Cadence estaba sentada en su pupitre, Observaba el pizarrón lleno de ecuaciones y números difíciles de entender.
El asiento de a su lado estaba vacio, ese lugar es ocupado por su amiga Ep que faltó hoy... En realidad era viernes y casi nadie venia, solo hay Diez u once alumnos en total de 28.
Es aquí cuando la Dj se arrepiente de haber venido cuando pudo quedarse en su casa a escuchar música o rascar discos como todos los viernes que su madre sale a trabajar y llega muy tarde, jamás se entera de que día falto.
- Suspendan su actividad, hay una alumna nueva.
Interrumpió el profesor mientras abría la puerta del salón que siempre estaba cerrada en su clase.
Entro una chica rubia de pelo lacio y largo. Tenía un vestido blanco que le llegaba a las rodillas y una chamarra verde con naranja. Sus ojos eran azul brillante y su boca tenía una sonrisa gatuna.
Cadence sonrió, quizás ella no la recuerde pero era una gran amiga suya de la infancia. En sexto de primaria se separaron y no se volvieron a ver... Hasta ahora. En ese entonces Cadence tenía su pelo natural y sin pintar: Un café claro y ligeramente más largo que ahora.
Se quedó mirándola un rato hasta que el maestro la bajo de las nubes.
- Puede sentarse a un lado de la señorita Cadence.
La rubia se sentó a su lado como el maestro le dijo, causándole un extremo sonrojo a la peli-morada.
El resto de la clase fue silencioso. Solo era copiar y resolver todo hasta que el timbre sonó para el cambio de clase.
- Cadence
Le dijo Francis mientras guardaba su cuaderno en la mochila.
- ¿Te acuerdas de mí?
Respondió la otra emocionada.
- ¡Obvio que sí! Te reconocería en donde fuera.
Cadence se sonrojo al recordar lo que paso con ella el día que se fue.
Fue un lunes cuatro semanas después de iniciar las clases, Francis y Cadence llegaron juntas como de costumbre. Siempre fueron las chicas populares de la escuela y todos las conocían, sobre todo porque siempre ponían la música en los eventos y les gustaba montar pequeños conciertos en medio del patio.
Francis era y sigue siendo un poco tímida, siempre quiso mucho a Cadence... Pero de otra manera de la que termino por darse cuenta su padre, un tipo que tenía cara de ser alegre, pero muchos le tenían miedo.
Estaba decidida a confesársele pero necesitaba el momento adecuado. Así en medio de la clase, escribió en un papel todo lo que sentía y se lo entregó en la mano.
Cadence la miro sonrojada mientras sostenía aun el papel en la mano, no conto con que la maestra le quitaría el papel y lo leyera frente a todos.
¡El problema no era que todos lo supieran! Era que el padre de Francis acababa de entrar al salón y lo escucho TODO. Saco a su hija de la mano y ella solo se despidió de Cadence con la mano, sin saber que sería el último día en 5 años que la vería.
El martes de esa misma semana, se corrió rápidamente la noticia de que Francis se iba a México con su familia y a estudiar allá, Cadence miraba su asiento vació y sentía un poco de culpa.
Las semanas pasaron, Francis y Cadence volvieron al pasado y volvieron a ser las mejores amigas... Pero Francis jamás le volvió a mencionar sobre la carta y sus sentimientos.
Resulta que Francis regreso por su banda, 3 desastrosos chicos con un futuro prometedor. Había dejado a su padre en México y vuelto para buscarla. Cadence aceptó sin duda a ayudarla y saco sus discos favoritos.
Cadence y Francis se volvieron bastante populares en toda la isla. La dulce voz de Francis combinaba con la poderosa voz de Cadence que la mayoría de veces cantaba.
Pero Petey, Billy y Bob sabían que algo se traía su tecladista con la bailarina, No era que se juntaran tanto... Si no que el aire romántico desprendía de ambas cada que hablaban o se contaban chistes... Era obvio para ellos que estaban enamoradas y no iban a callárselo.
- ¿Por qué no le dices a Cadence?
Le preguntó Petey un día.
- ¿Decirle qué?
-Pues que te gusta
La rubia se sonrojo como un tomate y miro hacia el techo para disimularlo, lo cual obviamente no funcionó.
- ¿Por qué crees eso?
Preguntó nerviosa.
- Desde aquí a la luna se nota Francis, decir lo contrario es como decir que odias la pizza: Absurdo
El del gorro soltó una risa burlona y se fue a su cuarto.
Francis pensó en lo que Petey le dijo. Eligió un día antes de irse a un evento de bandas que iba a haber en Inglaterra para decírselo todo a Cadence.
Fue a su casa y toco la puerta. La de pelo morado la abrió encontrándose a Francis sonrojada y con un clavel en la mano.
- Cadence... Yo quería decirte que... Bueno en realidad ya lo sabias desde hace mucho tiempo pero quería recordarte que te sigo queriendo...
Cadence tomo la flor y le sonrió
- ¡Yo también te quiero mucho Francis!
Grito mientras la abrazaba con fuerza y reía emocionada. La rubia le dio un tierno beso antes de irse a su viaje.
-Volveré pronto, ¡Te llamaré cuando este allá! Son como 3 horas de vuelo.
Se despidió.
En la noche esperó su llamada que nunca llego. Se fue a dormir creyendo que se le había agotado la batería. En la mañana despertó y prendió su televisor:
Francis nuevamente iba a dejar a Cadence... Pero esta vez para siempre.
No me odien plz (?)
Esta idea la traigo desde hace 1 semana y necesitaba escribirla o explotaba D: (?)
