Voy a empezar esta historia..Para no dejarla ahí a medio hacer.

Como perdonar:

Ilusionarte con alguien puede ser una de las cosas más hermosas de la vida, pero, también las más dolorosas. Cuando te hieren mil veces, y sin embargo dejas que eso pase, perdonas…eres masoquista…te gusta el dolor…o solo amas tanto que sin importar estas ahí, siendo incondicional. Esa persona representa los momentos que mas recordaras, lo más felices…pero también las amargas, que te hace dar cuenta que la vida no es justa. Esa noche poblada de estrellas, con el manto azul oscuro dándole un aspecto hermoso, sin embargo, para la joven muchacha sentada en el gran campo abierto, en donde una fogata crepitaba atrás de ella, en donde tres compañeros miraban la escena con tristeza y hasta con rencor.

Kagome miraba el cielo con nostalgia, con tristeza…esa noche, su amado estaba lejos en compañía de la sacerdotisa. Inuyasha hace horas se había ido detrás de las serpientes come almas, no sin antes mirarla con culpabilidad y tristeza.

Siempre es lo mismo…él se va y yo…y yo lo espero. Soy una tonta-un par de lagrimas bajaron por sus mejillas, el frio se hizo presente.

-Kagome deberías comer- susurro Sango la exterminadora, su cara denotaba tristeza, tristeza por la amiga…casi hermana.

-no Sango…yo esperare a Inuyasha-le devolvió una sonrisa falsa para no preocuparla, sin embargo Sango frunció el ceño y se le acerco a paso decidido.

-yo se que tu lo amas…-vacilo un poco para continuar-…pero es justo aguantarte todo esto…el no te merece…si no está aquí…no te merece-la azabache solo pudo bajar los ojos en signo de confusión, la exterminadora desde su posición la abrazo por los hombros y le susurro un piénsalo

Kagome solo miro al cielo otra vez, para tomar la decisión de caminar un poco, se levanto lentamente y empezó a caminar con las manos metidas en los bolsillos de su falda verde…estaba cabizbaja pensativa…

Es verdad que yo siempre lo doy todo por el…y el no ha hecho nada…me protege claro…pero físicamente…en lo sentimental…era una bestia. Pero aun así yo lo amo…pero este amor me está matando cada vez mas…y más.

Solo espero no encontrármelos…

Como si la suerte no estuviera de su lado, se dio cuenta después de perderse de sus cavilaciones que estaba a unos metros del Goshimboku…y este estaba rodeado de las serpientes de su encarnación, Kikyo. Sin meditar mucho, se sumió en el follaje, permitiéndole que los arbustos y matas la taparan, sin perder la perspectiva de la escena. Inuyasha y Kikyo estaban abrazados y apoyados en el árbol…

-…Inuyasha tú me amas-pregunto la sacerdotisa.

-claro…te amo más que mi vida-aseguro el Hanyo.-por eso he tomado la decisión de que vengas conmigo en la búsqueda de la perla-la abrazo.

-y tus amigos…y Kagome- la sacerdotisa le acaricio la mejilla imperceptiblemente.

-tendrán que aceptarte…lo quieran o no-aseguro decisivo. Su mano fue a dar en la mejilla de ella, para mirarla con ternura…y amor. Sus labios se acercaron paulatinamente.

-y Kagome-susurro a punto de tocarse.

-olvídala…esta noche solo tu estas para mí-la beso. La ojicanela sintió el mundo abrirse a sus pies, ellos estaban ignorando su presencia, entregándose en medio del bosque…y ella llorando por él. Sus pies actuaron por instinto, y corrió…tan rápido como pudo, mientras ríos de agua salina caían de sus mejillas, llego a un claro en donde se dejo caer.

Lloro y saco todo lo que pudo.

…..

No supo cuanto tiempo paso…ya el frio del próximo amanecer se acercaba. Ella ya tranquila desde hace un rato pensaba exhaustivamente sobre lo que debía hacer…pues el ya había escogido. Su corazón ya no aguantaba más…y fue cuando encontró las palabras que necesitaba…

-yo se que tu lo amas…-vacilo un poco para continuar-…pero es justo aguantarte todo esto…el no te merece…si no está aquí…no te merece-la azabache solo pudo bajar los ojos en signo de confusión, la exterminadora desde su posición la abrazo por los hombros y le susurro un piénsalo…

Y claro que lo pensó…lo tuvo todo muy claro. Todos tenían un límite…y el suyo ya había llegado. A pesar de sentirse como una porquería literalmente…estaba tranquila, su decisión parecía la correcta. Se paro ye empezó a caminar hacia el campamento…Cuando llego, vio a todos dormidos…menos el medio demonio. Se acostó para dormir lo que quedaba de la noche

Amaterasu97

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