Como un No muerto has vivido, como un Elegido fuiste seleccionado por tus defectos y virtudes, como Cazador te adaptaste al ambiente y como un Héroe serás recordado por tus acciones desinteresadas a lo largo del trayecto
Ohayo, muy buenas a todos y aquí estoy para darles la bienvenida a esta "nueva historia" que tengo en mente. Es solo un proyecto que considero prometedor y dependiendo del recibimiento que reciba pues la continuaré, todo depende de ustedes. De cualquier manera una pequeña aclaratoria de que esta es una historia donde existen los Quirks pero hay muchos cambios de gran relevancia, por ejemplo que acontecimientos del canon voy a tratarlos de manera muy diferente así como las edades de los personajes y muchas cosas más. Con todo eso dicho comencemos de una vez… Go
Disclaimer: Los personajes de Boku no Hero Academia le pertenecen a su creado Kosei Horikoshi, por lo cual escribo sin lucro alguno y solo por diversión.
Capitulo 1: El Nuevo Profesor
En una habitación a tempranas horas de la mañana donde los rayos del sol comenzaban a vislumbrarse por los orificios de las cortinas, un hombre joven de cabellera risada de color verde se levantaba algo somnoliento y frotándose un ojo con un puño.
Desvió su mirada a un lado para encontrar entre las sabanas a una pequeña niña de 5 años de blanca cabellera que estaba a su cuidado dulcemente dormida y aferrada a su torso como era normal en ella.
El joven sonrió divertido al verla tan adorable como siempre y con sumo cuidado se liberó de su agarre para dejarla plácidamente acomodada en la cama. No importa cuántas veces le dijera que durmiera en su cuarto, Eri siempre se escabullía en la noche para dormir a su lado.
Algo cansado se levantó de su cama en dirección al baño donde tomó su cepillo de dientes y emprendió su usual rutina diaria de higiene, cepillarse los dientes, luego refregarse la cara con agua y luego verificar si sus dientes habían quedado limpios, todo siendo cotidiano.
Una vez al estar más despierto sonrió levemente viéndose en el espejo, no había ningún defecto significativo que necesitara su atención, todo como siempre, su cabello rizado de tonalidad verdosa, sus ojos del mismo color pero de un color más esmeralda, las pequeñas pecas con las que había nacido y con las cuales moriría algún día, ese pensamiento le sacó una pequeña risa.
Luego de una ojeada más se vistió con un short negro deportivo y una camisa blanca sin mangas para luego proceder a hacer su rutina diaria de ejercicios en su pequeño gimnasio en otra habitación de su casa, repetía esa rutina todo el tiempo sin falta para no perder la forma tan saludable en la cual estaba.
Una vez terminó su entrenamiento, se fue a bañar para quitarse todo rastro de sudor y mal olor para al tanto de unos 10 minutos salir del baño con unos calzoncillos verdes y una toalla en su cabeza estando el resto de su cuerpo húmedo a causa de la reciente ducha.
Con calma fue a su cuarto notando que Eri seguía dormida, él se sentó en el borde de su cama para acariciarle suavemente la cabeza con una cálida sonrisa adornando su rostro, de verdad que se veía muy tierna cuando dormía.
Luego de eso enfocó su atención en tomar su teléfono y ver los mensajes que había recibido, de los cuales recibió solamente uno que era de su madre que parecía haber sido enviado la noche anterior, no logró leerlo en su momento a causa del cansado día que tuvo salvando personas, pero no era nada nuevo para el joven.
Mamá: [Acuérdate de no llegar tarde, estar presentable y dar una buena impresión a tu clase, mañana en la mañana ve a trabajar sin preocuparte por Eri, Toshinori la va a buscar, él y yo te deseamos ánimos en tu primer día, Izuku]
Soltó una pequeña carcajada al ver el mensaje de su madre, aun de adulto ella se preocupaba por él como si fuera aquel chico tímido y nervioso de la escuela, pero aun así agradecía que tanto ella como su padre fueran así de atentos como para desearle suerte además de cuidar de su hija, era un alivio que pudieran ayudarle en eso.
Ayuda que sabía que iba a necesitar, después de todo hoy era un día especial o por decirlo de una mejor manera es… relevante. Pues ese día dejaría por un tiempo sus actividades como símbolo de la paz y se centraría en dar clases en la prestigiosa escuela de héroes en la cual tuvo el privilegio de estudiar y graduarse con honores… Yuuei
Por varios acontecimientos terminó aceptando el empleo de profesor, algo que no esperaba ser hasta tiempo más a futuro pero de cualquier manera tenía sus razones para asumir el cargo, una de ellas sería relajarse un poco de su trabajo como héroe, idea que fue propuesta por sus padres y por sus amigos más cercanos además de Eri que deseaba pasar más tiempo con él.
-Solo será por un tiempo, no puedo descuidar mi trabajo como símbolo de la paz-, se dijo así mismo con una pequeña sonrisa como si quisiera responderle a sus padres, luego de eso bloqueó el teléfono y se fue a preparar el desayuno.
Algo sencillo para comenzar el día, unos Omelettes con jugo de naranja. Guardó lo de Eri para cuando ella despertara y con todo listo comenzó a comer mientras divagaba en sus pensamientos, podía permitírselo pues aún faltaba tiempo para que llegara el momento en que tenía programado salir a su nuevo lugar de trabajo.
Ya había pasado varios años desde que obtuvo el puesto de héroe número uno ocupando el cargo que antes le perteneció a su héroe favorito y actual padre, All Might. Y pasaron aún más años desde que obtuvo su Quirk heredado… One For All, cuando el ídolo rubio le ofreció convertirse en un héroe que pudiera salvar a las personas con una sonrisa.
-Cómo pasa el tiempo, eh-, dijo con una leve sonrisa para luego tomar un trago de jugo. Y es que después de ese momento sucedieron acontecimientos tanto buenos como malos que atesoraría por el resto de su vida, victorias y derrotas, logros y frustraciones, amores y desamores, todo eso lo había formado y convertido en lo que actualmente es y lo agradecía.
Una vez terminó de comer se fue a cepillar los dientes nuevamente y luego procedió a vestirse para su nuevo empleo como maestro. Llegó al armario con una expresión apacible y analizando qué ponerse, después de todo no es como si fuera a llevar todo el tiempo su traje de héroe, en el aula tendría que llevar ropa acorde al momento de dar clases.
Luego de unos minutos de pensarlo, tomó las prendas que vio aptas y procedió a vestirse con toda la calma del mundo, total aun le quedaban 30 minutos para salir en dirección a Yuuei.
Al estar ya vestido suspiró para sí mismo con cansancio para luego levantar la vista al techo.
-Espero hacer un buen trabajo, temporal o no sigue siendo una gran responsabilidad el educar a unos chicos-, dijo con una sonrisa con un deje de cansancio para luego tomar su teléfono y dirigirse a la cama para darle un último vistazo a la dormida Eri que aun descansaba plácidamente.
No tenía el corazón para despertarla de su sueño para despedirse, por lo cual le dio un pequeño beso en la frente y luego se fue a la puerta de su casa para salir de allí con las manos en sus bolsillos, quizás no haría mal pasear un poco de camino a la academia.
