Réquiem para un corazón

By AngelYanu

Todos los personajes de este fic pertenecen a Clamp como así también la historia original de CCS, este es un modo de entretención sin fines de lucro y sin mayor restricción de edad salvo por la trama de la historia. Todos los demás personajes "extras" son de mi autoría. (Universo alterno)

Summary: perdido en las sombras de una mentira, en un trabajo agobiante y lleno de atrocidades, ella era su ángel la luz de cada mañana. Pero su corazón tendría Réquiem después de tanta muerte… un asesino puede ser salvado por el más divino ángel sobre la tierra.

"Bienvenidos nuevamente, gracias por tomarse el tiempo para disfrutar de mi fic y por darme la oportunidad de entretenerlo por un rato. Soy Angelyanu habitué de esta página y con algunos fic publicados en mi haber. Como se imaginarán muchos de mis fic no los he podido terminar por cuestiones de tiempo, pero aprovechando las vacaciones quiero presentarles este nuevo trabajo, el cual por supuesto está finalizado. Esta vez les traigo a usted una historia de asesinos y misterio, que encierra la inestabilidad emocional de las personas y como el amor puede hacer que un corazón reaccione en el momento preciso; este fic combina escenas de acción, asesinatos, una turbia compañía de asesinos a sueldo una dulce mujer, que ha perdido su memoria casi por completo, una compañía rival y todo un enrejado de relaciones plagadas de secretos y silencios comprados.

Espero sea de su agrado y me acompañen a lo largo del desarrollo de la misma con su Reviwers para saber su opinión la cual es muy importante. Espero tener noticias pronto, me despido agradeciéndoles la oportunidad de mostrarles mi fic. Muchas gracias.

Angelyanu"

ooOOoo

Capitulo 1: viendo más allá del horizonte.

Era temprano en la mañana el sol iluminaba la mitad de la acera y el árbol más cercano empezaba a mostrar su sombra. La brisa suave y fresca del invierno, convertía a aquel pequeño patio en un lugar muy apetecible para estar tras una larga noche de guardia. O al menos eso pensaba una rubia de cabellos ondulados y pequeños buques que caminaba cansada hacía el vestuarios, para poder tomar una ducha y salir de su turno, una noche sin duda complicada.

Suspiraba mientras se encaminaba a la pequeña habitación desabotonando su bata y sacando su estetoscopio de su cuello, sentía que todo el cuerpo le dolía y en especial su cuello, necesitaba con urgencia una vacaciones… con ese pensamiento se adentró hasta donde estaba su casillero y sonrió al ver las fotos, mientras miraba una en particular la cual miró con intensidad. Era un hombre joven de mirada tierna que le abrazaba en lo que parecía una hermosa tarde de primavera, tenía el cabello castaño oscuro corto pero algo desordenado, los ojos color miel y un cuerpo armonioso aunque claramente mucho más grande que ella.

- Shaoran… - dijo en un suspiro mientras le veía, su flamante marido, era la envidia de toda el que le veía, él era el sueño de toda mujer, atento, cariños, amable guapo, todo lo que se podría pedir de un hombre. Solo tenía algo que lo transformaba en humano, su trabajo, casi no le veía y aunque comprendía que era muy demandante ser el subdirector de la empresa de negociaciones más importante de todo oriente, a veces solo quería verle sonriendo y a su lado por más de un par de horas. Muchas le cuestionaba que no podía quejarse después de todo tenía todo lo que alguna vez soñó y más, que trabajaba por gusto y no por necesidad, pues debía reconocerlo lo que el ganaba era una suma tan importante que le permitía quedarse en casa si así lo deseara.

Sin embargo pese a todo lo perfecta que parecía su vida, ella no podía concebirla así, su marido, el exitoso negociador, trabajaba en exceso casi no dormía, muchas veces tenía trabajo peligrosos y en lugares remotos, volvía cansado y silencioso. Ella había aprendido amar esos silencios y a darle la contención que tanto necesitaba sin mencionar una palabra, pero su preocupación pese al tiempo que llevaban casados no desaparecía.

Su trabajo se había convertido en su vía de escape, mientras menos tiempo estaba en la casa mejor se sentía, pues su mente en su hermosa casa solo estaba con Shaoran y lo mucho que le extrañaba.

Suspiró cerrando su locker dejando algunas pertenencias y tomando otras, ella había elegido esa vida y sabia muy bien lo que le esperaba el día en que dio el "si". Por ello solo esperaba que shaoran volviera a casa en una pieza y esa semana mucho más que cualquiera de las anteriores.

