Título.- La fuerza de un rey demonio.

Crossfic: Campione x High School DxD con toques de otras series.

Con sus poderes sellados y una apariencia totalmente diferente a la que alguna vez había puesto, Kusanagi Godou termina en otro mundo por culpa de sus (actualmente) inestables poderes divinos, ahora deberá de buscar una manera de volver a su mundo mientras está atrapado en el cuerpo de un niño y con muchos poderes sellados.

Nota: Kusanagi Godou es un Campione experimentado en todo, acepta su amor por la batalla pero todavía desea buscar soluciones pacíficas, en esta historia Godou es más liberal dado que es un poco pervertido, es más inteligente y hábil en las peleas, tiene una actitud sádica.

[Una nueva aventura]

En lo alto de una inmensa torre de oro se podía observar como el hermoso cielo una vez teñido de un brillante tono azulado había cambiado a uno de color carmesí, una poderosa presencia se había mostrado demostrando un poderío al derrotar a cada rival con el cual se hubiera enfrentado antes, incluso los mortales seleccionados por los anteriores siervos del rey Salomón, ninguno sería capaz de vencerlo con dichos poderes… o así debía de ser.

Una majestuosa serpiente de piel carmesí de un inmenso tamaño digno de ser catalogado como un dragón. Sus escamas brillando con su estómago de un color plateado, dos largas extremidades delgadas donde se alzaban unas hermosas alas de murciélago mientras su rostro de flecha con dos colmillos laterales de escamas con una boca dentro de su boca, tal demonio era conocido como Uria, el señor de las llamas abrasadoras y un Darck God Djinn, uno de los tres dioses fantasmales.

La hermosa pero peligrosa bestia invocada por la codicia de los humanos como la guerra que habían estado viviendo lo despertaron y pensaba hacer pagar a todos los humanos por su continua estupidez, en especial aquellos guiados por los Magis para tomar el poder de los demonios de Salomón y buscar el regreso del rey perdido, aunque en su mira se encontraban los portadores de los Djinn del fuego que representaba su poder.

Con su poder eliminar la mitad de la humanidad no era un problema y fácilmente eliminar a los que conquistaron las pruebas de los genios en las torres de piedra. Se burlaba de ellos por aquel poder insignificante que no puedo poseer ni utilizar por completo, simplemente una burla al poder de aquellos humanos maldecidos por Salomón para convertirse en meros perros bajo el servicio de humanos…

Pero con esa verdad…

– Como un humano puede igualarme – El dragón exclamo con furia notoria en sus palabras cuando una poderosa llamarada fue dirigida en contra de su rival con un brillante odio en sus dorados ojos, la llama tenía el poder de eliminar todo Agrava con simpleza, una ataque que ningún humano o demonio debería tener el poder para detenerlo.

Pase a eso un mar de viento llevo a las llamas para detenerlas justamente cuando un hermoso ave de fuego blanco se alzó devorando las llamas de Uria como si no fuera nada para sorpresa del mismo dragón, así el ave abrió su pico enviando un enorme y poderoso pilar de fuego en su contra

El dragón iracundo mando una ráfaga de fuego con la clara intención de destruir las llamas que osaban pensar que eran iguales a su persona, era el señor de las llamas y uno de los tres fantasmas celestiales sellado por su inmenso poder al cual temían y adoraban. Un aura carmesí intenso como la sangre comenzaba a invadirlo demostrando que no tenía dudas en acabar con cualquiera que fuera su rival, más un aura dorada rodeo al fénix blanco intensificando todavía más su poder.

Las llamas chocaban mientras la tierra sentía el infierno que pasaba en el cielo incluso en la tierra, los enemigos y aliados observaban todo en la lejanía.

La explosión ocurrió cuando las llamas chocaron en un empate, dejando así que una cortina de humo que provoco una onda de choque que mando a volar todo lo que hubiera en el suelo, sorprendiendo a todo el mundo por el poder de ambos rivales, sobre todo a una persona quien miraba al hermoso ave fénix peleando con todas sus fuerzas.

– Godou-san – Un pequeño niño de azules cabellos oculto con un turbante miraba al fénix en espera de su bienestar, rezando desesperadamente porque aquel quien fue su primer amigo en el nuevo mundo estuviera en buenas condiciones incluso si no obtuvo la victoria, deseaba con desesperación que simplemente saliera.

– Aladdin – Una gruesa voz resonó llamando la atención del pequeño Magi quien observo a un hombre con una armadura de cuello y acero con un casco inconfundible con una larga cola carmesí, su espada barata aun lado de su equipo Djinn donde Amon descansaba y su escudo atado a su brazo derecho mientras portaba en su mano izquierda la cabeza de un Goblin recientemente asesinado – Él no perderá – Como le era costumbre sus charlas eran cortas y directas sin expandir más de lo necesario.

