Los personajes no me pertenecen… Son de su creativo creador a quien no le sé el nombre pero lo admiro ;)
Este fic será corto como los otros…eso creo. Y es, como quien diría, de la misma realidad de mi otro fic "Sentidos"… leer ese le dará sentido a este primer capi en parte…pero si no lo quieren leer no es necesario.
Si ya lo leyeron pues bien por ustedes XD
Capítulo 1: Un Akuma de Miedo.
Adrien aún se sorprendía de las diferentes tonalidades de rojo que podía adoptar la cara de su novia, pasando de un rosa pálido a un rojo granada intenso. Impresionante y adorable, el por qué también se lo hacía divertido.
Estaban en casa de Alya, con los otros chicos de su clase, viendo películas. Tenían programadas una comedia, otra de acción, una de romance que seguro los chicos no dejarían ver completa y una última de terror, las que más le gustaban a Adrien. Eran entretenidas y siempre era bueno que Marinette lo abrazara. Pero el cronograma había cambiado desde un principio, la primera película que Alya coloco fue una que Nino había grabado unos cuantos meses atrás.
-Tienes permiso de tu adivinanza de tocar en otro lugar- dijo Alya en el video. los presentes reían, menos Adrien por no hacer sentir mal a su novia- pero cuidado con el lugar que elijes: mira que estas en público.
El rubio tenía que admitir que ese día Marinette fue muy inteligente al elegir tocarle el pecho… si solo no los fueran grabado. Pero si eso no fuera pasado, él no tendría novia y no estaría tan contento como lo está ahora.
-A veces pienso que Alya me odia- murmuro Marinette, tapándose la cara, avergonzada.
-Piénsalo así- susurro el en respuesta, sonriendo- sin eso, quizás ahora no estaríamos juntos.
Ella lo miro, sus ojos brillando. Se acercó un poco más y lo beso. En menos de un segundo sus amigos comenzaron a vitorear y reír, molestándolos. Pero el único sonido que en serio llamo su atención fue el de la cámara de un teléfono, el de cierta morena probablemente.
-¡Te dije que sin fotos!- grito Marinette poniéndose de pie, muy molesta.
Esta vez, Adrien rio de buena gana, mientras las dos amigas forcejeaban por el control del teléfono.
Gritos de pánico se escucharon a las afueras de la casa de la morena, y todos se precipitaron a la ventana. En la calle, las personas corrían, gritando, todos en una sola dirección, probablemente alejándose de lo que sea que los estuviera asustando.
-Tenemos que escondernos- dijo Chloe, en un chillido. Sabrina, junto a ella, asentía con miedo.
-No es mala idea- afirmo Marinette, más de una ceja arqueada se dirigió a ella, incluyendo a la rubia.
-Si este es un nuevo villano, Ladybug y Chat Noir estarán allá y yo también- dijo Alya, sacando su celular, muy contenta- deséenme suerte.
La morena corrió y salió de su casa antes de que cualquiera le dijera nada. Marinette la llamo, con algo de exasperación ante la temeridad de su mejor amiga; y viéndolo como una posibilidad de salir para transformarse para atender la situación, salió tras ella.
-Nino, cuida a los demás- le dijo Adrien al muchacho- iré por ellas.
Claramente preocupado, el moreno asintió y guio a los demás al sótano de la casa. Adrien salió de la casa, se aseguró de que no había nadie cerca y se transformó. Chat Noir comenzó a correr por los tejados, buscando a su novia y su amiga. Las consiguió un par de cuadras más adelante, corriendo en dirección contraria a la que corría el resto de las personas. Alya corría sonriendo emocionada, sin percatarse de la presencia de el al otro lado de la calle y la de Ladybug que la seguía de cerca, también sobre los tejados.
Ladybug lo miro y le sonrió levemente, tomo su yoyo y comenzó a balancearse entre los edificios, adelantándose. El rubio también tomo su bastón y la siguió. Dejando a la morena detrás.
Llegando a los Campos Elíseos se encontraron con la nueva akumatizada. Ladybug estaba segura que tendría pesadillas con esa mujer apartir de ahora. Su ropa era la más tétrica que le había visto a un esbirro de Hawk Moth, era un vestido largo que se arrastraba por el suelo de color negro ceniza, y parecía hecho de ceniza pues a cada movimiento liberaba partículas de polvo en el aire. Tenía las mangas hasta los puños y le cubría el cuello, era un diseño muy antiguo; su cara era la que no dejaría dormir a la heroína de Paris.