Izuku caminaba por la calle con serenidad y una mirada apacible mientras se robaba las miradas de varias personas que lo veían pasar, y no es para menos pues varios pudieron identificarlo como el héroe número uno pero aparte estaba el hecho de que su apariencia captaba fácilmente la atención, sobretodo del féminas que lo veían.
Es un hombre joven y atractivo de rasgos finos, algo maduros y a la vez cautivadores dándole un aire de inocencia por sus pecas. Lleva unas botas negras, un pantalón oscuro, una camisa negra con dos líneas rojas bajando de su cuello y una bata blanca de trabajo que llega hasta las pantorrillas con un corte dividiendo su cola en dos, claro que su tonificada figura le daba un aire más atractivo a vista de las chicas de alrededor.
Él era totalmente ajeno a esas miradas que lograba atraer, solo miraba al frente con desinterés y las manos en los bolsillos. Solo pensaba que quizás lo miraban por ser el símbolo de la paz, lo cual no sería nada nuevo para él, o quizás se preguntaban por qué iba vestido así, lo cual seguramente averiguarían en una semana o menos, después de todo la noticia de que sería profesor no tardaría en difundirse.
Siguió caminando con tranquilidad y sin prisa hasta llegar al frente de una plaza que estaba a unas cuadras de Yuuei, había una fuente en medio y varias tiendas que abrían temprano ya tenían clientes adentro.
Izuku sonrió levemente al ver la calma de todo el lugar, le tranquilizaba ver todo tan tranquilo sin verse interrumpido por algún villano. Claro que la taza de crimen era realmente baja a causa de su presencia como símbolo de la paz pero aun así había uno que otro incidente con villanos que necesitaba su atención, esperaba que ahora que era profesor los otros profesionales pudieran hacerse cargo en su ausencia.
-Oye preciosa, ¿Qué te parece si te diviertes con nosotros un rato?-, la voz de hombre llamó la atención del peliverde que se giró a ver como cerca de la fuente unos tres hombres de apariencia cuestionable rodeaban a una joven chica de cabello negro recogido en un cola de caballo grande y puntiaguda.
-No gracias, debo ir a la escuela-, respondió la pelinegra con serenidad y estoicamente mostrándose firme y en calma a pesar de verse rodeada.
-Oh vamos, una preciosura como tu debe saber divertirse-, insistió el hombre corpulento del grupo con una sonrisa desagradable.
La chica en esos momentos aguantaba las ganas de darles una paliza a los tres hombres que la estaban acosando, tan solo quería llegar temprano a la escuela pero de camino se topa con esos tres payasos que la rodearon y buscaban estúpidas maneras de convencerle de estar con ellos
Una mano se posa en el hombro del hombre corpulento y los tres vándalos y la chica enfocan su atención a Izuku que se mantenía con una expresión serena.
-Creo que no escucharon lo que la señorita acaba de decir, debe ir a la escuela, así que agradecería si la dejaran en paz y que no vuelvan a molestar a nadie-, dijo Izuku con una mirada fulminante a los tres hombres que palidecieron en ese mismo momento en que sus expresiones se llenaban de pánico, pues absolutamente todos sabían de la identidad del hombre que tenían en frente y no serían ellos los estúpidos que se pusieran en su contra.
-¡P-P-Por supuesto, Deku!, ¡v-vamos chicos!-, les dijo el líder del grupo a los otros dos para que después los tres se fueran con el rabo entre las piernas llenos de miedo.
Una vez los tres se fueron, el peliverde suspiró cansado para voltear su mirada en la chica que acababa de ayudar.
-¿Te encuentras bien?-, le preguntó Izuku a la chica con una leve sonrisa que la tomó desprevenida, pues esta se sonrojó levemente y recordó a quien tenía enfrente.
-S-Si, muchas gracias por ayudarme-, agradeció ella con un poco de nervios pero de la forma más educada que podía.
-No hay nada que agradecer, como eres de Yuuei solo puedo pensar que tu sola bastabas para ponerlos a ellos en su lugar-, dijo Izuku con calma observando el uniforme de la joven chica frente a él, sonrió divertido al ver que el diseño no había cambiado desde que él estudio allí.
La pelinegra por su parte estaba absorta viendo al hombre joven frente a ella, claro que sabía que era el héroe número uno Deku y era sorprendente estar en su presencia, pero más que eso es el aura de calma que emite agregado el haberla ayudado para deshacerse de esos hombres, además que es muy bien parecido.
-Será mejor que te apresures a llegar a la escuela, quedan al menos 10 minutos para que comiencen las clases-, le dijo Izuku a la chica con tranquilidad despertándola de sus pensamientos.
-C-Claro, muchas gracias nuevamente-, agradeció ella de forma cortes haciendo una leve reverencia para luego caminar en dirección a Yuuei.
Él por su parte la veía alejarse con calma, con el pensamiento de que quizás le llegue a dar clases a esa chica. Despejó ese pensamiento con sencillez y siguió su camino con las manos en los bolsillos de su bata, no tenía prisa por llegar a la academia, pues de un solo salto puede llegar en cuestión de un par de minutos.
Su vista divagaba en distintos puntos del lugar mientras caminaba hasta que enfocó su atención en como a lo lejos un villano con apariencia de lagarto salía de una tienda con varias cosas robadas mientras emprendía el escape.
Izuku suspiró cansado para luego rascarse la nuca con fastidio evidente.
–Por lo menos agradecería que no me hicieran llegar tarde a mí, ya puedo oír la voz de Aizawa-Sensei sermoneándome-, dijo para sí mismo para luego sonreír de lado en lo que rayos verdes del One For All comenzaban a rodear su cuerpo.
En el aula de la clase 3-A se encontraban 20 alumnos de la academia de Yuuei, adolescentes rodando entre los 18 y 17 años conversando entre si mientras esperaban a que la campana anunciara la primera clase que tendrían de su tercer año en la academia.
Varios estaban reunidos en grupos hablando animadamente cerca de sus puestos respectivos.
-¿En serio Deku te ayudó con esos bandidos?-, le preguntó Kyouka a su mejor amiga Momo que estaba sentada a su lado con su cabeza apoyada en sus dos manos y solo se limitó a asentir mientras estaba perdida en sus pensamientos.
-¡Eso es increíble Momo-chan!, ¿Cómo es él?-, preguntó Mina con una amplia sonrisa emocionada mientras le veía con entusiasmo.
-¿Cómo es quién?-, preguntó Shinso con curiosidad que estaba sentado unos puestos atrás y había escuchado la pregunta de Mina.
-Veras, es que Momo-chan se encontró con el héroe Deku de camino para acá cuando unos idiotas trataban de propasarse con ella-, respondió Mina en voz alta resaltando de entre todos los demás, captando la atención del resto que pusieron sus miradas en ella e hicieron silencio.
-¡¿Eso en serio?!, ¡Deku es increíble!-, exclamó Kirishima con emoción recordando las batallas que logró ver en televisión donde el héroe peliverde derrotaba a los malos con una mano y salvaba personas con la otra y una sonrisa en su cara.
-Seguramente es solo una mentira, no es posible que Deku esté por esta zona además de rebajarse a tratar con solo unos vándalos-, comentó Saiko con sencillez y los ojos cerrados ya que había escuchado el relato de Momo y no lo veía posible.
