Buenas aquí me encuentro nuevamente para compartir con ustedes lo que para mí hubiera sido la continuación del fic INOCENCIA ROBADA de la autora KARYNITA .Muchos saben que la autora hace años desapareció de fanfiction y hasta ahora no hemos sabido nada de ella .¡ NO ME ESTOY ADUEÑANDO DE SU HISTORIA ! ella es la única autora original de dicho fic , yo solo me inspiro en él para darle una hipotética continuación si en algún momento ella volviera yo quitaría mi historia.

Sin mas por el momento aquí la mi continuación de INOCENCIA ROBADA, autora original Karynita. Los personajes de naruto pertenecen al gran masashi kishimoto.

Chapter : 32 Lagrimas

Una hermosa pelirosa comenzaba a despertarse, se encontraba en algo blando, supuso era una cama. Cuando logro abrir sus ojos y enfocar un poco mejor la vista noto que se hallaba en su cuarto. Sentía todo el cuerpo extremadamente pesado además de un profundo dolor de cabeza. Se fue reincorporando hasta quedar sentada en la cama; se sentía muy confundida y desorientada y el dolor de cabeza no ayudaba en nada, tanto que tuvo que sostenerse con ambas manos los lados de la cabeza para aliviarse algo el intenso malestar, pero al instante las imágenes de todo lo ocurrido ese día la azotaron como un rayo que golpeaba bruscamente su interior: la discusión con la señorita Ino; el señor Neji; su discusión con el joven Sasuke.

Con cada recuerdo era como una estaca que se incrustaba en su frágil corazón .con cada imagen que pasaba por su mente el llanto, que para ese entonces ya había inundado sus ojos, era incesante. Si había pensado que ese día no podía ser peor pues se había equivocado porque al fin de cuentas el punzante dolor que sentía en su pecho terminado destrozándola y ahora ya no sabía que podía hacer.

Es que ¿Qué haría a partir de ahora? Estaba más que segura que el joven Sasuke nunca creería en lo referente del trato del señor Fugaku a la señora Mikoto, además que ahora ya no la trataría como antes ni confiaría en ella, mejor dicho nunca confió en ella

-SAKU: después de todo porque abría de creerme. Él es su padre, su familia y yo no soy más que…que una simple sirvienta- se lamento en llanto la joven pelirosa -¡ Nunca debí de ser tan ilusa, al pensar que… ¡-fue interrumpida por sus propios sollozos .

La pelirosa se sentía totalmente perdida, el dolor que albergaba en su pecho era tan grande y tan abrumador que lo único que pudo hacer fue abandonarse a el y dejar que se llevara aunque sea un poco de tristeza; aunque no abría suficientes lagrimas que puedan vaciar el pozo amargo en el que se sentía hundida pero aun así: lloro, lloro y lloro lo que le pareció una eternidad.

-….. … …. ….-

Sasuke se encontraba sentado frente a su escritorio, en su despacho con algunos documentos que revisaba pero la verdad es que no estaba nada concentrado. No podía dejar de pensar en la pelirosa de ojos verdes a la cual no había visto desde que la dejo lo mas cómoda posible en la cama de su cuarto (de ella) luego que se había desmayado en sus brazos tras la discusión de esa tarde.

-SAS: tks, maldición! -mascullo enojado consigo mismo, y es que no podía evitarlo estaba muy preocupado por ella.

FLASBACK

Al verla tan alterada y temblorosa a medida que su discusión subió de tono, que cada segundo su rostro empalidecía y su frente se llenaba de una capa de sudor, trato de tranquilizarse y recuperar su autocontrol pero para cuando lo logro apenas y alcanzo a llegar a su lado y evitar que se diera un fuerte golpe en la cabeza tras haberse precipitado al frio piso. Y entonces nuevamente se alteró pero esta vez de preocupación por ella.

Al principio trato de hacerla reaccionar pero al ver que era totalmente inútil y que la chica estaba totalmente inconsciente pensó que lo mejor era dejarla descansar, después de todo ya no tenía caso seguir peleando por algo que para él ya estaba claro. Así que con la mayor delicadeza, que solo con ella era capaz de emplear, la cargo en sus brazos y la llevo hasta su cuarto el cual no había olvidado cual era. Una vez allí, con la mayor delicadeza la recostó y acomodo en la cama; con cuidado le retiro un mechón de cabello del rostro y con el dorso de su mano acaricio su mejilla. No podía evitarlo, el verla ahí acostada, con el rostro pálido, con los rastros de lágrimas en sus mejillas, además de su casi imperceptible mueca de dolor. Tan frágil, tan delicada lo hacían sentir una amarga sensación en el pecho, más aun al saber que fue él quien provoco todo eso.

