En las tierras de Hyrule se esconde una leyenda, una leyenda transmitida por la familia real sobre como un niño se convirtió en un hombre. Se embarcó en una gran aventura hacia los más oscuros rincones del mundo, derrotando a las fuerzas del mal, demostrando su sabiduría, cumpliendo con su destino, que no era más para salvarme a mí.
Esta es mi leyenda, y mi nombre es Zelda.
Todo comenzó cuando tenía ocho años, tuve un sueño y no dudé ningún instante en que era una profecía. Le conté a mi padre sobre ella pero no me creyó, más se lo conté a mi niñera Impa y sí me creyó, sabía que algo malo ocurriría en este reino.
En las tierras del bosque Kokiri había un niño, el único Kokiri de todos sin un hada, su nombre era Link. Link vestía una túnica verde con un simpático gorro verde también, era marginado por todos los Kokiris por el simple hecho de no tener un hada, solo había una Kokiri que era buena con él y era su mejor amiga Saria.
Los Kokiris estaban bajo el cuidado del Gran Árbol Deku, los protegía y los cuidaba pero para eso los Kokiris no debían salir del bosque.
El Árbol Deku cayó bajo la maldición de Gohma, quien fue mandada por el hombre malvado de mi profecía, no había nadie que pudiese salvarlo, solo una persona y esa persona era Link.
-Navi ¿Dónde estás? Escucha mis palabras, las palabras del Gran Árbol Deku. ¿Acaso lo presientes? ¿Presientes el mal afuera de estas paredes? Es hora de que el chico sin un hada empiece su aventura. ¡Ve Navi! ¡Ve y tráelo hacia mí!
Navi era un hada azul, era una de las sirvientas del Árbol Deku, y desde entonces se convirtió en la compañera de Link.
Tal como el Gran Árbol Deku se lo pidió a Navi ella volvió con Link, el niño tuvo unos cuantos problemas al llegar hacia allí, más que nada porque un niño no le dejaría pasar a no ser que no llevase un escudo y una espada, el Árbol Deku le explicó que había sido poseído por un parasito el cual era Gohma, Link sin dudarlo se embarcó a ayudarle.
Una vez Link derrotó a Gohma salió del Árbol Deku, este le dijo que aunque sus esfuerzos para salvarle fueron asombrosos, sabía que se acercaba su fin. Link no sabía que hacer así que el Árbol Deku le contó la historia del mundo que había detrás de todos esos árboles y que ocurriría. En resumen, le explicó que un hombre del desierto mandó a Gohma y que quería hacerse con la Trifuerza, un poder omnímodo que dejaron las Diosas siglos atrás antes de volver a los cielos, solo un mortal podía hacerse con ese poder pero no un mortal cualquiera, debía de tener Sabiduría, Valor y Poder. Le entregó la Esmeralda Kokiri y le dijo que fuese a buscar a la princesa de Hyrule.
No tardó en encontrarla, bueno, encontrarme. Le expliqué mi profecía con cada detalle, fue la segunda persona en creerme, le expliqué todo lo que sabía sobre las piedras espirituales y sobre la entrada al templo del tiempo junto con la historia que pasa de generación en generación en la familia real, Impa le enseñó mi canción y él se fue a Kakariko.
Ya en Kakariko lo único que supe es que se fue en camino a la Montaña de la Muerte a buscar la piedra espiritual de los gorons, conocida como el Rubí Goron. Darunia, líder de los gorons, sabía que pasaba con Ganondorf así que solo iba a darle la piedra al mandado por la familia real, claramente no se creyó que Link era quien yo había enviado así que Darunia le ofreció la piedra a cambio de que el destruyese al Rey Dodongo en la Caverna Dodongo. Link cumplió y se fue a buscar la otra piedra espiritual, Zafiro Zora.
Link se embarcó al Río Zora y luego de una tarde entera logró entrar a los Dominios, subió hasta donde estaba el rey Zora y luego de un rato dando vueltas, entró por un portal mágico y llegó hacia el lago Hylia donde encontró una botella que decía que la princesa Ruto estaba en peligro, posiblemente esa nota la dejo Ganondorf.
