Capítulo 1: Fantasía real
Era un día agradable.
Era el segundo día en Nueva York de Peter y Elizabeth luego de su viaje al Caribe.
Peter estaba por ir al Bureau cuando abré la puerta de la entrada de su casa y se encuentra con un cachorro Husky Siberiano mirándolo.
-¿Y tú qué haces aquí?-dice, confundido.
-¡Te tengo! No te preocupes, Diana, no necesitaremos a la perrera-dice Jones, acercándose y alzando al cachorro.
-¿Es tuyo? ¿Desde cuando tienes perro?-le pregunta Peter, aún más confundido.
-no es mío. Es…-
-es una larga historia-dice Diana, haciendo una mueca mientras se acerca.
-¿Y Neal? Pensé que estaría con ustedes-dice Peter, sus Agentes hacen una mueca y miran de reojo al cachorro –es una broma, ¿Verdad? ¿No es una broma?-pregunta Peter, atónito.
-¡Wooff!-ladra el cachorro, lamiéndole la punta de la nariz al Agente Burke.
-no puede ser en serio…-
-lo es, Peter. Tenemos que explicartelo-dice Diana, soltando un suspiro.
Él los deja pasar y ambos Agentes le cuenta como Neal, imprudentemente, tocó un botón de una maquina extraña de un caso que estaban investigando con Hughes y…se convirtió en un cachorro, literalmente.
Satchmo y Neal parecían llevarse bien.
Pero Peter aún no podía creer que su asesor se hubiera convertido en un perro así como así. Elizabeth intentaba calmarlo.
Todo eso era tan fantasioso…
