Shika Saku

Shika Saku

Romantico

Había llegado el fin de la guerra. Habían ganado y por fin iban a poder celebrar en paz. Akatsuki se había desintegrado y los únicos miembros que quedaban con vida eran Pein y Konan, quienes decidieron pagar sus crímenes… No por ellos, sino por el pequeño hijo que venía en camino, deseaban darle un futuro, o eso fue lo que dijeron en la última batalla… Aún se me eriza la piel al pensar en ese momento.

/Flash Back/

-Pein!!! –grito Konan al ser herida de gravedad por Naruto, quien acababa de realizar un Rasengan que impacto de lleno en la chica.

-Konan!!! –Al momento de ver a su esposa caer el muchacho dejo su batalla contra Kakashi y corrió junto a ella. –Mi amor, ya estoy acá!! Deja que te cure!!

Yo miraba desde lejos, sabía que a Pein no le quedaba una reserva de chakra muy grande y la herida de Konan era profunda. Ya era imposible que él la salvara. Así que mire a mi maestra a los ojos y le pedí su permiso.

Tsunade suspiró- Hazlo Sakura, no me gusta ver a la gente morir.

Así que corrí hacia la pareja tendida en el barro. No tenía mucho tiempo y la tarea era muy peligrosa…

-Déjame a mí. –Le dije a Pein. Él me miro sorprendido.- No te queda reserva de chakra, es imposible que la salves déjame a mí.

Simplemente asintió y se hizo a un lado. Lentamente las batallas a nuestro alrededor se fueron deteniendo. Tsunade, Shizune e Ino aprovecharon estos momentos para curar a los heridos de nuestro bando y a una mirada de Tsunade fueron hacia los Akatsukis y curaron sus heridas, todos las miraron asombrados igual que me miraban a mi.

Yo por mi parte trataba por medio de chakra de cerrar los tejidos dañados. Era una tarea sumamente difícil y muy agotadora, pero lentamente logre mi propósito. A simple vista la herida no cicatrizaba, pero con mi chakra sentía el cierre de las arterias y a los músculos uniéndose poco a poco. Me llevó alrededor de media hora y casi el total de mi chakra, pero cuando termine lo único que quedaba de la herida del Rasengan era un pequeño círculo en el abdomen de Konan.

-Hice todo lo que puedo, deberá estar en reposo por los próximos ocho meses, pero ambos estarán bien. –Dije suspirando y mientras me secaba el sudor de la frente.

-Ambos? –Pein me miro asombrado.

Lo mire por primera vez desde que había empezado el jutsu de curación, mantenía a Konan contra su cuerpo, ella estaba desmayada desde que empecé a curarla.

-Si, ambos. Esta embarazada de un mes, aproximadamente. No te preocupes, estarán bien. -Afirmé mientras lo miraba a los ojos.

-Arigatou, Sakura-san. –Dijo inclinando su cabeza en señal de respeto. –Estaré en deuda con usted el resto de mi vida.

Yo solo sonreí y me pare para ir a ayudar a los demás heridos. Poco a poco todos fuimos recuperando fuerzas. Lo triste fue saber que de los Akatsukis no se había salvado nadie más que Konan y Pein, a pesar de todo el esfuerzo realizado por nosotras. Aún así fueron menos los muertos de lo esperado, al fin y al cabo de nuestro bando no murió nadie, solo Shikamaru estaba en real peligro, pues luego de enfrentarse a Kakuzu se desmayó y hasta el momento no parecía mejorar.

Un rato antes de armar las carpas y las fogatas para pasar la noche se me acercaron Pein y Konan, la última en brazos de su pareja.

-¡Sakura-san! ¿Cómo podremos agradecerte lo que hoy hiciste por nosotros? –Dijo Pein mirándome seriamente a los ojos y, para ser sincera, intimidándome un tanto.

-¡No es necesario que hagan nada por mi! Yo lo simplemente no podía ver a otra persona morir. –Dije mirando hacía el cielo, recordando el pasado y a su vez luchando por olvidarlo.

-Muy bien. No haremos nada por ti. Pero siempre podrás buscarnos en caso de que nos necesites. ¿Entendido? -Quizás Konan no fuera tan fuerte como su marido pero su mirada era mucho más penetrante que la de él. Aún cuando iba acompañada de una sonrisa sincera.

-Hai, Konan-san. Y díganme Sakura, no me gustan las formalidades. –Dije poniendo cara de disgusto.

-Hai, pero lo mismo va para ti, no más "san" a ninguno de los dos, Saku-chan. –Pein me sonrió luego de llamarme por mi nuevo apodo y yo sólo atine a sonrojarme…

-Hai.

-Bueno, tenemos que ir a hablar con la Hokage. ¡¡Adiós, Saku-chan!! –Se despidieron antes de irse.

/Fin del Flash Back/

Luego de eso solo fue necesario que el ex-líder de Akatsuki jurara fidelidad a la Hoja para que fuera admitido dentro de las filas de Shinobis. Aunque con la condición de que vivirían fuera de la aldea y no podrían usar ninguna técnica ninja durante un par de años. Ambos aceptaron encantados y se fueron del campamento junto con una comitiva de ninjas de Konoha. Ino (para cuidar de Konan), Kakashi, Chouji y Sai.

Por lo que supe luego de eso (¡¡en una carta enviada por Konan para mí!!) se habían establecido en la frontera del país del Fuego y del Viento. Parece que el bebé será una nena y quieren que lleve mi nombre y ¡¡yo sea su madrina!! Lo que me hace muy feliz, porque por todas las cartas que me llevo mandando con Konan ya la consideró una amiga muy cercana. El bebé nacerá en unos tres meses, por lo que en dos meses me voy de Konoha para ir a ayudar a Konan con el parto.

Me va a venir muy bien alejarme de la aldea. Especialmente de Shikamaru…