Pero no¡ el hizo lo correcto al dejarle las cosas claras a Sakura . Claro que sí!… Por mucho que él sienta lo que siente por ella… por mucho que… "la apreciara", no iba a permitir que difamara el nombre de su padre.

Porque su padre… su padre jamás… jamás sería capaz de hacer algo tan bajo como lo que ella decía… ¡ ESO NUNCA ¡

Con ese pensamiento en mente se levantó del borde de la cama donde se había sentado a contemplarla y se fue de aquella habitación. Esperaría que la chica se recompusiera para finiquitar de una vez por todo aquel asunto.

FIN FLASBACK

El ojinegro fue sacado de su letargo por los golpes en la puerta de su despacho.

-SASU: pasa! – dijo a la persona del otro lado.

-TEN: Señor aquí está su café – contesto la pelimarrón que traía una taza humeante de café en sus manos. La chica se deslizo cuidadosamente hasta dejar la taza en el escritorio con la mirada totalmente inexpresiva y fría de su patrón- ¿Necesita algo más señor?- pregunto ahora con un tono de voz más… normal, sin ese matiz coqueto al que el pelinegro estaba acostumbrado a oírla hablar; empalagoso e insinuante.

-SASU: Sabes si Sakura ya salió de su habitación?- pregunto aparentando indiferencia pero en el fondo un poco incómodo.

-TEN: Pues la verdad es que no la he visto, como hoy es su día libre no sé si estará en la casa- respondió la ojimiel con fastidio que él prefirió ignorar.

-SASU: Ve a su cuarto y mira si esta despierta- ordeno el moreno con molestia por su actitud hacia la mención de la pelirrosa – Si esta despierta dile que venga a mi despacho, que necesito hablar con ella ¡¿Esta claro?!-inquirió con tono severo.

-TEN: Claro, señor, como usted ordene-hizo una leve inclinación y se retiró a cumplir con la orden de su patrón aunque no de muy buena gana.

-….. … …...-

La ojijade se hallaba sentada en el borde de la cama con un vestido muy simple que usaba como pijama para dormir. Se estaba cepillando el cabello el cual estaba algo húmedo por el reciente baño que había tomado luego de haberse pasado prácticamente todo el día llorando. Sentía los ojos muy hinchados, además que aún le escocían un poco, por otro lado sentía el cuerpo más ligero. La verdad el baño le había hecho bien, por lo menos el malestar había disminuido un poco, casi nada pero algo es algo.

Por la ventana de su cuarta podía ver que ya casi anochecía. Solo deseaba que este día acabara de una vez por todas, que en la mañana pudiera despertar y sentir que todo mejoraría aunque la verdad sea que eso nunca pasara.

-SAKU: Ahh! – Suspiro con tristeza – Solo espero que el joven sasuke no quiera que me vaya- ciertamente ese pensamiento la tenía aterrada. Es que si el joven la echaba, ¿Qué sería de ella? ¿Adónde iría? . Y sí, tal vez no sería tanto problema después de todo bien podría buscar otro trabajo. Pero lo que realmente le aterraba era nunca volver verlo; a él y a la señora mikoto. Nunca volver a escuchar su voz, ver sus hermosos ojos tan negros y profundos como la noche, esos inigualables destellos azules de su alborotado cabello azabache, su rostro… definitivamente no podría, no soportaría no ver nunca más al hombre del que irremediablemente se había enamorado.

Bueno esa es la más importante de las razones por las que no le gustaría irse pero también porque el poco tiempo que llevaba viviendo en Konoha, si bien es cierto que no todo a sido un lecho de rosas para ella, también se ha hecho de personas a las que estima mucho. Personas que podría considerar amigos, sus primeros y únicos amigos. Además por nada del mundo quiere que la señora Mikoto se quede sola en esa casa donde nadie la quiere, solo ella. Así que, no! Por nada del mundo puede irse de esa casa.