Camino abrigándose mientras recorría el pasillo saludando de tanto en tanto a alguno de los que trabajaba allí. Esperaba poder llegar a casa y encontrarlo durmiendo, descansando o al menos recién llegando, pero tras llegar al ascensor y consular su móvil, la ilusiones se desmoronaron antes de ser construidas, no había ningún mensaje allí. Sonrió otra día sola, pero gracias al cansancio que tenía sabía que el día pasaría rápido y ella durmiendo para recupera fuerzas para ingresar al otro turno o el que le quedará más a mano a la hora en que se levantara.

Se disponía a presionar el botón del ascensor para que la llevara al estacionamiento, cuando las puertas se cerraban un fólder rojo se interpuso y no permitió que estas cerrasen del todo. Curiosa apretó para que las puertas se abrieran y sonrió al ver a la mujer que estaba tras la puerta.

- Sakura! Suerte que te encuentro, pensé que ya estaría en casa - mencionó apoyándose en la pared de ascensor intentando recuperar el aire el cual le faltaba. Ella le miró en un intento de reproche - lo sé, lo sé…. No debería correr - dijo acariciando su abultado vientre en una caricia protectora - es que quería… - sus palabras se ahogaron en un largo suspiro de dolor.

- Tomoyo por Kammi - mencionó Sakura alarmada tomándola del brazo para acompañarla hasta el suelo donde podría sentarse - ves porque no debes correr - mencionó tomando su pulso el cual no era demasiado acelerado.

Tomoyo sonrió mientras se reincorporaba lentamente - no es mi culpa es que tu sobrina ha estado muy inquieta últimamente. - Sakura sonrió algo más aliviada - de verdad no es nada he estado toda la mañana con molestias y el obstetra dijo que era normal.

Las puertas se abrieron - sabes que no es normal Tomoyo, has estado muy nerviosa desde que Eriol se marcho con Shaoran.

- ¿tu no? O es que no te has visto en un espejo - mencionó Tomoyo en voz sería - si shaoran te viera pondría el grito en el cielo - Sakura sonrió mientras se encaminaban a su auto.

- pues acabo de terminar una guardia de 48 hs Tomoyo, sé que no luzco como miss universo pero es lo mejor que puedo hacer sin dormir lo suficiente - Tomoyo negó seria mientras ambas subían al auto.

- no es a lo que me refiere, has bajado de peso Sakura, se que lo notas, estas trabajando mucho, deberías descansar - Sakura sonrió mientras recargaba la frente en el volante del automóvil.

- lo sé Tomoyo créeme que lo sé - dijo tranquila mientras cerraba los ojos - es que no me acostumbro a estar en nuestras casa sola, me es muy difícil mientras más tiempo libre tengo más me preocupa que no tener noticias de él - Tomoyo sonrió de manera comprensiva mientras le ponía una mano al hombro - sabes que no me quejo de lo que elegí porque lo amo, pero no me termino de acostumbrar a que este ausente tanto tiempo, hoy hacer 3 semanas que no se nada de él, más que lo que Hien me comenta o mejor dicho me informa a diario. - Tomoyo sonrió mientras veía a su amiga sonreía y suspirar mientras se erguía. - en fin, sé que todo estará bien, después de todo si hubiera malas noticias ya las sabría, siempre corren más rápido que las buenas. - Tomoyo sonrió pero cambio por una mueca de dolor mientras se tomaba el vientre.

- no me digas, ya lo sé debería estar en casa con todas las empleadas cuidándome como un reina - mencionó Tomoyo inclinando un poco el asiento para encontrar una posición más cómoda - pero sabes que no soy así, nunca fui una ama de casa y menos ahora que quiero estar con la mente ocupada.

- te entiendo amiga, pero debes cuidarte mucho, el bebe depende de tu salud. Tienes suerte que sea uno muy sano pero debes cuidarte - Tomoyo sonrió aún adolorida - sabes no me gusta nada ese dolor, por más que me digas que es normal - mencionó preocupada - te llevaré a casa y estaremos las dos juntas por si las dudas, estas en el 8 mes Tomoyo, todo puede pasar.

- no! - dijo decidida - esta bebe y yo esperaremos a su padre - Sakura sonrió - y no te preocupes Sakura en casa estaré bien no quiero se una molestia. - su amiga sonrió negando.

