Holaaa~ es mi primer fic y... no sabía como hacerlo y me decanté a algo homo (y la historia sigue como lo tengo planeado se hará un poco largita).
Como todos saben, nada de aqui me pertenece, solo la historia.
Advertencias: si no te gusta lo gay no entrar, si no te gusta el Italia del norte/Veneciano/Feliciano con Alemania/Ludwig y el Italia del sur/Romano/Lovino con España/Antonio, ¡No entrar! si no mueres por ello (ya que conforme avance la historia saldran estas dos parejas y tal vez alguna mas si me inspiro o si se recomienda XD).
Prólogo y Capítulo 1. Un nuevo día, una nueva amistad.
Hacía tan poco tiempo desde que me había enamorado que aun me era imposible de creer y lo peor de todo no es de quien, sino de los que me rodean y en especial mis padres. Pero antes de continuar la historia, contaré lo que sucedió
Hacía buen tiempo en la ciudad en la que vivía con mi madre, mi padre se fue con mi hermano, de nombre Feliciano, a Venecia durante una temporada. También tengo un hermano, pero de este no se nada de el, desconozco incluso su nombre (1). Mi madre reinaba junto con mi padre en la ciudad donde actualmente residía junto a mi madre y mi padre se fue con mi hermano a Venecia una temporada cómo mencione antes para hablar con otros reyes del mundo y como confiaban en que nos iría bien decidieron quedarse aun mas tiempo del previsto, aunque tenían razón de lo bien que nos iba, me aburría solo sin Feliciano y sus estupideces, de ahí que solía salir todos los días al pueblo bajo el reinado de mis padres para contemplar la belleza de Italia. No lo dije antes pero el posible heredero del trono era mi hermano Feliciano, el favorito por todos.
- Saldré a pasear un rato, no me esperéis para comer.
- Majestad, no se preocupe por ello, ¿Su madre lo sabe?
- Siempre lo sabe aunque yo no quiera y prepararme la comida aunque no vaya a estar.
- Tranquilo, no se preocupe por ello. Haremos tal y como dijo, como siempre.
Salí de mi "humilde" hogar y no sin una máscara que estaba obligado a usar por culpa de mi familia, no querían que le "arrebatara" a Feliciano a ninguna "pretendienta", no es mi culpa que algunas me prefieran antes a mi que a mi hermano. Una vez puesta la máscara, me dirigí a la ciudad. Cuando entré a la ciudad me topé con un gran alboroto creado por una mujer de tercera edad, me dirigí a dónde era creado el alboroto para ver qué era lo que sucedía exactamente.
- Signora, ¿Ocurre algo? - Le pregunté al ver cómo empezaba a cada vez comportarse como no era debido y maldecir a un muchacho que estaba alli.
- Que no te engañe este hombre, es un forastero que vino a robarnos todo lo que puede y mas, ¡Incluso me robo mi comida!
- Señora, te prometo que no robe nada ¡Llevo todo lo que llevamos de día sin comer y ayer no cene!
- Yo solucionaré este problema signora. Quédese mientras con estas monedas equivalentes a la comida de un día y el será a mi quien me deba el dinero (2).
- Molto grazie, ojalá existiera mas gente como tú y no como aquel forastero.
La anciana se fue a su casa y para mi sorpresa el muchacho de antes no se fue, se quedó donde había estado todo este tiempo. Esa fue una prueba para saber si el era un ladrón o no.
- Bueno, ¿Que se supone que has robado?
- Yo no robé nada, en serio y agradezco tu ayuda con esa mujer. Si no fuera por ti estaría muerto.
- Eso yo no lo sé, ¿Podría ver que lleva encima?
- Es imposible que lleve la comida de todo un día y si la llevara, ¿Dónde podría guardarla? Ni siquiera tengo vivienda.
- Ahora vete por dónde viniste, los forasteros no son bien recibidos y lo acabas de ver con aquella mujer.
- No puedo irme sin antes agradecerte lo que hiciste por mi.
- No es necesario que lo agradezcas.
- Por favor, dejame agradecértelo. - Se puso de rodillas (alias cuclillas XD) – si no no viviré en paz.
- Esta bien, ¡pero para ya de suplicar!
- Muchas gracias, primero buscaré un sitio donde poder instalarme y así ya podré devolverte el favor.
- ¿Que favor?
- El de antes, es lo que te tengo que agradecer.
- Yo tengo un lugar para ti en el que puedes vivir.
- ¿Enserio? Muchas gracias de verdad, me eres de mucha ayuda, por cierto, aquella señora da mucho miedo.
- Sígueme.
El chico comenzó a seguirme cuando yo comencé a caminar. El camino era corto, pues fuimos a una casa que no estaba muy lejos de donde estábamos. Cuando llegamos obligué al chico a entrar en la casa, esa casa era mía y la compré hace mucho tiempo sin que nadie lo supiera.
- ¿Como te llamas? - Le pregunte, pues tenía que saber su nombre.
- Me llamo Antonio Fernández Carriedo, ¿Y cual es el tuyo?
- ¿Yo? Bueno... me llamo... ¡Carlo! - Tuve que mentir, no podía decirle que era Lovino y menos de la familia que provengo, pues sería un grabe problema. - ¿Tienes familia? ¿De dónde eres?
- Tengo familia y viven en España, de donde provengo y quise venir a Italia para ver cómo es y es un paraíso.
- ¿Quieres comer? Pareces hambriento.
- Vaya, cuantas preguntas en un momento me hiciste Carlo.
- Quieras comer o no, en la cocina hay comida.
- De acuerdo, ¿Cómo puedo devolverte el favor? ¿Con algún trabajo.
- Aún no se que puedes hacer por mi, pero puedo traerte un trabajo para ganarte el sueldo de mañana.
- ¡De acuerdo! Muchas gracias.
- Antes de irme te pediré un favor, no le digas a nadie que me conoces o que te dí esta casa y si te preguntan de quien es dices que es tuya, ¿de acuerdo?
- Vale, así lo haré
Me fui de la casa y no se porqué me puse feliz, cosa un poco extraña de mi. Ese hombre de nombre Antonio, o al menos eso creo, vi algo en el que nunca vi en nadie, tal vez es por la poca gente que conozco o por culpa de la realeza pero Antonio tenía unas características que me hacían sentirme bien, Antonio era una de las únicas personas que podía llamar amigo.
(1). No quise poner nada de este, ya que en hetalia existe pero no sale mucho y no se apenas nada de este pero en el futuro podría salir, si me llega la inspiración/ayuda.
(2). Bueno, en este apartado con las monedas que le dio Lovino a la señora que equivalían a la comida de un día es porque hace mucho tiempo los salarios eran diarios y se les llama salarios porque algunos pagaban con sal... un misterio porqué aunque supongo que sería porque la sal seria muy valiosa.
Cualquier recomendación es buena y seguro que hay fallos de ortografía.