-No es mentira, él llegó y con solo verlos los ahuyentó-, le dijo Momo a su amiga de cabello gris azulado con calma, pues entendía que lo viera poco probable pues era muy raro que él héroe número uno anduviera resolviendo esa clase de conflictos por la calle.
-Hombre, eso suena increíble, es lo menos que se puede esperar del mejor héroe-, dijo Kaminari con las manos detrás de su nuca y mirando a Sero, Tokoyami y Shouji que asintieron con la cabeza de acuerdo.
-¿Tu qué piensas, Todoroki-kun?-, le preguntó Uraraka con una gran sonrisa a su amigo peli mixto que como siempre estaba tranquilo y apacible en su asiento.
-Está la probabilidad de que sea cierto, además no hay razón por la cual Yaoyorozu nos mienta-, respondió Todoroki con calma mirando a su amiga castaña mientras que Iida a su lado asentía con la cabeza mientras se arreglaba los lentes.
En eso Nejire se acerca a Momo invadiendo su espacio personal con una gran sonrisa.
-¿Cómo es su actitud?, ¿es amable?, ¿es tan fuerte como parece?, ¿sus pecas son de verdad?-, preguntaba la peliazul con mucho ánimo agobiando un poco a la pelinegra que suspiró mientras alejaba a su amiga con una mano.
-No lo conozco como para responder tus preguntas Nejire-chan, pero… si pienso que fue amable-, respondió Momo con un ligero sonrojo en sus mejillas mientras que Nejire asentía con interés.
-Pero es grandioso, ¿no lo creen?, después de todo eso significa que es un gran héroe-, dijo Mirio con su típica alegría y con las manos en su cadera mientras veía a todos.
-Togata-chan tiene razón, es bueno que el símbolo de la paz sea tan confiable, Gero-, dijo Tsuyu con un dedo en su mentón viendo a Mina y Toru que asintieron con la cabeza.
-De cualquier manera… no es como si fuéramos… a verlo en persona, es una suerte ya que no creo… que yo aguante ver a alguien tan brillante-, dijo Tamaki con su cabeza apoyada de una pared sintiéndose pequeño y tímido al tan solo imaginar estar al frente de quien era el héroe más grande de todos.
-¿Tu qué opinas, Bakugou?, ¿te molestaría hablar con el símbolo de la paz?-, le preguntó Shinso al rubio cenizo detrás suyo con una pequeña sonrisa burlona, causando que el chico chasqueara la lengua con molestia mientras desviaba la vista.
-Solo es una copia de All Might, es tan solo un cualquiera que voy a superar para ser el número uno-, respondió Bakugou con las manos en sus bolsillos y los pies sobre su mesa, causando que más de uno riera ante la usual actitud del explosivo chico.
-De cualquier manera, ¿Cuál sería la probabilidad de que alguno de nosotros se encontrara con Deku?-, preguntó Kyouka con sencillez y una sonrisa relajada mientras se encogía de hombros.
-La probabilidad es del 1,01% si consideramos las obligaciones que tiene y la condición de que esté en Yuuei, aunque sin esos factores en cuenta entonces las probabilidades son casi nulas-, respondió Saiko con serenidad y los ojos cerrados al hacer uso de su Quirk IQ que la hace más inteligente de lo que ya es.
-¡Guao!, ¡aun ahora no me acostumbro a lo inteligente que eres, Saiko-chan!-, exclamó Toru animada y sorprendida por la respuesta de su inteligente amiga que había sido vicepresidenta de la clase los anteriores dos años.
Luego de repente la puerta de la entrada se abrió revelando a Aizawa que entraba con su usual mirada desganada y cansada.
-Muy bien todos, siéntense en sus puestos-, dijo y de inmediato todos los que estaban parados se fueron a sus puestos para prestarle atención a su profesor asignado.
-Buenos días Aizawa-Sensei, es un placer verlo de nuevo este año-, saludó Iida de manera diligente y educada a su profesor pelinegro que solo se limitó a asentir con la cabeza.
-Tengo un anunció importante que hacerles, a partir de hoy dejaré de ser su profesor asignado-, anunció él con sencillez tomando por sorpresa a todos los presentes.
-¡¿Qué?!, ¡¿Por qué?!-, exclamó Sero sorprendido y el resto no se quedaba atrás, en menos de un segundo varios ya estaban protestando y bombardeando a preguntas al profesor, sobretodo Nejire en esto último.
-Silencio-, dijo con seriedad y con su cabello y cintas levitando hacia arriba, haciendo que todos se callaran y guardaran silencio.
Luego el suspiró relajándose.
-Por asuntos personales voy a estar más ausente y a causa de eso no podré cumplir como su maestro principal, en vista de eso el director le pidió a alguien en especial que viniera en mi reemplazo y hoy comienza a impartirles clases a ustedes-, explicó Aizawa con calma y varios se estaban desanimando.
-Pero… que se vaya así tan repentinamente… no me gusta-, dijo Uraraka algo decaída ya que su profesor había hecho mucho por ella y por el resto, le daba mal sabor de boca que se fuera.
-Es cierto, ¿Quién castigará a Mineta por hacer cosas pervertidas?-, preguntó Momo con cierta preocupación mientras que el chico pelimorado babeaba un poco viendo el camino libre, aunque también se sentía mal por saber que su maestro se iría.
-Debo aclararles que no me iré de la escuela, solo no seré más su profesor asignado y pasaré a darles entrenamiento físico ya que es un horario que me conviene más-, dijo el pelinegro con calma, causando que varios se aliviaran por eso, él había pasado mucho tiempo con esos chicos y no podía evitar el sentir cierto apego hacia ellos.
-¿Y quién será su reemplazo?, ¿es hombre o mujer?, ¿es alto o bajito?, ¿es hablador o callado?-, preguntaba Nejire con una gran sonrisa dejándose llevar por su insaciable curiosidad, pero ciertamente el resto también estaba integrado por la identidad del nuevo profesor.
-Fue un estudiante mío así como ustedes, era el mejor de su clase y actualmente tiene una carrera brillante como héroe profesional-, dijo el pelinegro recordando a aquel muchacho de espíritu heroico que era el centro del curso de héroes en aquel entonces.
-Eso suena muy prometedor, para que usted lo elogie debe ser alguien increíble-, comentó Shinso con una pequeña sonrisa mirando a su mentor, ya que él sabía por experiencia que era difícil obtener el reconocimiento de Aizawa.
-¡Cierto!, ¡de seguro debe ser alguien muy asombroso!-, exclamó Mina con los brazos en el aire mientras que varios se hacían una imagen mental de quien sería su nuevo maestro, cabe mencionar que algunos dejaban llevar mucho su imaginación.
En eso el teléfono de Aizawa sonó y este lo sacó de su bolsillo para ver el mensaje que le había llegado, al una vez leerlo suspiró cansado.
-Hablando de él ya está llegando para acá, tuvo que arrestar a unos cuantos villanos de camino-, les dijo Aizawa a todos con tranquilidad pensando en sermonear al peliverde una vez tenga el momento, a pesar de que era su deber tenía que organizar sus prioridades y dejarle a los demás héroes encargarse de los villanos.
-¡Demonios, eso suena increíble!, ¡ese sujeto debe ser muy fuerte!-, dijo Kaminari emocionado esperando conocer a su nuevo maestro.
