Bra Breifs era una chica de tan solo 19 años, bonita, adinerada, tenía todo o que quería excepto al gran amor de su vida, Son Goten, ya habían pasado 2 años de su inexplicable partida y ella aún se seguía preguntando el ¿porqué?, jamás entendió porque, siempre le había entregado todo su amor y lo había amado como jamás imaginó, era muy joven para saber el significado del amor, pero ella sabía que el era con quien quería compartir el resto de su vida.
Trató de buscarlo por todas partes, pero jamás contestó un mensaje, una llamada y nadie sabía a donde había ido, su familia nunca le quizo decir su paradero, diciéndole cualquier excusa, el primer año se sintió devastada, pensó hasta en suicidarse, el segundo sentía como su corazón y su vida se iban perdiendo, no confiaba en nadie, aquella niña dulce y bondadosa se había ido por completo, la mirada de Bra se volvió igual de indiferente y profunda que la de su padre, su orgullo había aumentado considerablemente, ella ya no tenía amigas, se sentía tan sola, solo contaba con Trunks quien había sido el pilar en su vida, cualquier problema que ella tuviera el siempre estuvo ahí ayudándola realmente en las buenas y en las malas.
Aquel sábado por la mañana se cumplirían ya dos meses desde la partida de su amado, pero también era día de limpieza total en su cuarto, tenía que remodelar, hacerle algo a aquella habitación, saco todo lo que había guardado en el armario durante esos años, era momento de deshacerse de todo y cerrar un capítulo de su pasado, estaba decidido tenía que olvidar a Son Goten.
Habían tres cajas, abrió la primera caja y una lagrima escapo por su mejilla hasta caer en una fotografía, no había visto lo feliz que era desde hace mucho tiempo, ella no pudo más, rompió en llanto al recordar aquel día
*Flash Back*
-Mi amor, te tengo una sorpresa- Dijo el joven Son
-Vamos Goten ya puedo quitarme la venda de los ojos?- Pregunto Bra
-Prométeme algo-
-¿Qué paso?- Dijo la chica
-Que me amarás siempre- Dijo él en un tono triste
-Goten, sabes que yo te amaré siempre no necesito prometerte nada porque yo sé que lo haré, te amaré hasta el día de mi muerte- Dijo una confida peliazul
Goten quito aquella venda que cubrían los ojos azules de su amada y al abrilos se dio cuenta que estaban al aire libre, cerca de la montaña paoz, Goten había preparado una cena romántica para festejar el cumpleaños numero 16 de su novia.
-Mi pequeña te prometo que siempre estaré aquí para cuando me necesites- Dijo Goten y beso la frente de la joven
Bra rápidamente saco su celular y se dispuso a tomar una foto, dándole un tierno beso en la mejilla a su amado
**Fin del Flash Back**
-¿Porqué Goten? Porque?- Decía Bra inundada en llanto- Yo te amaba
La puerta del cuarto de la joven se abrió y entró un joven alto y de ojos azules que al ver a su hermanita llorando se albalanzo sobre ella y le dio un fuerte abrazo
-Aún lo extrañas?- Pregunto el
-No lo sé, cada día lo pienso, creí que pasando el tiempo me olvidaría de él pero no es así, Trunks ayúdame a salir adelante por favor, ya no puedo con esto- Dijo la pequeña Breifs
-Tranquila princesa yo te ayudaré- Dijo su hermano al mismo tiempo que abrazaba más fuerte a su hermana.- ¿Qué te parece si vamos por un helado?, de chocolate tonta, tu favorito
-Tu siempre sabes como hacerme feliz- Sonrió débilmente- Te quiero Trunks
Los hermanos Breifs se dirigieron a un parque que estaba cerca de la corporación cápsula donde se ponía un señor que vendía unos ricos helado, Bra se sentó en una banca que tenía vista para la calle, mientras su hermano compraba sus helados.
La joven miraba a una feliz pareja que paseaba por ahí, tenían un pequeño y hermoso bebé que apenas aprendía a caminar, aquella escena la lleno de una inmensa ternura y la hizo sonreír ante ese ocurrente bebé que hacia todo lo posible por mantenerse de pie unos cuantos segundos.
De repente algo la hizo voltear a su derecha, sentía la mirada de alguien, entre esa fila de autos que estaban esperando a que cambiara el semáforo pudo ver que alguien la estaba observando desde un taxi.