- vamos Tomoyo noche de chicas, llevamos mucho tiempo sin nuestra noche de Chicas, la pasas bien yo me quedo tranquila de que estoy ante cualquier emergencia, y además ninguna de las dos tenemos que pensar que estamos solas - Tomoyo ya más tranquila sonrió afirmando.

- de acuerdo, pero… - Tomoyo observó a su amiga tomarse las sienes con fuerza y reprimir un quejido mientras de sus ojos cerrados caían algunas lágrimas - Sakura!! - Ella le sonrió intentando calmarla mientras se erguía nuevamente en su asiento.

- no es nada - mencionó poniendo las manos en el volante y apretándole duramente mientras encendía y salía del estacionamiento, para tomar la calle que la llevaría a la autopista.

- ¿Qué sucede Sakura? - mencionó aún preocupada su amiga observando como lentamente las manos de Sakura se relajaba sobre el volante y su semblante se calmaba.

- pues no lo sé - mencionó casualmente - un dolor de cabeza, se ha repetido con más intensidad desde hace un par de semanas pero no debe ser nada grave, no me he sentido muy bien este último tiempo - Tomoyo le observó comprensiva.

- Muchas cosas Sakura, el trabajo, Shaoran y dime la verdad a ti te afectó lo que me comentaste la semana pasada - Sakura afirmó mientras sus ojos se ponía cristalinos.

- sabes que si Tomoyo, es mi ilusión, pero las razones fueron justas - mencionó Sakura sonriendo - sé que el quiere un hijo, lo siento pero también en el fondo lo dos sabíamos que por más ilusiones que no hiciéramos no era el momento adecuado. - Sakura mantuvo el silencio - volví con las pastillas - mencionó como un comentario casual para después guardar silencio prolongadamente.

Estaban llegando a la casa cuando Tomoyo decidió que era momento de romper el silencio que reinaba en ese momento - sabes Sakura hoy cuando nos encontramos en el ascensor corrí para alcanzarte no solo para que no fuésemos juntas, sino también porque tenía algo que decirte - Sakura afirmó con una dulce pero triste sonrisa, mientras afirmaba sin sacar la vista del camino - pues Eriol y yo pensamos, quien serían los mejores padrinos para nuestra hija, y sin mucho meditar nos dimos cuenta que tu y Shaoran tenía el papel perfecto - Sakura estacionó el auto mientras mantenía el silencio.

- ¿lo dices de verdad? - mencionó casi al borde de las lágrimas

- creemos que tu y Shaoran harían un trabajo maravilloso además, son para ambos lo más cercano a una familia y tu sabes que te considero mi hermana - Sakura sonrió mientras salinas lagrimas de felicidad surcaban su rostro.

- Gracias Tomoyo - dijo mientras se lanzaba a los brazos de la otro llorando de la emoción. Tomoyo le abrazo intentando calmarla pero para su sorpresa, las lágrimas que empezaron siendo de alegría terminaron llenándose de tristeza y cada vez fueron más amargas.

- Sakura - murmuró suavemente y con el corazón en vilo; por un lado sentía angustia por el estado de su amiga pero por el otro comprendía que era lo que necesitaba - déjalo salir Sakura, tienes que desahogarte - Tomoyo sabía que esas lágrimas llevaban semanas acumuladas en le pecho de su amiga.

- Como te sientes - le preguntó un hombre joven, de cabello negro y ojos azules, a otro que estaba sentado en una cama tomándose el hombro con dolor.

- bien Eriol, estoy mejor - dijo tranquilamente y con su parsimonia voz - esta sanando bastante bien, es solo que - mencionó cortando sus palabras para tomar su pecho - acabo de sentir… un opresión - mencionó calmado y masajeando su pecho intentando alivianar la sensación de angustia repentina que había caído sobre él.

- tranquilo amigo, llamaré a Tomoyo para ver si todo está bien - Shaoran afirmó agradeciendo con su mirada - aunque seguramente estarán viendo películas y llorando por los finales felices, comiendo chocolate y disfrutando de su vida de solteras por unas semanas - mencionó intentando calmar a su amigo que parecía más preocupado que de costumbre.

- espero no te equivoques Eriol - su amigo le sonrió mientras acomodaba sus lentes y daba medía vuelta no sin antes mirarlo detenidamente y sonreír.

- estas preocupado Shaoran eso es todo tranquilo todo estará bien, sabes que las malas noticias llegan primero que las buenas, si algo pasara ya lo sabríamos primero que nadie - Shaoran afirmó sonriendo - iré a hablar con ellas, en unas horas más haremos una aterrizaje para abastecernos. - Shaoran afirmó nuevamente.