Y no era el único ya que varios ya se estaban interesando más por la identidad del profesional que tendrían como profesor asignado, hasta Bakugou estaba interesado aunque no lo mostraba a los demás.
Luego el sonido de un leve golpeteo en la puerta captó la atención de la clase que se giraron a ver la entrada.
-Pasa-, le dijo Aizawa y la puerta corrediza se deslizó a un lado mientras que una figura conocida por todos entraba por la puerta.
Los ojos de todos se abrieron de sorpresa al ver esos rizos verdes y esas pecas además de esos ojos esmeralda que habían visto varias veces en televisión.
No podían creerlo, no cabían en su asombro al ver la identidad de la persona que acababa de entrar al aula, particularmente Momo estaba sorprendida de ver a la misma persona que le ayudó minutos atrás.
-Buenos días Aizawa-Sensei, es un gusto verlo de nuevo luego de tanto tiempo-, saludó Izuku con una pequeña sonrisa amigable al pelinegro que le miraba con calma.
-Ya puedes dejar de llamarme así, recuerda que ya no soy tu maestro, Midoriya-, le contestó Aizawa ignorando la sorpresa de los alumnos.
-Lamento llegar tarde, aun si salí temprano al final me retrasé-, dijo el peliverde rascándose ligeramente una mejilla.
-Después tendremos una conversación de acomodar tus prioridades, por ahora será mejor que comiences tu clase-, le dijo el pelinegro a Izuku con seriedad mientras que comenzaba a caminar hacia la salida.
-Por favor dele mis saludos a Emi-san, les doy mis felicitaciones a los dos-, decía Izuku con una pequeña sonrisa mirando como su antiguo maestro abandonaba el aula cerrando la puerta no sin antes asentir con la cabeza.
Una vez que Aizawa salió del lugar, Izuku se giró a ver a los alumnos que todavía no salían de su asombro al verle a él allí.
Esto le causó un poco de gracia y sonrió divertido para luego ir a su escritorio donde los miró a todos para tomar la palabra.
-Buenos días a todos, seré a partir del día de hoy su maestro asignado así como su maestro en estudios fundamentales sobre héroes, es un gusto trabajar con ustedes de ahora en adelante-, dijo con una expresión calmada y amable mostrándose maduro y capaz.
Luego de eso Saiko levantó la mano captando la atención del peliverde.
-Si, por favor habla-, dijo él dando su consentimiento.
-Todavía no se ha presentado-, dijo Saiko estando internamente nerviosa, sabía que todas las cosas indicaban que él era quien evidentemente parecía, pero ella no podía asimilarlo completamente por las pocas probabilidades de que tuvieran a alguien como él en su salón, además de como profesor.
-Oh cierto, mi nombre es Izuku Midoriya y soy conocido actualmente como el héroe Deku, un gusto conocerles-, se presentó con sencillez y algo divertido por su descuido, causando que los que aún estaban en negación se sorprendieran al verificar que efectivamente tenían en frente al símbolo de la paz, el pilar de la esperanza, el héroe entre héroes y figura ejemplar del bien.
-Bueno, ahora van a levantarse por el orden de sus asientos para que cada uno diga su nombre, edad y luego presente superficialmente su Quirk-, anunció el peliverde con tranquilidad para tomar la lista de su escritorio con una mano.
-Comiencen por el número 1-, dijo mientras apoyaba su espalda del pizarrón para prestar atención a sus nuevos alumnos.
Luego la chica de piel color rosa se coloca de pie con una gran sonrisa, tiene cabello corto y rizado del mismo color pero una tonalidad más clara, sus escleróticas son negras con irises amarillos y tiene dos pequeños cuernos amarillos doblados que sobresalen de su cabeza.
-¡Mi nombre es Mina Ashido, tengo 17 años y mi Quirk es "Ácido"!, este me permite disparar ácido corrosivo desde dentro de mi cuerpo y puedo controlar su grado de solubilidad así como su viscosidad-, se presentó con mucho ánimo y entusiasmo muy contagioso para luego sentarse mientras que detrás de ella se paraba otra chica.
Es una chica mitad rana, tiene el pelo lacio de un color verde oscuro recogido con forma de lazo a la altura de su espalda, tiene ojos grandes de color negro con pestañas notándose en la parte inferior de ellos, tiene círculos rosados en sus mejillas y una boca en forma de "v" estirada hacia los lados.
-Mi nombre es Tsuyu Asui y tengo 17, mi Quirk "Rana" me hace ser mitad rana y con eso obtengo algunas habilidades de ellas como saltar alto, estirar mi lengua y más cosas, Gero-, anunció con tranquilidad para luego sentarse mientras que el siguiente alumno se ponía de pie.
Es un chico alto y de contextura musculosa que tiene el pelo negro y lleva gafas cuadradas.
-¡Mucho gusto Sensei, mi nombre es Tenya Iida y tengo 17 años!, ¡mi Quirk "Motor" me permite convertir mis piernas en motores permitiéndome una supervelocidad!-, exclamó el chico de lentes haciendo una reverencia algo exagerada para luego sentarse nuevamente mientras que el siguiente se paraba.
Es una chica delgada y esbelta, ella tiene la piel clara, ojos grandes y redondos de color marrón con pestañas cortas, también tiene pelo lacio castaño a la altura de los hombros que se divide en dos largos mechones a los lados de su cara con una ligera ondulación en la parte posterior y por ultimo tiene un ligero rubor natural en sus mejillas.
-M-Mi nombre es Ochako Uraraka y tengo 17 años, mi Quirk "Gravedad Cero" me permite manipular la gravedad de los objetos que toco con mis manos, como cancelar su peso o hacerlos flotar para también anular su efecto al juntar mis manos-, se presentó con algo de nervios para luego sentarse con algo de timidez evitando mirar a su profesor.
Luego un chico se levanta, este tiene el pelo rubio con mechones negros con forma de relámpago y cejas cortas y delgadas.
-Mi nombre es Denki Kaminari e igual que la mayoría tengo 17 años, mi Quirk "Electrificación" me permite liberar electricidad de mi cuerpo, aunque si supero mi límite causa un cortocircuito en mi cerebro-, se presentó con tranquilidad a pesar de que Kyouka y Sero se estuvieran riendo de él al recordar cuando se volvía idiota al excederse.
Luego el siguiente se levantó siendo un chico con el pelo rojo puntiagudo que se asemeja a cuernos, además de tener una contextura ejercitada para su edad.
-Mi nombre es Eijiro Kirishima, 17 años y mi Quirk "Endurecimiento" valga la redundancia me permite endurecer mi cuerpo pudiendo utilizarlo tanto para ataque como defensa-, se presentó con una sonrisa emocionada y con un puño al frente suyo para luego sentarse en lo que el siguiente se pone de pie.
Es un chico muy alto con el pelo blanco suelto delante de su cara, usa una máscara que cubre sus rasgos faciales exceptuando sus ojos. Tiene seis brazos de los cuales cuatro son tentáculos que salen de su espalda y se interconectan.
-Soy Mezo Shouji de 18 años, mi Quirk "Brazos Duplicados" me permite replicar distintas partes de mi cuerpo en la punta de los cuatro tentáculos que salen de mi espalda, dándoles una infinidad de usos-, dijo con calma para luego sentarse en lo que el siguiente se levantaba.
