Naruto y sus personajes no me pertenecen...el que escriba es mero pasatiempo
Que tal!!
Pues aquí estoy nuevamente...
Antes que nada debo aclarar que la historia que está en proceso... está pensada para que sea larga, la trama en general la irán conociendo conforme avancen los capítulos, espero tengan paciencia…De verdad quiero que esto quede bien y en el gusto de ustedes los lectores...
Dicho lo anterior es hora de iniciar!!Vamos Mis Elites!! (Olviden eso ¬¬)
&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Capitulo 1
Desesperación
Lentamente abrió sus ojos, temía encontrase con esa misma soledad en la que hace algunos días se había visto envuelta , se movió intentando encontrar alguna posición más cómoda, era imposible el dolor de sus manos, de sus muñecas a cada minuto se volvía más insoportable, pero no quería rendirse, quería luchar y nada la detendría, esta vez no podía huir y su destino simplemente dependía de ella, no de su padre ni de su hermano, tampoco de esa chiquilla mimada que lloraba con facilidad, se había vuelto mujer y esta vez tendría que luchar por su cuenta, volvió a moverse pero ahora con rabia , esa rabia guardada durante años de no poder ser indispensable , de ser esa muñeca intocable, esa muñeca que solo servia para ser admirada que no era valorada por nadie y a la que nadie le importaba, volvió moverse ahora con lagrimas en sus ojos, con mucha fuerza y un grito ahogado, pero la maldita soga parecía invencible, cortaba lentamente su piel, quemándola en cada uno de sus movimientos que se volvían mas desesperados. Después de un rato el dolor se había ido, lo intento con sus piernas, lucho y lucho , pero otra vez la soga se interpuso en su camino y sangro la delicada piel de princesa, esa piel que nadie pudo tocar, hasta aquel día que ese hombre entro por su ventana, segó su vista y la abandono sola en la oscuridad, de pronto otra vez pudo sentir dolor , pero ya no le importaba, apenas podía respirar, el llanto la estaba ahogando "debo hacer algo" intento gritar pero su boca estaba sellada, de repente se quedo inmóvil, un escalofrió recorrió su cuerpo, alguien se acercaba rápidamente, intento acomodarse, no pudo y lo único que obtuvo fue un golpe en el rostro, torpemente intento moverse en el suelo, otra vez fallo, estaba muy nerviosa, estando en el piso podía escuchar claramente como alguien se acercaba, tuvo tanto miedo que inconscientemente comenzó a temblar, aunque quizás fuera el frió, no lo pensó y con su último aliento intento librarse de la soga, sin embrago se detuvo en seco , frente a ella se encontraba alguien, podía ver sus pies, en un movimiento instintivo se impulso hacia atrás -no te cansas?- pregunto una voz grave, imponente , ella se limito a balbucear, en ese momento lo único que podía hacer era mirarlo, y lo peor del caso es que ni siguiera distinguía del todo a aquél sujeto
- te dije que te estuvieras tranquila- nuevamente se escucho esa voz y la silueta, reflejada por la luna, se acerco al cuerpo de la chica que tirada en el suelo, atada de pies y manos, amordazada y lastimada, respiraba agitadamente en busca de aire, el sujeto le quito el trapo que sellaba su boca -maldito, déjame salir, desátame, no te quedes mirándome, quítame las cuerdas- grito desesperada la muchacha que violentamente se revolcaba en el suelo
- ¿¿que te las quite??...lo siento pero es mi trabajo- dijo el hombre y la tenue luz que iluminaba aquella habitación mostró el rostro de el sujeto, aunque este estuviera cubierto por una máscara, y uno de sus ojos tapado por una extraña cinta, lo mechones plateados cubrían parte de su frente y se dio cuenta que aunque su aspecto fuera extraño, no parecía ser el maldito que la secuestro.
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Espero le haya gustado, de mi parte creo que es todo, debo aclara que la historia esta desmembrada (sadismo!) en pocas palabras que esto es solo el inicio, los detalles se irán revelando conforme avance la trama. (Paciencia TT…espera creo que eso ya lo había dicho ¬¬u)
Este fic lo dedico a aquellos que han reconocido mi existencia…con mucho cariño.
Gracias Setza-san, Jane, FW y Dibrael.
Atte. Aizar.
"Los amigos verdaderos son los que vienen a compartir nuestra felicidad cuando se les ruega, y nuestra desgracia sin ser llamados.", Demetrio de Falera
