Los personajes le pertenecen a la escritora Stephenie Meyer, lo único que es mío es la historia.
Summary: La tentación ínsita al pecado, una lección que Alice aprendió de mala manera, al sentirse sola por los descuidos de Jasper, decide buscar por otros lados lo que en casa no encontraba. Sin pensar que aquello le quitaría lo que más ama en la vida.
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_=:PECADO:=_
Las velas estaban encendidas y la cena casi lista, lo único que faltaba era que mi esposo llegara. Ya había pasado mucho tiempo desde que tuvimos una cena nosotros dos solos, pues ultimadamente era yo sola la que cenaba, al principio no me quejaba pues al ser esposa de un medico cirujano tenia que ser razonable… es su trabajo.
Pero despues de casi dos meses cualquiera se sacaría de quicio. Por eso lo hice prometer que hoy se tomaría la mitad del día libre y estaría conmigo, pero fiel a su costumbre me llamo para decirme… no, para prometerme que estaría a tiempo para la cena puesto que tuvo una cirugía de emergencia.
7:00 de la noche, no tardaría en llegar…
La última vela termino de derretirse y se apago, mire el reloj como por decima vez: 11:00 pm. Jasper había roto su promesa, tome toda la maldita cena junto a las velas, importándome un pepino si se quemaba algo o no, y las lance a una bolsa de basura. Lamentaba mucho tirar la comida, pues había mucha gente que mataría por comer aunque sea un pedazo de pan, pero estaba tan enojada que en ese momento me importo un reverendo comino lo que hacía.
Salí por la puerta trasera para tirar todo al bote, abrí la tapadera y lance la bolsa. Me recargue en el evitando que las lagrimas salieran de mis ojos.
Jasper me había fallado…otra vez.
-¿Alice estas bien?- alce la vista para ver a Peter mi vecino quien se encontraba sentado en una mecedora en el pórtico de su casa- Te noto algo alterada.
-Estoy bien Peter, no te preocupes.- cerré de nuevo el bote- Veo que regresaste de China
Peter era un arqueólogo graduado de Harvard, había hecho un doctorado y ahora se dedicaba a estudiar algunas civilizaciones matriarcales en Asia.
-Fue interesante, por cierto te traje algo, espérame aquí.
Entro rápidamente a su casa, yo me quede esperando ahí. Unos minutos despues salió con una pequeña bolsa de tela con algunos símbolos bordados, era muy bonita y llamativa considerando que eso era la bolsa, no me imaginaba que había adentro.
-Toma- me la tendió- Dicen que es un amuleto para la buena suerte y que te puede proteger de todo.
Abrí la bolsita y vacié el contenido, en mi mano había un collar con un dije de piedra transparente que por dentro tenia un símbolo parecido a una pluma, le sonreí ante el detalle de verdad era un bonito gesto de su parte.
-¡Es hermoso Peter! Gracias.
-En cuanto lo vi, me acorde de ti.
-De verdad no debiste haberte molestado- le dije algo incomoda, puesto que comenzó a verme demasiado. Pero que pienso, Peter no es asi al contrario era un buen vecino, siempre que Jasper me dejaba sola él era quien me acompañaba, bueno ambos charlábamos mucho con una cerca en medio de nosotros.
-Debió costarme mucho.
-No mucho, pues me lo regalaron.
-Entonces no puedo aceptarlo- se lo tendí- Si fue un regalo para ti…
-Pero a ti se te vería mejor- me interrumpió- A ver déjame ponértelo- me lo quito de las manos y me hizo que me volteara, justo cuando sus manos me tocaron la piel de mi cuello sentí un ligero escalofrió- Lo siento- se disculpo- Ya esta, te lo dije se te ve mejor que a mi.
-Tienes razón- me reí con algo de nervio.
Entonces el sonido de un coche estacionarse, hizo que ambos volteáramos. Suspire, Jasper ya había llegado y sinceramente no tenia ganas de pelear con el.
-Creo que debo entrar- señale por donde iba bajando mi marido- De nuevo gracias por el regalo- le señale el collar.
-No es nada Alice, lo hice con gusto.