Es una chica delgada, de piel clara y grandes ojos grises definidos de aspecto cansado, tiene el cabello color azabache corto y con un flequillo asimétrico. Uno de sus rasgos más distintivos son sus lóbulos con forma de conector de audio los cuales parece poder extender y controlar a voluntad propia.
-Jirou Kyouka, 17 años y Quirk "Earphone Jack" que me da la capacidad de conectar mis jacks a cualquier superficie y destruirla enviando ondas sonoras amplificadas de los latidos de mi corazón, también puedo recibir ondas con facilidad pudiendo espiar conversaciones a través de muros-, se presentó con una tranquilidad que solo encubría los pocos nervios que sentía al estar frente al símbolo de la paz.
El siguiente es un adolescente alto y delgado con el cabello oscuro casi llegando a sus hombros. Tiene brazos largos, tiene ojos grandes y almendrados con iris pequeñas y una sonrisa amplia además de verse simple.
-Me llamo Hanta Sero de 17 años y mi Quirk "Cinta" me permite expulsar un material similar a la cinta adhesiva de celofán de mis codos, así como retraerla-, dijo con calma para luego sentarse mientras que detrás de él se levantaba el siguiente.
Es de relativamente baja estatura con una cabeza en forma de pájaro, plumas puntiagudas, ojos rojos, una gargantilla roja rayada, un pico corto y dientes humanos. A pesar de esos rasgos el resto de su cuerpo es de forma humana común.
-Mi nombre es Fumikage Tokoyami, tengo 17 y mi Quirk "Dark Shadow" es un ser de sombras que sale de mi cuerpo que es útil tanto a la ofensiva como defensiva, su poder aumenta entre más oscuridad haya-, dijo con un tono misterioso para luego sentarse dándole paso al siguiente.
Izuku abrió levemente sus ojos al ver como un chico de cabello bicolor se levantaba.
Este tiene el pelo lacio y corto dividido equitativamente entre el blanco en el lado derecho y rojo en el izquierdo. Tiene una cicatriz de quemadura en su ojo izquierdo y posee heterocromía, por lo que su ojo izquierdo es turquesa y su ojo derecho gris.
-Mi nombre es Shoto Todoroki de 17 años, mi Quirk "Mitad Frío-Mitad Caliente" me permite congelar con la parte derecha de mi cuerpo y quemar con la izquierda, pero solo utilizo la derecha-, dijo con su rostro sereno y a la vez firme viendo a Izuku para luego sentarse en su asiento.
(Ha crecido desde la última vez que lo vi, ¿me recordará?), pensó Izuku con tranquilidad mientras veía a Todoroki para luego desviar su mirada a un uniforme flotante que pertenecía a una alumna invisible.
-Mi nombre es Toru Hagakure y tengo 17, mi Quirk "Invisibilidad" pues me permite ser invisible, es muy sencillo, jeje-, dijo Toru con diversión para luego sentarse en su asiento.
El siguiente alumno no se levantó de su asiento y se mantuvo sentado con los pies en la mesa con rebeldía. Tiene el cabello color rubio cenizo y desordenado en puntas, sus ojos son rojos, rasgados y algo más pequeños que el resto además de llevar el ceño fruncido y su uniforme algo descuidado.
-Mi puto nombre es Katsuki Bakugou, que te quedé grabado ese nombre ya que seré yo el que te superara algún día-, declaró Bakugou con una sonrisa arrogante y viendo de forma amenazante al peliverde, causando que la mayoría le viera con incredulidad considerándolo realmente idiota para hablarle así el mejor héroe.
-Oh, es un nombre muy curioso, no te molesta si lo acorto a Kacchan, ¿cierto?-, preguntó Izuku con una suave sonrisa inocente que causó que Katsuki apretara los dientes.
-¿¡Qué dijiste, bastardo!?-, exclamó con enojo levantándose agresivamente de su asiento para mirar al lugar donde debería estar el peliverde, pero en lugar de eso habían residuos de rayos verdes y en menos de un segundo tenia al lado a Izuku que sonreía con calma, causando que los demás abrieran sus ojos con asombro ante su velocidad.
-Vamos a ver Kacchan, por favor dime tu edad y Quirk-, pidió Izuku con una tranquilidad que resulto inquietante para el rubio que se vio algo intimidado por la diferencia de altura y la presencia del peliverde.
Bakugou desvió la mirada con molestia mientras que todos veían con atención la escena en la cual Bakugou no podía hacer nada.
-Tch, 17 años y mi Quirk "Explosión" me permite segregar nitroglicerina a través del sudor de mis manos y detonarlo a voluntad para crear explosiones-, explicó de mala gana sintiendo enojo contra sí mismo por verse acorralado con tal facilidad.
-Ese es un buen Quirk, vamos a tener que trabajar en eso de que su portador tenga el carácter para corresponderle-, dijo con tranquilidad y una leve sonrisa para luego comenzar a caminar en dirección a su escritorio mientras que Bakugou con enojo se dejó caer en su asiento con pesadez.
-Siguiente, por favor-, pidió el peliverde con serenidad causando que los demás salieran de su sorpresa y que un chico se levantara.
Es muy pequeño siendo de menor estatura que la mayoría, tiene una enorme cabeza con grandes ojos y su cabello asemeja un racimo de uvas.
-Emm, mi nombre es Minoru Mineta Y tengo 17, mi Quirk "Pop off" me permite desprender las esferas de mi cabeza y lanzarlas, estas esferas pueden adherirse a cualquier cosa menos a mí mismo-, se presentó algo tenso debido al aura de muerte que emanaba Bakugou delante de él, luego se sentó dándole paso al siguiente.
Es una chica joven y atractiva con un físico muy maduro para su edad, siendo también uno de los alumnos más altos de la clase. Tiene los ojos alargados, la piel clara, y el cabello negro opaco con un mechón recto puntiagudo colgando en su frente por el lado derecho, su cabello está atado en una cola de caballo grande y puntiaguda.
-Mi nombre es Momo Yaoyorozu y tengo 17 años, mi Quirk "Creación" me da la capacidad de crear cualquier material inerte de mi cuerpo a través de la manipulación molecular de mis células de grasa, siempre y cuando tenga una comprensión de cómo se hace algo, puedo crearlo, aunque me toma un período de tiempo más largo dependiendo del tamaño-, explicó con cordialidad y educación con las manos juntas mirando a su profesor.
-Entonces Yaoyorozu, me alegro de que hayas llegado a tiempo a diferencia de mi-, dijo Izuku con una pequeña sonrisa que colocó algo nerviosa a la pelinegra.
-N-No hubiera sido así si no fuera por usted, muchas gracias-, contestó Momo con un ligero rubor para hacer una pequeña reverencia y luego sentarse en su asiento mientras que el siguiente alumno se ponía de pie.
Es un chico alto y musculoso que tiene pelo rubio en estilo tupé, ojos color negro y un cuerpo tonificado. Su rostro que parece de forma simple y caricaturesca además de llevar plantada una sonrisa en su cara.
-Mi nombre es Mirio Togata de 18 años, mi Quirk "Permeabilidad" me permite hacerme intangible, con lo cual puedo atravesar muros y objetos sólidos incluyendo el mismo suelo, ¡espero mejorar mucho con usted!-, exclamó con emoción y un pulgar en alto para que luego se levantara una chica detrás de él.