Vio a su amigo salir y desde el fondo de su corazón rogó porque este no se equivocara puesto que realmente deseaba que su esposa estuviera feliz. Se recostó mirando el techo de la habitación del avión, llevaba más de tres semanas fuera de su casa y la verdad es que la extrañaba como no creyó posible, incomunicado con ella y sin posibilidad de escuchar su voz tenía que conformarse con los recuerdo de su memoria, pues siquiera fotos llevaba en su temor porque alguien descubriera que ella era su debilidad y le dañaran.

Su mente viajó al día anterior a partir para la misión: " Sakura estaba con fiebre muy alta y pese a ello estaba caminando de una lado al otro de la habitación mientras él permanecía en el marco de la habitación.

- por kammi sak tienes que guardar reposo - mencionó suavemente - tu eres la doctora de dúo deberías saberlo - dijo sonriendo intentando calmarla - sabes que no es nada serio, has pescado un resfriado no más que eso, pero si no cuidas de ti enfermarás de verdad - Sakura le sonrió con esa sonrisa que solo le dedicaba a él y le expresaba desde lo más profundo de su alma el amor que le tenía.

- tranquilo Shao es solo que no me he sentido bien últimamente - dijo nerviosa mientras se fregaba las manos con insistencia - creo que necesito… en realidad no sé lo que necesito - Shaoran sonrió mientras iba a su lado y le abrazaba protectoramente.

- ya que tu no sabes lo que necesitas, hazme caso al menos una vez toma los medicamentos que te dejó Tomoyo y recuéstate necesitas descansar, tu siempre me lo repites - Sakura sonrió - que clase de doctora eres si no le haces caso a lo que le recomiendas a tus pacientes - Sakura sonrió mientras se sentaba en la cama.

- tengo algo que decirte Shaoran - dijo seriamente su marido le miró comprensivo pero algo asustado por el tono de voz - quería decírtelo desde que volviste - de eso hacía ya 4 días, lo días en que había estado con fiebre y muy débil. Sus manos se revolvía nerviosas sobre su ropa y su labios temblaban - tuve… tuve un aborto - mencionó suavemente y rompiendo en lágrimas.

Shaoran solo atinó a abrazarla, pero ¿Cómo?, no entendía nada de lo que ella estaba diciendo, cuando había estado embarazada y porque había hecho algo así, porque había pasado eso. Le separó bruscamente de él en cuanto recordó la charla que había tenido por teléfono antes de llegar él allí.

"-Shao que pasaría si yo quedara embarazada." Mencionó suavemente y con un hilo de voz, recordaba que casi estaba a punto de llorar. "-no lo sé Sakura pero ya lo decidimos verdad y no puedes quedar embarazada cuando tomamos todas la precauciones para que no ¿Por qué me lo preguntas?" ella le había restado importancia al asunto y había continuado hablando pero mucho más apagada.

- tu estabas embarazada de otro, como pudiste - le dijo casi con odio mientras se levantaba, al decir verdad esas palabras eran obra de su confusión y no de lo que en verdad pensaba - no puede ser mió Sakura, no cuando tomamos todas las precauciones para que no sucediera, tu me has engañado. - soltó mientras se alejaba de ella, su mente iba demasiado rápido y su furia aumentaba, el solo hecho de pensar que ella podía haber estado en la manos de otro le desesperaba.

Ella se levantó y cayó de rodillas al suelo, sin embargo no intentó levantarle o socorrerla - no fue así Shaoran sabes que jamás haría algo así - mencionó rompiendo en un llanto muy profundo, sus lágrimas se convirtieron en ríos y su voz siempre firme en susurros - jamás estaría con otro hombre que no fueras tu y lo sabes - Sakura levantó sus ojos hasta encontrarse con los de él y casi le rogó - solo escúchame Shaoran solo eso después dime lo que quieras. - pese a que tenía más ganas de gritar e irse del lugar para no escucharle, sus ojos le convencieron y enternecieron se sentó con ella en el alfombrado piso y una vez a su lado afirmó."

Ella entre lágrimas había relato que tras su acuerdo de no tener hijos, había intensificado sus cuidados, pero tras sentirse muy enferma del estómago había abandonado las pastillas por unos días, días en lo que había estado en casa y como es de esperarse habían compartido más de una noche de amor. Cuando tomó la misión que le siguió a esa recordaba haber dejado a Sakura muy mal del estómago y lo que parecía ser una gripe muy grande por su debilidad.