-Hasta mañana.
-Buenas noches.
Entre a la casa por la puerta trasera, mientras que él lo hacia por la del enfrente. Me dedique a limpiar la cocina, cosa que no era mucho esfuerzo considerando que nadie ceno esta noche, entonces la puerta de la cocina se abrió mostrando a Jasper.
-Antes que digas algo, quiero decir que lo siento mucho- yo no le hice caso y me pase de largo- Alice, déjame que te explique.
-Ya se todas tus explicaciones- le dije entrado al cuarto- Una cirugía de emergencia, un paciente delicado, lo siento olvide que era cumpleaños de un colega y fuimos a celebrarlo…ya me canse de escuchar lo mismo, asi que no te preocupes por inventar otra el resultado es el mismo, faltas a tus promesas.
-¡Pero es la verdad! Sabes que mi trabajo es importante.
-¿Más que yo?- lo encare enojada- Pues bien, no les estorbare continúen con su relación.
-Alice, sabes que no quise decir eso. Tu eres importante eres mi esposa y te amo.
-Si, me amas hasta que recibes una llamada y me dejas ahí plantada- me cruce de brazos y mire para otro lado, odiaba esto ya estaba cansada de todas las discusiones, llevábamos todo este tiempo discutiendo por su falta de interés en el matrimonio, yo siempre me tomaba tiempo para a sus reuniones, fiestas y comidas, siempre tenia tiempo hasta faltaba al trabajo para acompañarlo a cualquier lado e incluso cuando esta enfermo estoy aquí para él.- Solo hasta ahí se que me amas.
-Estas siendo ridícula, sabes que te amo pero tienes que entender que a veces surgen situaciones que no puedo controlar.
-Jasper, yo también trabajo y cada vez que tu me pides que falte, no se como pero veo la forma de hacerlo.
-Sabes perfectamente que nuestros empleos son diferentes, no compares un doctor con una encargada de boutique.
-¿Insinúas que lo que hago es ridículo?- pregunte el doble de molesta que antes
-Claro que no…
-Pues yo no tengo la culpa que no haya terminado la universidad, ¿recuerdas por que?
-No quiero hablar de ello- como siempre evadía el tema, ese era también otro motivo de nuestras peleas, desde la muerte de nuestro Damien las cosas no habían vuelto a ser lo mismo y casi estaba segura que él me culpaba por aquello- Además pudiste haber regresado a estudiar, asi que no lo tomes como pretexto.
-¡Eres imposible! Empezamos con un tema y terminamos con otro.
-Pues tú lo iniciaste, me quería disculpar y tú lo convertiste en una discusión.
-Yo no quiero tus disculpas.
-¿Entonces que quieres?- dijo molesto- ¿Quieres que deje mi trabajo, eso quieres?
-¡Demonios no! No me conviertas en la injusta en todo esto, lo único que quiero es que cumplas tus promesas… ¿Es mucho pedir?
-Sabes que es algo que no controlo.
-¿Ves? ¡Ni si quiera lo intentas!- le grite, importándome poco si los vecinos me escuchaban o no, ya no tenia sentido seguir discutiendo por lo mismo, el no quería cambiar y no podía hacer nada al respecto- Jasper solo…solo quiero dormir.
Camine hacia la cama y quite las sabanas, acomode mis almohadas antes de acostarme, apague mi lámpara y le di la espalda.
-Puedes dormir en el sillón si quieres- le dije sin mirarlo- Buenas noches.
-Buenas noches Alice.- escuche que me decía pero ignore sus palabras.
Lo único que escuche fue el sonido de sus pisadas y de la puerta siendo cerrada antes de dormir.
Los siguientes dos días no nos hablamos más que lo necesario, a pesar de que seguía enojada con el no cambiaba mi rutina de prepararle el desayuno antes de irme a trabajar. Asi era mi día: Levantarme, prepararle el desayuno, irme a trabajar, regresar a casa y dormir, asi era. Lo único que me animaba mis días era Peter, sin querer se había convertido en mi acompañante en las tardes, la verdad me la pasaba muy bien con él era muy divertido y siempre me sacaba una sonrisa; en ocasiones me sentaba con el en su porche y nos la pasábamos platicando la mayor parte de la tarde hasta que Jasper llegaba, despues de eso me daba una ducha y me iba a dormir.