Esa chica tiene piel pálida, ojos grandes y azules, el pelo extremadamente largo color azul claro que le llega hasta las piernas y aparentemente gira alrededor de sí mismo en el área de la cintura, además de que ella tiene un físico que rivaliza con el de Momo.
-¿Cuántos años tiene usted?, ¿Cuál es su color favorito?, ¿Cuántos villanos ha derrotado?, ¿sus pecas son reales?-, preguntaba Nejire con mucho interés y entusiasmo olvidando el presentarse a sí misma, provocando que Izuku sonriera divertido.
-Tengo 22 años, el color negro, no llevo la cuenta y si, mis pecas son reales-, respondió Izuku con tranquilidad mirando a la peliazul. –Ahora por favor preséntate a ti misma, al final podrán preguntarme cosas-, agregó esperando oír el nombre de su curiosa estudiante.
-¡Mi nombre es Nejire Hado de 18 años!, mi Quirk "Oleada" me permite manipular y generar ondas de choque a partir de mi vitalidad-, se presentó con entusiasmo y emoción para luego sentarse en su puesto mientras que detrás de ella se levantaba un chico con timidez.
Es un chico tiene el cabello oscuro, desordenado y las orejas puntiagudas, además sus ojos rasgados y aun así se muestra tímido e inseguro mientras que agacha la cabeza y sostiene un mechón de su cabello al frente de su rostro para tratar de cubrirse.
-Mi nombre… es Tamaki Amajiki, y yo… tengo 18 años, mi Quirk "Reanimación" me permite utilizar mi cuerpo para… manifestar las características de las cosas que como y digiero-, dijo el chico para luego sentarse en su asiento rápidamente viéndose abrumado por hablar tanto.
Luego se levantó una chica que tiene el pelo largo gris azulado y ojos del mismo color, además del uniforme estándar de Yuuei, ella lleva medias oscuras muy largas hasta por debajo de la falda, una boina blanca, unos guantes y unas botas del mismo color, lleva un monóculo dorado en el ojo izquierdo con una joya de color lavanda al final.
-Muy buenos días, mi nombre es Saiko Intelli y tengo 17 años, mi Quirk de nombre "IQ" consiste en mejorar temporalmente mi intelecto después de consumir té y cerrar los ojos para pensar, el nivel de mejora en mi inteligencia aumenta dependiendo de la marca del té, será un gusto estar a su cuidado-, dijo Saiko de con una sutil y educada sonrisa haciendo una leve reverencia a su nuevo maestro para luego volver a su asiento.
Por último se levantó un chico alto, tiene pelo púrpura y desordenado y los ojos del mismo color. Sus ojos tienen bolsas muy oscuras debajo de ellos y también parece carecer de pestañas por completo, tiene dientes afilados y por un momento Izuku pudo ver a Aizawa en el chico, lo cual le causó gracia pero se lo guardó para sí mismo.
-Mi nombre es Hitoshi Shinso de 18 años, mi Quirk "Lavado de Cerebro" me permite controlar las mentes de las personas que me respondan verbalmente, como resultado estarán forzados a hacer lo que yo quiera, aunque claro que solo lo uso cuando se me es permitido-, reveló con tranquilidad observando a su profesor para luego sentarse en su asiento.
-Okey, con las presentaciones hechas pueden hacerme solo cuatro preguntas para luego comenzar con la clase, pues debo explicarles lo básico el día de hoy-, dijo Izuku con serenidad viendo a sus alumnos para que de manera inmediata la mayoría levantara la mano a excepción de Bakugou, Todoroki, Shouji y Tokoyami. –La señorita Intelli-, agregó el peliverde dándole permiso a la peligris que se levantó de su puesto.
-¿Cuál es la razón por la cual usted quiso ser nuestro maestro?-, preguntó Saiko con curiosidad y varios también se mostraron interesados por la respuesta.
-Buena pregunta, más que nada son por algunos asuntos personales, pero en parte es por tomarme un breve descanso de mis ajetreadas actividades como héroe-, respondió el peliverde con una pequeña sonrisa y luego la chica volvió a sentarse. –Ahora el joven Iida-, dijo mientras fijaba su vista en el chico de lentes que se puso de pie con las manos en su puesto.
-Si me permite preguntar, ¿Cuál será la estructura de sus clases?-, preguntó el pelinegro e Izuku asintió con la cabeza.
-Como soy su maestro asignado daré teoría así como discutiremos distintos asuntos como su desempeño, como profesor de estudios fundamentales de héroes impartiré tanto clases teóricas como prácticas para ponerlos a prueba en distintas formas, seguramente hayan experimentado lo mismo con Aizawa-Sensei-, respondió Izuku con serenidad y las manos en sus bolsillos.
-¡Muchas gracias por responder a mi duda!-, agradeció Iida para luego sentarse.
El joven maestro observó divertido como Nejire tenía su brazo más que extendido hacia arriba para llamar su atención.
-Mmmm, no sé quién pueda ser el siguiente…-, decía él con una mano en su mentón y sonriendo divertido al ver que la peliazul hasta se levantaba un poco de su asiento para elevar más su mano como suplicando ser elegida. -Quizás la señorita Hado-, dijo divertido mirándole, causando que la peliazul sonriera ampliamente para ponerse de pie rápidamente.
-¿Cuándo es su cumpleaños?, ¿Qué signo del zodiaco es?, ¿Cómo deberíamos llamarlo?, ¿Deku-Sensei o Midoriya-Sensei?-, preguntaba la peliazul sin parar y con mucha energía usual en ella.
-Solo responderé a una pregunta, pueden llamarme como mejor les parezca, no tengo ningún inconveniente con ello-, respondió Izuku con serenidad, provocando que Nejire se sentara en su asiento con un puchero ya que esperaba que respondiera todas sus preguntas. –Dígame, señorita Ashido-, dijo él concediéndole la palabra a la chica que luego se puso de pie.
-¿Usted tiene novia?, y si no tiene, ¿quiere tener?-, preguntó la pelirosa con una sonrisa pícara causando que varios se tensaran, específicamente las chicas que enfocaron su atención en su profesor que sonrió levemente.
-Esa es una pregunta muy personal señorita Ashido… no, no tengo pareja en estos momentos, si busco o no una lo dejo a su imaginación-, respondió el joven maestro con tranquilidad para luego tomar la tiza de su mesa y comenzar a escribir los detalles de su clase en la pizarra.
Mina por su parte sonrió para sí misma mientras que el resto de chicas suspiraban relajándose sin entender la razón de su interés por la respuesta de su maestro, de cualquier manera ignoraron eso y se centraron en prestarle atención a lo que decía el peliverde.
-Por eso las siguientes clases repasaremos los temas que hayan visto tanto en primero como segundo año, tendré en cuenta los aportes que hagan en base a las experiencias que han obtenido-, les dijo Izuku a todos con serenidad teniendo una mano dentro de un bolsillo de su bata mientras que con la otra escribía un poco de información en la pizarra.
Luego de eso el sonido de la campana retumbó dando por terminada la clase, a lo cual Izuku dejó de escribir y se giró a ver a su clase.