Su rostro y manos eran muy pálidas, blanco tiza. Sus labios grises, delgados y cuarteados. Sus ojos eran de color negro escarabajo, sin ningún tipo de brillo y estaban hundidos, dándole un aspecto aterrador. Sus mejillas estaban hundidas, la nariz era irregular y pequeña, y parecía tener ojeras también. Su cabello negro estaba atado en un tenso rodete tras su cabeza.
-No me gustaría despertar junto a ella en la mañana- bromeo Chat Noir, Ladybug resoplo.
-¿En serio crees que es un buen momento para bromear?
-Creo que si sonríe dará menos miedo- contesto él.
Pero se equivocó. La mujer les sonrió, apenas un poco, y la imagen no les gusto para nada. Sus labios resecos se estiraron y mostraron sus dientes opacos, formando algo más parecido a una mueca. No mejoro para nada su aspecto. Cuando hablo, lo hizo con una voz transgiversada, sobrenatural.
-Entréguenme sus miraculous, Ladybug y Chat Noir- su voz estaba vacía de emociones.
Esta mujer en serio los asustaba. Y lo peor es que todavía no sabian a que se enfrentaban, no sabían lo que ella podía hacer. Tampoco les daba una idea de en donde podía estar el akuma.
-¿Alguna idea, mi Lady?- pregunto Chat Noir.
-¿Atacamos juntos?- dudo ella.
-Me parece bien- él le guiño un ojo y fue primero.
La mujer volvió a sorprenderlos. Cuando estaban cerca, ella se elevó en el cielo, su vestido agitándose alrededor. Desde un edificio, Ladybug la ataco con su yoyo, pero un tentáculo de tela y cenizas salió de la falda del vestido, desviándolo. Varios tentáculos salieron y los atacaron.
El brillante día de Paris se volvió gris sin que se dieran cuenta. Una capa de nubes oscuras como humo taparon el sol y neblina se arrastró por el suelo, cubriéndole los pies hasta los tobillos a Chat Noir que se encontraba en la calle.
Volvieron a arremeter contra su enemiga, los dos juntos, y ella les mostro lo que podía hacer. Uno de sus tentáculos había tomado a Chat fuertemente por un brazo, la mujer lo apunto con su anillo, en el índice de la mano derecha hecho de plata y con una gran piedra rojo sangre de forma ovalada, y disparo un rayo negro. Ladybug atrapo el tentáculo con su yoyo y empujo al minino lejos de la trayectoria del disparo. Pero al final, el rayo negro impacto en Alya, la cual cayo inconsciente en el suelo.
-¡No!- la pelinegra miro con preocupación a su mejor amiga. La morena había comenzado a hacer muecas y removerse- ¿Qué le hiciste?
-Oh- la mujer miro a la muchacha de lentes y rio, sin gracia, erizándoles la piel- tranquila, esa niña solo está dormida, soñando cosas horribles probablemente.
Chat Noir alargo su basto y la golpeo como pudo, Ladybug lanzo su yoyo y atrapo el brazo con el anillo. El tentáculo soltó al muchacho y este se fue a reunir con su compañera de batalla. La tomo de la mano y se la llevo de allí; encontró un buen lugar para ocultarse y se detuvo.
-Necesitamos un plan- dijo, mirándola.
-Estoy en eso.
Ladybug estaba tratando de pensar en algo, sin usar su Lucky Charm, pues no quería arriesgarse. Seria demasiado peligroso usar su poder y que luego esa extraña mujer le diera con su rayo ¿si estaba inconsciente cuando se acabara el tiempo? Quedaría completamente a merced de ella y Hawk Moth obtendría al fin sus miraculous. Pero tampoco podía permitirse quedar inconsciente siendo Ladybug…
-Distráela, mantén su atención en ti, pero que no te de su rayo- dijo a Chat Noir- yo le quitare el anillo.
Chat asintió, luego tiro de ella y la beso. Cuando se separó de ella, le tomo el rostro entre sus manos y la miro a los ojos.
-Ten mucho cuidado, Marinette- pidió.