No quería pelear más con el.
-Te noto distraída ¿estas bien?
Me pregunto Peter, era el tercer día que no hablaba con mi marido y estaba dentro de la casa de Peter pues me había invitado a tomar un café.
-Más o menos.
-Si quieres puedes contarme, te prometo que de mis labios no saldrá nada.
No se que fue lo que me motivo a contarle, quizás el hecho de sentirme especial y única por un momento asi que comencé a relatarle como habían sido los últimos meses con Jasper, como al principio era miel sobre hojuelas y ahora ya no era lo mismo. Peter solamente me miro y asentía a cada momento, pero nunca me juzgo.
-¡Vaya! No pensé que fueran asi las cosas.
-Creo que necesito algo más fuerte que una tasa de café.- el entendió en seguida, fue a su alacena y saco una botella de vino, tomo dos copas y me tendió una sirviéndome vino- Gracias.
-De nada- se sirvió él y dejo la botella en la mesa- Y si las cosas están mal, ¿Por qué no lo dejas?
-Lo eh pensado, pero no creo que sea lo mejor… quisiera intentar más.
Me bebí la copa de un trago y le pedí más, más y más… para cuando me di cuenta íbamos dos botellas de vino y yo ya me sentía mareada.
-Yo creo que mereces algo mejor- me dijo Peter volviendo a sacar el tema- Alguien quien te merezca de verdad, que nunca te deje sola y que te recuerde todos los días lo especial que eres.
-Cuando lo encuentres llámame.- le dije dándole otro sorbo a la copa
-Estoy hablando de mi, Alice- en ese momento puse toda mi atención en él- Yo podría hacerte feliz, tu mereces quien te llene de atenciones, no que te deje sola todo el día y que siempre falte a sus citas.
-¿Tu? No lo había pensado, pero no.
Peter se levanto de su banquillo y se acerco a mi, yo tratando de enfocar mis sentidos en la situación me le quede viendo, entonces él me tomo de la cintura y estampo sus labios con los míos, los besos de Peter eran muy diferentes a los de Jasper, los de él eran hambrientos con pasión y calor, los de Jasper eran tiernos y dulces… ¡Jasper! Reaccione a tiempo, empuje a Peter con todas mis fuerzas.
-No puedo hacerlo- dije alejándome de él.
-¿Por que?
-Jasper es mi marido, aunque sea un idiota no puedo hacerle esto.- le dije levantándome de mi banco- Debo irme.
Camine hacia la puerta sintiendo a Peter detrás de mi, sentí como me tomaba del brazo y me acercaba a él.
-Cuando te canses de ser ignorada búscame.- me dijo antes de volverá besarme.
Yo asentí sin entender mucho, me fui derechito a mi cuarto para poder bañarme y quitarme esta sensación de mareo que tenia. Me tome un café muy cargado para quitarme lo borracha, por que si, estaba borracha, deje mi tasa en el lavadero y me recargue en él.
-¿Qué estoy haciendo?
La puerta de la casa se abrió y yo salte por la impresión, escuche a Jasper llamarme, a duras penas salí de la cocina para encontrarme con él.
-¿Qué pasa?
-Debo decirte algo- me quede esperando que continuara- Esto es algo de improviso…
-Ya se, ya se- lo interrumpí, de nuevo lo mismo- Tienes que salir de viaje, no se a donde con no se quien ¿me equivoco?- dije de manera aburrida- Tu maleta ya sabes donde esta y tu trajes y batas están limpias y planchadas en el ropero.- le dije mientras caminaba hacía la sala, puesto que como él se iría no tendría mucho que hacer, más que ponerme a pensar en que haría mañana en la boutique.
-¿Eso es todo?
-¿De que hablas?- me detuve para preguntar.
-No me dirás otra cosa, me iré mañana por una semana.