-Por ahora dejémoslo por allí, retomaremos lo demás en la última clase del día, por ahora será mejor que se apresuren a la cafetería-, les dijo con una pequeña sonrisa amigable y cerrando los ojos con amabilidad.
Ante eso los chicos comenzaron a guardar sus cuadernos y comenzaron a prepararse para salir del salón. Izuku por su parte se dirigió a su escritorio donde posaría sus manos con calma parar soltar un pequeño suspiro, no se había preparado un almuerzo para comer en la sala de profesores, además que ir a la cafetería por descuidado en su primer día podría dar una mala imagen.
-Midoriya-Sensei-, la voz de uno de sus estudiantes captó su atención e hizo que observara que la gran mayoría de su clase rodeaba su escritorio.
Él notó que los únicos que faltaban eran Mineta, Shouji y Tokoyami, pues Bakugou y Todoroki le veían desde sus asientos.
-¿Qué sucede?-, preguntó él con calma y tomando la compostura y colocando sus manos en los bolsillos.
Allí Saiko da un paso adelante para tomar la palabra. –Disculpe que ocupemos su tiempo Midoriya-Sensei, pero nos preguntábamos si usted en serio estudió aquí en Yuuei-, dijo la peligris con una pequeña sonrisa siendo lo más cortes posible mientras que varios de alrededor le apoyaban.
-Eso es cierto señorita Intelli, al igual que ustedes fui alumno de Aizawa-Sensei aquí en Yuuei, puede que no lo supieran a causa de la poca información personal que los medios tienen de mi-, respondió el profesor con una pequeña sonrisa mirando a sus estudiantes.
-Eso en verdad es asombroso, no sabía que el símbolo de la paz estuvo en la misma escuela que nosotros-, comentó Kaminari emocionado mientras que Sero asentía con la cabeza.
-¿No será difícil para usted ser profesor y héroe al mismo tiempo?-, le preguntó Kirishima al peliverde con una gran sonrisa curiosa.
-¿Es que acaso no lo oíste?, él se volvió profesor para descansar de sus actividades como héroe-, le dijo Jirou a su amigo pelirrojo con simpleza.
-Es cierto que estoy tomándome un pequeño descanso, pero aun así aplico mi título como profesional e intervengo en caso de ver algún villano-, aclaró Izuku con calma mirando a Kirishima, al cual se le iluminaron los ojos con emoción.
-¡Eso es muy varonil!-, exclamó el chico con emoción, causando que Izuku sonriera divertido.
Luego de eso Nejire se acercó al escritorio con una gran sonrisa mirando a su profesor.
-¿Cuál es su comida favorita?, ¿le gusta jugar videojuegos?, ¿Qué música le escucha?, ¿Le gustan los chistes?, ¿le cuento un chiste?-, llegó el bombardeo de preguntas de la peliazul al peliverde que sonreía calmado viéndole.
-Tienes que dejar de hacer eso, Nejire-chan-, regaño Momo a su amiga tomándola de los hombros para alejarla del escritorio. –Debes respetar la privacidad de Midoriya-Sensei, tienes que darle su espacio-, le dijo a Nejire que había formado un puchero y buscaba reclamar.
-No te preocupes, señorita Yaoyorozu-, dijo Izuku con calma captando la atención de sus dos alumnas, luego él se enfoca en Nejire. –Si quieres puedes hacerme todas las preguntas que quieras, pero solo obtendrás respuestas de mí a medida que me demuestres lo metida que estas en mis clases, ¿de acuerdo?-, decía él, causando que la peliazul se mostrara emocionada y asintiera con la cabeza.
-Dejando eso de lado tengo una duda para usted, Midoriya-Sensei-, dijo Shinso captando la atención del joven profesor. -¿Cómo fue ser estudiante de Aizawa-Sensei?-, le preguntó con calma.
-Estoy seguro de que ustedes ya lo saben al haber pasado dos años con él, no ha cambiado nada desde ese entonces-, respondió Izuku con serenidad.
-¿Cuándo comenzaremos nuestras clases de estudios fundamentales de héroes con usted?-, le preguntó Iida a su profesor mientras se arreglaba los lentes.
-La siguiente semana, el día de hoy solo es una pequeña introducción para mí, los días siguientes serán repasos de las bases como antes dije y luego podremos comenzar con los entrenamientos de héroes-, contestó el joven profesor mirando a su alumno que asintió y luego hizo una reverencia agradecido por la respuesta.
-¡Fue asombroso como se movió rápidamente para estar junto a Bakugou!-, exclamó Mineta emocionada y recordándole a los demás ese momento.
-Es cierto, nunca vi a nadie moverse a esa velocidad antes-, comentó Hagakure recordando la velocidad a la cual se movió su profesor.
-Esa rapidez supera mi velocidad de reacción, sin duda yo no sería rival contra usted-, dijo Mirio con una sonrisa viendo a Izuku con cierta admiración, pues tenía que ser el símbolo de la paz quien fuera la persona que les entrenaría de ahora en adelante.
-Por ahora debería ir a aprovechar el descanso, la siguiente clase les toca con Mic-Sensei si no mal recuerdo-, les dijo Izuku a sus alumnos.
-T-Tiene razón, disculpe por haber ocupado su tiempo-, se disculpó Uraraka un poco nerviosa y haciendo una leve reverencia al peliverde.
-No hace falta disculparse, es normal querer conocer más al nuevo profesor que estará con ustedes, pero tendremos tiempo para eso después-, les dijo a todos con una sonrisa amable, causando que los jóvenes comprendieran y sin más comenzaron a retirarse del salón.
Izuku observó que Bakugou bajó los pies de su asiento para comenzar a caminar a la salida con el ceño fruncido y un aura rebelde, siendo seguido por Kirishima, Sero y Kaminari que comenzaron a hablar animadamente entre sí.
Luego él se fijó en que Todoroki se levantó de su asiento con monotonía y se unió a Momo, Shinso, Jirou e Intelli a la salida mientras que detrás de ellos le seguían Mirio, Nejire, Tamaki, Iida y Uraraka para luego todos salir del salón dejando al profesor peliverde a solas.
(No esperaba conseguirme a Shoto en este lugar, al parecer no me recuerda, no sé si es algo bueno o malo pero por ahora es lo mejor), pensó Izuku mirando al techo de forma pensativa para luego sentir su teléfono vibrar en su bolsillo.
Con curiosidad lo sacó del bolsillo de su pantalón para observar que era un mensaje de Aizawa.
Aizawa: [Emi me preparó mucha comida, si gustas puedo darte en la sala de profesores]
Izuku suspiró aliviado de haber encontrado una solución para su hambre, debía recordar el agradecerle a la esposa de su ex maestro por haber sido su salvadora en esta ocasión.
Luego nuevamente su teléfono vibró captando su atención ante el nuevo mensaje que recibió.
Aizawa: [Aún tenemos que hablar seriamente sobre tus prioridades]
Ese mensaje mató la alegría del peliverde, el cual se sintió derrotado y comenzó a caminar a la salida de su aula.
Ahora recordaba los continuos sermones de su ex maestro cuando cada vez él se ponía en peligro, ahora que le tocaba volver a ser sermoneado podía sentirse de vuelta en aquella época de su juventud, había vuelto a Yuuei después de todo.
