Todos los personajes le pertenecen a Cassandra Clare, ninguna es mío.

Este fic participa del Reto Exprés "Familias de Nefilims" del foro "Cazadores de Sombras".


Prohibido


Comenzaba a entender el verdadero daño que podía causar, pero también seguía gustándole, atrayéndole, excitándole. Pero no, no podía, no debía, era imposible. Era como su hermana, su mejor amiga, ¿no? Claro que sí, si no, jamás se habría vuelto su parabatai. Pero entonces, ¿qué era ese sentimiento? Nada, no había sentimiento alguno, bueno, al menos eso era lo que se decía a sí mismo todas las noches antes de dormir y todas las mañana antes de salir de la cama. O cuando la veía. O cuando la abrazaba porque se alegraba de que seguía viva después de alguna batalla con algún demonio sucio. Pero, oler su cabello, ver sus ojos, tocar su piel… era… intoxicante… gratificante… delicioso. Pero no, era su parabatai, había hecho un juramento, había aceptado un destino, había sellado su sentencia de muerte en vida. Desde antes de convertirse en parabatais, Silas sabía que amaba a Eloisa más que a nada en el mundo, pero había creído que era la clase de amor ideal para ser compañeros de combate, no de vida. Era joven, tonto, iluso, nadie le había advertido que podía llegar a enamorarse, ni siquiera había considerado que eso podía llegar a pasar, estaba en la edad de odiar a las niñas, y por eso sentía que Eloisa era ideal para ser su parabatai, porque ella no le causaba repulsión.

Silas pensó en todo eso mientras escribía una carta, una carta de despedida y confesión. Era para Eloisa. Ni siquiera había pensado en escribir una para su hermana o sus padres, solo le importaba una persona en el mundo: la única que estaba prohibida para él, tanto como por los nefilim, como por el mismo cielo.

No había vuelta atrás, la causa de muerte había sido un juramento dicho hacía muchos años atrás.


El de la imagen es Gabriel pero es que no hay imágenes de Silas, así que, pues eso HAHAHA. ¿Un review?