-¡Oh si! Buen viaje- me deje caer en el sillón y encendí la televisión. Lo que siguió me tomo de sorpresa, Jasper se plantó frente a mi yo me hice a un lado para ver la televisión, lo que provoco que me quitara el control y apagara la tele- ¡Oye!
-¿Qué te pasa Alice? Has estado muy extraña estos días, ya no me hablas al trabajo me ignoras cuando llego y ahora parece como si te importara poco que me fuera.
-¡Por el amor de dios! ¡Nunca te hago feliz con lo que hago!- me levante- Si me preocupo mucho me dices que soy una ridícula, sino lo hago te molestas por que dices que me importa poco ¿Qué quieres que haga?
-Que seas la misma de antes. Aquella Alice de la que me enamore, esa que siempre estaba alegre y con tanta energía.
-¿De que sirve si no lo notas?
-Si lo noto Alice, lo hago.
-Estos días no lo eh visto- dije muy despacio y no estaba segura si me había escuchado, pero creo que no por que se dio la vuelta y subió por las escaleras.
Volví a suspirar, cosa que hacía muy a menudo, y me concentre en la televisión. Asi pase la tarde, ahora no podía ir a hablar con Peter para entretenerme pues Jasper estaba en casa, cuando cayo la noche me levante del sofá y me fui directo a la recamara; Jasper estaba acostado leyendo un libro, me pase de largo y entre al baño para poder cambiarme. Cuando salí Jasper ni se inmuto, no me sorprendía el casi no me hacía caso ultimadamente, lo único que hice fue quitar las sabanas de mi lado y me recosté dándole la espalda. Sentí como se movía, pero no le puse atención.
Solamente el clic de el interruptor de la lámpara y silencio.
-¿Alice?- sentí como me movía el brazo- Ya me voy.
-Aja…- conteste, pero no me levante
-Llegare en un par de días- seguí sin moverme- Alice, por favor voltea.- con mucho esfuerzo, no físico más bien mental, me voltee él ya estaba bien vestido, se veía muy guapo eso nunca lo negaría- Te veo en dos días, te juro que te lo compensare… todo.
-Si Jasper, como digas
-Por favor confía en mí- por el tono en que lo dijo supe que de verdad quería hacer el intento, asi que asentí y le sonreí.
-Te preparare tu platillo favorito- me voltee completamente.
-Yo llegare hambriento- se inclino para poder besarme- Te amo Alice.
-Yo también Jasper.
-Descansa- me dio otro beso en la frente, tomo su maleta y salió de la casa.
Me volví a dormir con la esperanza de que esta vez el cumpliera su promesa y que volviéramos a ser lo que éramos antes de que nuestro hijo muriera.
2 días despues
De nuevo todo estaba listo, saque del horno la lasaña de carnes frías que tanto me había esforzado por prepárale, las copas ya estaban en la mesa, mire el reloj eran apenas las 7:00 el vuelo de Jasper llegaba a las 7:00 o sea que llegaría a casa a las 7:30 como máximo. Subí a la recamara para cambiarme y que me viera bonita cuando llegara, estaba muy emocionada por esta noche… quizás solo quizás volveríamos a hacer el amor, lo extrañaba demasiado.
8:00 pm
8:30 pm
9:00 pm
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11:00 pm
Mire la cena fría de nuevo, esta ves no me moleste en recogerla o tirarla, las ratas o las cucarachas se encargarían de eso. Me senté en el sillón, esperando a que tan siquiera el llamara para darme otra de sus escusas pero paso otra media hora y nunca llamo.
-¡Estoy harta!- grite lanzando el primer objeto que tenia en la mano contra la pared- ¡Ya no lo aguanto!
Odiaba esto, odiaba ser siempre lo segundo en la vida de Jasper, odiaba sentirme sola… lo odiaba a él por no amarme tanto como el dice que lo hace…
-Estoy hablando de mi, Alice- en ese momento puse toda mi atención en él- Yo podría hacerte feliz, tu mereces quien te llene de atenciones, no que te deje sola todo el día y que siempre falte a sus citas.
Peter
-Cuando te canses de ser ignorada búscame.
Estaba cansada.
