Disclaimer: Star Wars pertenece a Disney y a Lucasfilm.
NA: Esta ambientado dos años despues del Despertar de la Fuerza.
Terminado de corregir.
Cronologia: 36 DBY
Sombras de la Rebelión
Han pasado 2 años desde la destrucción de la Base Starkiller, lo cual ocasionó
que la Primera Orden persiguiese a la Resistencia por toda la galaxia.
Rey está a punto de culminar su entrenamiento con el legendario
Maestro Jedi, Luke Skywalker.
Kylo Ren, Maestro de los Caballeros de Ren
Está obsesionado en encontrarla y por ello ha mandado a sus mejores
asesinos a buscar el paradero de la joven aprendiz..
Mientras tanto, la General Leia Organa busca desesperadamente el apoyo de
La Alianza de Sistemas Libres, remanentes de la
Nueva República, para poder
hacer frente a la amenaza de la Primera Orden.
..
...
Un destructor estelar, negro e imponente estaba muy cerca del planeta Sullust, no siendo la única nave, detrás de ella, destructores estelares, grises, se acercaban al lugar, la razón era que Sullust es miembro importante de la Alianza de Sistemas Libres; creada tras la aparente destrucción de la Nueva República.
El ataque era sorpresivo, los tres destructores, que acompañaban al destructor negro, soltaron naves transportes de soldados de asalto, listos para invadir el planeta.
Kylo Ren, que finalizó su entrenamiento con el Líder Supremo Snoke, miraba por el ventanal la invasión, su mente iba hacia a Rey, ardiendo en deseos de vengarse y por ello había mandado a tres de sus mejores caballeros de Ren a buscarla para capturarla y traerla ante él. Se paseó por la pasarela de su nueva nave, un regalo de Snoke tras finalizar su entrenamiento y lo bautizó como Han Solo, su padre fallecido.
Matar a su padre fue lo más doloroso que tuvo que hacer pero era un sacrificio, una prueba que tenía que pasar y para honrar ese sacrificio, puso el nombre del héroe de la rebelión en el destructor estelar, abrazando definitvamente al Lado Oscuro de la Fuerza..
Kylo Ren sintió que alguien se acercaba a sus espaldas y se giró. Un hombre, de la misma edad de Kylo Ren, con el uniforme gris implecable cuyas insignias revelaban su cargo como general, se acercó al Señor Oscuro.
—Todo esta listo para la invasión. Las tropas esperan sus órdenes.
—Proceda, general Irard—exclamó Kylo Ren fríamente, el mencionado inclinó levemente la cabeza y se acercó a los controladores, dando luz verde a la invasión.
Naves guerreras sullustanas se acercaban raudamente a los destructores estelares, listo para defenderse del ataque de la Primera Orden y las cazas TIE abrieron fuego y la batalla por el planeta dio comienzo. Kylo Ren simplemente se retiró del puente de mando, sin antes de delegar la responsabilidad al general Soont Irard.
Necesitaba estar solo, y en la privacidad de su oficina, donde se retiró su nuevo casco; y se miró al espejo, donde una línea roja le cruzaba su rostro.
Estaba pálido y aparentaba tener más años; su rostro irradiaba odio y sus ojos estaban coloreándose de amarillo, cerró los ojos y visualizó a Rey de rodillas y suplicando por su vida pero no la escuchaba y con su sable en cruz, hundió la hoja en su pecho, regodeándose en su pensamiento, cuando su transmisor empezó a pitar y sin perder tiempo, se colocó nuevamente su casco, seguidamente activó su transmisor donde se reflejó una figura pequeña holográfica.
—Mi señor; la encontramos.
—Bien, tráemela, recuerda que la quiero viva.
—A sus órdenes, mi señor.
Kylo Ren sonrió, al fin se iba a encontrar con Rey, a pesar que Snoke quería atraerla al Lado Oscuro pero él no estaba de acuerdo; lo había humillado y pagaría su vida por ello.
.
Illum
Habían pasado dos días desde que Rey y Luke dejasen el planeta Acht-To, el lugar donde entrenó la joven aprendiz y ahora habia llegado el momento más importante para ella: ensamblar un sable de luz, por ello el helado planeta Illum era el lugar adecuado para la prueba de Rey.
