Disclaimer: Ningún personaje me pertenece, Rick Riordan es el capo, grosso, genio loco increíble que creó esta saga. Also, si yo fuera él, me habría dejado a Nico, Malcolm, Michael, Luke y Percy para mí :D

Situado en:Algún momento del cuarto libro o el quinto.
Basado en SPOILER cuando Percy ve a Enebro y a Groover yendo a orillas del lago bajo la Luna llena y dice que le recordaba a Silena y a Charles SPOILER

Muchísimas gracias por leer :D


Su mano es áspera y grande, cálida. Envuelve la suya con delicadeza, como protegiéndola, mientras la ayuda a bajar hacia las orillas del lago. Los rayos de la luna llena iluminándoles los rostros. La risa de Silena uniéndose a los sonidos de la naturaleza y las charlas de los campistas que aún no han terminado de cenar.

Beckendorf, Charles, le sonríe condescendiente y la mira con adoración, casi como si fuera un maravilloso sueño del que está a punto de despertar. Para la hija de Afrodita, allí, es cuando el mundo se detiene. No hay cosas tales como dioses, ninfas, Kronos o sátiros. Sólo magia, el sentimiento de Chuck a su lado y el brillo en sus ojos.

Sus ojos, que se contemplan durante segundos que parecen días, y sus manos, el cosquilleo en ellas. La sensación de seguridad, de estar donde pertenece, cuando está con él y ya nada más existe.

Su cuerpo derritiéndose cuando sus labios se unen, y sentirse completa entre sus brazos, mientras la luna llena los baña con su halo de luz. Las estrellas sobre sus cabezas, y promesas de un por venir coronando la noche.

Es magia, es donde pertenece, donde quiere estar. Por siempre, hasta que no exista nada más.

-Te amo, Chuck- Susurra en su oído, y siente que ese es uno de esos momentos que marcarán su vida, porque él la mira de esa forma, la sostiene de esa manera y la besa así.

Es magia, son magia, siempre lo serán, pase lo que pase. Venga lo que venga.