Al de verdad le importaba, el siempre estaba conmigo cuando él me dejaba sola ahora el era mi consuelo, mi amigo… mi amante…
Me levante de mi sofá y camine hacia la puerta trasera de la casa, abrí la cerca y me dirigí a la puerta de Peter, toque muy fuerte escuche unos pasos por dentro y la puerta abrirse. Peter al verme sonrió pero no tenia tiempo para eso, sin pensarlo me lance a sus brazos y lo bese, el me metió adentro de su casa y me respondió el beso, comenzó acariciarme los brazos, la cintura y mi rostro, yo gemía por cada una de sus caricias pero no me quería quedar atrás, comencé a acariciarle su duro pecho de arqueólogo, levante su playera y acaricie su esculpido abdomen. Me deje caer sobre su sofá pero sin dejar de besarme. La ropa comenzó a estorbarme, le quite su playera de un solo tajo, el hizo lo mismo con mi blusa dejándome expuesta ante él.
-Eres hermosa Alice- no quería que hablara, necesitaba sentirme querida, importante no solo un mueble más en una casa.
-No hables- lo atraje hacía mi para volver a besarlo- Solo quiero que me hagas sentir amada.
-Te hare el amor Alice, jamás volverás a sentirte de esa manera.
Me tomo en brazos y me llevo a su habitación, ahí tomo mis labios de nuevo mientras me recostaba en su cama, termine de desnudarme y Peter hizo lo mismo, me quede quieta contemplando su cuerpo, acaricie todo su pecho y abdomen de nuevo el soltaba pequeños gemidos a cada caricia mía eso me hizo sentir bien, poderosa y amada, me levante para obligarlo a quedar debajo de mi, estampe mi labios de nuevo sobre los de él. Las manos de Peter no se quedaban atrás, me acaricio mis pechos y me trasero provocando que me sintiera más húmeda, tome la mano de Peter y la acerque a mi intimidad, comenzó a acariciar mi pliegues haciéndome estremecer introdujo un par de dedos y comenzó a bombear.
-¡Oh!- gemí
-¿Te gusta?- no encontraba mi voz asi que asentí- Te daré algo que te gustara más.
Me tomo de las caderas y me penetro de un solo golpe, la sensación fue placentera. Comenzó a embestirme muy fuerte, yo gemía cada vez más y más, el placer que estaba sintiendo era increíble, Peter me coloco debajo de el para poder embestirme más fuerte.
-¡Más Peter!- grite
-¿Asi Alice?- pregunto mientras se movía más rápido, unas embestidas más y sentí un remolino en mi vientre, mis paredes se apretaron contra su miembro logrando asi mi orgasmo, unas embestidas más y él alcanzo su liberación.
Mire al techo, Peter ya estaba durmiendo. Fue en este momento cuando el arrepentimiento llego, ¿Qué había hecho? Le fui infiel a Jasper, no importaba cuan olvidada me tenia el jamás me había hecho nada parecido, siempre se preocupaba por darme lo mejor ¿y yo como le pagaba?
Me levante muy despacio para no despertarlo, tome mi ropa regada por el cuarto, en el escritorio de Peter había papel y lápiz, lo tome y le escribí una nota:
Siento dejarte de esta manera, pero esto no debió suceder fue un momento de debilidad y desesperación mía por querer sentirme querida por alguien, pero estuvo mal, te rugo… no, te pido que nunca hables de esto por favor, que yo no lo hare, lo mejor será no volver a vernos.
Gracias por acompañarme cuando estuve sola.
Alice
Deje la nota en un lugar donde pudiera verla y salí de ahí.
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Dos días más pasaron cuando Jasper llego, esta vez no estaba molesta más bien arrepentida, de alguna forma tenia que decirle lo que había pasado y afrontar las consecuencias, no supe de Peter en estos días y lo agradecía, tampoco tenia cara para verlo a él también. La puerta se abrió y Jasper entro, yo estaba en frente de la puerta esperándolo.
-¡Alice!- dejo sus maletas a la lado y corrió abrazarme- ¡Lo siento tanto amor! De verdad, quise llegar pero… dios, ya no tengo más escusas, perdóname se que de nuevo te decepcione.