Rey se acomodó bien su abrigo mientras Luke avanzaba con los brazos cruzados hasta detenerse en una cueva. El veterano Jedi asintió y ambos ingresaron, la cueva estaba llena de cristales de diversos colores; Rey paseó su vista por todo el lugar hasta que Luke le dijo que se sentase.
—¿Sientes algo?-preguntó
—La Fuerza es intensa-exclamó Rey mirando el techo-Y algo me está llamando.
—Entonces el cristal te eligió. Sigue a ese llamado
—¿Qué son esos cristales?
—Cristales kaiburr; una pieza fundamental para un sable de luz.
—Tengo uno—dijo Rey.
—En realidad ese sable que tienes fue el de mi padre. Tú tienes que construirte uno, este es un paso más en tu camino para ser un caballero Jedi.
—Entonces ¿seré una Jedi?
—No, aún te falta una prueba más—dijo Luke y Rey supo a que se refería.
—¿Kylo Ren?
—Sí, solo con derrotarlo; serás una caballero Jedi. Deja que la Fuerza fluya hasta el acontecimiento, que sucederá, tarde o temprano.
Rey asintió lentamente, y volvió a mirar los trozos de metal.
—Concéntrate, Rey, deja que la Fuerza fluya dentro de ti.
Rey respiró hondamente y avanzó lentamente; vio un punto luminoso, mas luminoso que el resto de cristales. Aquel lo estaba llamando y la joven llegó hasta ella, se puso de cuclillas y lo agarró. Tenia forma triangular y bastante pequeña. Levantó las manos, donde las piezas flotaron; el cristal azul flotó lentamente hasta colocarse a la altura de sus ojos.
—"No existe emoción, solo existe la paz"—recitó Luke cerrando los ojos mientras Rey sacaba el primer sable de luz de su padre, desenroscaba la base y lo dejó a un lado mientras el cristal azul lo colocaba en un chasis.
—"No existe ignorancia, solo existe conocimiento".
El cristal kaibur se ensambló bien y la joven aprendiz colocó la otra parte del chasis metálico, puso el disparador en la parte central y el extremo del sable era redondo pero achatado.
—"No existe la pasión, existe la serenidad"
El sable de luz estaba terminada y nuevamente, con la Fuerza, atrajo el otro sable de luz que tenía y lo juntó, dos sables unidos en uno solo.
—"No existe muerte, existe la Fuerza"
Rey se puso de pie y encendió ambos extremos de su arma, formando un sable de luz de doble hoja y mediante la Fuerza, lo separó. Y ahora eran dos sables de luz que iluminaban el suelo de la cueva y los apagó.
—Muy bien—dijo Luke mientras Rey juntaba los dos sables, uniéndolas por las bases y lo colocó en su cinto—Vayamos a la base; es hora de ayudar a la Resistencia.
—Sí-exclamó decidida..
Los dos salieron de la cueva pero el aire frío no dejaba de azotar, por la cual avanzaron en silencio en dirección al Halcón y cuando estaban cerca, los dos se detuvieron bruscamente.
—Oh, no—exclamó Rey—Tengo un mal presentimiento.
Tres figuras oscuras aparecieron delante de ellos, vestían armaduras negras y cascos oscuros.
—Caballeros de Ren—dijo Luke sacando su sable de luz mientras Rey sacaba su sable de doble hoja.
Las luces verde y azul se iluminaron pero los caballeros de Ren no usaban sables si no bastones de cortosis, un metal resistente al sable de luz.
Uno de ellos extendió la mano para aplastar el Halcón pero Rey lo mutiló de un tajo y rápidamente lo decapitó, se giró para atacar el otro y él logró agredirla, tirándola al suelo mientras Luke luchaba contra su rival. Rey se puso de pie mientras escuchaba los alaridos del wookie, que descendía de la nave, con la ballesta en mano.
—¡Chewie! Nosotros nos encargamos, pon la nave en marcha—gritó Luke.
—¡Yo me encargo!—gritó Rey—¡Suba a la nave!
—No te dejaré sola—exclamó Luke mientras rechazaba un golpe certero.
—Confía en mí, padre—replicó Rey mientras Luke apretaba los dientes y extendió la mano, arrojando al suelo a su rival mientras Rey desarmaba al otro y lo lanzó al árbol con la Fuerza.