" - cuando te fuiste llego Tomoyo yo estaba como todas las mañanas vomitando en el baño, ella entró y se preocupo me obligó hacerme unos exámenes pero como no salió nada, me obligo hacerme un test de embarazo, pues ella alegaba que cuando comenzó con su embarazo sufría de los mismo síntomas. Cuando dio positivo quería morirme, no es que no quisiera, pero tu estabas lejos, habíamos acordado esperar para tenerle y yo no había cumplido, porque estaba segura que era mi culpa por no tomar otras precauciones cuando no tome las píldoras y confiar en que el efecto residual de tanto años de ingerirlas serían suficientes. Pero me equivoque"

En ese preciso instante se sintió el hombre más estúpido y ruin sobre la tierra, había acusado a su esposa la mujer más comprensiva y fiel del mundo de ser una cualquiera. Pero toda la furia que sintió en ese momento se trasformó en tristeza al escucharle contar como había perdido a su bebe, a su hijo.

" - el médico me aseguro que yo no tenía que ver en eso, que el feto no estaba en el lugar indicado y había sido un aborto natural, que sucedía bastante seguido en las madre jóvenes."

Pese a su parsimonia al contarlo sus ojos eran ríos de lágrimas y su voz temblaba como todo su cuerpo. Había tenido una hemorragia en medio de su guardia semanal de 48 hs y había perdido el conocimiento. Pese a lo que el doctor le repitió una y otra vez ella se sentía culpable, porque pese a conocer su estado en un intento por despejar su mente había ido a trabajar con normalidad pese a que no se sentía bien y tenía algunos dolores en la parte baja de su espalda.

Recordaba haberle visto llorar por horas y él intentando calmarla, había sido algo desafortunado, pues pese a su acuerdo si ella no hubiese perdido el bebe sería el hombre más feliz sobre la tierra. Las lágrimas brotaban nuevamente de sus ojos, pensando que tal vez su última oportunidad de tener un hijo se había ido y para como de males, había sido tan severo con ella que había enfermado por el miedo a no decirle que había tenido un aborto, pues pensaba que reaccionaría como reaccionó, como un estúpido, pensó con odio.

- Sakura no sé que hacer con un hombre como yo - mencionó en susurros en medio de la oscuridad… quería verle para pasar tiempo con ella y consolarla por todo el tiempo que no había estado a su lado, en lo que seguramente habían sido semanas duras para ella. En realidad tan duras como para él.

- lo siento mucho Tomoyo - mencionó Sakura secando los restos de lágrimas con sus manos mientras ingresaban a la casa - se supone que yo debía cuidar de ti, no tu de mi - mencionó suavemente - supongo que me diste el pie para desahogarte.

- no es nada esta bien que te desahogues de vez en cuando - dijo con suavidad abrazándole, Sakura respondió el abrazo aún angustiada por todo lo sucedido - porque no tomas un baño, mientras tu sobrina y yo atacamos tu heladera, y preparamos algo delicioso para desayunar ¿Qué me dices? - Sakura afirmó una vez más abrazándole estrechamente y agradeciéndole - no es nada Sakura - mencionó sacando algunas lágrimas con sus manos, Sakura le miró extrañada a lo que ella sonrió - tranquila son las hormonas Sakura, no es nada - Sakura afirmó mientras sonreía y salía en dirección al baño.

- Muy bien cielo - mencionó Tomoyo hablando a su vientre - tía Sakura debe tener algo delicioso para comer vamos a ver. Mencionó encaminándose a la cocina. Cuando estaban mirando al interior de la alacena más pequeña su móvil sonó con insistencia. Al ver el visor sonrió casi al punto de las lágrimas poniendo el manos libres en su oído y tomando el teléfono para ver a quien amaba.

-Hola preciosura - mencionó Eriol observando el radiante pero emocionado rostro de su esposa, lo que provocó una sonrisa de ternura - como están los dos tesoros de mi vida - mencionó suavemente y sonriendo al ver a su esposa sonreírle - ¿me extrañan? -

- Claro que si ambas te extrañamos mucho - dijo casi emocionada, Eriol sonrió a lo que su esposa volvió a sonreír mientras secaba las lágrimas de sus ojos - estamos bien tranquilo, son nuestras hormonas - Eriol sonrió.

- yo también les extraño, ¿Cómo ha estado tu día? - Eriol sonría al ver a su esposa tenía mucha ganas de estar junto a ella y abrazarle.