El se preocupaba por mi, era una persona terrible, el no debía pedirme perdón en nada. Mir ojos comenzaron a aguarse, por que me sentía como una porquería.
-No llores amor por favor, te amo y no me gusta verte llorar.
-¡Jasper yo…!
-No digas nada, siento mucho dejarte tanto tiempo pero no volverá a pasar… eh pedido unas vacaciones, nos iremos solo tú y yo por dos meses a donde quieras.
-No…
Pero no me dejo hablar por que sus labios se apoderaron de los míos, yo me deje llevar por que realmente necesitaba esto, pues seria la última vez que Jasper y yo haríamos el amor…
Me levante en cuanto Jaspe se fue a dejar los documentos para poder irnos de vacaciones, en dos días según el, guarde todas mis cosas en las maletas y las subí a mi camioneta. Hoy era el día en que me iría de aquí, le contaría la verdad a Jasper y me iría. Deje una maleta en la entrada para que fuera una manera de romper el hielo, estuve esperando a Jasper sentada en las escaleras, una media hora despues la puerta se abrió y mi corazón se rompió.
-¿Alice?- respire tres veces antes de levantarme y enfrentarlo- ¿Y esa maleta?
-Jasper yo…- me retorcí las manos, estaba muy nerviosa- Tengo algo muy importante que decirte.
-¿Qué pasa?
-Esto es muy difícil- tenia que ser rápida, quitar la banda de la herida de un jalón- Yo hice algo malo.- que manera tan estúpida de comenzar pero ya era algo
-¿Malo? Asesinaste a alguien en mi ausencia ¿por eso huyes?- dijo con humor, pero al ver mi rostro lo dejo a un lado.
Entonces decidi que esa no era la mejor manera de comenzar.
-Tú me dejabas sola mucho tiempo, te necesitaba pero tú no estabas…
-¿De que estas hablando?
-Hace dos días yo estaba muy molesta por que me había roto tu promesa.
-Hubo una emergencia, te lo dije, no fue cosa mía- ahora sonaba mas molesto, seguramente ya intuía lo que le iba a decir.
-Pero aun asi me sentía dolida, tu no me llamaste y pensé que otra vez te había importado poco que yo te estuviera esperando, ese día me cegué por el dolor y cometí el peor pecado que puede hacerle una mujer a su marido.
-Alice te refieres a…
-Si Jasper, me acote con otro hombre- solté por fin, Jasper me miraba todo rastro del hombre que ame se había ido ahora estaba distorsionado por el dolor y la ira.- Lo siento mucho, se que no es una escusa, pero de verdad estoy arrepentida…
-¡Pues deberías estarlo!- se acerco a mí y me tomo por los hombros- ¿Cómo pudiste? ¿Desde cuando te estas burlando de mi?
-Solo fue una vez.
-¿Y quiere que me crea eso? Mientras que yo me mato trabajando para darte lo mejor, tú te largas a revolcarte con otro.
-¡Me sentía abandonada por ti!- me solté de su agarre- Se lo que hice no tiene nombre, pero tampoco te voy a reprochar nada, es por eso que me iré de aquí.
-¿Qué?
-No quiero que tengas que vivir conmigo o que tú te vayas, esta es tu casa asi que la que se va soy yo.
-Claro, con tu amante…- sus palabras me dolieron, pero tenía razón en pensar esas cosas.
-No, me iré yo sola- sentí como mis lagrimas salían de mis ojos- Nunca más volverás a saber de mi, solo te pido que alguna vez puedas perdonarme.
Me acerque a la maleta y la tome, mire de nuevo a Jasper que me miraba pero ahora se veía diferente.
-Si quieres el divorcio solo tienes que mandarme los papeles y los firmare sin pedirte nada, en nos días mandare a mi abogado.- tome el pomo de la puerta- Adiós Jasper.
Casi corriendo llegue a mi camioneta, lance la maleta en el asiento del copiloto y corrí hacia el otro lado y me fui de ahí, dejando mi vida con el hombre que amaba.