Luke se metió a la nave al igual que Chewie, poniendo en marcha al Halcón, el caballero derribado por Luke se puso de pie, Rey separó en dos su sable y se giró rapidamente, atancandolo con gran rapidez, el ataque era demasiado para el caballero de Ren, perdiendo ambas manos y el ultimo caballero de Ren lanzó un grito de guerra mientras corria hacia la aprendiza y ella lanzó su sable de luz como una jabalina, atravesando su pecho y el sable regresó a su mano.
El segundo caballero de Ren estaba arrodillado, mirándose los muñones totalmente en shock y fue derribado con la Fuerza por Rey, quien no perdió mas tiempo y corrió hacia el Halcón que volaba bajo y de un salto, llegó a la rampa, ingresando al carguero.
—Nos encontraron—exclamó Luke—¿Desde cuándo nos seguían?
—No lo sé—dijo Rey jadeando.
El Halcón salió del planeta y saltó al hiperespacio.
...
Ttras lograr la victoria en la base Starkiller, la Resistencia vio que era momento de buscar una nueva base ya que no era aconsejable estar en el mismo lugar puesto que la Primera Orden sabía dónde estaban.
Tardaron casi un año encontrar un lugar y ese era Rishi, ubicado en la región Espacio Salvaje en el sistema del mismo nombre.
Rishi es un planeta de clima tropical, con bosques y montañas, la base se instaló en las profundidades del bosque pero con grandes espacios para sus reducidas naves. La General Leia Organa sabe muy bien que el número de tropas a su cargo era insuficiente para derrotar a la Primera Orden; había pensado contactar con otros gobiernos que no están bajo el poder de la Primera Orden, algo complicado pero no imposible. Lucharía por ello, lucharía por buscar el apoyo, lo había hecho antaño con la Rebelión y lo volvería hacer.
El hecho de saber que la Nueva República no fue totalmente destruida con la desaparición de Hosnian Prime la alivió. La Nueva República había quedado sin una cabeza de estado pero el resto de planetas que formaban parte de ese gobierno se habían unido, formando la Alianza de Sistemas Libres lideradas por la joven Jeela Rumarch, Jefa de Estado de Corellia.
Solamente eran pocos mundos que formaban la Alianza siendo Corellia, Dac y Sullust los que llevaban adelante los "fragmentos" de la Nueva República.
Leia sabia que Corellia ya tenia un nuevo Jefe de Estado y no era otra que la misma Jeela Rumarch,, ya que en pasado fue al planeta mencionado pero su Jefe de Estado le cerró la puerta en las narices. Necesitaba el apoyo de ellos para la Resistencia: más tropas y más naves.
Gracias al veterano almirante Ackbar, Dac estaba dispuesto a cooperar con sus famosos flotas calamaris.
Leia se encontraba en su despacho, un cuarto pequeño con un escritorio y un generador de holos, su mente ahora había dejado de lado a Corellia y estaba puesto en aquella Holo fotografía de Han.
En aquella holo imagen, ambos eran jóvenes; él, con su chaleco sin mangas negro y con su sonrisa de medio lado y ella, con el cabello recogido y un poncho verde, un momento despues de la batalla de Endor. Nuevamente el corazón de Leia se contrajo y recordó lo que le dijo Luke sobre el dolor. Deseó haberlo acompañado, deseó haber confrontado a Ben ella misma; ahora dudaba que su único hijo aún tuviera algo de luz dentro de él. Se limpió las silenciosas lágrimas, ya han pasado dos años y aún lloraba por Han, lo extrañaba y lo mal que se sentía al perder a su familia.
Tocaron la puerta y Leia tuvo que respirar profundamente.
—Adelante—dijo mientras guardaba el generador de holo imágenes.
—El Halcón Milenario hizo contacto, general—anunció una mujer rubia de ojos azules, estatura mediana y con su traje naranja de piloto.
—Gracias, capitana Antilles. He un momento iré a recibirles.
Poe Dameron se encontraba su Ala-X, revisando los controles y dándole mantenimiento con la ayuda de su fiel droide BB-8. El droide lanzó una serie de pitidos, Poe asintió.