-TEN: Así que si estabas aquí-dijo la pelicastaña al abrir la puerta bruscamente y ver que la pelirosa estaba sentada en la cama pensando quien sabe en qué?

-SAKU: Tenten ! – comenzó llevándose ambas manos al pecho y dejando caer el cepillo del susto - ¿Por qué no tocaste?!-pregunto molesta de que entrara de esa manera a su recamara.

-TEN: Yo no tengo la culpa de que estés en otro mundo y andes pensando en quien sabe qué?! –Mascullo con petulancia- o en quién!?- dijo esto con malicia y viéndola de manera desdeñosa.

-SAKU: ¿Qué es lo que quieres?- pregunto impaciente, lo que menos quería era escuchar las tonterías de las otros sirvientas de hecho lo que menos deseaba era encontrarse con ellas o con Kasa, eso sería demasiado.

-TEN: El señor Sasuke quiere verte- comenzó con desdén- me pidió que ORDENARA que fueras ahora mismo – se esmeró en hacer énfasis en lo de "ordeno"- y mejor no lo haga esperar mira que se veía bastante molesto-aunque más bien le parecía que estaba más serio y frio de lo normal pero eso no se lo tenía porque decir a esa chiquilla que en nada le caía bien.

Luego de haber dicho esto la pelicastaña se fue dejando a una pelirosa totalmente paralizada con una mueca de preocupación plasmada en el rostro y las lágrimas comenzaron a asomarse nuevamente en sus ojos, dándole ese toque cristalizado a esas dos preciosas gemas que albergaban profunda tristeza.

¿Sería este el momento de decirle adiós a Konoha y a todos los que allí conoció?

-…. …. …-

Sasuke se hallaba parado al pie de la ventana de su despacho contemplando el caer de la noche. No había podido avanzar nada en su trabajo ya que no tenía cabeza para eso ese día. Esperaba que Sakura ya se hubiera despertado y viniera hasta su despacho como había pedido. Más que por el asunto de su padre era porque necesitaba verla y asegurarse que ya estaba bien.

Fue entonces que la escucho, el delicado toque de la puerta lo hizo reaccionar.

-SASU: Adelante! – dijo con voz ronca. Se dio la vuelta para inmediatamente verla entrar a paso dudoso y cerrar la puerta tras de si.

Lo primero que noto es que tenía los ojos hinchados y aunque ella no estaba mirando a los ojos, pudo notar que estos estaban enrojecidos por lo que seguramente al despertar y recordar todo lo de sucedido se habría puesto a llorar y eso le estrujo el corazón y desvío la mirada.

Por su lado la pelirosa estaba muy nerviosa, no sabía que hacer o que decir solo sabía que no era capaz de levantar la mirada del suelo. No se animaba a verlo a los ojos. También se había despegado de la puerta cerrada y la verdad es que no se podía mover. Estuvieron así en silencio por unos segundos que les parecieron eternos a ambos hasta que fue Sasuke quien finalmente hablo

-SASU: ¿ya estás bien?- carraspeo algo tenso por la situación. La ojijade tan solo asintió con la cabeza levemente luego de unos minutos y sin levantar la mirada- Bien… ¿Por qué te desmayaste?- soltó de repente. No era lo que quería decir pero no se pudo controlar, ella lo descolocaba por completo de lo que realmente quería

Sakura solo se encogió de hombros como restándole importancia. Eso realmente lo molesto pero no quería comenzar una nueva discusión con ella, así que mejor directo al grano.

-SASU: En fin- suspiro irritado- te pedí que vinieras porque quiero zanjar de una vez el asunto de esta tarde- comenzó seriamente y con su mirada severa- Voy a pasar por alto tu irreverencia y todas esas… ridiculeces que dijiste acerca de mi padre-su voz sonó contenida, es que solo recordar lo que Naruto le dijo… mejor no lo recordaba- Pero por tu bien no quiero volver a oír que andes difamando su nombre ni nada por el estilo ¡¿Está claro!?-pregunto seriamente.

