CAPITULO 1
DESINTOXICARSE
Me encontraba inmensamente enamorada de esos ojos desafiantes, pero ella estaba fuera de mi alcance, por años la observe caminando a mi lado y después solo me miro de reojo y continuó por un rumbo distinto al mió, dejándome de lado como quien se deshace de un viejo objeto, eso era exactamente en lo que me convertí para ella más yo no me habia dado cuenta a tiempo de aquello, ya no sonreía al estar conmigo solo me veía con su mirada de hastío, ya no podíamos hablar porque era algo molesto incluso llegué a sentir el mismo desagrado por mi. Y para empeorar aquello apareció una mujer llamada Tomoe que montó todo un teatro de lastima para atraparla y lo logró, se había llevado entre sus mentiras a la mujer que amaba, yo estaba devastada había desperdiciado gran parte de mi vida en una persona que no valió la pena, Tomoe tenía bastante plata así que ella estaría mejor que nunca y yo no tendria que volver a sentirme de esa manera, Marina estaba muerta para mi.
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-¡Que onda amargada!-dijo una chica pelirroja.
-Nao ¿por que siempre eres tan desagradable?
-Natsuki, eres muy amargada, no te diviertes, no sonríes, nada más de verte con esas jetas me da flojera hasta respirar.
-No puedo estar al mil, es difícil el trabajo y la escuela.
-Por eso debes salir con tu amiga Nao para que te distraigas un rato, anda salgamos a una fiesta.
-No me gusta andar de reventada, ya lo sabes.
-Solo tomaremos una cerveza, hablaras con otros seres humanos y te prometo devolverte a casa sana y salvo en tres horas.
-¿Me prometes que me dejaras en paz después?
-Prometido, paso por ti a la universidad el viernes a las 7pm.
-De acuerdo.
Tenía bastante tiempo sin salir de casa, desde que mis padres me enviaron a estudiar a Tokio para que pudiera estudiar medicina y ser el orgullo de la familia, en la universidad contamos con dormitorios mi roomie es la escandalosa de Nao, ella es estudiante de enfermería pero se la pasa de fiesta en fiesta y de cama en cama así que no es normal verla seguido, yo estudio la mayor parte del día y trabajo medio turno por las noches en una cafetería, conocí a un par de personas en mi estancia como mi amiga Mai que es la encargada de la cafetería donde laboro, a Midori que es la encargada del piso donde vivo, con todo lo que tengo que hacer diariamente olvide algunos de mis pasatiempos y creo que eso me ha generado una depresión que cada vez tiende a hundirme un poco más no lo suficiente para hacerme caer, se me ocurrió que podíamos poner un poco de ambiente a la cafetería si teníamos un pequeño espacio con música en vivo, pero nada ruidoso, Mai comparte un gusto conmigo que es el de esas voces de jazz olvidadas, esos Bossa Nova que son como un buen café intensos pero suaves, el día de hoy hará audiciones para ver si encontramos una voz, ya que hemos reunido buenos músicos pero falta solo ese elemento, sin embargo mis prácticas se prolongaron y no logre estar presente en la audición pero confió en los buenos oídos de Mai para encontrar el talento en un mar de individuos, llegue corriendo a la cafetería me sentía emocionada por ver a los músicos, al abrir la puerta la melodía me impactó de golpe, pero lo que realmente me robo el aliento fue la voz que una joven de cabellos castaños dejó escapar, fue como estar en un vació infinito, en medio de una oscuridad absoluta donde su voz se escapaba en una brillante luz que entraba directamente en mi, sus ojos permanecían cerrados mientras observaba al resto de la banda, Mai me tomó del brazo.
-¿Qué te parece?
-Yo creo que esta bien, ¿de donde salio?
-A mira en la percusión esta Nina, Tate toca el piano, Mikoto el bajo, y Alyssa la guitarra, son un buen sonido.
-Y la que está can…
-Ah, claro ella es Fujino-san realmente a todos los conocía a excepción de ella.
-Fujino dices, me parece haberla visto antes en el hospital.
-¿En serio?, no parece que sea médico, más bien parece que siempre se ha dedicado a la música.
En ese momento fueron interrumpidos por un mar de aplausos, era la primera vez que había tantas personas reunidas, Mai estaba desbordante de energía.
-Hey excelente trabajo chicos, descansen unos minutos.
-Si gracias Mai-san, ¿Natsuki qué haces aquí?-dijo el chico sorprendido.
-Tate, hola lo mismo me pregunto de ti, yo estudio medicina y trabajó aquí por las noches.
-Es increíble encontrarte aquí, bueno yo estoy estudiando una ingeniería pero es difícil encontrar un buen trabajo de pocas horas, además disfruto mucho tocando el piano.
-¿Creí que solo tocabas la batería?
-No, se me da bien el piano, la batería y el chelo.
-Chicos me alegra que ya se conozcan, les presento al resto de los músicos.
Los salude de uno en uno, pero de pronto la chica desaparece, su rastro se perdió en segundos, me sentí un poco nerviosa, Salí a tomar un poco de aire por la puerta trasera y ahí estaba fumando un cigarrillo, exhaló una bocanada mientras lentamente sus ojos rojizos se posaron en mí, y esbozo una pequeña sonrisa.
-Lo siento debía avisar que saldría.
-Yo, no te preocupes, yo solo Salí por un poco de aire, creo que debo volver.
-Espera, mi nombre es Shizuru –dijo extendiendo su mano-.
-Natsuki, es un placer conocerte Shizuru-san.
- Por favor no seas tan formal, con solo mi nombre está bien, ¿disfrutaste la canción?
-Sí, fue increíble, de alguna manera es medicina para el alma, pero nostálgica, emm, yo debo regresar.
-Claro, vamos yo también tengo que continuar-dijo apagando el cigarrillo-.
Entramos de nuevo, por otro periodo de tiempo interpretaron más temas, pero yo me sentía hechizada cada que entonaba otro fragmento, era como si estuviera curándome de algún modo heridas que ni yo conocía de mi entonces. Llegue a casa a la 1 a.m. Midori me esperaba en la puerta.
-Buenas noches Natsuki
-Hola Midori, lamento la demora.
-No te preocupes mientras le hables bien de mi a Mai puedo esperarte toda la noche.
-Claro, que le hablo bien de ti, aunque deberías de ir conmigo para que la conozcas mejor.
-Aun no estoy lista para eso-dijo sonrojándose- bueno ve a dormir nos vemos después.
Al abrir la puerta me sorprendió encontrar a Nao acostada en su cama, nuestra habitación estaba en el tercer piso y la vista que se tenía era muy agradable, a pesar de la selva de edificios la luna se veía perfecta. Me acosté agotada pero no podía borrar la imagen de aquella chica, sin duda me dormiría pensando en ella.
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Esta es la última vez que tendré que beber para dormir, hoy conocí a una chica que aprecia lo que hago, y extrañamente pareciera saber el dolor que me embriaga es la única que pone ese gesto de angustia, podría ser también que solo sean ilusiones vanas pero de no ser así, sería lindo para variar, pensar que alguien se duerme pensando en mi, ya no hay más que fotografías viejas de cuando solías quererme, de cuando yo era tu mundo sin embargo para ti ya existen otros planetas y por mi bienestar me conviene olvidarte, estoy en el proceso de desintoxicación de tus mentiras, pensando lo bien que lo pasas con ella porque tu la consideras mejor que yo, más bonita, más lista, tal vez ella logre lo que yo no pude y te haga sentir completa mientras yo aquí me fumo un cigarro sintiéndome vacía.