Luego el resto del día transcurrió sin inconvenientes. Le tocó volver a la clase 3-A para dar la su última clase introductoria y luego despedirse de sus alumnos para después caminar en dirección a la salida de la academia.
Al pasar unos minutos salió de las instalaciones donde se impulsó con un gran salto para salir despegado en el aire a gran velocidad. Las brisas del aire golpeaban su rostro y ondulaba sus rizos mientras estaba relajado a pesar de estar suspendido a varios metros de altura para comenzar a descender y volver a saltar.
Minutos después ya se encontraba frente a la casa en la cual creció y donde actualmente vivían sus padres. Sonrió con cierta nostalgia y se acercó a la puerta para tocar el timbre esperando a que atendieran.
Luego de esperar un poco comenzó a oír pasos acelerados hacia la puerta que se abrió rápidamente revelando a una pequeña niña de 5 años de piel clara con largo cabello blanco con reflejos azul claro, sus ojos son grandes y redondos con irises rojos y tiene un pequeño cuerno color marrón en el lado derecho de su frente. Lleva puesto un vestido rojo con encajes y unas sandalias blancas.
-¡Papiii!-, exclamó la pequeña Eri con inocente alegría lanzándose a los brazos de Izuku que la recibió con una amplia sonrisa feliz.
-Me alegra verte Eri, ¿te gustaron los Omelettes del desayuno?-, le preguntó el peliverde a la pequeña que se despegó del abrazo para asentir con la cabeza.
-Estuvieron deliciosos, compartí un poco con mi abuelito-, respondió la pequeña con ternura para luego tomar de la mano al peliverde y obligarlo a entrar a la casa donde adentro le esperaban su madre y Toshinori.
Su madre vestida con una camisa color crema, un suéter rosa y una falda amarilla. Toshinori por su parte llevaba un pantalón formal de color amarillo, una camisa blanca con corbata negra, y como es usual todo eso estaba excesivamente grande para lo delgado que él es.
-Y dinos, ¿Qué tal te fue en tu primer día?-, le preguntó Inko a su hijo con las manos juntas y una maternal sonrisa al ver como él entraba tomado de la mano de Eri.
-Estuvo muy bien, no tuve problemas en ningún momento y todos parecían mostrar atención cuando hablaba, digo yo que es un buen comienzo-, respondió el joven hombre con tranquilidad viendo a su madre.
-Eso es bueno, recuerda que tienes una gran responsabilidad al educar a esos jóvenes héroes en formación-, dijo Toshinori con una pequeña sonrisa posando una mano sobre el hombro de su hijo y discípulo al cual le paso la antorcha del One For All.
-Lo sé, me esforzaré por corresponderles adecuadamente-, respondió Izuku con alegría mirando al rubio para luego sentir como su hija jalaba su mano para captar su atención. -¿Qué sucede, Eri?-, preguntó él con una sonrisa.
-¿Cuándo podré acompañarte a la escuela?-, preguntó la pequeña niña con ojos de cachorros ya que no le gustaba estar lejos de su padre, cosa que causó que el peliverde sonriera enternecido.
-Ya estoy arreglando los detalles con el director Nezu, por lo cual espera un poco más, ¿de acuerdo?-, dijo Izuku con una gentil y cálida expresión a la pequeña, la cual asintió con alegría.
-Será mejor que se queden a cenar, así festejaremos tu primer día como profesor, Izuku-, dijo Inko con emoción y juntado sus palmas para luego dirigirse a la cocina.
-Eso suena bien, de esa forma nos puedes contar los detalles-, secundó Toshinori con una sonrisa viendo a su discípulo que asintió de acuerdo y luego de eso se fueron a sentar en los sofás de la sala para comenzar a conversar mientras que Inko preparaba la cena.
Se habían quedado más tiempo conversando con Inko y Toshinori y al llegar la noche tuvieron que volver a su hogar para descansar. Al llegar se habían quedado un rato viendo televisión en el sofá de la sala pero al llegar las 9 pm era la hora de dormir y se prepararon para eso.
Ahora Izuku y Eri salían del baño vestidos para dormir luego de haberse bañado y haberse cepillado los dientes. La pequeña tenía una linda pijama blanca de conejitos rosados mientras que Izuku llevaba unos calzoncillos negros dejando al descubierto su ejercitado cuerpo.
-Bueno Eri, ve a dormir a tu habitación-, le pidió Izuku a su hija mientras se acercaba a ella que estaba saltando sobre su cama con alegría.
-Pero quiero quedarme a dormir contigo, me da miedo estar sola, papi-, respondió Eri dejando de saltar y viendo con suplica a su padre que hacia lo posible por mantenerse firme.
-Recuerda que debes aprender a manejar tus miedos para volverte una niña grande-, le dijo él a la pequeña que agachó la cabeza con tristeza e inflando las mejillas.
-Pero yo no quiero ser una niña grande todavía, quiero quedarme con papi más tiempo-, dijo Eri en un adorable mohín mientras que sus ojos se humedecen y apretaba sus pequeños puños.
Izuku suspiró derrotado sin poder resistirse a la petición de su pequeña.
-Está bien, pero me debes prometer que te comerás las verduras que cocine la abuela, ¿de acuerdo?-, dijo el mayor con una sonrisa amable y gentil que le subió el ánimo a la niña que asintió mientras se limpiaba los ojos con un brazo.
-¡Muy bien, lo prometo!-, dijo Eri con una dulce y linda expresión que alegró al peliverde para que luego ambos se acomodaran en la cama para dormir.
La pequeña se acobijó cerca de Izuku para utilizar su brazo como almohada mientras que él sonreía levemente mientras observaba el techo de la habitación.
-Buenas noches, Eri-, dijo Izuku con cariño en su tono mientras que la pequeña estaba cayendo presa del sueño.
-Yaww, buenas noches, papi-, respondió Eri con una leve sonrisa luego de bostezar para luego cerrar sus ojitos y caer cómodamente dormida sintiéndose protegida en los brazos de su padre.
Izuku le miró con calma para luego suspirar y mirar nuevamente al techo. Ya pasaron 3 años desde que Eri llegó a su vida y la adoptó como su hija, lo cual agradece profundamente al ella volverse un pilar esencial para él.
(¿Quién lo diría?, soy padre y profesor, solo falta estar casado), pensó en broma para luego reír por lo bajo para no despertar a Eri. (Tampoco es como si alguien se interesara en mí, pero no puedo dejar que Eri crezca sin una figura materna, aunque esos son problemas para más adelante, por ahora estamos bien), pensaba el peliverde con calma para luego cerrar sus ojos y caer dormido en el mundo de los sueños.
*Fin del Capitulo*
Y eso ha sido todo por este primer capítulo, fue más que nada como una breve introducción a este mundo. En los siguientes capítulos se profundizará más a fondo en las interacciones entre Izuku y su clase así como la vida personal del joven profesor, padre así como símbolo de la paz. Espero que no les moleste el cambio que hice para incluir a los tres grandes, a Shinso y a Saiko en la clase 3-A, ya que lo vi poco usual y me serviría para explorar más en las interacciones interpersonales entre ellos cinco con el resto.
Espero que les haya gustado esta idea a historia y si es así entonces comenten en los Reviews si les interesa que la continúe. De cualquier forma sin nada más que decir me despido de ustedes hasta la próxima… Sayonara.
