Realidad
Capitulo 1: Ahora lo entiendo
Por: Mazii-chan
Los personajes no me pertenecen son propiedad de: Rumiko Takahashi. Esto lo hago sin fines de lucro sólo con la intención de hacer llorar, reír o mostrar algún sentimiento.
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Colocó a la chica en la camilla, las enfermeras se la llevaron al quirófano.
—Doctor, el paciente está perdiendo mucha sangre habrá que hacerle un transfusión.
Fue lo último que escucharon antes de que las puertas de aquella habitación se cerraran y una luz roja se encendiera.
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La chica de cabello color azabache y ojos de tonos café se sentó en unas de las tantas bancas vacías del parque. Sus pensamientos se unieron con su corazón ambos sufrían por una boda fallida e insultos, quizás con palabras más amables hubiera entendido.
—Eres una tonta Akane—
—¿Porqué no me dijiste lo de la cura?—
—Eres una boba—
—Quien va a querer a una marimacho como esposa—
—No eres para nada femenina. ¿Qué hombre te querrá así? —
Aun podía escuchar los insultos de su prometido, nunca había llorado por aquellas palabras intentaba hacerse la fuerte pero no pudo hasta que le dio el golpe final, las palabras más hirientes que jamás pudo haberle dicho.
—¿Qué es más importante para ti?—preguntó Akane, su voz se hizo más quebradiza, tenía miedo a que la respuesta no fuera su nombre —La cura o yo— Ranma solo calló por unos instantes y no dudo en responder
—La cura— su voz salió dura, fría, sin emociones de por medio.
Un Crack pudo escuchar ¿era su corazón? Las lágrimas amenazaban con salir, pero no le daría en el gusto de verla sufrir por él, ella era fuerte y lo demostraría.
El sonido de las gotas de lluvia la sacó de lo sucedido en la tarde.
No podía odiar a Ranma, lo amaba más que nadie en el mundo, con él al lado pudo aprender a no rendirse nunca y dar la vida por aquello que más quería como lo ocurrido en el monte Fénix, ella había dado su vida para que él se salvara de esa bola que contenía al príncipe. Pero cuando pudo regresar a su forma normal, logró escucharlo diciéndole que la amaba o sólo era porqué sentía que la iba a perder, ¿por un momento de desesperación? Quizás el "te amo" nunca fue verdad. Él tenía razón quien iba a querer a una chica que no era buena dueña de casa, como su hermana Kasumi, o no era tan inteligente como Nabiki, quién iba a querer a una chica violenta que no poseía ninguna característica en especial.
Ya era bastante tarde quizás su familia ya se estuviera preocupando, además hacía frío y no andaba con ningún chaleco encima como para protegerla del viento que azotaba con furia. Sus piernas no respondían, los ojos los sentía cada vez más pesado, no resistió más y callo desmayada
—Ayúdenme— pensó antes de que Morfeo la tomara en sus brazos.
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Movió un mechón de pelo de la chica que tapaba parte de su cara, esa hermosa piel nívea que poseía. Seguía dormida, había deseado tanto tiempo tenerla así sin que nadie se interpusiera entre ellos. Él estaba enamorado, perdidamente, de Akane siempre la miraba de lejos, seguía y hasta ya se sabía cada uno de sus hábitos: en las mañanas salía a trotar luego de una hora volvía a la casa y salía nuevamente pero esta vez vestida de colegiala, siempre salía apurada junto con un chico, Ranma, lo odiaba. Ya pasadas las horas ella regresaba del instituto a veces enojada otras felices pero siempre con Ranma, iba a entrenar luego se iba a la casa, más tarde escuchaba un "buenas noches" de parte de ella. Los sábados y domingo siempre salía a correr pero en la tarde siempre era diferente.
Le acaricio la mejilla, la veía tan frágil, tan indefensa, quería romper esa coraza que había creado para que nadie la lastimara y sabia que en el fondo sus sentimientos eran más frágiles que el de una chica normal, había que tratarla con cariño y cuidado.
Akane comenzó a despertarse, su cabeza le daba vueltas no sabía donde estaba, lo último que recordó fue que estaba sentada en el parque y se levantaba para irse luego de eso todo oscuro.
—No te preocupes, no te hare nada— se sentó al lado de ella
—¿Quién eres?— preguntó, estaba débil como para pegarle o defenderse de ese desconocido
—Akane, no sé cómo decirte esto, he estado por mucho tiempo reuniendo el valor suficiente para decirte que yo… te quiero.— Silencio —Se que tú no me corresponderás a esté sentimiento tan fuerte que poseo aquí dentro— se tocó el corazón —, no quiero que te alejes de mí, en verdad te quiero— El chico espero que ella reaccionara pero nunca lo hizo ninguna palabra había de por medio solo un silencio que se volvía más incomodo cada vez que pasaba el tiempo. Ella no soportó más y lloró, lloró por todos los sucesos que le habían ocurrido durante los últimos días.
—Gracias. Pero no te puedo corresponder en ese sentimiento— La cara de Ranma se dibujo en su mente —Porque amo a otra persona—.