Esos ojos, aquellos ojos negros y brillantes no podían ser de nadie más, Bra sabía que los conocía, se había visto en ellos muchísimas veces, no podía estar equivocada, ese era su amado, ese era Goten.!
-Go… Goten!?- Se pregunto a si misma
-Ten Bra, aquí esta tu helado, doble de chocolate, como a ti te gustan, ¿a quién estas buscando? Parece que acabas de ver a un fantasma Bra, estas muy pálida- Dijo algo asustado su hermano
El semáforo cambio a verde y aquel taxi se marcho, sin que Bra le quitara la vista de encima, el aquel Son que le hizo tanto daño, había regresado!.
-Trunks! Aquel ese del taxi era Goten!- Dijo una exaltada Bra
-Bra, no creo que sea él, hoy has estado mucho tiempo pensando en él, quizás solo lo confundiste, no puede ser el, te lo aseguro que no, tu tranquila- Le entregó el helado a Bra
Quizás Trunks tenía razón, pero el corazón de Bra no se equivocaba, no podía confundirse sabia bien a quien había visto, quería correr y alcanzar aquel taxi, quería besarlo, pero aunque fuera así y estuvieran de frente los recuerdos empezaron a invadir la mente de la joven todas esas lagrimas incluso aquel intento de suicidio, no, Bra tienes que ser fuerte, se decía para ella misma.
-Tienes razón Trunks, talvez ya me este volviendo loca- Dejo soltar una breve risita
Era de noche y Bra estaba a punto de dormir, pero era inútil, esa mirada, no podía dejar de pensar que Goten estaba de vuelta, tenía que averiguar todo, necesitaba explicaciones, aún tenía muchas dudas, pero de una u otra manera se sentía tan feliz de que aquel joven estuviera de vuelta en la cuidad, aunque tenía miedo de que se equivocará y su hermano tuviera razón, había la posibilidad de que su mente la haya engañando y aquel chico ni fuese Goten.
Era lunes por la mañana Bra tenía que ir al colegio, se cambio lo más rápido que pudo, se pusol unos jeans, un tenis negros, y una blusa que dejaba ver su abdomen de color azul marino, recogió su cabello en una cola alta y le amarró un listón.
Bajó las escaleras rápido sin ser vista por nadie, tomó una manzana de la cocina, se despidió de su madre y su padre y se fue rumbo a la escuela.
Se puso sus audífonos y eligió una canción al azar, siguió caminando y de repente sintió esa misma sensación que sintió aquel día en el parque, donde creyó ver a Goten, desvió su mirada a otro lado y no prestó atención siguió caminando hasta llegar a la escuela.
Justo a tiempo, dejo unas cuantas cosas en su casillero y se fue directo a clases, se sentó en la esquina, después de que Goten se había ido hace dos años su grupo de amigos había reducido demasiado hasta solo quedar con Ubb y Marron, incluso tuvo peleas con Pan, aunque la extrañara demasiado sabía que ella era la culpable de su distanciamiento y que tarde o temprano ella se iba a arrepentir, pero no era momento para pensar cosas tristes, apenas y había superado la última pelea con la Son como para recordarla de nuevo.
-Bra, buenos días! ¿Qué tal tu fin de semana?- Preguntó un moreno que se sentó atrás de Bra
-Hola Ubb, fue normal tu sabes como me pongo al recordar esas fechas, siempre los 17 me pongo triste- Dijo la Breifs con tristeza- ¿Y el tuyo?-
-Bien, mi familia y yo fuimos de paseo y llevamos a Marron, íbamos a llamarte, pero Trunks dijo que era mejor no molestarte
-Sí de todos modos gracias creo que fue lo mejor- Dijo antes de que Marron entrara seguida del profesor
Era la primera clase y era demasiada aburrida, nadie estaba poniendo atención, Bra miraba a la ventana que daba a la calle, miraba como algunos estudiantes apenas entraban a la escuela y a lo lejos pudo ver un taxi del cual se bajaba un joven de cabello negro y una sudadera roja, el corazón de Bra se aceleró demasiado, aunque aquel joven llevaba puesto el gorro de la sudadera y lentes obscuros su mente la atormentaba creyendo de que era Goten.
-Señorita Breifs, puede conestar mi pregunta- Interrumpió el profesor
-Eh? ¿Cuál pregunta?- Dijo Bra tratando de entender lo que el profesor le decía, ante dicha respuesta todos sus compañeros soltaron uno que otro insulto ante la peliazul.