- tranquilo fuimos a trabajar hicimos jornada completa, para cuidar de Sakura y ahora estamos con ella en su casa, por ver unas películas y aprovechar el medio día, después obviamente hacerla que duerma porque lleva 3 días sin dormir - mencionó Tomoyo con vos preocupada - dime que tienes a Shaoran contigo - Eriol sonrió.

- si todavía había cosas que terminar pero le he convencido para que vuelva conmigo, lleva 3 semanas fuera de la casa, y la verdad que lo noté bastante deprimido, con todo el tema este de la seguridad de Sakura no ha querido siquiera hablar con ella para que no le relacionen - ambos sonrieron, Shaoran era una hombre extraño y distante pero para Sakura era el hombre más dulce y protector que existiese, ambos sabía que él sacrificaría todo por verle bien. - es más iba a llamar en cuanto aterrizáramos para cargar combustible, pero Shaoran tuvo un mal presentimiento, Sakura está bien - el rostro de su mujer se entristeció - ¿que paso? - mencionó Eriol comenzando a alarmarse.

- por suerte nada grabe, solo que Sakura estuvo llorando por más de 30 minutos, estaba realmente angustiada, se ha guardado mucho- mencionó suavemente - ella es un mujer fuerte pero se ha quebrado, las cosas que sucedieron a principio de mes le han dejado más que angustiada. Sin Shaoran a su lado, no tienen con quien desahogarte, está muy deprimida. - Eriol sonrió amablemente viendo a su esposa, trasmitiendo con su mirada más que lo que podría haber dicho.

-ha sido unas semanas complicadas, amor, Shaoran fue herido - el rostro de Tomoyo paso a uno de profunda preocupación - nada del todo serio, según él rasguños, está casi recuperado. Shaoran ha estado casi ausente la mayoría del tiempo, sé que algo le preocupa - su esposa le miró comprensiva y sonrió algo entristecida.

- tu sabes lo que significaba para Shaoran haber perdido un hijo, y lo peor no ser capaz de darle lugar a Sakura para que se lo dijera en el momento. Solo lo supo porque ella enfermó; sabes que para él ese es lo peor que le podría haber sucedido. - Eriol suspiró sonriendo y agachando su mirada.

- es verdad cielo, tu tienes ese don de ver las cosas. Solo espero que ambos se reencuentren pasen tiempo juntos, sino alguno de los dos va a terminar cediendo y sabes que no se podrá culpar a nadie. - Tomoyo afirmó - por casualidad Sakura no está desconfiando de Shaoran, conozco que hay varios que quisieran verles separados y no dudaran en calumniar a Shaoran si es necesario.

- lo han hecho como cada vez que Shaoran se ausenta, pero Sakura se ha transformado en un experta a la hora de desacreditar rumores. Sé que algo le esta sucediendo, algo más que la angustia que se sufre por lo que le sucedió, pero creo que está mucho más alejado de ese tema de lo que pensamos. Sakura confía ciegamente en Shaoran. - Tomoyo le sonrió mientras miraba a su esposo tranquilamente.

- tranquila amor todo va a estar bien, probablemente no se nada. Solo que es la primera vez que ambos se separan por tanto tiempo - mencionó tratando de sonar convencido Eriol - sabes como son cuando se vean de nuevo, recuperarán energías. Sabes que cuando ambos se encuentran el mundo desaparece para ambos - los dos sonrieron sabían que sus amigos eran así.

Tomoyo disfrazó una mueca de dolor con una sonrisa, pero no fue suficiente para engañar a su esposo que le miró alarmado - tranquilo Eriol, nuestra pequeña ha estado algo inquieta, un par de dolores para mi y una preocupación de Sakura, pero el médico me ha dicho que es normal que la pequeña se está acomodando. - Eriol le miró con preocupación. - tranquilo ya te lo he dicho ambas hemos decidido esperar a que tu vuelvas - Eriol sonrió abiertamente.

- solo prométeme que te cuidarás mucho Tomy, no quiero que a ninguna de mis dos ángeles les pase algo, estás en el ante último mes, debes cuidarte más o ¿no? - Tomoyo simplemente le sonrió.

- sospecho que has hablado con Sakura, Eriol - dijo en un enfado fingido adornado por una sonrisa - pero tranquilo está cumpliendo su labor, no se ha despegado de mi lado desde que tu te fuiste, es más hoy voy a estar aquí porque ella no quiere despegarse - Eriol sonrió dulcemente por el enfado de su esposa.