—Sí, lo puedo ver—dijo Poe mientras desconectaba unos enchufes del tablero—Pruébalo.
El motor de la nave empezó a sonar y Poe estaba atento a los sonidos, sonrió al final mientras apagaba.
—El motor está bien, amigo; buen trabajo—exclamó el piloto mientras BB-8 lanzaba otros pitidos agudos mientras su pequeña cabeza metálica se giraba, el piloto alzó la mirada a su derecha donde vio el Halcón Milenario aterrizar.
—Ya lo veo, debe ser Rey ¿vamos a saludarla?
El droide fue el primero en bajar, rondando velozmente hacia la pista de aterrizaje, Poe descendió por medio de la escalerilla y empezó a andar rápidamente, en el camino se encontró con Leia.
La escotilla del carguero corelliano descendió por la cual bajaron Rey y Chewbacca seguido de R2-D2 y detrás de ellos, Luke.
Los mellizos Skywalker se miraron intensamente, el veterano Jedi avanzó hacia su hermana melliza y se enfundaron en un abrazo.
—Lo siento, Leia—susurró Luke.
—Nunca me vuelvas hacerme esto—exclamó Leia en su oído—Todo estos años…te he extrañado, más de lo que imaginas.
—Me voy a quedar, Leia—dijo Luke y se giró hacia Rey que se mantenía al margen; el maestro Jedi hizo el gesto que se acercara. Leia sonrió.
—Hola, Rey.
—Hola, tía Leia—saludó Rey extendiendo una mano pero la general le dio un abrazo.
—Ya sabes la verdad.
— ¿Lo sabias? ¿Sabías que Luke es mi padre?
—Lo supe cuando te vi por primera vez—exclamó Leia con las manos en los hombros de su sobrina—Por esa razón es porque querías que salieras a buscarlo. No quería decírtelo, quería que lo descubrieras tú misma.
Rey asintió y Chewbacca lanzó un alarido de alegría hacia Leia en la cual la mujer le dio un cariñoso saludo.
—Vayamos a la sala—dijo Leia y el grupo empezó a andar, Rey sintió que algo chocaba en sus pies y bajó la vista donde un droide astromecanico redondo la miraba y emitió un pitido que interpretó como alegría.
—Hola, amigo ¿Cómo estás—exclamó Rey mientras se ponía a su altura y colocaba su mano en la cabeza del droide.
—Hola.
Rey alzó la vista y se encontró con el piloto Dameron; ya lo había conocido una vez y fue hace dos años, justo despues de que R2-D2 mostrase el mapa completo. Fue una presentación corta, lo suficiente para recordar su nombre.
—Poe Dameron ¿verdad?—exclamó Rey sintiendo un leve cosquilleo en la boca del estómago.
—Sí—afirmó Poe—¿Tú padre es Luke? No lo sabía.
—Así es—dijo Rey mirando al grupo que daba una vuelta a la esquina, desapareciendo de su vista—He pasado dos años entrenando. ¿Cómo son las cosas aquí?
—Hemos estado buscando lugares para establecernos—dijo Poe mientras avanzaban, seguidos por el droide—Rishi fue una sugerencia de un piloto de mi escuadrón.
—¿Y Finn?—preguntó por su amigo.
—Él está bien—dijo Poe y se detuvo para observar los ojos de Rey—Despertó un par de días después. Se ha acoplado muy bien al grupo. Justo él está en las prácticas de tiro.
Poe llevó a Rey a una sala amplia, donde observó a varios voluntarios con rifles y apuntando a blancos con circunferencias rojas.
—¡Finn!—gritó Poe y a lo lejos, un hombre de piel oscura se giró y al ver a su amiga emprendió una veloz carrera, Rey sonrió al ver a su amigo.
Los dos se abrazaron, BB-8 lanzó una serie de pitidos y Poe sonrió con los labios, su comlimk sonó y contestó
—¡Te he echado tanto de menos!—exclamó Finn emocionado.
—Me alegra de volverte a ver, amigo—dijo Rey sonriendo mientras se separaban.
—La general Organa quiere vernos—exclamó Poe mientras guardaba su radio en su bolsillo.
Los tres salieron de la sala de tiro, rumbo a la sala de conferencias de la Resistencia, era el momento de traer la paz a la galaxia.