Link entro dentro de Jabu Jabu y logró "rescatar" a la princesa Ruto. Aunque claro, Ruto es una princesa mimada y obligó a Link a cargarla todo el rato. Debo de admitir que por poco me moría de celos. Al acabar Ruto le entregó a Link el Zafiro Zora pero dijo que en el futuro se casarían, Link no entendió eso.
Tardó una tarde hasta llegar al castillo, lastimosamente no pudo entrar porque Impa y yo estábamos escapando de Ganondorf, quien saqueó el castillo, por lo menos logré tirarte mi Ocarina.
No sé muy bien que hiciste luego, si fuiste directamente al Templo del Tiempo o fuiste al Rancho Lon Lon con la que ahora es tu prometida.
Aun así, sé que fuiste al Templo Del Tiempo con la Ocarina del Tiempo, logré enseñarte la canción del Tiempo y abriste la puerta del Tiempo, pero gracias a mi insensatez te quedaste dormido durante siete años y Ganondorf utilizó la Trifuerza para el mal.
Esos siete años fueron una tortura, no podía ni imaginarme que estaría pasando por tu cabeza y si estarías bien, pero quería serte de ayuda así que entrené y me infiltré en el castillo de Ganondorf.
Cuando por fin despertaste de tu sueño recuerdo haber estado allí para decirte tu siguiente misión. Te llevé al Templo del Bosque a salvar a Saria y te enseñé la canción.
Lo mismo hice con todos los siguientes templos.
El templo de fuego.
El templo del agua.
El templo de las sombras
Y por último
El templo del espíritu.
Cuando volviste al templo del tiempo y te conté la verdad, esperaba poder ayudarte pero de nuevo gracias a mi insensatez esta vez me secuestró Ganondorf paralizándome.
Me fui y te volví a dejar solo. Ganondorf me veía e intentaba abusar de mi, de no ser por ti hubiera sido violada por el rey del mal.
Te podía ver a través del cristal y veía como Ganondorf te lastimaba, te retorcías del dolor y se me caían las lágrimas al verte sufrir, por mí.
Cuando creíamos que todo acabó luchaste contra Ganon y me sentí terrible al no poder ni pasarte la Espada Maestra, gracias a las Diosas logré detenerlo para que dieses el último golpe.
Y luego de nuestra aventura no quería que te fueses, te quería para mí sola y tenerte a mi lado.
Pero órdenes eran órdenes y tenía que mandarte al pasado.
Estuvimos jugando unos meses pero luego te fuiste a buscar a Navi, nunca pude decirte cuanto te amaba pero te di mi Ocarina para que al menos no me olvidases.
Lo último que supe de ti hace poco fue que te casarías con Malon.
Perdona por no decirte que te amaba.
Perdona por haberte dejado marchar.
Perdona por haberte mandando al pasado cuando no querías.
Perdona por ser débil.
Pero gracias por salvar mi reino.
Gracias por protegerme.
Gracias por dar casi tu vida por salvarme.
Y gracias por haberme salvado.
No sé porque decidiste embarcarte en esta aventura, si fue por tu destino o por mí, pero te amo Link aunque te vayas a casar con Malon.
Esta carta la escribí para expresar mis sentimientos por ti y la dejaré aquí en esta botella en la inmensa pradera de Hyrule para olvidarte.
-Zelda.
Un joven chico con ropas verdes iba con su yegua por la pradera cuando encontró una botella y dentro una carta, la leyó y no pudo evitar correr hacia el castillo de Hyrule a buscar a la propietaria de ella.
Entró y corrió por los pasillos mientras los guardias le perseguían, abrió una puerta un poco grande que era la biblioteca de ese lugar, buscó a una joven con cabellos dorados y cuando la encontró corrió a besarla, la chica sorprendida le quedó mirando confundida y él respondió.
-Yo también te amo Zel.-Acto seguido volvieron a besarse tiernamente mientras los guardias que perseguían al chico los vieron confundidos.
El resto se lo dejo a su imaginación! :'D!