– Goblin Slayer-san – Su segundo mejor amigo como aquel a quien ayudo a obtener poder para su matanza de Goblins… razón de que Amon se quejara tanto, más aquel joven le había estado ayudando con sus problemas mientras cazaba a los Goblins, un guerrero entre guerreros.

El viento se llevó el humo revelando a los dos rivales todavía ilesos demostrando el poder que ambos tenían como el hecho de que no se rendirían, Uria, majestuoso y de inmenso poder se encontraba cansado de la larga batalla en contra de un humano y eso dañaba su gran orgullo digno de un dragón de su calibre, así mando un rugido sin preocuparle la aparición de Acnologia o cualquier cosa, solamente demostraría su orgullo vivo.

Repentinamente el ave fénix comenzó a crecer con un aumento abrumador de poder el cual ningún ser vivo o humano podría creer posible, más el ave crecía y se deformaba hasta que solo quedaban dos hermosas alas blancas mientras regresaban a encogerse quedando a un tamaño digno del portador de su poder.

Un pequeño niño de 10 años de un oscuro cabello obsidiana levemente salvaje de una piel acanelada y unos ojos negros como el azabache, su rostro de facciones infantiles e inocentes detonaban un salvajismo que quedaba con su sonrisa de emoción. Su cuerpo bien entrenado sin grasa o musculo innecesario estaba casi en su totalidad descubierto.

Accesorios invadían su cuerpo con una corona de lirio dorada emplumada a los lados mientras en sus ojos aparecían unas sombras oscuras y en su frente como mejillas se mostraban unos tatuajes como plantas hermosas, en su cuello caía una cadena con un corazón de fuego blanco mientras en sus brazos habían unos brazaletes dorados y unos anillos en algunos de sus dedos, un pantalón de oro blanco con una capa carmesí atado en su espalda adornado con plumas y unas botas doradas con un reflejos de oscuridad.

Aquel niño en realidad era un rey demonio que provenía de otro mundo, el cual en verdad era un hombre o anciano con una edad sorpresiva que aparentaba tener eternamente 16 y que se había convertido en un niño de 10 en la actualidad…

¿Confundidos?... yo tambor.

– ¿No puedes ir a apoyarlo? – Aladdin observo a Goblin Slayer con una mirada de suma preocupación, confiaba en Godou mucho más de lo que cualquier otra persona (salvo Goblin Slayer) y conocía a su fuerza mejor que nadie, pero nunca le había gustado que alguno de ellos lucharan solos dado sus limitantes.

Godou era un niño de su edad y Goblin Slayer era un humano que solo portaba el poder de Amon, en general ambos se ganaron su confianza en diversas batallas incluso cuando entraron al calabozo de Orarion por petición de Hestia para salvar a Bell.

Goblin Slayer observo a los dos rivales y pensó observando de reojo su Djinn y su dos Djinn oscuros antes de mirar a los rivales, analizaba y pensaba como lo hacía en contra de los Goblins que tanto había cazado en su infancia. Un aura de tonalidad grisácea junto a otra de una tonalidad ambarina comenzaron a invadirlo mientras hermosas mariposas blancas y negras comenzaban a rodearlo de poco a poco.

Aladdin se maravillaba cada que observaba como los espíritus se reunían cuando él necesitaba de algo, su vida triste y la razón de su obsesión por actuar genocidamente por y contra Goblins había cautivado el corazón de los Rukh's blancos y negros quienes deseaban darle fuerza alguien noble manchado por el poder de los dioses, cosa que Amon y los dos Djinn oscuros entendieron y amaron de su portador.

– Goblin Slayer-san – Una nueva voz los interrumpió donde los dos observaron a una pequeña niña con un traje blanco y azul de una monja, en su espalda una hechicera de traje verde y una luchadora de oscuros cabellos (El primer Team).

Las lindas damas miraron a su salvador mientras los demás miembros del gremio se acercaban observando su decisión, Lancer era quien estaba más impaciente dado que ni siquiera él había logrado alcanzar al héroe de clase dorado.

Un aura negra más notoria comenzó a invadir el cuerpo de Goblins Slayer cuando dos hermosas alas negras se formaron en su espalda creadas por uno de sus dos Djinn oscuros alistando la decisión de su amo.

En un parpadeo Goblin Slayer había desaparecido alzando el vuelo mientras liberaba la daga que contenía el poder de Amon y esta comenzó a ser invadido por una poderosa llamarada.

– Se ha convertido en un verdadero héroe – Una suave voz resonó en el bote donde los compañeros y amigos de Goblin Slayer observaron a la razón de que su amigo se volviera una obsesionado por matar Goblins.

