Disclaimer: Todos los personajes son propiedad de Stephenie Meyer. La trama es solo idea mia.

¡Hola! Tanto tiempo... vengo a dejarles la intro de una nueva historia. Ya voy por el tercer capítulo por lo que espero no tardar mucho en subir. Espero que les guste la idea, y ya saben, espero sus review, serían de gran ayuda (:

Protege mi corazón

Una alarma me sacó de mi trance la cena estaba lista. Guardé rápido mis cuadernos y salí de mi cuarto, bajé lentamente las grandes escaleras y me dirigí al comedor. Para mi sorpresa Charlie y Renée me estaban esperando, hoy era jueves y ellos solo cenaban conmigo los fines de semana. Charlie se puso de pie. Algo andaba mal.

—Debo comunicarles algo, les pido por favor que no se alteren— Renée y yo asentimos, ya me estaba preocupando.

—Intentaron secuestrarme cuando salía de la empresa— mi respiración se detuvo. Charlie, mi papá— por suerte el guardaespaldas de mi socio Eleazar, reaccionó a tiempo y disparó, al parecer no se lo esperaban ya que nunca ando con seguridad, por lo que escaparon como ratas—

—Por dios Charlie ¡Por qué no me avisaste antes! yo me muero, que haría...— Renée había empezado a llorar.

—Tranquila Renée, por favor, no te alteres. Ya tomé algunas medidas, pero hay una en especial que debo comunicarles ahora... he decidido contratar nuevo personal, específicamente algunos guardaespaldas.

¿Guardaespaldas? Genial, así Charlie estaría más seguro... ser dueño de esa empresa lo convertía en un blanco perfecto.

—Es lo mejor Charlie, estarás más seguro así, no soportaría que nada te pasara amor.

—No comprendieron, creo que me expresé mal. Son tres hombres, uno me custodiará a mi, otro a ti Renée y otro a ti Isabella... y debo agregar, no hay posibilidad de que se nieguen... a no ser que quieran estar encerradas en esta casa—

Ni mamá ni yo podíamos hablar ¿Tener a alguien que me siguiera todo el tiempo? Era mucho. Demasiado.

—Charlie, yo lo acepto, creo que si intentaron secuestrarte toda la familia está en riesgo... y sobre todo nuestra hija. Bella, eres nuestro punto débil... tenemos que cuidarte— Renée ya estaba más reconfortada... yo pensé que se opondría. Genial, tendría que aceptar... luego ya vería como me deshacía del tipo ese.

— Agradezco mucho que me entiendas Renée, espero lo mismo de ti Isabella, se que no me defraudarás.

—Claro que no, aceptaré lo que digas— y le di mi mejor sonrisa de niña buena ¿Qué ganaba con contradecirlo? Era tan testarudo... me ganaba y con ventaja.

—Bien. Están esperándonos en mi despacho, son tres jóvenes con experiencia, tienen muy buenas recomendaciones y sabrán tomar distancia de ustedes, espero que sean ubicados y respeten su lugar en esta casa, a pesar de todo son del servicio. Ante el menor fallo quiero que me avisen ¿Entendido?

Volvimos a asentir. Terminamos de comer y lo acompañamos a su despacho, fuimos en silencio, casi nunca hablabamos entre los tres.

Cuando entré pude distinguir tres figuras, un hombre de unos treinta años estaba sentado en uno de los sillones, otro de gran porte que parecía matarse en el gimnasio estaba hablando con uno de pelo cobrizo que me daba la espalda. Apenas nos sintieron se enfrentaron a nosotros... la mirada del joven de pelo cobrizo se clavó en la mía. Verde, verde profundo, me estaba mareando ¿Cómo podía afectarme tanto un simple tipo? No, simple no, era todo menos simple, pero eso no quitaba el echo de que era un trabajador, un empleado. Estaba segura de que lo que él ganaba en un mes yo me lo liquidaba en un día de shopping. Una sonrisa se formó en mi rostro. Él seguía sin dejar de mirarme... y sonrió, una sonrisa sincera que me detuvo el pulso y me impidió escuchar lo que hablaban los demás.


Gracias por leer. Mañana trataré de subir el primer capítulo completo. Saludos ^_^