-SAKU: …. – la ojijade trato que su voz saliera pero es que al despegar los labios nada salía de ellos y lo peor de todo es que sentía como le escocían los ojos y tenía la vista nublada. Estaba haciendo el más grande esfuerzo porque las lágrimas no comenzaran a escurrir por su rostro pero sentía que no aguantaría. Le dolía mucho el como el joven le estaba hablando, no tanto lo que le dijo, aunque eso también contribuía a su desasosiego; lo que la estaba afectando realmente era ese tono duro, frio y severo que nunca antes había usado para con ella.

-SASU: Sakura, me has oído?!- el azabache al ver que la chica abría la boca como pez fuera del agua y no decía nada se acercó a ella, sobre todo porque parecía que se desmayaría otra vez.

La joven al ver a su patrón tan cerca y tan de repente no pudo evitar sobresaltarse. No lo podía evitar él siempre la ponía muy nerviosa aun en las peores situaciones. Para Sasuke era lo mismo, lo cierto es que se moría por tenerla nuevamente cerca de él. Aunque ahora estuvieran separados por unos escasos centímetros era suficiente pues así podía sentir más profundamente su delicioso aroma a cereza, el cual lo embriagaba por completo.

-SASU: Sakura – la llamo nuevamente pero ya no con ese tono frio e indiferente, solo su tono normal y tranquilo

-SAKU: S-si…- al fin logro que le saliera la voz, además de levantar levemente la mirada para verlo, sintiendo un poco de tranquilidad al oír como cambio su tono de voz

-SASU: Bien – dijo el pelinegro mirándola fijamente con sus profundos orbes negros a la par que la chica se perdía en su mirada.

Estuvieron así por lo que parecieron eternos minutos pero finalmente la pelirrosa reacciono y apartando la mirada se removió incomoda en su lugar.

-SAKU: Jo-joven- tartamudeo nerviosa-ya… ya me puedo ir? –pregunto queriendo huir de allí de inmediato, esa mirada siempre le removía cada milímetro de su ser

-SASU: ….- no respondió, seguía clavando su mirada en ella y es que hasta ahora notaba que la chica traía el cabello ligeramente húmedo y comenzaban a hacérseles esos rulos que le gustaban en las puntas aun a pesar que no lo tenía tan largo como antes.

También no pudo evitar fijarse en su vestimenta: un simple y muy sencillo vestido que se le ceñía al cuerpo y que si no fuera por esa fina tela que le cubría a modo de abrigo le transparentaría los pechos.

-SAKU: Joven –volvió a llamarlo la ojijade

-SASU: Si, puedes irte- dijo volteando para ya no seguir ante la tentación de continuar admirando su cuerpo

Sakura se giró para tomar el pomo de la puerta y marcharse a su habitación antes que otra cosa ocurriera, o al menos eso intento pero…

-SASU: Una cosa más- comenzó el moreno viéndola de soslayo por encima del hombro- Puedes volver a tus labores habituales como las otras en la casa- quizá está siendo demasiado duro con la joven pero en parte sentía que debía reprenderla de alguna forma- La única diferencia es que estarás contratada directamente por mí y seré yo el que te pague. Entendido?

-SAKU: Si – susurro con la voz quebrada. Ya no podía más debía irse- Con permiso! – se marchó prácticamente corriendo y al llegar a su cuarto no pudo hacer más que lanzarse a llorar en la cama hasta que cayo envuelta en los brazos de Morfeo

El azabache por su parte solo estuvo unos minutos más en su despacho pero luego se retiró también a su habitación; no quiso cenar por lo que una vez allí solo se colocó su pijama y se dejó caer en la cama.

Al poco tiempo se dejó llevar por el cansancio y estrés físico y mental acumulado en todo ese terrible día.

-… …. ….-

Bueno este fue mi primer capítulo de mi versión de lo que pudo ser la continuación de Inocencia Robada. Espero les guste a algunos, se que tal vez no sean tan fantástica como la de Karynita ´pero hare mi mejor esfuerzo.

También me disculpo por los fallos de ortografía que se me hallan escapado. Quiero aclarar que no podre actualizar muy seguido ya que me queda realmente difícil pero tratare en lo que pueda que no sean tan lentas las actualizaciones.

Sin más que decir me despido, espero me dejen sus críticas, comentarios u opiniones siempre con respeto por favor.

P.D: CONTINUACION INSPIRADA EN INOCENCIA ROBADA, AUTORA ORIGINAL KARYNITA