Hola chicas (: Aquí les vengo con mi primera traducción, de verdad espero que les guste, leí esta historia y me ha encantado, veamos cómo nos va, ya que la autora no ha terminado. Les aviso que actualizaré esta historia cada jueves (si no me atraso por la escuela) así que tendrán un capítulo cada semana. Para las que no han leído, les invito a leer mi adaptación "Consulta con la sexóloga Hermione Granger" para las que les guste el lemmon y Harry Potter. Es una ADAPATACIÓN y al igual que este fic, no me pertenece.
Disclaimer: Los siguientes personajes no me pertenecen, son de la legendaria Stephanie Mayer, la trama le pertenece a momma2fan a la cual agradesco por permitirme hacer esta traducción.
"Juego de amor"
By: Momma2fan
Prólogo
BPOV
La lluvia bajaba por mi cabeza mientras miraba la tumba de mi padre. Apenas escuchaba la voz del padre mientras decía a los presentes la gran persona que fue mi padre. Charlie era mi mejor amigo y la única familia que me quedaba. Por supuesto tenía a mi familia sustituta, pero cada uno tenía su propia vida. Alcé mi cabeza mientras el reverendo Weber daba la última oración que dejaría a Charlie descansar. Sollocé y me preparé para despedirme de Charlie por última vez. Tenía 19 años y estaba sola.
El suave zumbido de la máquina metiendo el ataúd bajo tierra era el único ruido que podía escuchar aparte de mis sollozos. Sentí un brazo rodear mis hombros y mire los ojos cafés de mi 'hermano' Emmet. Me acurruqué junto a él y dejé mis lágrimas correr por mis mejillas.
Por el rabillo del ojo pude ver los flashes apagarse como luces estroboscópicas. ¿Mencioné que mi padre era el dueño de los Marineros de Seattle? No, pues lo es…era, como sea. El mundo entero está curioso por saber si heredaré el equipo. Estoy segura que los jugadores también están curiosos.
Lentamente recorrí mi mirada por los invitados. Jasper Whitlock, el lanzador inicial estaba a un lado con los brazos rodeando a mi mejor amiga Alice Brandon. Han estado saliendo por unos cuantos meses. Junto a ellos estaba Rosalie Hale, mi otra mejor amiga. A su lado estaba el primera base, Edward Cullen. Mi padre reclutó a Cullen cuando terminó la universidad. Lo he estado viendo jugar desde que tenía 16 y quedé enamorada de él. Me pregunto cómo se sentirían si yo me hiciese cargo del equipo.
En cuanto el ataúd estuvo bajo tierra los presentes lentamente comenzaron a caminar hacia sus vehículos. Me quedé ahí y esperé, necesitando un tiempo a solas para despedirme.
-Vamos Bella, te estás empapando- dijo Emmet, tirando de mi brazo.
-Ve, estaré en un minuto- Emmet me miró unos instantes antes de irse, dándome algo de espacio. Volteé al hoyo en la tierra que ahora tenía a mi padre y me ahogue en lágrimas que caían libremente por mi rostro. Sabía que el paparazzi seguía ahí tomando fotos, y que seguramente esto saldría en primera plana, pero no me importaba.
-¿Qué haré ahora sin ti papá? Te extrañaré mucho. No sé cómo sacaré al equipo adelante sin ti. Si me dejas esto a mí, espero que nadie renuncie por mí. Te amo papá, te extraño demasiado. Prometo que te sentirás orgulloso de mí.-
Me di vuelta y me marché dirigiéndome al auto donde mis amigos me esperaban para apoyarme. Esperaba que lo siguieran haciendo una vez que el testamento estuviera ya leído. Algunas personas no estarían satisfechas con lo que dirá. La prensa me hara pedazos.
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