Ella asintió, tomados de la mano salieron de allí. Entonces se separaron. Él fue directo a un lugar en el que ella lo viera claramente y Ladybug camino sigilosamente a un lugar desde donde pudiera dar su golpe sorpresa, rezando para que Chat Noir no se metiera en demasiados problemas.
-¡Hey! Em… ¿señora?- el minino le hablo a la mujer, desde el techo de un edificio. Ella lo miro- ya que seguro nos tardaremos en esto, pues usted no querrá que la venzamos tan rápidamente, ¿me podría decir su nombre? Me parece de mala educación pelear con alguien a quien no conozco.
-No señora, señorita- le corrió la mujer. Chat lo puso en duda, pero guardo silencio- y mi nombre es Nightmare, gato.
-Mi nombre es Chat Noir, Madame- hizo una pequeña reverencia, sonriéndole. Aunque su interior se estremecía al escuchar su voz sobrenatural.
Toda la atención de Nightmare estaba en él, cosa que alegro y molesto a ambos al mismo tiempo. Les alegraba porque él estaba haciendo bien su parte; a ella le molestaba por que una mujer estaba poniendo demasiada atención a su novio, para parecer un fantasma salido de una película de terror, y a él no le llamaba la atención que alguien que daba miedo lo hallara atractivo. Porque si, Nightmare parecía encontrarlo agradable a la vista.
-¿Dónde está tu novia?- pregunto la akumatizada, vigilante de la aparición de la catalina, pero pendiente de él a la vez- no creo que le agrade que estés hablándole a otra mujer.
-Ladybug no es celosa- el rubio le quito importancia con la mano, aunque sabía que era mentira- ¿Cómo podría tener una novia que me celara? Soy un tipo muy guapo, aunque me veo más sexy con el antifaz ¿verdad mi lady?- hizo la pregunta gritando y a nadie en particular, pues ni él estaba seguro de donde estaba ella y tampoco la delataría si lo supiera.
Ladybug estaba a no más de diez metros de Nightmare, y podía escuchar claramente la conversación de su novio y esa mujer. Hawk Moth no lo había pensado muy bien al elegir a una mujer como esa, que se distraía ante el coqueteo de un muchacho guapo. Y la pelinegra tenía que morderse la lengua para contenerse de gritar ¡le molestaba tanto que él le hablara con esa confianza a otra chica! Sabía que él no lo decía de verdad, era solo para mantener ocupada a la aterradora "señorita". Pero aun así.
Vio un momento justo para atacar, Nightmare se estaba riendo de una broma de Chat Noir, y la mano con el anillo estaba lo suficientemente lejos de su cuerpo, algo vulnerable. Tomo el yoyo, calculo y lo lanzo. Atrapo completamente a mujer, menos el brazo con el anillo. Se acercó rápidamente, con una media sonrisa. Su compañero se le unió.
-Muy simpático, Chat- ella se cruzó de brazos.
-Sabes que no era en serio- el sonrió y le dio un beso en la mejilla- yo me veo sexy con o sin antifaz.
Él se inclinó para tomar el anillo, pero un tentáculo escapo de su prisión de alguna forma y lo tiro lejos de allí. Ladybug fue rápidamente a ayudarlo, mientras Nightmare se liberaba.
Ladybug recogió su yoyo y junto a Chat se preparó para atacar, pero antes de poder moverse o poder reaccionar, Nightmare levanto el anillo y dirigió un veloz rayo negro hacia ella.
Le dio de lleno en el pecho.
-¡Ladybug!
Chat Noir tomo en brazos a su novia inconsciente. Dio media vuelta y huyo sabiendo que no podía quedarse allí, con su lady desprotegida y el en obvia desventaja.
Fue al primer lugar que se le ocurrió, la casa de ella. La deposito en la cama y la cubrió con las mantas.
-¡Idiota!- grito, regañándose a sí mismo- no la protegiste.
Se sentía desesperado, sin ella, sería inútil. ¿Ahora que se suponía que debía hacer? ¿Habría alguna forma de despertarla? Tenía que pensar en algo y protegerla al mismo tiempo. Se des transformo y se sentó en la cama junto a la muchacha.
El día se volvía cada vez más oscuro, y estaba seguro que no era porque se acercara la noche.