– Tiene razón en eso, Onee-chan – La granjera estuvo de acuerdo mientras miraba a su viejo amigo rumbo a una pelea imposible de ganar con una sonrisa, sus ojos pasaron a la hermosa mujer regresada de la muerte por el poder de los genios y esta sonrió sabiendo que una parte de él había regresado incluso cuando intentaba ocultarlo – Ha crecido mucho.

-Con Uriel-

El dragón cargo una vez más su ataque en contra de su rival como el niño preparaba un nuevo contra ataque, repentinamente una poderosa explosión de fuego como un filo corto parte del cuerpo de Uriel, el cual rugió en dolor y Godou observo sorprendido como a su lado se encontraba su compañero con su equipo Djinn activado.

Su armadura de acero brillaba de un rojo intensó como rubís donde las uniones eran un mar de llamas, sus brazos portaban un escudo de fuego mientras cargaba la daga encendida en su totalidad en un brillo obsidiana con una estrella carmesí en el centro, su pantalón de oro puro con sus zapatos brillando en una poderosa llamarada. Su casco dorado con una cola de fuego mientras marcas obsidianas invadían1 su cuerpo, junto a sus alas que se prendían de un fuego azul.

– ¿Cazando algo diferente a Goblins? – Con burla en su comentario, Godou observo a su amigo quien le miro detrás del casco con una sutil sonrisa que nadie vería.

– Este dragón no es diferente a mi contexto de Goblins – No porque no fuera uno físicamente no significaba que él no lo viera como tal, él decidía que era un Goblin y que cazaría como a un goblin.

-ROOOOOARRRRRRRRRRRR-

Uria nuevamente rugió sin piedad enfadado de como moscas aparecían deteniendo su misión de erradicar a la humanidad, insecto tras insecto pensando que puede oponerse al gran rey de las llamas, ya no pensaba tener piedad y cargaría su última y más poderosa llamarada.

Su boca se expandió horrorosamente mientras llamas comenzaban a formarse en su boca y toda la energía que emanaba viajaba a su último ataque.

– Si esa cosa cae nos matara a todos y puede que al mundo mismo – El magi oscuro respondió con un tono despreocupado mientras mostraba una sonrisa divertida – ¿Me pregunto si esos dos podrán detener a uno de los tres demonios fantasmales? – Con eso soltó una suave risa entre dientes en espera de ver el destino del mundo.

Godou y Goblin Slayer observaron eso y se vieron de reojo asintiendo, así dos poderosas auras comenzaron a invadir el cielo junto al aura de Uria.

El cuerpo de Goblin Slayer rodeado de tres colores de tonalidad ambarina junto a un tono violeta y uno azul oscuro que era el aura de sus genios que viajaban a su espada sagrada que portaba el poder de Amon, el cual empezaba a teñir su flama en una de un arcoíris oscuro.

Godou fue rodeado con diversas auras moviendo su mano donde viento, fuego, luz, sonido y la fuerza misma crecían en todo su esplendor, a su vez una esfera blanca con bordes de oro se mostraba en la concentración de magia a niveles inhumanos y solo en la entrada divina.

Con unos segundos donde el viento soplaba como gritos de agonía, la tierra y el mar temblaban como si estuvieran asustados y el cielo parecía buscar esconderse por la mezclas de poderes.

Uria, Godou y Goblin Slayer lanzaron sus ataques con la intención de eliminarse mutuamente, el choque de poder era abrumador e incluso parecía una broma de los dioses oscuros.

La realidad no podía contenerse demostrando en su ataque, la unión de tanto poder era tan increíble que uno pensaría era una broma de muy mal gusto, entonces un brillo negativo se expandió tragando el cielo mismo como a los rivales y desapareciendo…

Y con esto acabo esta serie que un amigo me pedía desde hace un tiempo.

He de admitir que solo pensaba hacer un crossover entre Campione y High School DxD y toques de Magi, pero al final salió esto y creo que no está mal, agregando elementos de Danmachi, Fairy Tail y Goblin Slayer junto a Yu-Gi-Oh.

Como se puede apreciar esta aventura comienza con un Godou shota quien pase a que es un adulto, esta trasformado en un niño de 10 años.

Esta historia crossover la tengo pensado como ya dije en una de Campione y High School DxD, pero díganme; ¿Les gustaría que la historia se basara en cómo se llegó a todo esto?

La historia será un Harem obviamente y aunque no debería decirlo tan fácilmente, revelare las posibles familias que pueden tomar a Godou y Goblin Slayer:

Gremory.

Sitri.

Bael.

Phenex.

Zepar (Oc en su mayoría)

Agares.

Leviatán.

¿Podrán adivinar cuál es de cuál?

Antes de finalizar, espero que sea de tu agrado Enigma95.

Ahora, sin más que decir…

Nos leemos luego.