POV BELLA:

-Bella, vuelve, tenemos que hablar- decía el, el chico al que había amado, el chico que nunca se fijo en mi hasta la fiesta, y que luego el me abandono.

-Dejame en paz, ya escuche todo lo que le dijiste a Emmett, no tienes que repetirlo- dije, con la voz seca, dirigiéndome a mi casillero, dispuesta a sacar mis cosas y no volver nunca mas

-dejame explicartelo- me rogo el, cerrando mi casillero

-no tienes nada que explicártelo, no es lo que tu crees

-¿ah, no?, entonces que es?- le pregunte sarcásticamente- abriendo nuevamente la puerta del casillero y empezando a guardar todas mis cosas

-Bella, yo te amo

-pues olvida ese amor- dije terminando de guardar mis cosas, entonces vi la foto donde estábamos nosotros dos en el hermoso claro, antes de todo, antes del engaño

-ten, no la necesito- le dije dándole la foto y dirigiéndome a la puerta

-espera...

-olvidate de mi, tu me engañaste, no hay nada mas que explicar- dije saliendo del instituto, a la lluvia intensa de Forks

-Agarre mi carpeta y busque lo que necesitaba ver, era eso lo que me animaba a seguir, a no caer en la depresión, en fin, ellos eran mi motor de vida

Mire la ecografia detenidamente, y ahi estaban,tres puntitos de esperanza. Dude un segundo en volver y decirle a Edward que estoy embarazada, pero algo me hizo seguir avanzando, a perderme en la oscuridad de la noche, a ir a mi auto y largarme para siempre de Forks, y a reconstruir una nueva vida en la universidad de California. Yo no podía estar en el mismo lugar donde esta Edward Cullen.

Diez años despues

-¡Feliz cumple mama!- entraron mis tres hijos corriendo, me levante de mi cama y me encontré con las tres personitas mas hermosas de la vida

-¿que hacen aquí?- pregunte sorprendida- creí que seguirían con su tío en New York- les dije todavía sorprendida

-¿te refieres a que yo, tu hermano, me perdería tu cumpleaños?- dijo Jasper entrando a la habitación

-tuvimos que obligarlo- dijo Alice también entrando a la habitación- el no quería venir a California- agrego Alice

Jasper, es mi hermano, dueño de una empresa de financias en New York, tiene treinta años, el cabello color miel y ojos celestes, digamos que somos hermanos por que mi padre engaño varias veces a mi madre, incluso antes de estar casados, pero en fin, el se llevaba bien con mama. Pero luego todo empeoro desde la muerte de papa.

Alice, ella es mi mejor amiga y también cuñada, casada felizmente con Jasper hace mas de tres años, y esta embarazada, aunque este de cinco meses, nunca pierde la energía característica de ella. Alice tiene el cabello negro, corto, yojos negros, es de estatura baja, amante de las compras, y una mujer hiper activa, se podría decir que Alice era una chica alegre.

- ¡Mama, mira lo que te compre yo!- dijo Marion, saltando en mi cama

Marion era mi hija, amante de las compras al igual que su tía. Ella era físicamente igual a mi, tenia ojos marrones y cabello marrón, pero en carácter era igual a el, le gustaba la música y leer, para que ella tenga diez años, ha leido bastantes libros.

- es mejor el mio- dijo Anthony sentandome en mi cama

Anthony era igual a su padre, tenia el cabello cobrizo, siempre despeinado, y ojos verdes, se podría decir que era una copia idéntica de su padre. A Anthony, le gustaba la música, al igual que Marion, pero el era un poco despistado, y un poco torpe, supongo que lo heredo de mi, pero igual todas las chicas caían rendidas a los pies de mis hijos, el siempre las trataba bien, aunque a veces podría ser un poco creído.

- ¡mira el mio, mama!- dijo Renesmee, al igual que los demas, sentandose en mi cama

Renesmee era una extraña combinación entre nosotros dos, tenia el cabello de el, pero sus ojos eran una copia idéntica de los mios. Le encantaba todo tipo de música, y también leer, odía, al igual que yo, ir de compras,para ser tres hermanos ella era la mas tranquila de los tres, aunque también podía pelear con bastantes ganas. En fin, mis tres hijos eran las personas mas adorables de la vida.

En ese momento empezó a sonar mi celular

- ¿es que acaso no te pueden dejar sola, cinco minutos?- dijo Alice, sabia que era de mi trabajo

- hola- dije por el teléfono

- hola Bella, soy yo Jacob- dijo una voz gruesa

Jacob Black, es mi jefe, de la empresa donde trabajo, soy como la redactora del diario de California . Jacob tiene el cabello negro, corto, y ojos negros, es un gran amigo pero a veces puede propasarse un poco.

Alice articulo con los labios "¿quien es?".

- Hola Jake- dije sorprendida, "crei que el estaba de vacaciones" pensé

Alice cambio la expresión de su rostro, cruzo los pocos metros que la separaban de mi, y me saco el celular, estaba a punto de protestar pero ella empezó a hablar

- Escuchame, Bella esta de cumpleaños, no todo el mundo cumple veintiocho todos los días, así que mas vale que no la invites a ningún lado, ni a comer ni a ver una película, hoy pasara el día puramente con nosotros- termino de decir Alice

Trate de escuchar lo que le decía Jake, pero no se escuchaba nada, de pronto la expresión de Alice cambio, en vez de estar enojada paso a una cara sorprendida, para luego ponerse nerviosa

- no creo que Bella quiera ir alli- dijo ella-

Jacob le contesto rápidamente y luego ella dijo

- hablare con ella, adios- dijo antes de cortar

Alice miro a mis hijos un largo momento, ¿que era lo que ella me escondía?

- ¿Alice que pasa?- le pregunte

- Bella, Jacob me dijo, que te tienes que transferir de estado, te encontraron la vacante que esperabas- dijo Alice

- eso es fantástico...- empecé, pero luego vi la cara de Alice- ¿donde queda?- le pregunte

- En Forks, allí en donde habrá una nueva editorial- dijo Alice

Me quede callada, ¿por que el mundo me hacia esto a mi?, yo no quería ni deseaba ir a Forks, volver a recordar mis malos momentos ahí, me haría caer en depresión.

Mire a mis hijos discutir por cual regalo abriria primero, ¿los dejaría volver a Forks?, ¿a donde todo comienzo?, ¿seria capaz?, ellos eran muy chicos, apenas diez años, no podían enterarse de que su madre escapo embarazada de Forks, allí las noticias volaban y supuse que todos sabrían por que me había ido.

Pero por otro lado necesitaba el empleo, quería ascender, quería darle lo mejor a mis hijos, ganaba bastante como editora, pero querría darles mas, ¿volvería a entrar en Forks?

- ¿Bella?- dijo Alice preocupada

- Iré- dije decidida- iré, y me quedare ahí, en Forks.- dije decidida, lo unico que temia era encontrarme con el, pero seguro que se habria ido, se habria mudado del Estado, incluso del pais, no creo que el este, el no estaria, ¿no?