—Lo se, ¿pero él te corresponde? — Tomó las manos de ella—, Se que él te ha insultado, te ha hecho llorar y varias cosas más. ¿Tú en verdad quieres ese amor, no es un capricho? Yo lo vi hoy supe que él no te ama por su forma de hablarte ¿nunca te has preguntado por qué trata bien a las demás chicas y a ti no? Las relaciones son en pareja. No sólo uno puede dar amor y el otro no, esto es mutuo. Dalo como lo recibes.
—¡Tú no sabes como me trata!— gritó
—Decirte que eres fea y de pechos planos, eres marimacho, que no sabes cocinar, que eres una boba ¿esa es la forma de amar de una persona? — levantó una ceja y continuo —Tú eres preciosa, tienes talentos únicos, posees un cuerpo que es envidiable para cualquier mujer, aunque no sabes cocinar nunca es tarde para aprender y cuando sepas serás mejor que cualquier otra persona y estoy seguro que serás una linda dueña de casa— lo ultimo hizo sonrojar a Akane.
—Gracias, pero no me debes conocer tan bien como dices— le dio una sonrisa sincera, aunque fuera un extraño sabía que podía abrir su corazón y contarle sus problemas porque tenía la certeza que él si la escucharía
—Te equivocas pequeña, ten por seguro que te conozco mejor que nadie—
—¿Por qué estoy aquí?— cambio bruscamente el tema —Tampoco se tu nombre
—Mi nombre es Raito y te encontré desmayada en el parque y aproveche para declararte mis sentimientos— con un leve color escarlata en las mejilla
—Raito, ya es tarde, mi familia debe de estar preocupada por mí. Sobre todo por lo que pasó hoy.
—¿Tu boda fallida? Me alegro que no te hayas casado.
—¿Por qué?— La mirada de ella se oscureció
—Porque no te hubiera podido declarar mis sentimientos— lo dijo en tono de burla y seriedad la tomó de los hombros y lo atrajo hacia ella dándole un reconfortante abrazo. Ella le correspondió y hundió su cabeza en el pecho de esté.
—Se sentía tan bien, su calor corporal es muy agradable no me quiero separar de él— pensó Akane
—Tenemos que irnos o tu familia te saldrá a buscar.
Ambos se fueron del parque, la conversación que tuvieron se quedaría allí, aunque no se los dijeron con palabras se lo decían todo con la mirada. Esa solitaria banca del parque era testigo de todo lo que ocurrió en esa agitada noche.
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Faltaban unas horas para que amaneciera y ya podían ver la entrada de los Tendo, en el trayecto conversaron de diversas cosas, se dieron cuentas que tenían casi los mismo gustos excepto por algunas pero no de gran importancia.
—Bueno ya estamos en tu casa, disculpas las molestias que te he causado—. Le acaricio la mejilla y esta sólo se dejo llevar por tan cálida sensación
—Se que esta idea es loca pero siento que te conozco desde antes. Cuando me abrazaste lo pude sentir, no se si me estoy volviendo loca o sólo es mi imaginación pero siento como si desde el primer momento en que me hablaste, tan amablemente, sentí que algo nos vinculaba. No me preguntes qué es, porque no se la respuesta—. Su sonrisa con la que había comenzado hablar había desaparecido poco a poco —Hay algo en ti que me recuerda a una persona especial—. Risas —debes pensar que estoy loca, pero contigo me puedo expresar sin miedo— agachó la mirada al suelo como si fuera más interesante —Es la primera vez que siento esto—susurro. Entrelazó sus dedos y se los llevó al pecho
—No te trates de loca yo siento lo mismo pero la diferencia es cuando veo tus ojos ese vinculo me llama a no separarme de ti, tus ojos es como mi adicción, como tu adicción por los chocolates—. Les tomó las manos y las beso cuidadosamente —Ya va amanecer, deben de estar preocupados por ti. Mejor ve.
—Te quiero volver a ver—
—Sólo piensa en mí e imagina que estaré a tu lado y yo apareceré, cuando más lo necesites me encontraras ahí— Ella asintió y comenzó a caminar hacia la casa. Él espero hasta que entrara, una vez que la perdió de vista giro sobre sus talones y camino hasta que se desvaneció por la bruma.
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Las horas pasaron y el doctor por fin salió del quirófano.
Se sacó la mascarilla —Los familiares de…—todos se levantaron de golpe —La operación fue un éxito pero lamento decirle que perdió mucha sangre y que el golpe que recibió provoco una contusión cerebral haciendo que cayera en un coma profundo. Mañana podrán venir a verla. Con su permiso— Se retiro.
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Este es mi primer long-fic de Ranma, sino comprobarlo en mi profile.
La idea de este fic me picaba hace algún tiempo y quise hacerlo, mi meta es hacer que el fic llegue hasta la preciada palabra fin se que no es nada fácil pero lo lograre. Tengo pensado actualizar cada semana, los capítulos no serán largos pero tampoco corto. Este primer capítulo es el más pequeño, en relación al tamaño, que hare lo otros lo superaren para que la cantidad de capitulo no pasen los veinte. La trama de fic va hacer rápido pero también en momentos lentos, dependiendo de qué hablare en cada capítulo.
Espero quejas, recomendaciones, sugerencia, tomatazos, lechugazos, así me hago una ensalada, también piedrazos, no discrimino, o simplemente felicitaciones. Ya sabrán ustedes.
Este fic es sin fines de lucro, pero un review tuyo es como un pago para mí. Gracias por cooperar.