntarles si necesitaban ayuda y si nos querían acompañar, después de todo, no es bueno andar solos por este gran bosque lleno de caminantes.-Le respondí nerviosa y asustada, pero tratando de no demostrarlo para no asustar a Tyler y para que no pensaran que era débil.
Al parecer, cuando escuchó eso, la mujer se calmó, ya que bajó su arma y la guardó en su cinturón.
-Lamento haberte apuntado con el arma, es que nunca se sabe cuándo se puede estar por fin seguro de esas cosas y de la gente que te quiere hacer daño.- La mujer caminó acercándose hacia mí extendiéndome la mano.- Mi nombre es Carol Peletier, y ella.- Apuntó a la niña.- Es mi hija Sophia.
Como respuesta, yo le extendí la mano también, esbozando una falsa sonrisa.- Mi nombre es Alex Riggs.- Apunté a mi hermano.- Y él es Tyler Riggs, mi hermanito menor.
FIN FLASHBACK.
Ya habían pasado alrededor de tres semanas desde que nos encontramos con Carol y la pequeña Sophia, y no había sido nada de fácil.
Esa mañana solo los niños.- Tyler de 10 y Sophia de 9- desayunaron, y lo que desayunaron fueron tan solo dos galletas de vino cada uno. Ni hablar del agua, hace dos días que ni rastro había de esta. Carol y yo no comíamos no comíamos ni bebíamos nada desde hace cuatro días, y para empeorar las cosas se nos estaban acabando las municiones y empezaba el verano, y con este el sol.
Debíamos dormir por turnos encima de árboles, y si teníamos suerte podíamos encontrar una que otra cabaña en la cual pasar la noche, pero siempre que llegábamos a una cabaña, o estaba llena de caminantes o estaba llena de caminantes y además saqueada, sin nada de comida, agua, municiones; ni siquiera ropa.
Tampoco podíamos quedarnos habitando en estas, porque como se encontraban en medio del bosque, siempre llegaban hordas de zombies unas horas o un día después como máximo.
-Alex- Me dijo Carol sacándome de mi mente.- ¿Te sientes bien?
-Estupendamente.- Le respondí, aunque ni yo misma podía creerme eso.
De repente sonó un ruido de entre los árboles y arbustos. Eran unos pasos muy pesados, de seguro un caminante de buen tamaño.
-¿Escuchaste eso?- Me preguntó Tyler.
Yo solo asentí y miré a Carol quien me observaba fijamente, fue entonces cuando yo le hice un gesto a la mujer para que se acercara a mí.
Esta sin pensarlo dos veces se acercó a mí junto a su indefensa y pequeña hija. Yo miré a Tyler y le susurré:
-Toma a Sophia y escóndanse tras ese arbusto.- Apunté con mi dedo.- Solo deben gritar si algún caminante se les acerca.
-Está bien.- Me respondió e inmediatamente hizo lo que yo le dije.
Yo solo miré a Carol y ella asintió como tratando de decirme que estaba lista y dispuesta a luchar, ambas nos pusimos en posición para atacar a lo que fuese que saliera de entre esos árboles. El sonido sonaba cada vez más y más fuerte y yo cada vez me ponía más y más nerviosa puesto que el tan solo hecho de ver a una de esas cosas me provocaban ganas de vomitar; ni hablar de cuando debía matarlos, debía contener las ganas de vomitar lo que había comido, aunque a veces no lograba controlarme, pero ahora no tenía nada más que bilis para vomitar, ya que hace un par de días que no comía. Además de esta, tenía otro contratiempo, debido a que me daba asco matar zombies no ocupaba mucho mis armas y por lo mismo no sabía controlarlas muy bien que digamos.
Finalmente salió de entre los arbustos lo que yo esperaba atenta, pero al parecer me equivoqué, ya que salió un gran y fornido hombre.
Esto me causaba dos cosas: La primera fue alivio de que fuera un humano y no una de esas cosas, y la otra cosa que me causaba fue terror de que pudiera hacernos algo a nosotras o a los niños.
El hombre al vernos también pareció relajarse, ya que esbozó una sonrisa burlona. Yo y Carol seguíamos mirándolo con mucha seriedad y miedo de que fuera un ladrón y quisiera quitarnos lo que ni siquiera teníamos o de que nos matara al ver que no teníamos más nada para ofrecerle. La tensión se podía cortar con un cuchillo, nadie bajaría su pistola.
Seguimos así por un buen tiempo hasta que escuchamos un pequeño grito, de inmediato identifiqué de quién era, sin duda era de Tyler.
En seguida me di vuelta. Fue entonces cuando vi una escena que hizo que mi corazón se detuviera por un momento.
Un caminante se acercaba peligrosamente hacia mi pequeño hermanito. Quería ir para ayudarlo, pero mi cuerpo me lo impedía, me dolía la cabeza, tenía náuseas y se me empezaban a doblar las piernas. Sin darme cuenta, me desplomé.
Continuará…
N.A: Espero que les haya gustado este primer capítulo tanto como a nosotras. También aprovechar de darle las gracias Constanza Tapia nuestra primera lectora en esta primera y gran Fanfiction. (Atentamente: Catalina Carvajal y Paulette Vega).