-Señorita acabo de preguntar el siglo en el cual inicio y termino la edad media, sabe la respuesta?- Afirmo el profesor
-Eh si comenzó en el siglo V y terminó en el XV
-Muy bien pero Bra, le pido que ya no se distraiga en mi clase no quiero que eso afecte en sus buenas notas-
-No se preocupe profesor no volverá a pasar
-Bueno jóvenes mi clase a terminado, quiero que investiguen sobre el feudalismo, quiero que tengan mucha información ya que mañana haré un pequeño examen sobre eso.
Los alumnos salieron de aquel salón tuvieron aquella clase por dos horas seguidas así que ya era tiempo de ir a desayunar.
-Ubb porque no desayunamos en el patio?- Pregunto Marron
-A mi me parece bien- Respondió Bra
-Esta bien vamos- Concluyó el moreno
-Adelántense chicos tengo que dejar esto en el casillero e ir por mi teléfono los veo allá!- Dijo Bra antes de empezar a caminar por un largo pasillo
Al fin se encontraba enfrente de su casillero, intentó poner la combinación pero se llevó una gran sorpresa cuando miró que alguien más la había puesto.
Abrió s casillero, creyó que alguien le había jugado una broma o incluso le habían robado algo, pero fue todo lo contrario, aquel intruso había ordenado todas sus cosas y había dejado una papel doblado color azul, Bra lo tomó y lo desdoblo
"Mas azul que el cielo y más bello que el mar"
-G
No tenía ninguna duda, aquella carta no podía ser de nadie más que de él, esa frase, esa letra, esa G lo demostraban, nadie más sabía aquella frase, nadie sabía sobre aquello solo ella y Goten
*Flash Back*
-Te amo Goten- Dijo Bra abrazando a su novio
-Mi princesa, te amo, a ti a tu sonrisa pero a tus ojos, esos ojos que me enamoran y me hacen temblar cada vez que me miran- Dijo Goten besando la frente de la Breifs
-Mis ojos? Pero son normales!- Afirmó ella
-¿Normales? Jajaja por dios mi amor tus ojos son mas azules que el cielo, pero más bellos que el mar- Dijo antes de unir su amor con un apasionado beso
**Fin del Flash Back**
-Go… Goten, haz vuelto- Dijo Bra abrazando aquella pequeña carta mientras una lágrima escurría por su mejilla- Sabía que eras tú
Bra tenía que contarle sobre aquella carta a Marron y a Ubb, sentía mil emociones recorriendo su cuerpo, sentía mucha felicidad al saber que el estaba bien, pero recordaba todas esas noches tan dolorosas en las que sufrió por su partida y la ponían melancólica, salió directo hasta el patio, ahí estaban sus dos amigos, sentados en el pasto, la joven Breifs se acercó y se sentó delante de ellos, pudo ver en sus ojos una mirada confusa, nadie hablaba los tres tenían algunas dudas.
-No saben lo que me acaba de pasar- Dijo finalmente Bra
-Bra necesitamos decirte algo- Dijo Ubb
-Es mejor que te lo digamos ahora, de todos modos te vas a enterar, mira lo que pasa es que…
-Hola, veo que aún siguen siendo amigos- Dijo un joven con una voz fría
Los tres jóvenes voltearon en dirección y ahí fue cuando el corazón de Bra se aceleró más que nunca, su sangre se fue directo a su cabeza sus ojos se inundaron de largimas de un momento a otro, no sabía exactamente lo que sentía pero, jamás se había sentido así, quería correr y abrazarlo, y una parte de ella quería abofetearlo, era el, era su Goten…
-Goten?- Preguntó Bra
-Valla, veo que aún me recuerdas Bura Breifs, creí que a este momento deberías odiarme- Dijo Goten en un tono arrogante
-Vete de aquí Goten, no quiero que vengas a ilusionar Bra- menciono Ubb
-Por favor Ubb Bra ya es parte de mi pasado y yo del suyo verdad Breifs?-
Goten dijo aquella frase tan fuerte que sintió como su corazón se partió en mil pedazitos aun no se explicaba nada, si Goten ya no quería saber de ella ¿Por qué le dejo aquella nota en su casillero? ¿Por qué viene a avergonzarla y hacerla sentir mal? Bra lo fulminó con la mirada, lo miró a los ojos directamente, aquellos ojos negros no eran los de su Goten, aquellos ojos negros estaban llenos de dolor, de enojo, de algo que no era el Goten que Bra conocía.