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-¿Alice?- escuche la voz de Rose del otro lado- Debes salir.
Ignore sus intentos por sacarme de mi recamara, la cual era mi refugio desde hace 3 semanas que llegue a casa de mi mejor amiga Rosalie, la cual le conté lo que había hecho y aunque no me juzgo tampoco le pareció lo que hice, de todas formas me dio posada en su casa en lo que yo encontraba algo para mi. No me sentía con ánimos de salir asi que solo me quedaba aquí.
-¡Alice! maldita sea, si no sales te voy a sacar- ignore de nuevo su comentario- ¡Bien, te lo advertí! ¡Emmett!
De la nada la puerta salió disparada sacándome un buen susto.
-¿Qué te pasa?- exigí- Quiero estar sola.
-Gracias Emmett- le dijo ella a su novio- Ahora solo déjanos un momento a solas.
-Te veo al rato nena- le dio un pequeño beso antes de irse
-Ahora me puedes decir cuanto tiempo piensas quedarte encerrada- me regaño- No has ido a la boutique en días, se que eres la dueña pero debes pararte por ahí de ves en cuando.
-No quiero salir, no me siento bien- y era verdad hace dos días comencé a sentirme mal, pero lo relacionaba con el estrés del momento, además me merecía cada uno de los males que tuviera.
-Y menos te sentirás mejor quedándote aquí.
-De verdad Rose, no me siento…
Otro enorme mareo me dio y tuve que salir corriendo hacia el baño, vomite todo lo que no había comido, me levante muy rápido por eso el mareo se me hizo mas intenso. Me agarre del lavabo mientras recuperaba la compostura, sentí a Rose detrás de mi, me lave la cara y la boca para quitarme el mal sabor. Busque entre mis cajones el enjuague bucal, entonces algo llamo mi atención.
Tome el paquete de toallas sanitarias, lo mire por un momento y comencé a hacer cuentas.
Llevaba 19 días de retraso.
-Es imposible
-¿Alice, que sucede?
-Tengo un retraso.- respondí- llevo más de dos semanas de retraso.
-¿Quieres decir que…?
-Podría estar embarazada- termine por ella
-Espera aquí- Rosalie salió del baño, yo me senté en la taza del baño asimilando todo, si mis cuentas no me fallaban fue en los días en que Jasper se fue y yo estuve con Peter, ¿podría ser el padre? Pero también recordé que dos días despues estuve con Jasper, dios mío, no tenía idea de quien era el padre de mi hijo- Aquí esta- ella me tendió una cajita.
-¿Qué es eso?
-Una prueba de embarazo, asi sabremos si estas embarazada o no.
Tome la caja y saque el aparatito, seguí las instrucciones al pie de la letra. La caja decía que tenia que esperar 5 minutos, mientras esperaba no dejaba de moverme de aquí para haya, estaba muy nerviosa por los resultados.
-Deja de moverte, me estas mareando.
-Estoy nerviosa Rose, que tal si resulta positiva.
-¿Qué piensas hacer?
-Quedármelo es obvio, es mi hijo de todas formas.
-Alice- fije mi atención en ella- ¿Quién el padre?
Iba a responder cuando mi reloj sonó, anunciando que habían pasado los 5 minutos. Me acerque a la prueba como si fuera un bomba a punto de explotar, tome el aparato y vi el resultado.
Positivo
-¿Alice?- escuche la voz lejana de Rose.
En verdad estaba embarazada, ¿pero de quien era el bebé? De Jasper o de Peter.
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¿Qué les pareció? Espero que les haya gustado, sinceramente esta idea se me ocurrió cuando una chica me menciono en un review, que como seria si Alice le fuera infiel a Jasper, entonces comencé pensar en la historia. Se que quedo algo abierto el final, ahí queda de ustedes de quien quiera que sea el bebé, pues no se si la vaya a continuar por que tengo mucha tarea y presión.
Espero que puedan entenderme, si cuando lleguen las vacaciones de semana santa se me vienen más ideas la seguiré, si no se quedara asi.
¿Comentarios?
Paulinita Rathbone