- no le he dicho nada, pero no esperaba menos de ella. Por favor se obediente Tomoyo, si no estoy ahí por favor no ignores las indicaciones de Sakura, prefiero no ver nacer a mi hija a que algo les suceda. - Tomoyo sonrió al borde de las lágrimas - por favor Tomy no llores - mencionó con dulzura.

- lo siento amor, es que son las hormonas, ya no puedo controlarme - mencionó escurriendo las lágrimas con sus manos y sonriéndole - no es nada, es otra de mi facetas de mujer maniática-embarazada - completó con gracia robando una sonrisa sincera y feliz de su esposo.

- lo sé, eres mi maniática preferida - Tomoyo sonrió - bueno debo dejarte cielo, falta poco para que aterricemos para abastecernos, y quiero ir ha ver como sigue Shaoran, porque sé que le está restando importancia a sus heridas pero no quiero que Sakura me mate por traerlo en parte - Tomoyo sonrió.

- puedes traerlo como quieras, mientras ambos aparezcan aquí. - Eriol afirmó mientras le dedicaba una sonrisa cargada de amor. - nos veremos en la noche verdad - él volvió a afirmar. - no puedes llegar antes ¿verdad? -mencionó Tomoyo casi en un gesto infantil.

- haré lo que pueda Tomy te lo prometo - volvió a sonreír - te amo, lo sabes, prométeme que ambas se cuidarán - Tomoyo sonrió - nos vemos amor, no me extrañes demasiado.

- nos veremos Eriol, vuelve lo más pronto que puedas que te extrañamos mucho y asegúrate de no volver solo, por favor no creo que Sakura resista mucho. - Eriol afirmó decidido - te amo - mencionó mientras la comunicación se cortaba. Tomoyo suspiró mientras se encaminaba nuevamente a la heladera y sonrió suspirando - creo que te vas ha enamorar de tu padre tanto como yo, mi pequeña - soltó hablando con su hija, como lo hacía prácticamente del momento que supo que la esperaba. - es un hombre tan singular.

Pronto unos pasos hicieron que se volteara, para encontrar a su mejor amiga ataviada con unos jeans claros, con una polera alta negra y un suéter de color verde oscuro de medio hombro.

- te ves mucho mejor - mencionó Tomoyo sonriéndole mientras volvía la vista a la heladera - pero ¿Cómo te sientes? - Sakura sonrió tomando asiento en la barra de la cocina.

- Pues mejor tomy a decir verdad tú tenías razón necesitaba desahogarme, pero es que últimamente me cuesta mucho. - Tomoyo sonrió mientras aparecía frente a ella, con dos vasos de leche y un plato repleto de galletas que Sakura había cocinado.

- lo sé Sakura - mencionó suavemente - debes en cuando debes dejar de ser la súper mujer, para se solo Sakura y permitirte llorar, angustiarte y gritar de enojo si lo sientes, las cosas que han pasado no han sido situaciones cotidianas -mencionó con suavidad sabiendo que su amiga había entendido el mensaje al ver su mano en el vientre - estoy casi segura que por no poner mal a Shaoran y dejarlo tranquilo no te has desahogado como debías, solo has aumentado el tiempo de trabajo y pretendes estar todo el tiempo ocupada para pensar lo menos posible - Sakura le miró sorprendida - que no te regañe no quiere decir que no lo vea Sakura - ella sonrió con dulzura - eres una mujer extraordinaria amiga, pero debes reconocer que tu cabeza y corazón están angustiados y sé que mucha gente esta inventando cosas sobre la ausencia de Shaoran, y no es fácil de acallar a los fantasmas del " engaño" cuando estos aparecen.

- no voy a negarte que sabes leerme como un libro abierto, todo lo que has dicho sucedió y sucede - mencionó Sakura desplomándoos en el sillón. - han sido semanas pesadas, pero solo quiero que Shaoran vuelva el no poder escucharle en 3 largas semanas ha sido la condena más grande. Incluso más difícil que ignorar a todas las mujeres que me dicen que soy un tonta por no aprovechas la oportunidad para "divertirme" cuado según ellas Shaoran lo está haciendo - Tomoyo le miró comprensiva.

- No es malo que piense eso debes en cuando, se que puede pasar - Sakura sonrió y negó con la cabeza.

- creo que tu me puedes entender y aunque llevo mucho menos tiempo de casada que tu, sé que Shaoran nunca haría algo así, confío plenamente en él - mencionó con una sonrisa - siempre fue algo especial lo nuestro Tomy - su interlocutora sonrió mientras le tomaba las manos.

