Serie: Beyblade
Género: Yaoi, Lemmon
Pareja: Kai x Bryan
Comentarios: Esta historia nació en mi cabeza originada por un dibujo excelente que realizó la hermosura andante de NekoT, no es de esperarse menos si es de ella. Esta hermoso y bueno, serán tres capítulos cortos, el tercero contendrá lemmon, así que paciencia.
«¤» Eиgαиchαdō α Τϊ «¤»
Bien, si analizamos las cosas desde un punto de vista parcial, bien se podría decir que él estaba prestando demasiada atención a cosas sumamente innecesarias, un buen ejemplo sería lo que ahora pensaba, tratando de encontrar una lógica, a cosas absurdas.
— ¿Vas a salir a entrenar de una vez o quieres que te castiguen por llegar tarde? – la voz ya conocida le sacó de sus cavilaciones, tomó su casco con una mano y salió de los vestidores, llevaba dicho objeto de protección bajo su brazo y su mirada un tanto perdida, caminaba sin prisa escuchando como sus demás compañeros de equipo trotaban pasándole por un costado directo al campo de entrenamiento.
Sintió en su lento caminar, como alguien a su costado pasaba y con singular confianza le daba una nalgada.
— Apresúrate Hiwatari o te castigan. – ante la nueva insistencia, corrió arrugando la frente por dicho acto realizado por uno de sus compañeros.
Mientras corría alrededor de todo el campo, justo por llegar tarde a la alineación, el entrenador le sacó y le impuso correr rodeando todo el campo de juego, llevando puesto todo el equipo, hombreras, casco y todo. Bufó rodando los ojos e hizo caso.
Los minutos eran eternos y tan solo corría volteando continuamente al centro donde todos practicaban las jugadas que ya conocían y pensaban en nuevas. Enfocó su vista sin querer en quien llevaba un cuatro en el uniforme usado en los entrenamientos, le vio lanzar el balón lejos, era el de mejor brazo y por ello tenía su actual posición.
Ya le conocía de hacía mucho tiempo, tenían alrededor de tres años formando parte del equipo de football americano de la universidad y habían compartido preparatoria por año y medio más, lo cual, sin poder evitarlo, los llevó a conocerse muy bien, llegando a ser, sin duda alguna, amigos.
Pero, justo tenía las últimas dos temporadas de juegos, planteándose una pregunta que le carcomía, y más allá de ello, le inquietaba en demasía, en verdad, no lograba comprender su comportamiento.
¿Qué le estaba llevando a observar por largos lapsos a su amigo Bryan?
¿Admiración?. Quizá
Porque no, después de todo el chico era bueno para jugar, tenía el mejor brazo de todo el equipo y con ello les había llevado a muchísimas victorias en lo largo de aquellos meses. Fuera del ámbito deportivo, aunque solitario, era una persona de noble sentimiento, que en un principio solo entro a jugar para que le dieran la beca completa y así evitarle una carga a su madre, quien había cuidado de él por ella misma toda su vida. Trabajaba antes de entrar al equipo para costear sus estudios y además era responsable cuando se dedicaba a algo.
Pero eso lo sabía desde el año y medio que compartieron… ¿Por qué entonces notarlo hasta ahora?. Talvez era otra cosa.
¿Amistad?. Podría ser…
Llevaban una amistad muy sólida, a su muy particular forma de ser, ambos eran callados, preferían pensar antes de hablar tonterías, bromeaban, tan solo entre ellos y otro compañero que se les unió a las líneas hacía un año, ganándose el título de 'Novato del año' . Titulo muy ingenioso si le preguntaban a Kai. Bryan siempre estaba ahí cuando se le necesitaba, si algo andaba mal, sabía brindar apoyo, hablar lo necesario, aconsejar y en su momento, callar.
Era hasta donde Kai recordaba, la persona con quien más había compartido tiempo, momentos importantes, así como hablado sobre sus más íntimos secretos, sus deseos y sus objetivos. Ambos conocían las manías del otro, los defectos, las virtudes… ambos sabían escucharse, no solo oír lo que el otro dijese, si no, conocerse. Eran en una simple y corta palabra... amigos.
Lo que le llevaba a pensar que talvez era esa la extraña insistencia de su vista por vagar a través de su cuerpo cuando coincidían en las duchas, por observarle desde la banca cuando estaba descansando sus diez minutos, por ver los gestos que hacía cuando lanzaba el valón, el ceño fruncido cuando se trataba de que alguien de otro equipo le hablara, o memorizar las facciones arriscadas y las falsas disculpas que les daba a todas las chicas que le invitaban a salir, incluyendo a todas las porristas.
Quizá, solo quizá de eso se trataba.
No, para que engañarse a sí mismo, sonrió de lado aumentando la velocidad a su carrera, desvió un momento la vista una vez más al campo y le vio, ahí estaba Bryan parado justo en medio de todo el equipo, tal cual si fuera el entrenador, platicando en voz alta talvez algún cambio en una jugada, o podría ser una nueva.
Por un momento la mirada lila se conectó con la roja, parecían haberse sonreído sin siquiera mover un solo músculo de sus rostros, era una extraña pero interesante conexión.
Kai terminó por fin de correr, detuvo su andar algo agitado, camino lento hasta donde estaban los vasos y el contenedor de agua, bebiendo de ella en varias ocasiones pero sin exagerar ya que luego no podría continuar como debía.
Bryan hizo un ademán con la mano a los chicos del equipo y comenzó a caminar hacia él a paso lento, los demás parecieron seguir con el entrenamiento, el cual, divididos en dos grupos pequeños, se alineaban para comenzar a intentar anotar, tal como si fuera un partido real.
El chico de cabellos claros y ojos del mismo color, sacó su casco y lo tomó con una mano, caminando con la vista fija en un solo objetivo, sus ojos no despegaban la mirada de unos rojos que le miraban por sobre el vaso con el que bebía agua.
— ¿Eres ahora el capitán? – preguntó Kai, extendiéndole el vaso que antes usara, lleno de agua para su amigo.
— Le insistí a Hitoshi que tú hacías mejor trabajo pero…
Kai negó con un movimiento de su cabeza.
— Te lo ganaste. – y nuevamente, esa sonrisa que solo se reflejaba en la mirada, que talvez muchos pudieran ignorar si les miraban, pensando que solo miraban seriamente al otro, pero ellos se entendían.
— Gracias. – acordó. – Y ahora serás el tackled así que prepara esa condición para recibir mis pases. – sonrió, esta vez mostrando una diminuta flexión de lado en sus labios.
— Ya la tengo. – presumió bromeando, dirigiendo sus pasos hacia los demás, habiendo terminado ese día su castigo. Bryan se quedó quieto tomando agua aún.
Su pensamiento distraído en miles de pensamientos.
.:TBC:.
¤Žhёиα HîK¤
"…Todas la pasiones son buenas cuando uno es dueño de ellas, y todas son malas cuando nos esclavizan…"
Rouseau
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Bien, veamos… creo que fue todo por hoy, es corto como dije en un principio y el siguiente contiene el análisis de Bryan. Para llegar a la pervertida… digo, a la conclusión en el tercer capítulo con ambos en un delicioso Lemmon n.n
A quien ya me pedía otro de esta pareja… ahí lo tienes lindura. Y gracias por el dibujo que me inspiro. Artista: NekoT
Besos.
Espero sus comentarios. Gracias por leer.