- te tengo buenas noticias - mencionó Tomoyo sonriendo - Eriol me llamó vienen de vuelta para Japón - Sakura sonrió y sus ojos se iluminaron como no lo hacían en mucho días - llegaran en la noche creo pero no es nada seguro, se supone que es una sorpresa, pero no resisto verte tan triste - su amiga casi soltó las lágrimas mientras le miraba - tranquila Shaoran está bien, Eriol cumplió su promesa ambos volvieron en una sola pieza.

Sakura sonrió algo apenada - todavía recuerda esa promesa - mencionó rascándose la cabeza, recordaba que le había hecho prometer a Eriol que traería a Shaoran en un sola pieza, cuando habían partido a una negociación en medio oriente justo después de casarse - creo que en ese momento me vía como una mujer desesperada - Tomoyo rió.

- la has dado el pie, para que te lo recuerde a cada momento que pueda - ambas rieron divertidas mientras comían galletas.

El avión llegaba al lugar de los hangares que le había designado, todos y cada uno de sus ocupantes, bajaron a estirar las piernas. Y no fue la excepción el director de la misión y su mano derecha, aunque el primero no tuviera lo ánimos necesario como para bajar al hangar mientras reabastecían el avión.

- como te fue - mencionó el director de la operación, mientras encendía un cigarrillo y se sentaba en una caja de madera. - ¿como están? - Eriol sonrió mientras se apoyaba en las chapas que formaban el portón de aquel hangar tan apartado.

- bien como supondrás - Shaoran respiró aliviado casi como si le sacaran un tremendo peso de sus manos - Sakura estuvo llorando - volvió el rostro a su interlocutor con los ojos miel inquieto como reclamando una explicación - nada grabe amigo, sabes cuanto le afecto a Sakura haber perdido el bebé tanto como a ti, incluso más, seguramente ha estado trabajando mucho, para tener la mente ocupada y en cuanto ha encontrado el momento se ha desahogado - Shaoran afirmó mientras cerraba los ojos y soltaba el humo lentamente.

- soy un idiota Eriol - soltó resignadamente mientras volvía la vista a él - sé que tu también lo pensaste cuando te conté lo que le dije cuando sucedió todo, no puedo creer que haya sido capaz de decirle que me había engañado, sé que eso le lastimó más que cualquier cosa - su amigo y mano derecha le miró preocupado, pero comprendiéndolo.

- puede que tengas razón, pero Sakura te conoce de lo contrario nunca habría aceptado ser tu esposa. Sabe que por momentos eres impulsivo y no creo que le haya dado demasiada importancia, porque en ese momento estabas lo bastante alterado como para no medir lo que decías - Shaoran embozó una media sonrisa mientras afirmaba.

- es una mujer singular Eriol, otro hubiera muerto de miedo de verme la cara, sabes como soy - su amigo afirmó sonriendo - pero ella siempre logra calmarme y hacerme reaccionar, sin ella no creo que estaría cuerdo en este momento - Shaoran sonrió apagando el cigarrillo con su pie y poniendo las manos en los bolsillos - realmente espero no te equivoques hermano, creo que si hubiera lastimado a Sakura con mi comentario me sentiría el hombre más ruin sobre la tierra, porque sé que ella jamás desconfiaría de mi y sé también que está rodeada de mujeres que insisten en que es lo correcto y que con mis ausencias, sin comunicación, es más que suficiente para suponer que tengo una amante o por lo menos que estoy de noche desenfrenada.

- tu lo has dicho, es una mujer singular cree ciegamente en ti - soltó comprensivamente y con una sonrisa - es como si te conociera más que tu mismo, sería capaz de apostar que ella sabe que te sucede mucho antes de que tu lo notes - Shaoran afirmó sonriendo, mientras se presentaba un silencio. Solo interrumpido por el piloto del avión que anunciaba que estaba todo listo para continuar.

Notas de la autora:

Buenas!, por el momento este es el primer capitulo, creo que si han prestado atención ya tiene una leve idea a lo que se dedica Shaoran y Eriol por igual. Pero descuiden en los capítulos siguiente la historia irá tomando un poco más de forma.

Como es una introducción sé que deja muchas dudas, así que pregunten todos serán respondidos en la medida en que pueda. Muchos saludos a todos y espero su reviwers.

Saludos y éxitos

Angelyanu